Segunda historia a pedido- Tema: La reconciliación de Anakin y Padme luego de su ''separación'' por lo de Rush Clovis.
En la nave de regreso a Coruscant, todo fue un perpetuo silencio, Anakin ni siquiera le había dirigido la palabra, y Padme sabía que no solo era porque iban rodeados del escuadrón de Anakin, Padme sabía que era porque él estaba molesto. Lo peor era que ella ahora lo comprendía.
La llamada del canciller no fue en el momento más oportuno.
- Senadora Amidala, estaba muy preocupado por ti, me alegra saber que ya estás a salvo- sonrió el canciller en tono paternal.
- Muchas gracias canciller, la verdad es que sin el general Skywalker no lo habría logrado
- Sin duda nuevamente te debemos mucho Anakin- dijo el canciller en un tono adulador, pero Anakin solo asintió.
- Solo cumplía con mi deber- dijo en tono frío y esas palabras calaron en el corazón de Padme ''Solo cumplía con mi deber'' ¿Solo eso había sido? Se reprendió a si misma por juzgarlo ¿Qué más esperaba? Ella le había dicho que su matrimonio era una mentira y que ya no podía estar con él, solo para confiar en Clovis, que al final había terminado estando aliado con los separatistas, y Anakin había tenido que ir a rescatarla.
- Irónico- murmuró Padme sin darse cuenta que pensaba en voz alta
- ¿Dijo algo senadora Amidala?- preguntó el canciller y Padme se sonrojo.
- Oh no es nada canciller, solo pensaba en voz alta- dijo sonrojada, preguntándose si Anakin había notado que estaba pensando, por su ceja arqueada supo que era probable que sí.
Para tormento de Anakin, el canciller le ordenó escoltar a la senadora Amidala hasta su apartamento para garantizar su seguridad, lo cual Anakin no deseaba, porque ella le había pedido que se alejara. Padme notó su incomodidad, y lamento haberle dicho todas aquellas palabras.
Cuando la llamada del canciller terminó, Padme intentó hablar con Anakin pero el nuevamente había desaparecido, hablando con Rex.
Cuando llegaron a Coruscant, Anakin escoltó a Padme en su nave hasta su apartamento, no intercambiaron más que algunas palabras, y Padme sentía que se sofocaba con tanta frialdad ¿Desde cuándo Anakin era así? Él siempre había sido expresivo ¿Qué le había hecho ella?
Al principio había estado molesta porque Anakin golpeo a Clovis, golpearlo era una palabra que se quedaba corta, pero por otro lado Clovis había estado a punto de besarla, y Clovis le había dicho a ella ''Dijiste que él no tenía sentimientos por ti'' había visto la mirada de Anakin, había visto el dolor en su mirada, luego recordó lo que ella le había dicho, y al final él siempre había tenido razón, Clovis mentía y Anakin era el que había terminado arriesgando su vida para rescatarla. Él siempre estaba allí para ella, y ella se sentía cruel por apartarlo cada vez, mucho más ahora que había sido tan injusta con él.
- Ani- dijo Padme tomando su mano impidiendo que él se fuera, notando que su mano se sentía tan pequeña entre las de él.
- Debo informar al consejo sobre la misión- dijo Anakin saliendo de allí, Padme lo vio perderse por el pasillo, pero ella no podía dejarlo irse así, no después de ese día, no después de todo lo que había ocurrido.
- Ani- dijo Padme nuevamente corriendo hacia donde él estaba y parándose seria frente a él.
- ¿Qué quieres Padme?- preguntó Anakin algo irritado- Dijiste que me querías lejos, que nuestro matrimonio no era más que una mentira, yo nunca voy a ser suficiente para ti Padme, me ha quedado claro, Clovis podía darte todo lo que tu deseabas, lamento que haya muerto- dijo Anakin haciendo ademán de salir de allí.
¿Qué quería Padme de él? Primero lo alejaba, le decía que no podían estar juntos, que necesitaba un tiempo, antes de eso la encontraba a punto de ser besada por Clovis, en ese atuendo tan malditamente seductor, y luego tenía que ir a rescatarla porque el mismo imbécil de Clovis la había secuestrado junto a los separatistas. Realmente Anakin lamentaba que Clovis hubiera muerto, pero no por las razones que un jedi debería lamentarlo, sino porque habría deseado poder golpearlo nuevamente. Y ahora Padme no quería que se fuera. ¿Qué era lo que ella quería?
