—Kim Taehyung... ¿Estás seguro de ésto?
La voz de mi mejor amiga me sacaba de concentración.
—Muy seguro. — respondí completamente de acuerdo con lo que iba a hacer.
—No hay forma que Seokjin quiera hablar contigo después de ésto. — dice Jimin limándose las uñas, sentado en posición de indio sobre mi sillón más grande.
—Lo hará, estoy seguro que lo hará.
—Mira, no quiero sonar como una maldita perra — menciona Irene — Aunque de alguna forma siempre terminas haciéndome quedar como una
Me señala con uno de sus dedos y luego se recoge el cabello cansada — Seokjin no te dirige la palabra nada más que para trabajo y lo que tienes planeado no hará que regrese a ti ¿lo entiendes?
Sus palabras duelen como una bofetada.
Pero me importan tres kilómetros de verga.
Sí, es cierto que Seokjin no me habla más que para darme sus ideas sobre el programa de concursos que lanzaremos en dos semanas y también es cierto que el plan puede parecer una completa locura.
Sin embargo, creo que he conocido un poco al bombón en esos días de profundas conversaciones y maravillosas cogidas. Así que podrían estar equivocados.
—Voy a intentarlo chicos... ¿Están conmigo o no?
Les dirijo mi mejor mirada de cachorro triste. Estamos en mi apartamento conversando en medio de la sala y planeando todo lo que haré para hacerle a entender al bombón natural, que si quiero intentarlo.
Ellos intercambian miradas negando y sonriendo como un par de estúpidos antes de acercarse a mi lugar y rodearme entre sus brazos.
—Así que así se siente ser Namjoon... — digo apretandolos a mi cuerpo y ambos me empujan enojados.
—No te podemos dar un minuto de confianza porque ya empiezas — se queja Irene para luego despeinarme e irse al pequeño bar esquinero —¿Quieren un trago?
—No necesito un trago, necesito pensar... Y hablar con Jungkook.
El plan va a involucrar a más personas de las que creí, pero estoy seguro que valdrá la pena. Y conociendo a Jeon, no habrá forma en que se niegue cuando se entere.
Jimin suelta un fuerte suspiro antes de agarrar irritado el puente de su nariz — Ésto va a ser un dolor de cabeza...
...
Es un día nuevo de trabajo en el canal, llego al piso veintitrés con dos tazas de café en un posa vasos y me dirijo a la oficina del bombón tranquilamente hasta tocar la puerta y esperar su permiso.
Después de unos segundos escucho su suave voz a través de la madera decir — Adelante...
Giro la manija y me encuentro con su rostro mirando concentrado a la brillante pantalla de su Mac Pro, con esos lentes redondos cayendo sobre el puente de su pequeña nariz y que ocupan casi la mitad de su rostro.
—Hola Seokjin — digo sonriente, me mira curioso alzando una ceja y luego regresa su atención hacia la pantalla.
—¿Qué pasó Taehyung? — responde sin mirarme, tecleando rápidamente mientras lo miro a una considerable distancia, se ve tan adorable intentando lucir indiferente.
—Te traje un café; sin azúcar, ni crema. Amargo cómo tu precioso corazón — le estiro el vaso extra grande y al ver que no lo toma, lo dejo sobre su escritorio.
—No era necesario — dice suspirando y mirando el vaso descartable antes de dirigir su mirada hacía mí — Aún así, gracias...
El fantasma de una sonrisa se dibuja en su rostro, yo se la devuelvo automáticamente — ¿Quería preguntarte si mandaste los correos a los diseñadores sobre los logos?
Asiente y continúa con su trabajo — Los mandé anoche, deberían responderlos hoy, no olvides pasarles las ideas para el set digital.
—No lo olvido — sigo de pie en su oficina por varios segundos hasta que levanta la mirada y nuevamente alza una ceja curioso.
—¿Necesitas algo más? — dice inclinando su cabeza y luciendo jodidamente adorable.
Me encojo de hombros y sonrío —No, nada más.
—¿No tienes trabajo qué hacer? — ahora apoya sus codos en su escritorio y dirige toda su atención hacia mí.
—Sí, de hecho demasiado.
—¿Y por qué no te largas de aquí? — me frunce el ceño haciéndome reír.
—Lo haré — reviso mi reloj y veo qué ya está siendo hora de irme — Bien, nos vemos Seokjin.
Está por decirme algo más, pero no lo dejo hablar al salir casi corriendo de su oficina y cerrar rápidamente.
Veo a Jimin sentado en su escritorio y le guiño un ojo antes de entrar a mi oficina. Las cosas podrían salir mal, pero definitivamente no pueden salir peor.
¿O sí?
...
Casi siendo hora de almuerzo, empiezo a escuchar algo de ruido fuera de mi oficina y a los pocos segundos la voz de Jimin resuena por el anexo:
—El águila viene volando. Repito. El águila viene volando.
Mierda.
Acomodo mi corbata y rápidamente tomo unos documentos que no sé ni de qué son. No llego a contar hasta tres cuando la puerta de mi oficina se abre estrepitosamente.
