Nate miró a Stiles, aún no entendía nada sobre su naturaleza, hace solo un par de días que ahora tenía la mente de un adolescente, no comprendía algunas cosas y ahora también tenía clases en casa como los entrenamientos.
- Es que, se me hace todo muy difícil, papá. - Nate puso su cabeza en la mesa y la escondió con sus brazos.
- Tranquilo, Nate. - le dijo Derek acariciando su hombro. - Todo tendrá sentido.
- Padre, nada de esto tiene sentido, papá era un demonio y ahora es un ángel, somos hombres lobo, y yo soy una mezcla.
- Lo único que debes entender es que naciste del amor entre tu padre y yo y que la manada entera te adora.
- Me adoran porque soy lo que los mantiene unidos.
- Nathaniel, no vuelvas a decir eso. - dijo Stiles enojado. - Todos te aman, sobre todo, Liam, que es como tu hermano.
- ¡Pero yo no lo quiero así, papá!
Derek miró a Stiles curioso.
- Hijo, ¿todo este... drama es porque te gusta Liam?
- No es eso, padre, es que... - el chico suspiró. - esa chica Hayden, lo tiene loco, anda muy embobado, ya no me nota.
- Nate...
- Y de lo único que habla es Hayden. Hayden esto, Hayden lo otro, que Hayden tiene bonito cabello, que Hayden es muy linda, que Hayden, Hayden, Hayden, ¡ya me tiene harto!
Las cosas alrededor empezaron a flotar, pero el sonido de la cafetera distrajo al muchacho, haciendo que todo caiga al suelo nuevamente.
- Bebé, tienes que ser paciente, tal vez Liam esté enamorado de ella, además tú entrarás al instituto el otro mes, vas muy avanzado, y todo eso es gracias a tu tía Lydia.
- No quiero conocer a más gente, quiero estar aquí, con ustedes, con... - el chico suspiró. - Con Liam.
- Hijo, todo pasa a su debido tiempo, ¿sí?. A Stiles y mí también nos tomó tiempo. - Derek sonrió.
- Bastante, diría yo. - dijo el ángel. - Yo estaba completamente enamorado de Derek, pero él solo tenía ojos para cazadoras psicópatas, ¿no es así, cielito?
- Stiles. - Derek trató de estar serio, pero sonrió igualmente. - Kate ahora está feliz con Jennifer.
- Y viven en la casa de mi padre, algo que jamás pensé que pasaría, para ser exactos. - rió Stiles. - Nate, mírame, todo va a estar bien, tal vez esa tal Hayden no es tan mala, trata de ser su amigo.
- ¿Alguien habló de Hayden? - Liam entró a la cocina con su mochila colgando de un brazo y muy feliz.
Nate rodó los ojos, se sirvió café y se fue a su cuarto nuevamente.
- ¿Qué le pasa?, está muy raro conmigo.
- Tranquilo, se le pasará. - le dijo Derek revolviendo su cabello.
El teléfono de Stiles comenzó a sonar, llamando la atención de todos ahí.
- Bill, ¿qué pasó?, ¿qué te dijo Eric?
- Iremos para allá cuando anochezca, supongo que tienes lugar para algunos vampiros y una humana subdesarrollada.
- ¡Bill! - se escuchó a la chica.
- Tenemos una cabaña detrás de nuestra casa, además de que pueden comer aquí.
- Excelente, nos veremos pronto, pequeño Stiles.
- Nos vemos, Bill, cuídate.
Stiles colgó, dejó el teléfono sobre la mesa y suspiró.
- Un problema menos.
- Odio que te llame así. "Pequeño Stiles".
- Der, amor, Bill tiene a Sookie.
- ¿Un vampiro?, - dijo Liam curioso. - ¿existen de verdad?
- Li, hay un montón de criaturas que viven aquí en la tierra. Los vampiros son uno de ellos.
- ¿Y se van a alimentar de... los humanos de aquí?
- Oh cariño, no, se alimentan de sangre sintética.
Liam hizo una cara extraña y negó para luego irse al cuarto de Nate.
- ¿Escuchaste eso?, ¡los vampiros existen!
- Ya escuché a papá hablar con el tío Bill. - le dijo sin despegar la vista de su laptop.
- ¿Tío Bill?, ¿ya lo conoces?
- Liam, tengo solo 2 años de edad y la mente y el cuerpo de un chico de 15 años hace dos días, jamás he visto ni he hablado con el tío Bill, pero si papá dice que es alguien en quien confía, no voy a dudar de él.
- Sí que llevaste lo hablador de Stiles, ¿eh?
- ¿Vas a decir algo más o comenzarás con Hayden otra vez?
- Nathan, ¿cuál es tu problema?
- Si no tienes nada más que decir, puedes irte a tu cuarto, estoy ocupado viendo algunas cosas.
- ¿Qué cosas?
- ¡¿Qué te importa, Liam?!, ¡déjame solo! - rugió el chico.