Padme se mordió el labio y miro los ojos azules de su esposo, estaba molesto, pero más allá de esa molestia había dolor, uno que ella había causado.
- Quiero que te quedes- dijo simplemente, sabiendo lo estúpida que sonaba luego de que ella misma le dijera que no quería estar con él.
- No puedo- dijo Anakin intentando salir nuevamente.
- Por favor, yo- dijo Padme probando un truco que siempre le resultaba con Anakin- He pasado por mucho hoy- comenzó a decir mientras una lágrima escapaba de sus ojos. Una lágrima de mentira que le estaba costando trabajo fingir, pero Anakin sonrió.
- ¿Es en serio ángel?- preguntó divertido, por más que quisiera seguir molesto.- ¿Intentas engañarme a mí? ¿Qué ya conozco ese truco hace años? ¿Qué ya lo has usado tantas veces conmigo siempre creyendo que me engañas?- preguntó y Padme se sonrojo furiosamente. Pero al menos había sonreído, eso era algo.
- Antes parecía funcionar- dijo Padme sonriendo.
Anakin suspiró, realmente tenía que informar al consejo, pero podía hacerlo el canciller, estaba seguro de que el canciller lo cubriría, el canciller sabía de su amistad con Padme, y a veces Anakin estaba completamente seguro de que sabía que estaba casado con Padme.
- Bien, me quedo ¿Qué es lo que quiere decirme senadora Amidala?- preguntó Anakin en el mismo tono serio de antes, pero sin esa seriedad y frialdad en su rostro.
- Que lo siento- dijo Padme y Anakin casi tropezó consigo mismo ¿Padme diciendo lo siento? ¿Estaba escuchando mal? Pudo esperar cualquier cosa, que Mace Windu le diera el rango de maestro, que Dooku se uniera a la república, que Obi- Wan se convirtiera en un lord sith, pero jamás pudo esperar a su dulce esposa diciendo ''lo siento''.
- ¿Cómo?- preguntó casi tartamudeando
- Eso, que lo siento Ani, tenías razón, Clovis, él no era quien pensé, él mentía- dijo Padme intentando disculparse lo mejor que podía.
- Ya no importa eso Padme- dijo Anakin recuperando la seriedad- tenías razón, nuestro matrimonio es una mentira y yo jamás podré darte lo que deseas, sé que mi amor no es suficiente- dijo Anakin con una sonrisa triste.
- Todo lo que necesito es tu amor Ani- dijo Padme abrazándolo sintiéndolo tensarse, sintiéndolo luchar consigo mismo, pero ella no lo soltó. Tenía que decirle cuanto lo amaba, tenía que hacerle entender cuán importante para ella, ¿En que estaba pensando ella cuando lo alejo? Él era un general jedi, ponía en peligro su vida todos los días, ni siquiera sabía si el regresaría a casa luego de una misión- No puedo estar sin ti, eres todo lo que necesito, a ti, tu amor, tu mirada, nunca podría haber nadie más, nunca nadie podría ocupar el lugar que tu ocupas en mi corazón, en mi vida- decía Padme intentando explicarse mirándolo a los ojos, nunca había sentido esto por alguien Ani, siempre estuve dedicada a la política, toda mi vida giraba en torno a la política, eres la única persona a la que he amado, la única persona a la que amo y la única persona a la que amaré, ahora siempre, por el resto de mi vida y más allá de esta vida- dijo Padme y pronto sintió como Anakin la abrazaba con fuerza.
Anakin no deseaba soltarla nuevamente, sus palabras, eran todo lo que necesitaba, todo lo que necesitaba para ser feliz nuevamente, cuando ella le había dicho que ya no podía estar con él, su mundo se había destruido, todo se había puesto de cabeza, incluso Obi- Wan lo había notado, pero ahora ella le decía que lo amaba, que lo único que necesitaba era a él ¿Podía ser un hombre en toda la galaxia más dichoso que él en ese minuto? Estaba seguro de que no, estaba seguro de que era imposible sentirse más feliz. Él no se creía digno de merecer a una mujer como Padme, como su amado ángel y sin embargo ella le decía que lo amaba, que lo necesitaba, que deseaba estar siempre con él.
