Sultana o Reina [Sehzade Mehmed]

011

-Azael, Tráeme a Thomas, deseo ver las nuevas armas que creó -el asintió y se fue.

-Que tal tu día? -entró Peter a la sala del trono aproximándose hasta quedar a mi lado, se acercó a mi oído.- Debiste despertarme, fue incómodo que tus criadas lo hicieran.

-Lo siento, No tuve tiempo -lo miré sarcástica.

-Que graciosa.

-Su majestad -se acercó Ansel.- La encontramos, encontramos su ubicación

Me levanté del trono inmediatamente.

-Donde está ?

-En una granja en las afueras del país.

-Llévenme ahí, ahora.

Salimos de la sala del trono, ensillamos algunos caballos y nos dirigimos a la Granja donde encontraron a Maria

[Dia anterior]

-No puedo permitirme dejarla suelta, es obvio que cometerá traición, de una u otra forma, debo encontrarla, y encarcelarla. No quiero llegar al punto de matarla, porque es mi hermana.

-pero si no la encontramos a tiempo? -preguntó Thomas.

-Van a encontrarla, no me importa cuántas montañas muevan destrocen lo que quieran, pero búsquenla ! -Hablé exaltada.

-Su majestad... entiendo que esté asustada, pero... porque no la encarceló antes?

- Pensé que tendría el mínimo respeto por su Reina y no daría problemas, veo que me equivoqué. Ahora bien... Búsquenla y no vuelvan hasta encontrarla ! Entendieron?

-Si su majestad

Los soldados emprendieron la búsqueda de María, A quien ahora catalogue como una amenaza a La Paz y al familia real.

[actualidad]

Luego de un largo rato cabalgando, llegamos a la granja, baje de mi caballo y me aproximé un poco a la granja y la vi.

Podría reconocer esa larga y espesa cabellera donde fuese.

-María -la llame y ella volteó a verme.

-Que haces tú aquí ?

-Quedas arrestada por conspiración, Traición y por atentar a La Paz.-me acerque a ella. Quedando frente a frente.

María se rió a carcajadas.

-No puedes hablar enserio.

-lo hago, Yo no ando con juegos Maria.

-Tuviste tu corona, no es lo que querías? Eliminarme del mapa y tomar lo que no te pertenece Maldita bastarda -La abofetee fuertemente.

-Ten respeto a Tu reina! Porque quieras o no, Lo soy. Arréstenla -ordené e inmediatamente los guardias la apresaron y la retuvieron.

Volvimos al palacio, la encerraron en un calabozo, para mi sorpresa ella estaba muy callada y no opuso resistencia. No le tomé importancia para seguir con todos los asuntos del reino.

Pasaron los días, por supuesto extraña a mi familia, mis hijos y esposo, sin embargo no podía hacer mucho, una que otra carta llegaba de vez en cuando y a decir verdad, las cartas parecían ser iguales todas. Todas y cada una de ellas eran muy parecidas entre sí, lo que me desconcertó un poco, pero finalmente no le di importancia.

Me sentía algo decaída, no paraba de pensar en cómo estaría Bahadir y Dilay, pero Peter, siempre trataba de animarme con alguna de sus ocurrencias, empezamos a pasar más tiempo juntos, todas las noches nos reuníamos a beber vino sin alcohol y hablar por horas hasta quedar dormidos.