Conocer a una persona puede ser una experiencia maravillosa pero muchas veces el involucrarse con otra vida puede desmoronar nuestros ideales.
El reconocido actor Bill Skarsgård se verá atraído por una mujer independiente y de una personalidad fuert...
Nate se retiró con su propina luego de acompañar a los hombres hasta sus respectivas suites.
Bill dejó su equipaje a un lado y fue a dar un vistazo a su habitación. Se sentó en la que sería su cama por la próxima temporada. Roman por su parte fue hasta donde estaba su amigo y lo miró con curiosidad.
- ¿Qué fue eso? - Interrogó el hombre de pelo negro y ojos café mientras se cruzaba de brazos.
Bill distraído prendió un cigarro y habló sin darle importancia.
- ¿Que fue qué?
- No le quitabas la mirada de encima a la muchacha. Te conozco. No sobresales por ser amable sin razones y tampoco te detienes a observar muchachas que podrían ser fans. De hecho ni le has agradecido la atención, solo la miraste como un psicópata.
Bill se rió vagamente al imaginar como la escena fue vista por un tercero.
- Bueno, supongo que me sorprendió que hablara muy bien sueco... Y su rostro... - dijo pensativo
- Bella mujer sin dudas, pero muchas mas han querido acercarse a ti.
- Estás haciendo muy grande el tema. Solo la miré con curiosidad...
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- ¡"Curiosidad" dices! - rió Roman - Creo que hasta la pusiste nerviosa. Pero en fin, solo quería molestarte acerca de esa incómoda situación. Deberías distraerte un poco, vinimos por negocios pero tenemos tiempo suficiente para disfrutar de lo que puede ofrecernos este país y su gente.
- Solo quiero descansar por hoy - Acotó Bill apagando su cigarro.
Roman se retiró dándole una palmada en el hombro. Era cierto que iban por negocios, Bill había sido convocado para una entrevista y una posible audición pero Roman intentaba que se relajara y apartara su mente de las cosas que pasaban en Suecia en su círculo íntimo. Por eso eligió aquel lugar. Las reseñas eran muy buenas y las instalaciones perfectas para unas fugaces vacaciones.
Bill se dejó caer en la cama y cerró sus ojos. Pensó en Alida, en su pequeña hija y cuánto debía ser fuerte por ella. De repente la imagen de aquella muchacha en la recepción vino a su mente... Era bonita, claro, pero había algo más con ella... No era su "envase" pudo ver en sus ojos más allá de lo que ella mostraba y lo hacía sentir molesto. Ya no quería pensar nada. Se dejó ir a los brazos de Morfeo por un tiempo...
Mientras Bill descansaba del viaje, Roman se dio a la tarea de ir a recorrer el lugar para planificar qué hacer cuando se repusieran. Buscando el salón de comidas se topó con Roxanne que tenía su nariz pegada a un IPad. Ella no se percató de su presencia hasta su saludo que le sacó un susto. Estaba muy concentrada.
- ¡Lo siento, no fue mi intención asustarte! - Le dijo Roman muy apenado.
- No, está bien, lo siento. Vengo sumida en mis tareas. Dime, ¿Puedo ayudarte en algo? - Ofreció la dulce Roxanne con una auténtica sonrisa.
