Capítulo 38

4.1K 214 2
                                    

Narra Ilaria

Por más que intento no encuentro ninguna forma en que acomodar mi cabello de una forma que se vea bien, ningún peinado me convence, no sé por qué acepté venir a este evento con Ezra si realmente no es el tipo de ambiente en que me siento más cómoda

Decido dejar mi cabello suelto y con algo de movimiento, saco del armario el vestido que hacia meses había comprado con Alice y que nunca usé por haber preferido el vestido rojo. Me pongo el vestido con mucho cuidado de no arrugarlo y busco un par de tacones que hagan juego con el color plateado del vestido

Me siento frente al tocador y comienzo a maquillarme de forma sutil, realmente debí haber llamado a Alice para que me ayudara con esto, el glamour siempre fue lo suyo. Justo cuando termino mi tediosa tarea escucho el ruido de la puerta, me levanto tratando de no pisar el vestido y camino hasta la entrada para abrir

Al hacerlo me encuentro con Ezra, cuando usa esmoquin siempre se ve más guapo, me muevo de la puerta para permitirle entrar y de inmediato noto como su vista recorre todo mi cuerpo y se posa finalmente en mi revelador escote

—Mis ojos están más arriba—Bromeo

—Ya lo sé, pero esta vista me gusta más—Bromea

Le doy un suave golpe en el hombro para fingir descontento

 —¿Acaso no planeas besarme?—Pregunto mientras pego mi cuerpo contra el suyo

—Ni siquiera debes preguntármelo

Sus labios presionan los míos de forma muy placentera, sus manos recorren toda mi espalda al descubierto y puedo sentir como mi piel se eriza ante su tacto que de un momento a otro cesa desconcertándome

—Si seguimos con esto no terminaremos en el lugar en el que debemos estar—Susurra cerca de mi oído

Tomo mis cosas y salimos del departamento, Ezra me lleva en su auto hasta uno de sus restaurantes, hasta donde sé el primero de ellos, al llegar había muchas personas en todo el lugar. Al bajarnos del auto Ezra me toma de la mano y me lleva hasta el interior del restaurante

—Debo saludar a unos socios, ¿Quieres acompañarme?—Pregunta mientras deja un suave beso sobre mi mejilla

—Prefiero esperarte, no tardes—Le doy un corto beso en los labios 

Me acerco a la mesa de dulces, poso mi vista en Ezra quien se acercaba a un grupo de hombres de todas las edades, se saludaban de forma cálida, mi mirada queda fija en mi novio hasta que una voz desconocida me desplaza de mis pensamientos 

—Hola—Me saluda un hombre acercándose a mí de forma un tanto invasiva

—Hola—Le respondo poniendo distancia entre nosotros

—¿Trabajas aquí?—Me pregunta en un tono seductor bastante descarado

—Si—Respondo cortante

Su mano roza la mía y abruptamente la retiro, realmente me está haciendo sentir incómoda

—¿Viniste sola?—Insiste

—No, vine con mi prometido

—Si hubieses venido conmigo yo no te dejaría sola por ningún motivo corriendo el riesgo de que otro hombre te robe

Siento una mano sobre mi hombro y al girar mi cuerpo me encuentro con Ezra y su evidente expresión de enojo

—Buenas tardes, ¿Interrumpo?—Pregunta mostrando su molestia

—No pasa nada, yo ya me iba—Le responde este prácticamente huyendo de la escena

Ezra pone su mano sobre mi cintura y acerca su rostro al mío para besarme no de forma decorosa a pesar de la cantidad de personas presentes en el restaurante, pero poco me importa eso para corresponder el beso de igual forma, cuando se separa de mi posa su mano en mi espalda 

El padre de mi mejor amigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora