-Y así amigos, es como se convence a un Uchiha de cualquier cosa -chocó puños con su compañera. Sasuke quiso darse un cabezazo contra un espejo, pues le habían aplicado la psicología inversa y su gran orgullo en contra.
-Mientras hace eso, nosotros atacamos a Haku. Usaré los clones para tener más probabilidad de tocarlo o al menos que lo ataques tú. ¿Aún puedes hacer el Shikyaku no Jutsu? -le preguntó a Kiba. Cuando este asintió, le dijo- Si puedes atraparlo, somételo un momento. Si no, Sasuke predirá sus movimientos y podrá atacarlo. Cuando lo aturdan, lo marcaré con mi fórmula técnica y entonces lo tendremos a nuestra merced en cualquier momento y lugar.
-¡Entendido!
-Hmp. -asintió el pelinegro.
-¡Kagebunshin no Jutsu!/¡Shikyaku no Jutsu!
Una gran nube de humo apareció y de ella salieron una veintena de Nozomi's y un Kiba transformado con el jutsu. Haku volvió a salir, y pasó exactamente lo mismo que antes, solo que esta vez, también atacó al Uchiha, haciendo que tuviera que cubrirse con sus brazos. Gracias al bombardeo, los clones se desvanecieron uno por uno, haciendo que imágenes de cada una de las posiciones llegaran a la pelirroja.
-*¿Qué... es esto?* -estaba aturdida. Casi cae de espaldas por el golpe, pero su compañero castaño la atrapó, golpeándose él mismo.- ¡Kiba! ¿Estás bien? -preguntó, levantándose rápido.
-Me duele la espalda~ -respondió. La Uzumaki puso su mano encima de la zona y emanó un poco de su chakra, disminuyendo mucho el dolor- Gracias, Nozomi-chan.
-No hay de que. Sasuke, ¿Pudiste verlo? -murmuró
-Era casi imperceptible, ¡Pero alcancé a ver su movimiento! -asintió.
-¡Entonces, otra vez! -dijo el Inuzuka, transformándose.
-¡Kagebunshin no Jutsu!/¡Shikyaku no Jutsu!
Kiba volvió a saltar junto a los clones de su compañera, al espejo donde se ubicaba Haku. Sasuke avanzó y pateó un charco de agua, haciéndola volar.
-¿Es que aún no han entendido que es inútil?
El ojicafé salió de su espejo y destruyó a cada uno de los clones, atacando a Kiba y Sasuke de paso, como las dos veces anteriores. Nozomi, ya preparada, hizo a un lado las imágenes que aparecían en su mente, pues era más importante el combate frente a ella. Aún así, los tres fueron incapaces de esquivar el ataque, y cayeron de espaldas en el suelo helado.
-*Claro que ver su rastro no significa que pueda igualar su velocidad -pensó el Uchiha reincorporándose- A esto se refería -recordó el agua siendo repelida y la instrucción de su compañera- Bien, la próxima vez que ataque será la ocasión.*
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-Aunque la basura se multiplique, no podrán vencer a Haku -se jactó el espadachín.- Es la herramienta definitiva.
-No hay nada tan aburrido como oír a alguien tan presumido -dijo el Hatake.- ¡Acabemos con esto enseguida! -levantó su hitai-ate, dejando ver su Sharingan otra vez.
