El padre de mi mejor amiga

Capítulo 7

Narrador omnisciente

El reloj marcaba las 4 de la tarde e Ilaria se encontraba leyendo un libro en el sillón, esta vez había escogido un ejemplar propio porque se había dado cuenta de que en definitiva los de Ezra no eran su estilo, un golpe en la puerta le interrumpió y rápidamente fue a abrir

Al hacerlo se topó con Mariana quien de inmediato le mostró una sonrisa falsa

—Hola, niña, ¿Y Ezra?—Le pregunta haciéndola a un lado para entrar

—Ya lo voy a buscar—Responde Lili intentando no ceder ante la provocación

Ilaria se acerca a la habitación de Ezra y este abre de inmediato, se encontraba vestido con un pantalón de chándal gris y una camiseta blanca, llevaba el cabello revuelto y sus lentes puestos

—Señor, lo está buscando Mariana—Le informa fría

—¿Sabes que es lo que quiere Lili?—Le pregunta desconcertado

—¿Como saberlo señor?

Ilaria regresa a la sala, toma su libro y sin saludar a Mariana regresa a la cocina para intentar continuar con su lectura, pero en definitiva era algo que no podía hacer, ya no tenía que mentirse a ella misma, estaba evidentemente celosa y ese sentimiento la estaba envenenando

"Evidentemente es mucho más bonita que yo", pensó

Dejó su libro a un lado y se colocó contra la pared que dividía la cocina con la sala para intentar escuchar la conversación de Ezra

—¿Quieres ir a cenar esta noche a mi casa?—le pregunta Mariana

—Esta noche le prometí a Lili que haría tiramisú—Le responde Ezra

—La niña lo entenderá, por favor no me hagas rogarte

—No tienes que hacerlo, ya le di mi palabra

—¿Prefieres estar entre adolescentes que en mi casa?, nos la podemos pasar muy bien

Ilaria se despegó de la puerta y volvió a la isla, sabía que Ezra no le había prometido absolutamente nada y que esa solo debió haber sido una táctica para zafarse de la situación, pero eso le abría la puerta para comprobar de una vez por todas si tenía una mínima posibilidad o si por el contrario debía rendirse con sus sentimientos 

Después de un rato escuchó la puerta ser abierta y cerrada y por ende asumió que su invitada ya se había marchado, esperó un par de minutos y regresó a la sala donde tomó asiento en el mismo sofá que Ezra pero dejando una distancia prudente entre ellos

La chica deja su libro a un lado y enciende las noticias, a las que tampoco le presta mucha atención, pero igual servía para distraerse

—Lili—Le llama Ezra 

Ilaria le escucha, pero finge que no y sigue viendo las noticias

—¡Lili!—Repite levantando la voz

—Dígame señor—Responde la chica

—Ya empezaré a preparar la cena, ¿Quieres comer algo en específico?

Ilaria niega sin dirigirle la mirada y Ezra se sienta a su lado, Ia chica se sorprende ante este gesto, pero finge que ni siquiera lo notó y sigue sin despegar los ojos del televisor

—¿Te pasa algo Lili?—Pregunta finalmente

La chica niega

—¿Qué me va a pasar señor?—Le pregunta irónica

Ezra la mira fijamente intentando descifrar lo que pasaba por su mente, para él que le llamara señor era signo de un retroceso para los dos, no le gustaba que le llamara de ese modo porque sentía que tenía menos posibilidades que antes

—¿Quieres volverme loco?, ni mirarme quieres

Ilaria posa sus ojos sobre él con una sonrisa triunfante en el rostro

—¿Quiere usted que lo mire señor?—Le pregunta en broma—Porque no tengo ningún problema con eso

Con la sonrisa victoriosa de Ilaria Ezra se dio cuenta del pequeño juego de la chica

—Eres terrible—Le dice entre un gruñido

Lili se acercó sin ninguna especie de pudor hasta quedar muy cerca de él

—¿Así que habías prometido prepararme tiramisú?, fíjate que no lo recuerdo—Bromea la chica 

La cara de Ezra reflejaba mal humor, pero Ilaria que ya había aprendido que ese era su estado normal no le prestaba la mínima importancia, y menos a la hora de bromear con él

—En mi defensa últimamente ha sido muy pesada—Le dice Ezra

—¿Pesada con qué?

—Con querer salir conmigo

La sonrisa de Lili se borró al instante y esta vez fue Ezra quien se rio fuertemente, Ilaria en respuesta le dio un ligero golpe en el hombro

—Esto no es gracioso—Le dice

—¿Y hacerme creer que estás enojada conmigo si lo es?

—¿Te hubiese importado mucho si lo hubiera estado?

—Claro que si

Los dos se quedaron en silencio unos segundos sin la menor intención de separarse, los ojos de Ezra se posaron en los labios de Ilaria durante una cantidad de tiempo bastante imprudente

—No tienes idea de lo difícil que es para mí contenerme para no besarte

—No tienes que contenerte

—Realmente no quieres esto, lo mejor para ti es estar con alguien de tu edad

—¿Tú que sabes de lo que es mejor para mí?

Ilaria toma la iniciativa y apoya sus labios contra los de Ezra, él queda perplejo ante este hecho, Lili se levanta rápidamente y se dirige a su habitación, pero cuando estaba a punto de abrir la puerta Ezra la tomó del brazo obligándola a mirarlo, se inclinó hacia ella

—¿Acaso crees que no voy a dejar que me des un buen beso?

Sus labios se juntan de una manera que en ningún momento fue dulce o casta y que por el contrario fue escalando rápidamente, los dos no querían soltarse, pero el sonido de la puerta abriéndose abruptamente los separa de golpe dejándolos perplejos.

Alice entra en la casa, pero no se había percatado de lo sucedido, al notar esto Lili, le saludó rápidamente y se encerró en su habitación completamente llena de culpa