Al despertar de la mañana, el recorrido habitual del brazo,
por el desierto del olvido, toca la soledad de tu almohada,
entonces, de inmediato caigo a la conciencia de una pesadilla.
Y yo, que jamás recé... además, me puse a llorar.
Por las ventanas virtuales miran, acechan mis miedos.
Son cientos, son planos, a veces me aman...
Otras desaparecen donde surjo,
desconocen el brillo de mis ojos,
y les luzco sólo por la luz que me luce.
Al dormir su inconciencia en las computadoras,
saludan espejos, sacuden los sueños,
comparten duras dudas sobre viejos inventos.
La vida, no más vivida, es narrada, y toda la culpa delegada,
la realidad trancada en las mazmorras de la pantalla.
Ignoran lápidas como antigüedades en una feria.
Cargan esperanzas como si no fueran a morir jamás.
Predican amor como algo igual y universal.
Pero ¡ojo! Estos internautas son artistas y suobra: su vida.
Y yo seré siempre aquel a desmentir la verdad.
Pero, es cierto, es verdad, no te encontré y me puse a rezar.
(Ilustración: Diana Tavares)
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Paradoja
PoetryLa paradoja está en el título de cada poema, en el contenido de sus líneas. Paradoja son poemas que resisten en tiempos de pandemia, reside en el hecho de que estemos más distante y más cerca que nunca. Incluso las palabras no significan otra cosa...