𝙉𝙚𝙫𝙚𝙧 𝙜𝙞𝙫𝙚 𝙪𝙥 | Oikawa T.

𝐴𝑜𝑏𝑎 𝐽𝑜𝑠𝑎𝑖

Tachibana y yo nos quedamos hablando en la plaza durante un buen tiempo, más del que había pensado que podría tomarnos. Hace mucho que no teníamos tanto tiempo para hablar así, siempre una estaba ocupada con sus propias cosas y apenas podíamos intercambiar un par de palabras, pero ahora las dos estábamos libres así que le dimos rienda suelta.

Charlar con esta chica era bastante divertido, siempre le añade algo de comedia a lo que dice, además es buena escuchando, aunque es inevitable el que se pierda imaginando las cosas que uno cuenta. 

—No fue la gran cosa...—Murmuró sonriente mientras sus mejillas se teñían de un suave color rojo.

—¡Pero si lo dijo frente a todo el salón y te dio un ramo de rosas!—Solté un leve suspiro ante su modestia.—Y pensar que lo rechazarías...

—Pero míranos ahora.—Una leve risa escapó de sus labios.—El bobo hizo lo imposible para que quedemos en el mismo salón en nuestro primer año de preparatoria, continuó a mi lado a pesar de haberlo rechazado y al final terminó por conquistarme sin siquiera intentarlo, ¡Todo el mismo año!

Había un chico en secundaria que había quedado sumamente enamorado de Tachibana, era bastante atractivo y famoso, pero no era de los que les interesaba mucho el tener una pareja o algo así, eso, hasta que un día Tachibana fue a dejar un recado a su salón y, según aquel chico, fue amor a primera vista. Alguna vez había hablado con él, era amable pero bastante reservado, aunque cuando hablaba de mi mejor amiga las cosas cambiaban. 

Hasta donde sabía, se le confesó el último día de clases, después de la ceremonia de graduación. Tachibana no quería estar en una relación, así que terminó por rechazarlo. 

Ahora, después de tres años de ese suceso, ellos dos están saliendo.

—No usa lentes, ¿No?—Pregunté mirándola divertida. Tachibana me miró con una mueca para después darme un leve golpecito en el hombro.—¡Auch!

—No los necesita para poder ver a alguien tan linda como yo.—Ambas soltamos una pequeña risita.—Pero él realmente hizo mucho por mi ese año.

—Pues se nota que tuviste un primer año bastante intenso, ¿Eh?—Dije sonriente para después subir y bajar mis cejas.

Sonrió levemente para después asentir.

—Pero el tuyo tampoco se queda atrás.

Tachibana tenía razón, mi primer año de preparatoria tampoco fue el más tranquilo del mundo, como hubiera querido.

Después de hablar con Mashiro-san en aquella plaza comencé no sólo a ir planeando las cosas que haría en mi tiempo de descanso, sino que también decidí oficialmente entrar a Aoba Josai y a estudiar para el examen de ingreso. Le di la noticia a mi familia días después de haber investigado un poco sobre la preparatoria a la que quería ir. Mis padres hicieron un par de preguntas pero al final aceptaron y me apoyaron, entendieron que necesitaba cambiar de ambiente. 

También se lo dije a Tachibana, al principio quedó bastante sorprendida, pero después de unos minutos comenzó a llorar y a decirme que lo entendía, que de alguna forma se esperaba alguna cosa así después de lo que pasó aquel día en el que nos peleamos. Las dos terminamos en un río de lágrimas mientras nos decíamos que nos deseábamos lo mejor para el futuro, fue bastante emotivo.

Lo difícil fue decírselo a Wakatoshi.

Como dije anteriormente, él y yo teníamos planeado ir juntos a la preparatoria de Shiratorizawa, desde hace bastante tiempo, así que decirle de repente y a pocas semanas de la graduación que no seguiría con nuestro plan fue... Problemático.