Se quedaron en silencio en la oscuridad del apartamento, abrazados, disfrutando de la cercanía el uno del otro. Anakin observó el lugar dándose cuenta de que estaban parados exactamente en el mismo maldito lugar donde Clovis había estado a punto de besar a Padme. Aún podía recordar sus manos sobre la cintura de su esposa, su rostro cerca de él de ella ¿La habría besado si él no hubiera llegado? Padme se dio cuenta también del lugar en donde estaban, pero era tarde ya para hacer algo al respecto, solo le basto ver la mirada oscura de Anakin, para saber que la noche probablemente sería larga.
- Él ni siquiera sabe cómo te gusta que te besen- dijo Anakin tomando con fuerza la cintura de su esposa, apegándola a su cuerpo- ¿Acaso él quería imitar una película romántica de los holo dramas?- se burló recordando la ridícula forma en que Clovis había intentado besar a su esposa.
- ¿Me mostrarás la diferencia maestro jedi?- dijo Padme sonriendo y Anakin la miró fijamente, su mirada tan oscura, tan llena de deseo le dio la respuesta, y ella ansiaba saber esa respuesta.
Anakin se agachó para tomar ambos muslos de su esposa y enrollarlos en su cintura, haciéndola jadear sorprendida, no le dio tiempo a recuperarse de la impresión y pronto la estaba besando, apasionadamente, mientras una de sus manos sostenía la espalda de Padme y la otra avanzaba rápidamente hacia uno de sus redondeados pechos, la sintió jadear ante el repentino toque, sonriendo en el beso, porque solo él podía conseguir esas reacciones en su esposa, nadie más, solo él.
Avanzó hacia la habitación y la arrojó sobre la cama, no fuerte, pero tampoco despacio, justo como a ella le gustaba, y luego antes de que ella pudiera darse cuenta, la estaba besando apasionadamente, para luego bajar lentamente por su mandíbula, y detenerse en su cuello, escuchándola jadear y suspirar. Se detuvo observando el atuendo de Padme, no tenía tiempo para ser cuidadoso, no hoy, por lo que simplemente tomó la prenda y la rompió como si fuera nada más que un pequeño trozo de papel entre sus fuertes manos.
- Ey- se quejó Padme pero fue silenciada por un beso hambriento, al tiempo que sentía como todo el resto de su ropa recibía el mismo cruel trato. Puedo comprar otros después se dijo a si misma demasiado abrumada por el placer y la ansiedad.
Padme sintió como Anakin lentamente trazaba besos por su cuello, deteniéndose en su clavícula, para luego morder levemente su hombro haciéndola jadear. Luego sintió como los labios de Anakin se cerraban contra sus sensibles pechos, pero claramente no fue consciente de cuando Anakin usó la fuerza para tomar sus manos por sobre su cabeza y atarlas contra el respaldo de la cama.
- Ani- gritó pero su grito nuevamente fue silenciado por ardientes besos, mientras las manos de Anakin recorrían su cuerpo, tocando sus pechos, jugando con sus caderas, pasando tentativamente sus manos por entre sus muslos, sintiéndola tensarse y jadear.
El estar completamente desnuda e indefensa frente a su esposo hizo que Padme se sonrojara, excitada.
Sintió las mano mecánica de Anakin enredarse en su cabello, jalando suavemente su cabeza hacia atrás, para luego recorrer su cuello con su lengua, dejando húmedos besos en él, mientras su otra mano daba suaves tirones a sus pezones ahora erguidos. El roce de sus manos en sus pechos y sus hambrientos besos en su cuello y clavícula, hacían que a Padme le costara trabajo no gemir, haciendo que se mordiera el labio para silenciar sus ruidos. Anakin sonrió, bajando nuevamente sus labios a los pechos de su esposa, Padme cerró los ojos, se sentía tan malditamente bien, que los gritos se escaparían de sus labios si seguía trabajando sobre ella así.
- ¿Puede alguien más tocarte así Padme?- preguntó Anakin en un tono oscuro que solo lograba excitar más a Padme.
- No- chilló cuando sintió como las manos de su esposo se colaban entre sus piernas, acariciando su húmedo centro- Nadie más que tu puede tocarme así- chillo sintiendo como él introducía un dedo en ella, de forma tortuosa, lenta y desesperante, para luego comenzar a acariciar su clítoris, haciéndola jadear y gemir en voz alta.
- Ani, oh fuerza Ani por favor- pidió Padme sin saber que era realmente lo que estaba pidiendo.
