Revista La Pluma Naranja

Consultorio de Elisa: Carta de Emilia (Hielo contra fuego)

¡Escríbele a Elisa! – Consultorio sentimental para personajes

Carta de Emilia (Hielo contra fuego, por @Megara7)

*Alerta: Spoilers. Si no has leído esta historia y planeas hacerlo en un futuro, aquí puedes enterarte de cosas que no deseas saber todavía.*

 

Querida Estela:

Me llamo Emilia y tengo casi dieciocho años. Vivo con mis tíos porque mis padres me abandonaron (suena horrible, lo sé y lo siento así) cuando tenía siete. El tema es que ahora volvieron y quieren que vaya a vivir con ellos. Eso me causa mucha angustia porque no siento que su petición sea sincera. No sé si puedo contártelo. ¿Hay alguna forma de que cambies los nombres al publicar esto? Temo que alguien pueda encontrarme. Según mi madre estoy en peligro y si no me mudo pongo en riesgo a mis tíos. Es una manipuladora de primera y no sé qué tanto creer en alguien que apenas conozco.

También está Chester, el chico que me gusta y es mi vecino hace desde hace poco. Mi mejor amigo, Jorge, me presiona para que me le declare pero nunca tuve novio y me da pánico ser rechazada. ¿No debería ser al revés? ¿Él venir por mí? Encima Chester es jugador de fútbol y todas las chicas lo quieren. Creo que una de mis mejores amigas, Abi, está saliendo con él y por eso no quiero hablar con ninguno de los dos. El otro día lo vi llegar y, literalmente, corrí hacia mi casa. Además ella cambia de novio con frecuencia y estoy segura de que no lo quiere tanto como yo. Vamos, ¡es el primer chico que me mueve el piso en casi dieciocho años!

Por otra parte, su hermano menor, Julién es un dolor de cabeza y vive haciéndome la vida imposible. Los dos ya deben saber que me gusta Chester porque me llevan años luz en astucia. Se ríen de mí (con tanta clase que no sé si se burlan o me tienen cariño) y a la vez tratan de ayudarme con un problema secreto que compartimos. A veces no sé qué pensar sobre nuestra relación. Chester es tan ambiguo con algunas cosas. Por ejemplo, una vez me dijo que no reconocería lo que es bueno para mí ni aunque lo tuviera en frente mío. Y tenía un brillo raro en los ojos además de que estaba muy cerca. Pero luego se va, se ríe y sigue saliendo con Abi. Ya estoy enojándome con solo recordar eso.

Un último problema y no menos importante: este sábado es el baile de graduación y tengo que asistir por obligación de mi familia. No tengo pareja y temo que pase algo… En el colegio me odian porque le fracturé la mandíbula a una chica de un golpe. Suena mal, pero ella me provocó y fue un episodio aislado. Espero nunca lastimar a alguien de nuevo. Aunque mis padres sean unos asesinos y, según Julién, quieren llevarme por el mismo camino.

Espero haber sido clara porque a estas alturas ni yo misma entiendo qué sucede. Lo único bueno es que estoy comenzando a encontrarme y me gusta lo que veo.

Un abrazo,

Emi.

Oh, eres perversa, querida Emilia. Has cambiado hasta mi nombre en la carta, todo con tal de que nadie se entere de que estabas escribiendo a esta revista. O probablemente no recuerdes bien cómo me llamo, en fin, lo dejaré en que es alguna estrategia. Bien pensado.

Sobre lo de tus padres, siento decirte que lo más probable es que estén en alguna agencia ultra secreta del gobierno y por eso vayan de un lado a otro. No es que te hayan abandonado porque no te quisieran, sino porque en cualquier momento podían volar en pedacitos y no deseaban que los vieras. Tal vez, ahora que estás mayorcita, quieran meterte en el negocio. Yo que tú, me aferraba con uñas y dientes a esos tíos, no suena divertido eso de explotar en cualquier momento.

También es posible que Chester te guste tanto porque también se ve misterioso y no da señales claras sobre sus sentimientos contigo o con su novia. Él puede ser un espía también, ten cuidado. Y tus amigos, su hermano y Jorge, me caen bien, te animan a que vayas por lo que quieres. Pero tu amiga, Abi, es lo primero y lo más importante. Quiero decir, un chico es un chico, pero las amigas están ahí siempre, ¿no? Así que lo mejor que puedes hacer es ir con ella y pedirle que lo deje por ti. Oh, sí, eso podría funcionar. Y le entregas a cambio a uno de tus amigos, el hermano de Chester seguramente sea buen material para ella.

Con respecto a lo del baile, no deberías ir solo porque te obligan. Rebélate y vete por ahí con tus amigos, o ve a buscar a Chester y dile lo que sientes. No podrá ir a la fiesta él tampoco, quedará shockeado y tendrá que volver a buscarte. O se enojará e irá al baile de todas maneras con su novia, pero esperemos que ocurra lo primero.

La otra opción que te queda, es ir al baile y esperar a que pase eso que dices (¿Alguna explosión? ¡Yey! Quiero ir también). Ahora que lo pienso, eso de que no tienes pareja es feo. Podrías llamar a alguien para que vaya contigo, dile a tus padres espías que contraten a alguien así de paso te hace de guardaespaldas… Ah, cierto que no tenías buena relación con ellos. Bueno, entonces te pongo como tarea acercarte a ellos antes de la fiesta, todo sea por el bien de tu pareja ficticia en el baile.  

Si eliges esto, te queda la típica estrategia de darle celos a tu amado Chester, ver cómo reacciona. Tal vez él mismo provoque esa explosión que estás esperando. Mantén a tus padres lejos del salón de baile, por las dudas. Y convence a Abi de que lo deje solo por unos minutos, regálale a su cuñado, todos serán felices. Oh, sí, la vida es tan simple durante la adolescencia.

Avísame cuál estrategia decides utilizar, así te ayudo con los detalles.

Mucha suerte.

Elisa.