Un bombón natural me mira frunciendo el ceño desde el umbral de mi puerta y finjo estar revisando unos documentos sin percatarme de su presencia.
Escucho que se aclara la garganta y luego cierra la puerta detrás suyo cruzándose de brazos.
—Oh, hola Seokjin. No te vi ahí. — dejo los papeles que sostenía en mi escritorio y le regalo mi mejor sonrisa cuadrada.
—¿Qué estás haciendo?
Su voz suena ronca y si no lo conociera tan bien, podría pensar que está molesto.
De hecho no lo conozco tan bien y creo que sí está molesto.
—¿A qué te refieres? — finjo inocencia cuando lleva dos de sus dedos al puente de su nariz e intento reprimir una risa mordiendo mi labio.
—¿Porqué rayos han llevado cien cajas de pizza con aceitunas a mi oficina?
¿Cien cajas? Yo pedí ciento cincuenta, tendré que hablar con la pizzería.
Me encojo de hombros antes de mirarlo sonriente —Wow, esas son varias pizzas.
—¿Qué estás haciendo Taehyung? — ruega, sus ojos pidiéndome una respuesta, lamentablemente aún no puedo dársela.
—¿Yo? Nada en particular.
—¿Se puede saber que voy a hacer con tantas pizzas?
—No lo sé Seokjin, suerte con eso.
Me giro en mi asiento dándole la espalda mientras aparento rebuscar algo en el librero y segundos después, que parecen eternos, lo escucho cerrar la puerta detrás mío.
No pasa mucho tiempo cuando escucho a Jimin por el altavoz — El águila ha volado lejos.
Me río como un loco.
Puede que lo esté un poco, y probablemente pienses que soy un completo idiota, pero vamos... ¿No confías en mí acaso?
Minutos después alguien toca mi puerta, abriendola casi de inmediato. Jimin ingresa con una caja de pizza en la mano.
—Jinnie está entregando pizzas a todos, los pasantes están muy emocionados — dice riendo y dejando la caja sobre mi escritorio.
Abro la caja y una sonrisa cuadrada se dibuja en mi rostro al ver lo que está escrito en la parte posterior de la tapa:
"Cómete las aceitunas de todas las pizzas de mi vida, por favor"
Va a ser una semana divertida.
...
Sé que las cosas podrian parecer no tener sentido a estas alturas, pero todo lo que estoy haciendo tiene un propósito.
Acabo de hablar por teléfono con un músico canadiense que contacte por Internet, sólo espero que Seokjin no me quiera pegar, a menos que sea para azotarme.
Luego de un par de horas estoy terminando una reunión con el agente de Kim Hyun Joong. Un actor y cantante conocido que tuvo un boom hace algunos años, pero por malas decisiones, estuvo clausurado de los medios por un buen tiempo.
Estoy encargandome de esta reunión mientras Seokjin hace una prueba de luces en el espacio que tendremos para el set.
Finalmente podríamos tener al actor de presentador en el programa de concursos, dependiendo más bien de lo que su agencia nos esté pidiendo y de lo que podemos ofrecerles.
De hecho, no debería estar teniendo esta reunión pero Irene me consiguió el contacto y sería descortés que vaya otra persona a representarnos.
Cuando he terminado veo entre mis mensajes que las cosas están yendo bien en el canal, aún no termina el primer día del plan y estoy seguro que todo saldrá mejor de lo que esperaba.
Mis amigos pueden ser un dolor en el culo, pero son lo más cercano a familia que tengo. Me han apoyado en una infinidad de cosas, pero también me han detenido de hacer algo incorrecto.
El hecho que estén ayudandome ahora, solo quiere decir que tal vez esté por buen camino, aunque no quieran aceptarlo.
De todas maneras, si hay algo que puedo destacar de mi personalidad es que soy terco como una mula. Incluso más que el bombón de chocolate negro, aunque debo decir que él me hace muy buena competencia.
No creo que exista poder en el mundo que me haga rendirme y eso no es malo ¿sabes?
No me rendí cuando no tenía apoyo para estudiar, no me rendí cuando conseguí mi trabajo soñado y no me rendiré ahora que estoy enamorado.
Si algo te interesa debes ser persistente hasta obtener el resultado que buscas, si alguien te interesa también debes ser persistente, pero en este caso siempre debes estar listo para recibir un NO por respuesta.
Y eso haré.
Seguiré hasta dónde Seokjin lo permita. Hasta escuchar un No por respuesta.
O en el mejor de los casos, un Sí.
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Capítulo corto iniciando con los planes de Taehyung 🤦🏻♀️
Agradezco sus comentarios, los aprecio todos y cada uno de ellos 🥺
También quería contarles que quedan algunos pocos capítulos para terminar la primera parte de la historia.
La segunda parte será contada desde la perspectiva de Seokjin, espero que se animen a leerla cuando llegue el momento de subirla 😊
Y si quieren que suba los siguientes capítulos con algún horario? Me gustaría leer sus opiniones o si prefieren que siga subiendolos cuando se me cante XD
Nada más por hoy, que tengan una linda semana, lxs tkm 💜