Enamorada de mi psicólogo©

Capítulo 23

El cap de hoy va dedicado para la primera persona que votó en el capítulo anterior sarada124 ❤.

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MARATÓN 3/5.

Narra Fabricio.

¡Dios! Ésta chica va a acabar conmigo.

No pensé que se iba a acordar de que estábamos muy pegados mientras dormíamos, pero es que fue inevitable para mi no abrazarla y querer tenerla cerca, además de que cuando era chiquita así dormíamos siempre, aunque mayormente ella terminaba con su pelo en mi cara y abrazándome como un koala, mi hermoso koala.

Creí que ése suceso lo iba a pasar por alto luego de lo del beso, lo que casi perdemos el control y lo de su papá.

¡Santa Madre Teresa de Calcuta!.

Estoy como en shock, no sé si me entienden, estoy pasando por setecientos estados de ánimos, luego de que ella le haya dicho todo éso a su papá.

Fue como un cachetazo a la conciencia.

Y cuándo dijo que había estado como secuestrada por una persona que está obsesionado con ella, les juro que me sentí morir. Al igual que cuando me recordó que la habían querido violar, sentí que me faltaba el aire. Imaginar por todas las cosas que pasó. Y que encima durante mucho tiempo ella estuvo mal por éso y ésa fue la razón por la que no quería dormir, porque tenía miedo de dormirse y despertar ése lugar donde estaba encerrada, fue como si yo lo hubiera pasado y haya quedado con el mismo trauma de ella.

Si bien no hice, ni dije nada fue para que ella se tranquilice más rápido, porque si yo decía algo ella es más que seguro que se iba a poner peor y no quiero que termine colapsando como pasó en casa de mis padres.

Pero no niego que sentí la culpa correr por cada una de mis venas cuando dijo que muchas cosas le pasaron después de que yo me fui.

Me arrepentí y me arrepiento de haberme ido y haberla dejado sola, sin mi protección.

Fue como si la dejara en el medio de la jungla y no le diera nada para que sobreviva.

Y por Dios que me siento tan mal por éso.

Ojalá pudiera volver el tiempo atrás y no irme para poder cuidarla y no permitir que nadie la quiera lastimar y menos ése enfermo psicópata de Ian Adler.

Lo único que quiero es cuidarla, protegerla de aquello que quiera hacerle daño, no quiero que ella sufra más de lo que ya sufrió a lo largo de su corta vida.

Voy a protegerla de todo aquél que quiera acercarse con malas intenciones y si tengo que alejarla de medio mundo, porque ése medio mundo quiere dañarla, entonces la voy a alejar de ésas personas para que nadie le haga daño.

Es mi princesa y nadie va a lastimar a alguien que me importa.

Si, como leyeron, me importa y quiero cuidarla, ¿Y qué? Ustedes harían lo mismo por alguien que quieren cuidar.

Me levanto de la cama y me dirijo a la habitación de al lado para darme una ducha.

Al llegar a la puerta de la habitación veo a una chica de la limpieza así que le hago señas para que venga.

- ¿Necesita algo señor? -pregunta cordial, se ve que ella es buena, lo noto por la mirada que tiene y el tono de voz que utiliza. Además de que estoy sin remera y ella en ningún momento me miró el cuerpo, como lo hubiera hecho cualquier otra mujer.

- Helena me dijo que podía darme una ducha en ésta habitación y que si necesitaba ropa se la pidiera a alguna de ustedes -respondo mirándola a los ojos y veo como asiente tranquila.