- ¿Quieres que pare ángel?- dijo Anakin moviendo sus dedos lentamente- ¿No te gusta lo que hago?- preguntó
- No, no pares, por favor- suplicó Padme clavando su miranda en esos ojos azules que la miraban divertidos, burlándose de ella, ya pagaría por eso, Padme podía jurarlo.
- ¿Qué es lo que quieres ángel? ¿Tal vez quieras a alguien más?- gruñó casi molesto por su propio pensamiento
- No, Ani- susurró Padme sintiendo como el jugaba con ella, ¿Qué tal si su esposo era el sith que la república tanto buscaba? Maldición, él era cruel y malvado cuando realmente deseaba serlo.
- ¿Entonces Padme? ¿Qué deseas?- preguntó Anakin apretando el muslo de Padme, y bajando rápidamente para acercar su lengua a su clítoris.
- A ti, solo a ti- dijo Padme casi gritando ¿Era normal que sintiera que su alma abandonaba su cuerpo? ¿Era normal que sintiera que flotaba por todas aquellas malditas sensaciones que él causaba en ella?
Padme solo podía ver el rostro de su esposo entre sus piernas, saboreándola, haciéndola sentir cosas que nunca había sentido, podía sentir ahora una de sus manos apretando con fuerza su muslo, levantándolo para lograr un mejor acceso y sus dedos trabajando dentro y fuera de ella cada vez más profundo, cada vez con más rapidez, estaba cerca, sus gritos y gemidos le decían a Anakin que su esposa estaba realmente cerca de terminar, pero él no le daría la satisfacción, justo cuando sintió que ella se acercaba, paro, levantando la cabeza y observándola divertido.
- Oh fuerza, eres cruel- dijo Padme recuperando el aliento, había estado tan cerca, tan cerca de llegar a la cima de su placer.
- Ángel, la noche aún es muy larga- sonrió Anakin mientras comenzaba a desvestirse con lentitud, primero su túnica y luego prenda tras prenda de ropa, hasta quedar totalmente desnudo frente a su esposa.
Padme admiraba la figura de su esposo, lo había visto desnudo muchas veces, pero aquella noche había algo especial, era su mirada hambrienta y enojada, era su semblante posesivo e incluso cruel, era la luz de la luna iluminando su rostro y haciendo que sus desordenados cabellos le dieran un aspecto aún más sexy de lo que ya era, bajo su mirada hacia su miembro mordiéndose el labio, parecía más grande de lo que comúnmente era.
Anakin no dijo una sola palabra, solamente arrastró lentamente su cuerpo por sobre el de su esposa, abriendo sus piernas con sus manos y acomodándose entre ellas, mirándola siempre a los ojos, sin perderse ninguna reacción de ella, Padme intentó soltarse, necesitaba tocarlo, necesitaba abrazarse a él, mientras el la tomaba.
- Libérame- pidió en un gemido ahogado cuando el comenzó a rozar su miembro contra su sexo, preparándola.
- Aún no- bromeó Anakin con una sonrisa malvada.
- Quiero tocarte- pidió Padme desesperada.
- Lo estás haciendo- bromeó sin detenerse y ella maldijo por lo bajo, él pagaría por eso, reafirmaba su juramento.
- Eres mía- dijo Anakin sujetando su cuello, suavemente sin lastimarla en absoluto y ella asintió- Solo mía- dijo Anakin entrando fuertemente en ella, sintiéndola gritar de dolor y placer.
- Oh fuerza, te sientes tan bien- susurró Anakin entrando y saliendo de ella tan duro y fuerte como podía, haciéndola gritar y tirar de las amarras que sujetaban sus manos.
- Ani, oh fuerza, oh, no puedo, Ani no pares, por favor- gritaba Padme sintiéndose cada vez más cerca, cada vez más cerca nuevamente.
Era simplemente maravillosa la forma en que su pelvis rozaba contra su clítoris y el la llenaba por completo, sus cuerpos moviéndose de manera sincronizada, el orgasmo la golpeó fuertemente, haciéndola jadear el nombre de su esposo una y otra vez, pero no era suficiente para él, no era suficiente para recordarle que ella era suya y de nadie más.
Soltándola rápidamente desde el respaldo de la cama, ni siquiera le dio tiempo a recuperarse, la hizo ponerse sobre sus manos y rodillas, al momento que la penetraba de forma dura, casi salvaje, haciéndola gritar su nombre en cada movimiento.
