Mordida ©

2. Fríos labios.

2. Fríos labios.

Cuando llego a la barra, del otro lado hay un chico con rulos y muy lindos ojos que me mira. Su mirada es fría, y a la vez siento la misma sensación que cuando pensé que me observaban, haciendome estremecer. Camina hasta mi y en su rostro aparece la misma media sonrisa que la de Louis, a diferencia que en la de este chico aparecen hoyuelos. Muy lindos hoyuelos. Me muerdo el labio, es demasiado guapo.

 —Hola, ¿que vas a pedir?— dice sosteniéndome la mirada.

 —Am, cinco cervezas, por favor— susurro y coloco mi pelo suelto para el otro lado, en un estado mortal de nerviosismo. Instantáneamente el tal Harry aspira bruscamente y cierra los ojos.

 —Claro, ¿algo mas?— dice con los dientes apretados.

Cuando abre los ojos, estos son de un color cobrizo algo extraños. Hubiera jurado que sus ojos eran claros, no así. El no vuelve a mirarme.

—No— susurro.

—Enseguida te las traigo— dice con el ceño fruncido. Aun no me mira. ¿Habre dicho algo malo? Harry se voltea e inmediatamente recuerdo lo que Louis me dijo.

—Oh, espera—digo en voz alta. Harry voltea y alza sus cejas indicando que hable —Me dijo Louis que te diga que eran para él y sus amigos.

—¿Louis?—Harry parece sorprendido pero aun sigue con su ceño fruncido.

—Si—asiento y él me mira nuevamente a los ojos. Pareciera como si tratara de decirme algo. No entiendo su expresión.

—Bien.

Harry desaparece de mi vista. Giro hacia las mesas para observar a Emily. Sigue ahí cuchichiando con Liam. Al parecer Niall se ha ido y Louis me mira. No lo había visto mirándome, que vergüenza. Alzo mi mano y lo saludo en un acto patético de mi misma. La sonrisa de Louis se agranda y también me saluda. Es lindo, nunca había visto a chicos como ellos. O sera que nunca salgo...

—Aqui tienes, no me debes nada—escucho a mis espaldas. Giro rápidamente y los ojos cobrizos de Harry me miran. Este inhala bruscamente otra vez.

«Debe tener problemas de asma, pobre.»

Miro las cinco cervezas sobre la bandeja encima de la barra.

—Gracias, Harry—sonrío y tomo la bandeja.

—Con que ya te dijeron mi nombre eh—sonrie.

—Em, si, Louis me lo dijo—rio y me giro con la bandeja en mis manos.

—Creo que merezco saber el tuyo, ¿no crees?—me detengo y volteo a verlo.

—Lea, Lea Evans.

—Un gusto, Lea. Nos vemos pronto—Harry me sonríe de manera coqueta y es inevitable no imitarlo. Nuestros ojos se observan detenidamente. Al parecer esta muy seguro de lo que dijo.. y espero que así sea.

—Claro, hasta luego—digo y le sonrío nuevamente.

Volteo para seguir mi camino y no babearme con esos ojos. Al llegar a la mesa, Niall ya ha vuelto. Pero Louis no esta. Y Emily con Liam siguen en su coqueteo.

—Uju, ¡Mas cerveza!— festeja Niall, lo que me hace reír. Apoyo la bandeja en la mesa y me siento donde estaba antes.

—Gracias Lea— sonríe Emily y los tres agarran una cerveza.

—No es nada—agarro una de las cervezas que queda y la abro. Tomo un sorbo. Esta riquísima, aunque tiene un gustito distinto, o será lo que esta casi congelada, no lo sé.

Un rato mas tarde, Louis vuelve y con él, otra bandeja de cervezas. Estos chicos son maravillosos. Y no lo digo solo por su físico, sino también por su inteligencia y manera de expresarse y hablar. No son como los idiotas de mi clase, sino que parecen mas adultos y aplicados. Después de unas cuantas cervezas mas traídas por Niall, me encontraba disfrutando de la noche de la cual quería huir momentos antes.

—¡Hey Lea, ven a bailar!—giro y un sonriente Louis me extiende su mano. No lo dudo ni un segundo. Tomo su mano y nos dirigimos a la pista de baile. No se si es el alcohol corriendo por mis venas, la excitacion de toda esta gente bailado o el hecho de que Louis este bailando conmigo, pero me siento genial. Me siento liberada.

Bailamos un par de temas movidos con Louis, hablando de tonterías y riéndonos de otros de la manera en la que bailaban. Louis es divertido a su manera, aunque aun asi, no me cierra del todo, es algo extraño y sigo sosteniendo que es algo.. arrogante. Seguimos bailando hasta que llegaron los lentos. Louis toma mi mano izquierda y me atrapa entre sus brazos y comenzamos a movernos al ritmo lento de la musica. Gracias a Dios, había dejado que la obstinada de Emily Miller me diera clases de baile, por si alguna vez se presentaba la ocasión.

—¿Asi que nunca habías venido aquí?— pregunta Louis cerca de mi odio.

—No, es mi primera vez.

—Mmm—ronrronea sobre mi hombro cerca de mi cuello.

Mi cuerpo de repente no responde, solo absorbe cada una de sus caricias. No puedo controlarme. Siento su aliento cerca de mi cuello, hace cosquillas, pero no me molestan. Me siento dura, helada. Poseída. Cierro los ojos al sentir sus labios en mi garganta que están extremadamente fríos como hace rato. Deja pequeños y helados besos en él. Lo único que puedo hacer es abrazar su cuello y entrelazar mis dedos en su pelo. Louis empieza con pequeñas mordidas, haciéndome estremecer. Esto, esto.. se siente genial.

—Em, Louis...— una ronca voz me saca de mi transe y suelto a Louis, quien voltea a ver a Harry algo irritado.

—¿Que sucede, Harry?—dice molesto.

Harry entrecierra los ojos con el ceño fruncido y lo mira directo a los ojos, como si hablaran sin omitir palabra. En un instante, Harry levanta la mirada y clava sus ojos en mi, que sigo sin hacer ni un movimiento en mi lugar.

—¿Puedo bailar con Lea, amigo?—suelta sin apartar la vista.

—Bien—dice Louis a regañadientes y se voltea a verme—¿No te molesta, cierto Lea?—Niego con la cabeza algo exagerada, pero no puedo hablar. Las palabras parecen no querer salir.

Harry le da unos pequeños golpecitos en el hombro a Louis antes de este se vaya. Me toma de la mano y nos volvemos a mezclar entre la gente. Los lentos se pausan por un momento y la música comienza a ponerse mas movida nuevamente. Harry es genial, simpático, divertido, hermoso. Simplemente es de esas personas con las que quieres estar todo el día, aunque sea solo con su compañía.

—Te dije que nos veríamos pronto—dice sonriente. Sus ojos parecen mas verdes que los cobrizos que vi hace rato, es una mezcla hermosa. Lo quedo mirando tratando de comprender como hace—Me vas a derretir si me sigues mirando así, Lea.

—Oh, yo.. y-yo lo siento—digo al fin y aparto mi vista a un costado. Harry ríe y me toma de la barbilla para que lo vuelva a mirar. Se que estoy colorada, pero espero que no se note con la poca luz que hay.

—Puedes mirarme todo lo que quieras..—dice acercándose—si tu también me dejas hacerlo—rie cerca de mis labios. Oh, por dios.

—Claro que si— sonrío y siento sus fríos labios sobre los míos. 

En Multimedia: Emily Miller ♥