Capítulo 22: El imposible olvido

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El imposible olvido

Con toda la emoción a borde y prácticamente con el corazón en la mano, Hermione observó rápidamente a aquella persona tras abrir la puerta y en ese preciso instante quedó pasmada y muda al ver quien estaba ahí. Pero la emoción pareció extinguirse en tan sólo un segundo, la persona que estaba al frente no era quien ella esperaba. Todo sentimiento de esperanza se desvaneció terminando por destrozar y herir aún más su corazón. El haber tenido la ilusión de que él venga aquí, que le dijera que no puede vivir sin ella y que quisiera que todo vuelva a ser como antes, pero que al final nada de esto haya pasado dolía, dolía mucho. Entendió que tal vez las cosas estaban mucho peor de lo que parecían. Y por si fuera poco, quien sí vino a verla es la persona con la que menos se hubiera querido encontrar.

—Hey —saludó el chico esbozando una amplia sonrisa.

—Tú —exclamó Hermione—. ¿Qué haces tú aquí?

—¿Ahora me recibirás siempre con esa pregunta? —replicó él mirándola fijamente.

Ella lo miró y respiró pesadamente, estaba cansada de todo el tema. Justo cuando trataba de calmarse y olvidar todo, tenía que pasar algo que le haría recordar todo el problema provocando que se sintiera aún peor. Además sabía que la presencia de aquel chico no podría significar nada bueno, la última vez que se le ocurrió ir a buscarla arruinó totalmente su relación. ¿Qué hacía el aquí? ¿Acaso está en todas partes? Hermione no entendía cómo es que se las ingeniaba para saber siempre dónde estaba ella, pero ya harta de todo, no quiso saber nada más y tampoco tuvo intención en preguntarle.

—Hermione quiero conversar un momento contigo —comentó sorpresivamente Jack.

—¿Conversar de qué? —inquirió la chica. 

—De lo que pasó —respondió sin despegar su mirada de ella—. Quiero disculparme.

Lo miró detenidamente y aunque al principio no lo creía, Jack en verdad parecía estar arrepentido. Pero conforme al concepto que tenía del chico hasta ahora, ella aún tenía dudas sobre la honestidad de sus disculpas. Sin embargo si él en verdad quería disculparse entonces no podía negárselo, a pesar de que claramente esto no haría que todo el problema con Ron se solucione. Aún así, queriendo pensar que tal vez se sacaría un peso de encima con esto, decidió aceptar escuchar sus disculpas.

—Está bien, te escucho —dijo Hermione cruzando los brazos. Mantenía una actitud fría hacia él.

—No aquí —indicó Jack echando un vistazo alrededor—. Quiero invitarte a cenar, por favor acepta.

—¿Qué? —exclamó Hermione con una expresión de extrañeza.

—Por favor, no pretendo nada más que disculparme —añadió rápidamente Jack, expresando una muy convincente sonrisa.

Hermione lo dudó, no podía fiarse mucho de Jack. Además estaba igual o mucho más enojada con él que con Ron, pues fue por su culpa el que se haya originado todo este problema. Comenzaba a enfurecerse al recordar cómo éste se las arregló para mostrarla como una persona "infiel" frente a Ron, cuando en realidad no lo era. Si no fuera por él, ella estaría ahora mismo junto a la persona que más ama y a quien, a pesar de haber pasado poco tiempo, extrañaba muchísimo.

—No iré contigo —contestó con una total frialdad. Ni siquiera se dignó de mirarlo y fingió estar pendiente de otras cosas.

—Hermione... —musitó Jack acercándose unos pasos para tratar de captar su mirada.

—¡¿Acaso no eres ni un poco consciente de todo el problema que provocaste?! —le espetó Hermione frunciendo el ceño.

Jack vaciló un poco al ver la forma en la que se exaltó la chica, su expresión de enojo y la fuerza en la que elevó el tono de voz resultaba ser aterrorizante. La verdad es que sí era consciente de que su repentina aparición aquel día iba a traer problemas, incluso esa fue su intención aquel día, porque sabía muy bien que el hacer que ellos se peleen le daría más oportunidades a él con Hermione. Estaba muy interesado en ella y haría todo lo posible por querer conquistarla.

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