Sultana o Reina [Sehzade Mehmed]

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-Majestad, Lady Elizabeth. -presentaron a mi hermana

-Ven aquí Beth - Le hablé a mi hermana quien ya no era una niña. Era una jovencita y había crecido mucho desde la ultima vez que la vi

Ella se acercó.

-Me recuerdas? -le pregunté entusiasmada.

-Stephanie-sonrió inocente.- Eres mi hermana

-Así es, me gustaría que conozcas a alguien especial, ven -me levante del trono y caminamos juntas hasta llegar a el gran salón, donde se encontraban Peter y Dilay.

Ambos estaban jugando, Sam y Carla con ellos, estaban jugando las escondidas, En esta ocasión Peter era el buscador, todas se escondieron, luego Peter fue a buscarlas.

Primero encontró a Carla, luego a Sam y luego dijo:

-Oh, no encuentro a la princesa Dilay -dijo fingidamente ya que la pequeña se encontraba detrás de él.- Donde estará ?

La pequeña salió de su escondite para abrazar a su tío. El la tomó en brazos y la cargó.

-Te escondes muy bien pequeña -la felicitó.

-Dilay -me acerque a mi hija quien estaba en brazos de peter.- Ella es Elizabeth, es mi hermana -la presente

Eli me vio incrédula.

-Tienes hijos? -asentí con la cabeza.

-Dos de hecho, también tengo a un hermoso Niño -sonreí.- pero no pudo venir conmigo.

-Tu cabello es muy bonito -Habló Dilay refiriéndose a mi hermana.- Es muy brillante.

Y así era, mi pequeña hermana tenía el cabello largo y muy brillante sin contar que era un poco rubio el pelo llegando al pelirrojo. Su piel era pálida, más que la mía, y tenía los mismos ojos de mi madre. Párpado un poco caído y marrones muy lindos con un brillo singular en ellos.

Era muy parecida a nuestra familia materna.

-Puedo... Cargarla ? -preguntó mi hermana con un poco de inseguridad en sus palabras.

-Por supuesto -le entregué a Dilay y ella no se resistió.

-Majestad -habló el Lord Greenwich.- Tiene algunas visitas

-Bien, llévalos a la sala del trono. -Hizo reverencia y se fue.- Beth, cuida a Dilay, y no bajen a los calabozos. -Pedí y mi hermana asintió para luego irse con mi hija.

Salí de la habitación también dirigiéndome a la Sala del Trono, Ansel iba a mi lado, ya que lo nombré guardia real, por lo que ahora era mi guardia personal.

Entramos a la sala del trono, y ahí estaban algunos duques que no reconocía, hicieron reverencia ante mi, me senté en el trono, y extendí mi mano en señal de que hablarán.

-Majestad -Habló el primer hombre.- Disculpe mi apurada visita pero... Debo estar seguro de que nuestra reina desea lo mejor para el pueblo -Me miró con cierta astucia en sus palabras.

-A que se refiere... -Me quede en blanco esperando su apellido

-Duque Maximoff -Expresó

-Duque Maximoff -asentí.

-Cuando planea casarse ? -Lo miré seria, su pregunta no me agradaba.- Lamento si mis palabras fueron algo Groseras, pero su majestad, Necesitamos un rey, un hombre en esta nación, Una unión con España, sería bastante buena ¿ no lo cree?

-Duque Maximoff-sonreí falsamente.- Lamentó que deba enterarse de esta manera, pero yo estoy casada actualmente. -expliqué con falsa pena

-Que dice? -se sorprendió y yo enarqué una ceja.- Es decir, Que quiere decir su majestad?