siempre has sido tu (Trilogía Curvas Impredecibles #2)

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Seguimos hablando de diferentes temas, aunque la veía más nerviosa que de costumbre, como si quisiera decirme algo que ni ella misma se imaginaba decir.

-Solo dilo mama, aquí estaré para ti – sus manos tomaron las mías para mirarme un rubor jovial en sus mejillas, mi madre esta avergonzada.

-Estoy embarazada, Hada – lo sabía, y me sentía feliz, se que ya es mayor, pero me emocionaba la idea de tener un hermanito – No pareces sorprendida hija.

-Algo me intuía madre, pero me alegro mucho, solo espero que sea niño, me hace feliz saber solo si tu eres feliz en la vida madre, y además no serás la primera ni la última madre a tu edad además eres bella – la abrace sabiendo que, aunque me pondré celosa porque quizás sea mi último abrazo con ella solo nuestro, estoy feliz de compartirla con un hermano mío.

-Desde que tengo a mi familia lo soy, te amo tanto mi niña

Aunque la sorpresa había sido muy poca de mi parte no fue lo mismo con Chris y para papa quien estaba impactado por la noticia, pero feliz de que esta familia crezca incluso bromeando que la salida de nosotros ayer había dado en clavo, es gracioso recordar la cara rojiza de mi madre.

Me senté en el balcón dentro de mi habitación y mire hacia su casa, deseando ser mucho mas valiente de lo que en mi mente soy, pero no puedo, mi piel se eriza de solo pensar estar frente a él, frente a mis miedos, hacerle frente a lo que me persigue cada noche a lo que me atormenta, pero de alguna forma, verlo tan cambiado produce un efecto totalmente diferente en mí, su olor incluso esa mirada demandante y profunda hace que el aire en mi pecho no fluya correctamente a mis pulmones, Joder, eso no esta bien. Se supone que no debe ser así. Incluso no acordándose intenta saber mi actitud. Pero esos labios inquietan hacen que los míos piquen por un absurdo roce, arde una naciente necesidad en mí de querer escuchar de nuevo esa voz, esa áspera y profunda voz, que por un mínimo momento al fondo de mi mente me hizo querer arder en él. No. De verdad esto no podría ser.

Incluso si fuera una locura, mis piernas tiemblan apretándose de tan solo pensarlo y mis dedos acarician mi labio inferior. Esto esta mal. Demasiado mal.

- ¡¿CÓMO PUDISTE OCULTARME ALGO ASÍ?!

Brinco en mi lugar al escuchar su voz en la lejanía y mirar como sale de su casa, niega con la cabeza antes de buscar con la mirada a algo o alguien y mira directo en mi dirección, esa mirada me hizo temblar por lo que me levante asustada. No, no lo hagas, no estoy lista. Rezaba en mi mente como si eso pudiera detenerlo. Rápidamente me senté en mi escritorio tratando de calmarme, aunque eso hizo desviar mi atención a mi atuendo, ¿estaría bien esto? Joder no es como si estuviera interesada en que me notara o ¿sí? No, claro que no. Además, no creo que el se atreva a ... detengo mi mente al escuchar la puerta de abajo, solo estábamos mi madre y yo en casa por lo que estaba tranquila y en silencio después de que papa fuera al mercado por barbacoa para celebrar la llegada de mi hermano(a).

Volvieron a tocar por lo que pude escuchar la voz de mi mamá, su voz, él estaba aquí y mi corazón latía desbocadamente, aunque mi cuerpo tiemble una necesidad de volver a ver sus ojos me consume tanto al punto de que es irracional esa necesidad. Tres pasos estaba a mitad de mi habitación avanzando a la puerta, dos pasos mas y la puerta abierta a mi vista, no quería avanzar, pero no podía evitarlo, mi necesidad de abordarlo y no lo se ... ¿Hacerle pagar?, quizás pero no lo sé, una serie de números a pasos estaban avanzando hasta llevarme al final de las escaleras escuchando sus voces hablar.

-No puedes abordarla tan sencillo- mi madre intentaba frenarlo ya que se miraba con intenciones de ir hasta mi habitación.

-Debo hablarle, yo ... yo no la recordaba y jamás fue mi intención herirla, toda la noche estuve escarbando en mis pensamientos para darme cuenta que la necesitaba más que a nada, pero ...