Pero cuando algo estorba, es mejor sacarlo del camino antes de que haga algo malo.

Llegamos al consultorio y nos bajamos. Entramos a la recepción y ahí está la secretaria de Fabricio.

- Tengo turno con el doctor Emerson -informo y como ella sabe quien soy me invita a esperar.

- El señor la va a atender en un momento, está con otro paciente -su sonrisa es cordial.

Tomamos asiento con Jim y veo como la secretaria lo mira.

No quiero reirme, porque sé que mi amigo no sé fijaría en ella a menos que tenga mucha testosterona en su organismo.

No le pido a Jim que me espere en la camioneta porque sé que no me va a quitar un ojo de encima, desde ése día no se me despega.

Y me molesta sólo un poco, ya que mi plan debe comenzar dentro de unos días, pero él en ése estado no me deja sola nunca.

Ni siquiera había visto cuando una mujer salió secándose las lágrimas.

Ni había escuchado cuando Fabricio me llamo.

- Señorita Helena pase por favor -su voz ligeramente ronca me debilitó.

¡Dios! ¡Ésa voz tan hermosa!.

No nos habíamos visto desde el domingo y sólo hablamos por mensaje, y si bien me mandaba audios, o a veces me llamaba, no era lo mismo que escucharla en persona.

Entro a su consultorio y lo veo anotando algo.

Cierro la puerta y tomo asiento en la silla que está en frente de él.

Lo miro detenidamente y vuelvo a confirmar que es muy lindo como para fijarse en mi.

Todo en él me está resultando lindo y éso asusta.

Porque sólo indica una cosa...

- ¿Cómo estás? ¿Cómo va todo? -se escucha muy formal pero su sonrisa es muy como las que suele hacerme sólo a mi.

¿Que cómo lo sé? Simple, él me lo dijo además de que lo vi.

- Estoy bien a decir verdad, me siento más tranquila en la escuela ahora que no está mi compañero, todo se siente más tranquilo sin su presencia -debo sonar tranquila, no quiero que él sepa lo que quiero hacer y lo inquieta que me encuentro por el miedo que me produce que algo pueda salir mal y todos salgan perjudicados por mi culpa.

- Entiendo -asiente y se ve concentrado en algo- ¿Tuviste algún problema con la ira en éstos días? ¿Algo en particular? -analiza mis facciones y mis ojos para buscar algo pero trato de mantenerme tranquila, no quiero que todo mi plan se vaya por el caño.

- Puede ser el sábado a la noche cuando pasó el incidente ése con la chica pero en mi defensa cabe destacar que ella me provocó -levanto mis manos en señal de inocencia y él ríe por éso.

¡Deos! Lo que extrañaba oír su risa, es simplemente perfecta.

- Si, recuerdo éso, y comprendo que te hayas enojado por haberte tratado de poca cosa cuando sos todo lo contrario pero vos no deberías de haberle pegado así, sé que lo hiciste para demostrar que nadie te debe de tratar así, pero algo me dice que hay algo más ahí y por éso le pegaste así, o ¿Me equivoco? -tiene una sonrisa pícara y yo estoy como un tomate, no sé qué amor tiene éste hombre por hacerme poner así, parece que le encanta verme así de roja y horrible.

Sé que trata de decirme que lo hice porque estaba celosa, pero no fue así o éso creo, no sé.

Me encojo de hombros y lo miro fijamente.

Enamorada de mi psicólogo©Where stories live. Discover now