Piratas del Caribe: La Hija del Mar

Capítulo 3. Una vida terrenal

Zazil Ha

Solo lo observe, no esperaba otra cosa de mi madre, mandarme con un sujeto viejo era lo único que me faltaba. No se veía ninguna arruga, pero en pocos años, tal vez, las tendría. Nos miramos por un momento, parecieron minutos, unos terribles segundos fueron en realidad; la incomodidad era demasiado tensa, alguien tenía que romper el hielo.

 — ¿Entonces a ti te llaman Jack Sparrow?

 — Capitán Jack Sparrow, es un mejor nombre que Zazulja

 — Es Zazil Ha, y no sólo es el mejor nombre, también es hermoso

 — Como quieras — me dijo —, de todas maneras estamos llegando tarde, te tengo que presentar con una persona, más bien dos, las odiarás en el momento en que los mires, vamos

Al inicio, no me acostumbraba a caminar, los pies — como los llamó Calypso —, eran extraños, ponía un pie, y luego el otro, tenía que dejar un espacio pequeño para no parecer más tonta, después de observar a varias personas, creo que el concepto de caminar, ya está resuelto, vivir con este tipo y sus planes para mí, no estoy tan segura de eso, pero mientras pueda regresar con mi hermana y mi madre, valdrá la pena esos 7 años de tortura.

 — ¿A quién odiaré?

— A un pirata que se dice llamar Davy Jones, el intenta quitarme mi barco, El Perla Negra, el mejor barco de todos los mares. Y a su nuevo aprendiz, se llevaran una gran sorpresa que eres mujer. No es bueno llevarlas, pero haré una excepción contigo, no eres la única pirata femenina, pero en un grupo de hombres, es demasiado malo para ti, como a nosotros.

 — Entonces ¿por qué no vas a buscar a otra persona y a mí, me dejas en algún otro lugar?

— ¿Estás loca? No durarías ni un día aquí, ni siquiera sabes robar o por lo menos trabajar en algún lugar para que puedas comer... Soy tu única opción, además ya me tarde mucho en encontrar a una persona que sea mi sucesor, y si es cierto lo que me dice tu "madre", como sueles llamarla, entonces seré inmortal con mi barco, como siempre he querido.

 — ¿No te alimentas del aire o de la luz?

 — Ni que fuéramos plantas. Zazulja, tienes mucho que aprender ¿Calypso no te digo nada sobre nosotros, o lo que te convertirías?

 Ni siquiera me dejó contestar cuando habló otra vez.

— Basta de plática, tu primera lección será, aprender a como tomar un buen pirata, vamos a la Isla Tortuga, o espera, ya estamos aquí. Entonces iremos por un poco de ron.

— Bueno, de todas maneras, no tengo opción,  y es Zazil Ha, otra vez.

La isla, era una ciudad de locos, o por lo menos, en lo que yo veo, es muy ruidosa, demasiadas personas, andan de un lugar a otro, caminando como yo lo hacía antes, entonces ¿estaba bien como lo estaba haciendo?, no comprendo este lugar. En mi gran mundo de mar, no se escuchaba tantos sonidos, eran dulces y agradables, llenos de peces, cantando su do en la roca, aquí casi no los oigo, ni siquiera ya estoy segura que hagan un sonido.

Esta isla, está llena, vestidos de una manera de lo más poco, respetable, pero como no conozco este lugar, no puedo decir lo que está bien o mal, tienen un concepto diferente al mío. Aun yo no me acomodaba con la ropa que me dio Calypso, tapando todo mi cuerpo, llevaba como una especie de escama de arriba hasta la cintura y en la otra de la cintura a mis pies, pero se sentía tan cómoda, suave, nunca creí que existieran, tal vez me acostumbre a esto.

Después observe sus cuevas, o al menos me lo parecieron, tenían una forma estrecha, hechos de un material que no conocía, se veía un poco rugoso, un color café claro, con un hoyo rectangular, en el cual jalaban con un objeto, y entraban y salían, no podías ver lo que había adentro, tenía una gran curiosidad, que no me pude contener en preguntar: