𝓹𝓻𝓲𝓷𝓬𝓲𝓹𝓮 𝓜𝓲𝓷.

7: Mɪ ʟᴜɢᴀʀ sᴇᴄʀᴇᴛᴏ

Me desperté antes de HoSeok, hoy sería nuestra "Gran reunión" planeaba algo especial pues hace mas o menos de un mes había conocido a HoSeok, bueno. Me sentia algo feliz al ver a Hobi al lado mio la primera vez que duerme a mi lado claro, omitiendo la siesta de la otra vez.

Quite sus brazos de mi pecho con cuidado para poder levantarme sin despertarlo, sin más pude levantarme de allí, corrí a mi baño para estar listo, tome una pequeña campanilla que alertaba a mis sirvientes que comería en mi recámara, toque barias veces para dar a entender que trajeran mucho, Alguien toco la puerta entrando con un carrito donde estaban las dos bandejas dejó las bandejas En la mesa de noche y se retiro sin decir nada, Sin siquiera ver quien era mi acompañante.

Me senté en la cama nuevamente mientras acariciaba su cabello dulcemente, simplemente hacía eso sonriendo al sentir sus sedosos cabellos, observé su cálido rostro, una pequeña sonrisa se pintaba en este indicando que ya había despertado, pase mis manos hasta su nariz, luego hasta sus labios mientras delineaba cada centímetro de esos labios tan esponjosos, tan apetecibles.

- Buenos días. - Sonreí al ver que abrió los ojos.

- No, magnifico día. - Sonrió, su sonrisa mañanera era lo que quería contemplar todo los días.

- ¿Tienes Hambre.? - Negó. -!¿ Por que.?!

- Si no es un YoonGi en salsa no quiero.

- Entonces dejame ir a prepararme. - Reímos.

Me puse a su altura dejando un beso en su mejilla, luego lo mire a los ojos  tenian un brillo particular, él sol se alumbraba en ellos, su nariz perfecta se veía mas hermosa que otras veces, su cabello desordenado  su respiración tranquila, su primera sonrisa que ahora me pertenecía en su totalidad.

- Buenos días. - Dijo nuevamente.

- No, maginifico día. - Repeti.

- ¿Tienes hambre.?

- Si no es Hobi en salsa no quiero. - imite.

- Entonces te quedaras con hambre. - bufé.

- así no iba. - Río. - Me gusta tu risa, quiero que solo sea para mi.

- Ya lo es, todo es tuyo.

- Me alegra escuchar eso.

Se sentó por fin observando las bandejas con brillo en los ojos, al parecer seria su primer desayuno en la cama, lo cual me alegra en sobremanera por que quiero complacerlo en todo los conceptos.

- ¿Ahora si tienes hambre.? - asintio.

Tome las bandejas y las hacer que una por  una, primero la de Hobi y luego la mía, se levantó y fue a lavarse los dientes.

- ¡Hey! Ese es mi cepillo de dientes. - Río.

- No dijiste eso ayer, ó ¿me tienes asco.?

- No dije eso, no saques conclusiones por mi. - Sonríe tierno con la pasta dental notandose.

- Bien entonces no digas más.

Reí, luego de haber acabado volvió a su lugar anterior, comenzó a comer sin decir nada, solo disfrutábamos de los bocados que cada uno cogía de su plato, incluso compartíamos algonos de ellos, terminé antes, mi acompañante estaba disfrutando de su comida así que no se apresuro, solo veía cada expresión de disfrutar cada que algún bocado que acariciaba su paladar, luego de terminar su desayuno sonrió cálido para mi.

- Estaba riquisimo, muchas gracias. - Tomo mis mejillas y junto nuestros labios.

No dije nada más por que él beso lo decía todo,  solamente la presencia de él otro, nuestras frentes unidas, nuestros dedos entrelazados eran suficiente para poder transmitir nuestro amor a través de él silencio proporcionado.