- ¿Es esto lo que quieres?- preguntó él empujando nuevamente, duro doloroso y salvaje, perfecto, pensaba Padme.
- Si, a ti, siempre a ti- respondió entre jadeos, todo lo que deseaba era a él, ni siquiera podía concentrarse en modular o formular una frase totalmente coherente, el placer de sentirlo tan profundo dentro de ella nublaba absolutamente todos sus sentidos.
Anakin apretó sus caderas, mientras le susurraba dulces palabras de amor a su esposa, que parecía perdida en las sensaciones, gritando su nombre, apretando las sabanas, sintiendo que sus rodillas temblaban, de no ser porque él la sujetaba fuertemente de seguro habría caído vergonzosamente hacia adelante. A medida que él sentía que su final estaba cerca arrastró su mano por entre las piernas de Padme, acariciándola, llevándola hacia la cima de su placer una vez más. Padme apretó con más fuerza las sabanas bajo ella, buscando sostenerse mientras hechaba la cabeza hacia atrás gritando de placer, su orgasmo llegó con más fuerza esta vez, por todas las sensaciones anteriores y sintió como su esposo la seguía derramándose en su interior con un fuerte gemido.
Padme se dejó caer hacia atrás, siendo sostenida por los fuertes brazos de Anakin, que la cargó en sus brazos y la recostó a su lado en la cama. Padme se recostó sobre su pecho, acariciando cada cicatriz, cada leve marca que la batalla dejaba en él.
- Te amo- susurró Padme besando en los labios a su esposo, sin lujuria ya, solo disfrutando del lánguido placer post sexo, disfrutando de estar una vez más entre sus brazos, juntos ahora, para siempre.
- También te amo ángel, siempre, desde siempre- dijo Anakin besando su frente, admirando su figura desnuda, su cabello desordenado y su rostro sonrojado, maldición sentía como comenzaba a excitarse de nuevo, debería ser un pecado que su esposa fuera tan malditamente sexy.
- Dijiste que la noche era joven- murmuró Padme algo cansada, pero sin duda excitada al ver como su esposo comenzaba a despertar nuevamente.
- Lo dije- sonrió Anakin observando como Padme se dentaba a horcajadas sobre él.
- Ahora es mi turno de demostrarte que soy solo tuya, y que tu eres solo mío- dijo Padme con una sonrisa casi tan oscura como las de Anakin.
- Oh fuerza- dijo Anakin sintiendo como Padme bajaba sobre su miembro nuevamente despierto- No tienes idea de lo mucho que te amo- susurró mientras la sentía montarlo con suavidad y luego una pasión desenfrenada.
- Me aseguraré de que recuerdes cuanto yo te amo- dijo Padme mordiéndose el labio para no gemir ante las sensaciones de tenerlo nuevamente dentro de ella.
Cada uno cumplió su promesa, no quedaban dudas cuando el amanecer entro por la ventana, encontrándolos aún enredados en el cuerpo del otro, Padme era suya, y él era completamente de ella. Ambos se amaban, y se amarían hasta el día de su muerte.
Un mes más tarde Padme miraba a Dormé visiblemente sorprendida.
- Estoy embarazada- dijo Padme sosteniendo el papel que confirmaba lo que ya temía.
- Ni siquiera sé porque la sorprende My lady- dijo Dormé sonrojada, después de todo había sido ella quien había tenido que mantener alejados a todos los guardias y droides de las habitaciones de Padme, luego de que estuviera toda la noche y gran parte de la mañana, bueno, demostrando cuanto ella y su esposo se amaban.
- Oh por la fuerza- dijo Padme sonrojada recordando el rostro sonrojado de Dormé cuando por fin ella y Anakin habían salido de la habitación esa mañana.
El final también fue a pedido, para explicar cuando fueron concebidos Luke y Leia jajaja.
Tengo apróximadamente 15 pedidos de capítulos ya, que los iré publicando por orden de llegada.
Siguiente capítulo es un pedido algo extraño : Darth Vader (Anakin) / Padme Amidala, nunca he escrito un fanfic donde Anakin no sea Anakin sino que sea Darth Vader, será interesante de escribir.
Besos y abrazos para todos y que la fuerza los acompañe mis amigos! jejeje.