Los ojos del chico se iluminaron de un color rojo y expulsó a Liam de su cuarto, haciendo que vuele hasta el pasillo. La puerta se cerró sola y Liam trataba de pararse cuando Stiles llegó al segundo piso.
- ¿Qué pasó?
- Nate me echó volando de su cuarto, literalmente.
Stiles rió y levantó al beta, éste se sacudió la ropa.
- No entiendo que es lo que le pasa.
- Es un adolescente, tú más que nadie deberías de entenderlo.
- Sí, pero yo no ando golpeando a las personas. - Se masajeó la cabeza. - Por lo menos de niño no molestaba y era tierno, ahora es una versión de Derek adolescente con tus rasgos y los de él.
- Pero la diferencia es que yo conocí a los dos Derek, y mi hijo es solo un cachorrito.
- Un cachorro con bastante fuerza.
El resto de la manada llegó después, Stiles les dió la noticia sobre Bill Compton y el ejército de vampiros, algo que realmente incomodó a los chicos.
- No pueden asesinar a nadie del pueblo.
- Isaac, conozco a Bill desde que yo era un niño, él y los demás no van a asesinar a nadie.
- ¿Pueden caminar bajo el sol? - preguntó Cora.
- No, solo pueden salir de noche. Excepto Bill, que ahora por una extraña ocasión sí puede. No sé porqué.
- ¿Y si otros salen de día?
- Se mueren lentamente, sus cuerpos se comienzan a destrozar casi quemándose por la luz del sol.
- Bueno, si Stiles confía en ellos, no veo el problema. - dijo la loba. - Stiles siempre tiene razón en todo.
- Es lo que yo dije. - Nate apareció luciendo una chaqueta de cuero con una camisa a cuadros y jeans azules. - Papá siempre tiene razón.
- Es el retrato exacto de Derek y Stiles. - dijo Chris riendo.
- Pero Nate es más lindo. - dijo Liam, para luego mirar a los padres del menor. - Sin ofender, claro.
- ¿Quieres quedarte castigado por una semana? - le dijo Stiles.
- No no, por favor no.
- Es broma, Li. Por supuesto que mi hijo es hermoso, ¿no es así, mi pedacito de cielo chiquito? - le dijo el ángel apachurrando sus mejillas.
- Ya, papá, basta. - rió.
El sheriff entró apresurado y algo cansado.
- Papá, ¿qué pasó?
- Los ángeles, hijo.
- ¿Qué, qué pasa con ellos?
- Quieren a Nate. - le dijo telepáticamente. - Saben de su naturaleza y quieren que esté con ellos.
Stiles observó a Nate quien al parecer no había escuchado nada, él, al ser mitad ángel y el elegido, puede escuchar los pensamientos. El ángel tomó a su hijo de la mano y lo llevó a su cuarto con Derek tras él. La manada observaba curiosa la escena frente a ellos.
El ángel cerró la puerta cuando Derek entró poniendo una barrera antisonidos y empezó a hacer un bolso con las pertenencias del chico.
- Stiles, ¿qué pasa?
- No se van a llevar a mi bebé, no lo van a hacer.
- ¿Quién quiere quitarnos a Nate?
- Los ángeles, uno de ellos llegó a advertirle a papá a la comisaría hace unos minutos.
- Papá, no me quiero ir, por favor. - le dijo el chico abrazando a Derek.
- Lo mejor es que se quede con Bill, ellos jamás van a pensar que está con él.
- No quiero irme, quiero estar aquí con ustedes.
- Aquí estará a salvo, Stiles. Lo protegeremos. - dijo Derek tomando a Stiles de los hombros deteniendo lo que hacía.
- Derek, tú no sabes de lo que ellos son capaces de hacer.
- Dijiste que Bill y su ejército venían a Beacon Hills, solo tenemos que estar listos para el ataque.
- Papá, si me voy, la manada estará débil. - le dijo el muchacho abrazando a Stiles. - Mi poder es más fuerte que el de ellos, ¿no es así?
Stiles solo abrazó de vuelta a su hijo, acariciando su cabello.
- Lo es, mi amor, pero aún no los manejas bien, y no podríamos contra todos ellos.
- Claro que sí. Hemos pasado por muchas cosas, unos ángeles no nos van a detener. - dijo Derek acariciando la mejilla de Stiles. - Ten confianza, mi luna, todo va a estar bien.
El ángel observó a su familia y rompió en lágrimas abrazándolos.
- ¿Por qué nunca puedo tener nada bonito en la vida?
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lost in your memory (invisible string, Vol. II) - sterek
Fanfictioninvisible string, parte II: lost in your memory. El que fue el anticristo en vida, cambió su destino con solo una acción. Él está vivo de nuevo. La guerra final se acerca. 𝙳𝙸𝚂𝙲𝙻𝙰𝙸𝙼𝙴𝚁: Los personajes mencionados en esta novela son propiedad...
Capítulo X - bad things.
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