CLAN ALDER: "Capítulo XV"

Start from the beginning
                                    

—Ten—sus ojos se encontraron con Dinah, una de las vampiras que había conocido ese mismo día al llegar al Alderhood. En sus manos sostenía una taza con algo humeante—. Es solo un té—la dijo al verla dudar—. No tiene sangre ni nada, aunque si quieres puedo conseguirte un poco.

—No, gracias. Pero puedo aceptar un té—dijo tomando la taza viéndola con sospecha y olfateando el aire.

"Huskys" pensó Dinah, y puso los ojos en blanco apoyándose en la pared opuesta a Lauren.

—Pruébalo—Lauren la observó mientras daba un sorbo a su té al sentir su sabor sus ojos se abrieron con sorpresa.

—Su sabor es fuerte y diferente—murmuró dando otro sorbo—. ¿Qué marca es?

—No es ninguna marca—Dinah sonrió observándola con curiosidad—. Es una Camallia Sinesis original procesada. Mi madre ayuda a un cultivador en Miami que suele enviarnos una cantidad cada mes—Lauren observó el líquido claro con un toque de limón, canela, y supo que parecía ser su té favorito—. Camila lo toma de esa forma. Un toque de limón y canela. Hace muchos años que se convirtió en su favorito porque era el favorito de su mejor amiga.

—¿Qué tantos años? —Lauren vio a Dinah fijamente esperando su respuesta.

—Un poco más de trescientos—Dinah notó la sorpresa en los ojos de Lauren pero se mantuvo sin mostrar sus emociones—. Sé que piensas que somos una clase despreciable de depredadores, pero tenemos una despensa y puedes comer algo. Llevas casi doce horas en el pasillo. Tus huskys están preparando algo en la cocina para todos mientras uno de ellos cuida la puerta como si su vida dependiera de eso, a pesar de que la casa está protegida con magia gracias a tu amiga la bruja.

—Me preocupa lo que pasa dentro de la enfermería que tiene tu madre aquí. Yo me recuperé muy rápido, pero mi padre y tu hermana no recuperan la conciencia, y todo lo que me importa se encuentra dentro de esa habitación.

—Claro—Dinah alzó una ceja interrogante y sintió la presencia de Ian y Normani que estaban a unos metros en la cocina cuidando de su alpha, y otro de los lobos que no reconocía pero que ahora sabía que se llamaba Claudio que se encargaba de cuidar el perímetro sin arriesgarse a ser visto—...creo que el sentimiento es mutuo.

—Tu hermana me salvó la vida—bajó su mirada hacia el piso y respiró hondo recordando la escena—. No importa la naturaleza que tengan, lo que tu madre hizo por mí y lo que está haciendo por mi padre es mucho más de lo que podré pagarles.

—Nos alegra estar a su servicio, milady—dijo Dinah con burla pero Lauren no sonrió al escucharla. Sus ojos fueron hacia la puerta cerrada como si pudiera percibir algo. Dinah dejó de sonreír y también se puso derecha como si sintiera lo mismo.

—Algo no está bien—dijo de inmediato tirando la taza a un lado la cual se quebró contra la pared.

Lauren intentó abrir la puerta pero al sentirla cerrada, respiró hondo y con un golpe de su hombro la puerta de madera cedió abriéndose. Rachel y Amelia estaban cerca de la cama de Camila. Lauren notó que Rachel tenía lágrimas en sus ojos, sus manos empapadas de sangre al igual que su madre.

—Lauren no puedes estar...—empezó a decir Amelia, pero Lauren alzó una mano impidiéndole que siguiera hablando. No había tenido la oportunidad de hablar con su madre, pero apenas podía verla a los ojos después de recuperar la conciencia. La alegría de verla, la tristeza del tiempo alejadas, la muerte de sus hermanos, y la tensión del momento no eran buena combinación.

—¿Qué es lo que pasa? —dijo observando a su padre que parecía tranquilo con todo su cuerpo lleno de Asclepias Tuberosa. Sus heridas estaban casi sanas, a diferencia de las de Camila que parecían casi recién hechas. Su rostro estaba demacrado, lo que era extraño que se notara en un vampiro que solían tener una tez pálida, aunque eso era algo diferente en la familia Strafford.

The Midnight Chronicles TrilogyWhere stories live. Discover now