𝕷𝖆 𝖀𝖑𝖙𝖎𝖒𝖆 𝕺𝖕𝖔𝖗𝖙𝖚𝖓𝖎𝖉𝖆𝖉 (Temporada 4)

Capitulo Final

El final de una aventura

La llegada del sol hizo toda la tristeza se fuera, la batalla contra aquellas bestia era una victoria, el reino de los híbridos había reclamado de nuevo sus tierras. La reecontrucion había avanzado mucho gracias a la ayuda de Merlin, el rey de los híbridos retomaba su trono mientras que los demás pecados ayudaban un rubio permanecia a las afueras en el gran capo verde de su alrededor, su hermano menor quería decirle algo pero no sabía con qué palabras hacerlas ya que después de todo este tiempo alejado de su original vida, no sabía si aún planeaba el puesto del rey demonio ya que.... El realmente buscaba serlo desde el inicio para cambiar el mundo demoníaco y hacerlo un lugar mejor no solo para los demonios si no para su prometida, Meliodas esperaba pasientemente con un tarro de cerveza en la mano la pregunta de zel hasta que el ya no pudo aguantarlo más y grito.

Zeldris: ¡Meliodas!....- Este dio un leve salto.

Meliodas: ¿Si que pasa?... Pero no me grites que no estoy sordo- Preguntó, mientras limpiaba uno de sus oído con su dedo índice.

Zeldris: Bien.... Papá ya no existe, el reino demoníaco ya no está y tú deber como heredero es... Bueno yo...- Interrumpió.

Meliodas: Zel....- Alzo su mirada para toparse con esa sonrisa que no veía en el desde que el había comenzado a cambiar cuando conoció a __.
¿Quieres tomar tu el trono del rey demonio?....- Su mirada llegó a iluminar de nuevo, esas palabras quería escuchar.
Yo lo tome no solo por qué debía, si no en tu memoria, ya que tú querías volverte mientras yo....- Alzo la mirada para comenzar a contemplar el cielo azul.

Meliodas: Yo solo quiero ya tener una vida tranquila, envejecer y sobre todo ver a mis hijos crecer....- Volteo a verlo.
Tu desde el principio sabías que no me interesaba en lo absoluto en reinado, pero ahora que todo acabo y definitivamente no tengo necesidad de serlo....- Una sonrisa se le formó a Zeldris al escuchar eso, por fin sería el rey del reino demoníaco.

Zeldris: Gracias..... Hermano.- ambos rieron ya que tenía tiempo de que él no lo llamaba así, pero en eso llegó en su mente la joven quien permanecia aún dolida.
¿Y....__?.- El rubio miró bajo.

Meliodas: Aún.... Sigue en duelo.- Su mirada era de preocupación.

Zeldris: Me imagino, perder a no solo tu familia al tu mejor amigo es un dolor muy grande para ella.

Permanecia a un lado de una cuna, tiraba de de un cinta quien a su punta tenía un pequeño cascabel que sonaba cada vez que lo movía, las manitas de la bebé que regreso a la vida miraba con mucho detalle el cascabel, sus risas eran hermosa mientras que por parte de la ojiverde solo podía recordar a su hija quien viéndola bien se parecían demasiado. La joven a pesar de sacar leves sonrisas en sus labios aún permanecia con el dolor en su pecho de la perdida de Mael, las chicas quienes estaban en el cuarto veían fijamente en silencio a su compañera que desde hace 1 hora no había dicho nada, todas no sabían cómo decir la noticia pero una de ella lo dijo sin más.

Elaine: ¡MAÑANA NOS REGRESAMOS A LIONESS!...- Las chicas giraron a verla.

Diane: ¡Elaine!...- abrió los ojos como platos.

Gelda: ¿¡Por qué hablaste?!...- La joven pelinegra giro a verlas a las chicas.

__: Que bien....- Sonrió.
Pero chicas.... Les pido un favor...- todas hicieron silencio.
Quiero estar sola, por favor....- Fue lo único que dijo para dirigirse a la puerta y cerrarla de un portazo. Sus pisadas se dirigían hacía la azotea del castillo, la joven miraba al horizonte ya que allí había sido la pelea final, en vez de mostrarse feliz por qué todo había acabado de verdad no podía evitar caer una lágrima al ver qué a pesar de hacer todo lo posible para que el se salvará, al final.... El mismo eligió la muerte para salvarla, ella solamente quería gritar pero no debía ya que en este todos estaban tranquilos así que sin más dio un salto de la azotea para caer de pie en el césped llevo sus manos a los bolsillos de su suéter para comenzar a caminar e irse alejando del lugar con mucha prisa, cada paso que daba comenzaba a ser rápido, no sabía si estaba caminando o trotando pero... Ese cambio ahora era solamente correr hacia el gran bosque, lágrimas salían de sus ojos no pudo evitar gritar de una vez por todas dejando salir todo el odio que tenía consigo misma.