天星 ◞ ❛ 𝘱𝘰𝘳𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘭 𝙘𝙞𝙚𝙡𝙤 𝘺 𝘭𝘢𝘴
𝙚𝙨𝙩𝙧𝙚𝙡𝙡𝙖𝙨 𝘦𝘳𝘢𝘯 𝙥𝙚𝙧𝙛𝙚𝙘𝙩𝙤𝙨, 𝘫𝘶𝘯𝘵𝘰𝘴 ❜ 🌟
❱ ˗ ˏˋ Seren, como su nombre lo decía, era una estrella, una de las más brillantes que podían existir. Y Arm...
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capitulo diez "nervios de punta"
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Seren se sorprendió al igual que todos al ver al gran Titán por dentro de la Muralla. Como si de pronto la admiración que tuvo por estas años antes regresará, y se comenzó a cuestionar tantas cosas...
Aquella combinación que existía entre Eren, Mikasa, Jean, Armin y ella para el plan había sido una que nunca se hubiera imaginado, por lo que intentó pasar tiempo con ellos antes de regresar con los demás. Yuuki seguramente se enojaría con ella, le daría un golpe en la cabeza y querría saber detalles, así que estaba preparándose para aquello.
El siguiente día sintió incluso una vibra diferente en el ambiente. Compartía la habitación con Mikasa pero ella siempre se encontraba con Eren por lo que parecía que estuviera sola, lo cual no le molestaba, pero si le hubiera gustado poder conectar más con la chica. Cuando se levantó y desayunó (en su habitación, como si no quisieran que salieran de ahí) quiso ir a dar una vuelta, pero tan sólo salió por la puerta fue detenida.
—¿A dónde va? —le preguntó un soldado, mirándola. Seren suspiró y fijo su vista en el otro lado del pasillo, en donde se encontraba la habitación de Armin y Jean.
—Iré con Armin Arlert, ¿puedo?
Aunque él la miró mal, terminó asintiendo. La pelirroja le sonrió agradecida y se dirigió hacia allá, notando que el guardia aún la miraba. Como si fuera a escaparme, pensó, aunque no era mala idea. Tocó la puerta y espero a que le abrieran. Por suerte el rubio no demoró tanto, y al verla, como era costumbre, se ruborizó.
—¡H-hola, Seren!
Se veía avergonzado, por lo que ella no pudo evitar reír un poco. Señaló con su cabeza el interior de la habitación y habló:
—¿Puedo pasar?
Armin asintió y rápidamente se quitó de la entrada, dejándola pasar. La habitación era igual a la suya y se lamentó por eso, ya que tenía la mínima esperanza de que pudieran salir juntos. No estaba acostumbrada a estar encerrada en un lugar, y a pesar de ser solo su segundo día en el establecimiento, quería irse; no podía mantenerse quieta desde niña y en esos momentos no sería la excepción.
