James llegó agotado del trabajo, entró a su casa y se dirigió a la sala donde suponía se encontraban Regulus y su hijo.
Al llegar se encontró a un Harry dormido siendo arrullado por Regulus que no se percataba de nada porque cantaba suavemente con los ojos cerrados.
- "Y como una hoja se mece en el viento, se mecen en mi corazón los recuerdos, los recuerdos del tiempo, del tiempo en que nos...."
- ¿Quién te enseñó esa canción?- preguntó impresionado James ya que el solo conocía una persona que la supiera y lamentablemente ella ya no podría cantarla más.
Regulus que hasta ese momento se enteraba de la presencia del otro se sonrojó un poco y puso al niño dormido en el sillón.
- Me la enseñó un amigo- respondió finalmente el ojiplata.
James prefirió no indagar más en el asunto.
- Bien ¿Cómo se comportó Harry hoy?- preguntó inclinándose sobre su hijo en el sofá para intentar acomodarle los desordenados cabellos.
- Bien- respondió nervioso el universitario- esto yo...
- Si ¿Qué sucede?
- Harry... Él me dijo que quiere ver a mi hermano ¿Podría llevarlo?
El hombre de anteojos pareció meditarlo unos segundos.
- Por mí no hay problema pero deberías preguntarle primero a tu hermano- contesto melancólico.
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Regulus llegó a casa e igual que sucedía desde que consiguió el trabajo su hermano apareció como quien no quería la cosa.
- Hola Reg ¿Cómo te fue en el empleo?- preguntó como si no le interesara.
- Bien- contesto simplemente el ojiplata que no se la iba a dejar tan fácil.
El ojiazul fingió acomodar unos papeles del trabajo pero seguía mirando de reojo a su hermano.
- ¿Y cómo está el niño?- indagó rebelando sus verdaderos motivos.
- Bien, por cierto pasado mañana lo cuidaré aquí ¿No te importa verdad?- preguntó el menor fingiendo inocencia.
La reacción de Sirius fue muy peculiar, dejo caer los papeles que fingía revisar, se cayó del sillón en el que estaba y observo a su hermano con cara de "esas bromas no se hacen".
- ¿James está de acuerdo con eso?- interrogó viendo a su hermano con ojos de cachorro que tiene miedo de que lo abandonen.
- Si, el estuvo de acuerdo completamente- respondió el ojiplata provocando una sonrisa en su hermano.
- Yo... yo tengo que ordenar la casa y... y cortarme el cabello- comenzó a murmurar para sí el ojiazul- y comprar muchos dulces.
Regulus veía a su hermano con algo de lastima, era obvio que llevaba mucho tiempo esperando volver a ver a su ahijado.
- ¿Como me presento Reg? Lo más probable es que se asuste si le digo que soy su padrino, tal vez ni me crea- comentó preocupado a su hermano de repente el Black mayor.
- En realidad Harry fue el que me pidió venir a verte, cree que eres su padrino mágico o algo así- explicó el menor provocando una gran sorpresa en su hermano.
- James... él le habló de mí... a pesar de todo- Sirius no podía creer lo que oía.
Regulus no contesto y se fue a su habitación a descansar.