El Secreto (Wonho&Tú)

Capitulo 16

Paso un mes tranquilo, pero hace 2 dias, habia empezado el rumor de que Lee Hoseok estaba en una relación con una persona de la Preparatoria, todos hablaban de aquello, por suerte, nadie sabia si era mentira o verdad, cuando Hannah Roswell se quiso señalar, Hoseok lo negó en medio del comedor, frente a todos, incluso maestro y el director.

Nadie sabia y muchos hasta creian que era un rumor del Club de Periodismo para tener mas lectores, pero la verdad, es que ahora tenia de nuevo a Hannah Kennarbar detrás mio, era de mi misma clase y desde que entró a ese club ha luchado porque salgamos a cambio de promover el Club de Teatro, pero ella no me interesa, es bonita y todo, pero yo ahora y antes no estaba interesado en tener una relación o la verdad, me gustaba Hoseok y actualmente tengo una relación con él, aunque era secreto para gran parte de la Preparatoria.

Hannah, no se nada – le respondió mientras me seguía hasta la próxima clase, solo voy a su casa a pintar cuadros y que mi hermano pequeño tenga sus clases particulares con él...

Por favor, no lo haz visto con una chica – comentó Hananh a punto de escribir en una libreta – es necesario que esto se sepa...

¿Para qué?, ¿Para que más gente lea tus columnas de chismes? – dije enojado – lo más que he visto de Hoseok es como le enseña a mi hermano a batear y a recibir el balón, nada más, si quieres algo habla con él o deja de meterte en cosas ajenas y a mi dejame tranquilo...

Aun no aceptas mi invitación para la fiesta de conmemoración de la ciudad – dijo coqueta – podríamos ir y divertirnos....

Lo siento, estaré ocupado, tú tienes deberes con tus chismes, yo con mis hermanos y el Club de Teatro y no me interesas como nada... - dije firme.

Me acerqué a Angela y entré al salón, ya sentamos, me relaje.

Nos persigue a nosotros igual sobre todo cuando supo que el padre de Hoseok, nos ofreció toda la semana antes de las fiesta usar el Auditorio de la ciudad con todas las comodidades – comentó Angela – Ethan casi le quema el brazo ayer cuando ella le sorprendió por detrás...

No tengo nada que decirle, menos si insiste en querer algo conmigo – dije resignado – no me interesa ella, ni ninguna chica...

Me interesa solo mi novio

Sonreí internamente, recordando el ultimo fin de semana en casa de Hoseok, esos 5 minutos besándonos, mientras mis hermanos, estaban estudiando, fueron mágicos en su cuarto, pero debia concentrarme en lo que ahora venia, es mi penúltimo año y quería sentirme capacitado para todo lo que iba a venir, asi que olvide lo demás y me largue a pasar todas las clases, lo más normal.

Luego en la tarde la rutina fue normal, me dedique a entrenar el dialogo para obra que íbamos a presentar, me sentía tan a gusto, cuando acabo tomé a mis hermanos y me iba yendo cuando Hoseok apareció con siempre.

¿Cómo están todos? – pregunto sonriente - ¿No quieres que te ayude a cargar a los mellizos?

No, estoy bien, vamos a casa – dije pensativo - no quiero provocar conflictos, todo anda bien y mis hermanos no gritan ni lloran, no hay gritos...

Solo que madre lo odia por ser chino – dijo Axel molesto.

... - evité verlo, estaba triste por esa situación.

Mirame – Hoseok tomó su rostro y me dio un beso tierno – cualquier cosa, yo estaré contigo, lo prometo, si necesitas irte de esa casa, ven a la mia, a mi padre le da igual, incluso te apoyará a ti, a tus hermanos, y si tu madre, quiere a ella...

Me emocioné por su actitud, era tan dulce, noble y comprensivo, le devolví el beso, pero luego decidí que debíamos irnos.

Al llegar, entramos al cuarto, cuando eran las 8 de la tarde, oímos un portazo, todos saltamos de la sorpresa, incluso los mellizos despertaron y lloraron asustados.

Vimos a Joe con los ojos desorbitados, con una botella de ron en la mano.

Puto marica – dijo agarrándome del pelo.

TianYu – Axel quiso detenerlo.

No, enciérrense y llamen a la policía – dije mientras Joe arrastrándome por el pasillo – ¡suéltame maldito!

Me tiró en el piso, a unos metros estaba mi madre viendo todo con indiferencia, vi que una ceja me estaba sangrando.

Asi que eres un marica que le gustan los hombres – escupió Joe viéndome con odio – toda ciudad lo sabe, que repugnante eres...

¿Yo soy repugnante? – pregunté frustrado – tú golpeas y nos maltratas desde hace 12 años, mirate a un maldito espejo...

Callate, cállate! – mi madre se me acerco y me tomó del pelo para golpearme a la cara – ¡como pude parirte!

Sentí muchas cachetadas en mi rostro, cuando me soltó la cara me dolía, por favor que no lastimen a mis hermanos.