Sin siquiera darnos cuenta

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N/A: Este capítulo se lo dedico a mi buena lectora 'Heronway' cuyos comentarios siempre son interesantes. Leer sus comentarios es una buena fuente de motivación, muchas gracias por su paciencia y su apoyo continuo a la historia :D <3

Lamento mucho la demora pero al menos lo hice extra largo, espero lo disfruten C: 

¡Feliz día de la madre a todas! Al menos aquí en México es el 10 de mayo, haha. ¡Muchas felicidades, espero las consientan mucho y se la pasen muy bien con su familia!

Capítulo 55. Sin siquiera darnos cuenta

Soltando un leve quejido, Karamatsu abrió lentamente los ojos y observó el techo de madera llenando su visión de un momento a otro. Se encontraba algo atontado mientras creía oír el sonido distante de sus hermanos hablando.

El segundo se incorporó y miró sus piernas, las cuales sabía no cooperarían de nuevo; sin embargo, como forma de no quedarse sin hacer su intento del día, el segundo se movió con la intención de pararse y se percató de que efectivamente había logrado ponerse de pie.

Dicho suceso lo tomó desprevenido, pues al pararse, no sintió que tuviera algún problema de equilibrio. Era una sensación de normalidad que en ese momento se sentía como si hubiera logrado lo impensable. Debido a esto, el segundo sonrió enormemente y su somnolencia restante se desvaneció por arte de magia. Se sentía tan contento que no podía evitar querer aventurarse a más.

Karamatsu dio un paso al frente pensando en que tal vez sus piernas temblarían y se caería, no obstante, eso no sucedió. Había dado un paso como si no hubiera ningún problema, y al darse cuenta de esto, prosiguió por dar unos cuantos pasos más exitosamente.

No entendía cómo podía ser posible pero prefirió no cuestionarlo, pues tal vez si lo pensaba demasiado sus piernas recordarían que no podían hacer lo que estaban haciendo. Deslizó el shoji y bajó las escaleras, encontrándose a Ichimatsu, quien cargaba a Suzu en brazos y parecía estar de camino a la habitación principal.

"Eh, te ves extrañamente feliz" comentó Ichimatsu al ver a su hermano con un poco de curiosidad. Karamatsu asintió fuertemente. "No es que sea algo malo, pero digo, estabas durmiendo hace nada... ¿Tuviste un buen sueño?" Karamatsu se quedó pensando y se encogió de hombros al no saber si había soñado o no algo.

Ichimatsu guardó silencio para entonces mirarlo con los ojos entrecerrados.

"¿Hay alguna razón por la que no estés hablando?" preguntó el cuarto.

"¿Eh? ¿Puedo hablar?" preguntó Karamatsu al justamente tratar sin esperar decir nada. Ichimatsu arqueó una ceja sin entender a su hermano.

"¿Sí...? ¿Acaso querías que te diera permiso?" Ichimatsu desvió la mirada. "Tch. Está bien que no te agrade pero tampoco tienes que actuar como si yo estuviera activamente queriendo intimidarte"

"¿Qué? No es como si pensara eso..."

"¿No? Pues sonó a que te estabas burlando de alguna manera..." el cuarto suspiró. "En fin" dijo el niño antes de seguir su camino hacia la habitación principal, dejando a Karamatsu mirando en su dirección luciendo confundido.

"De acuerdo..." murmuró el segundo sin entender, sin embargo, lo dejó pasar ya que estaba presentemente feliz por poder caminar y hablar. Karamatsu se dirigió al baño y un par de minutos después salió luciendo satisfecho, esto, más que nada porque no había necesitado ayuda de ningún tipo.

El segundo se acercó al lavabo y procedió a lavarse las manos mientras tarareaba una melodía expresando su felicidad, ya entonces se miró en el espejo preguntándose si también podría expresar sus emociones en su rostro. Efectivamente, notó su sonrisa, sin embargo... Antes de poder sentirse aliviado por esto, Karamatsu notó algo muy extraño.

Relatos de un Futuro InciertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora