De tu ex, con amor (Emma & Chase #1)

26 de agosto de 2013

Lunes. La gente odia los lunes. A mí me dan igual. Tengo que estudiar y trabajar, por lo que hay demasiado en lo que concentrarme. Y, en estas épocas, eso me gusta. Mantenerme ocupada me ayuda, aunque no hace milagros. Tampoco espero eso. Sé que superar lo que sucedió va a tomar tiempo, por muchos motivos que tú ya debes saber.

Pero ya es hora de olvidarte, Chase. Y lo haré, deshaciéndome de todo lo que hay en mi mente y plasmándolo en papel.

* * * * *

—Deberías venir. Mary dijo que no tenía problema alguno.

—Sabes que no me gustan las reuniones con mucha gente.

—Pero solo van a ser mis amigos. Con suerte llegaremos a diez personas. Comeremos, hablaremos un rato y nos podremos ir si te sientes incómodo.

—Prefiero pasar a buscarte después. Tú diviértete.

—Chase, no seas así. Son mis amigos. Además, las chicas quieren conocerte.

—Precisamente.

Te miré disgustada y trataste de disipar mi mal humor, pero no pudiste. Me molesté, mucho más de lo que te dejé ver. ¿Qué sucedía contigo? Ellas era mis amigas más cercanas y de por sí ya te conocían después de todo lo que había contado y de las fotos que habían visto. No, no te preocupes. No hablaba de nosotros muy seguido. Solo de ti, como si fueras el sol que dominara mi sistema y yo no pudiera evitar orbitar a tu alrededor.

Como sea, no querías hacer nada que implicara a la gente que me rodeaba. Rechazabas sistemáticamente cada invitación que te hacía si mis amigos estaban incluidos. No querías tener nada que ver con mi mundo y, según dejabas ver y lo que creí (creo), tampoco querías que yo estuviera al tanto del tuyo. ¿Por qué? ¿A caso yo no era suficiente? Claro que no lo era. No me comparaba con la otra, ¿cierto? No, yo era un universo distinto. Ella te lastimó y te hundió y te gastó como si fueras un producto cualquiera del que pudiera librarse cuando ya no le encontrara utilidad. Yo te quería y me preocupaba por ti. Aun así, la preferías a ella. La buscabas a ella en cada mujer y era evidente que en mí no ibas a encontrarla. Yo solo era una estúpida que no entendía de estas cosas porque no sabía de amores y mi experiencia en ese terreno era escasa. Solo era el blanco perfecto del cual podrías aprovecharte.

Déjame decirte algo que aparentemente nunca entendiste, Chase: que te hayan lastimado antes no te justifica. No te da el derecho de dañar a nadie solo para mitigar tu dolor. No te da el derecho de usar a las personas como un puto placebo, como un toque de tu droga favorita. No somos objetos desechables, Chase. No somos intercambiables como las piezas de una máquina. Todas aquellas que llegamos después de ella fuimos solo fichas en tu tablero. A ti no te importaba quién se iba y quién se quedaba. Te deshacías de quienes no servían muy pronto, como si fuera un trámite sencillo. Chase, todas nosotras sentimos. En mayor o menos medida, todas te quisimos. ¿Y tú? ¿Sentiste algo en ese músculo inútil que late en tu pecho?

Nos manipulaste a todas. Lo sé, porque lo veo muy claro ahora. Vivías victimizándote como parte de tu estrategia en ese juego. Para mí no era un juego.

Supongo que por eso perdí.

* * * * *

Borré otro de tus mensajes. No sé por qué insistes. Te contradices a ti mismo, a tu frialdad y a tu egoísmo. Es como si tuvieras la necesidad de seguir presente, invadiendo mi vida. No pienso concederte eso. Ya aprendí mi lección: no eres honesto. Tus detalles eran una burda fachada para lograr tenerme en la palma de tu mano, con el poder de aplastarme cuando tuvieras ganas.

Ahora yo te tengo en mis manos y te estoy haciendo añicos.

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¡Aloha gente! Primera nota que dejo perdida por estas páginas de autora a lector. Ojalá les esté gustando esta historia. Es un proyecto que vine desarrollando desde hace un tiempo y al que le tengo especial cariño. Así que apreciaría muchísimo sus opiniones al respecto, sea a través de un comentario largo, uno cortito o siquiera una estrellita.

Nos leemos pronto ♥