Namjoon
21 de junio, año 16
Me apresuré a bajar las escaleras desde el piso 13, estaba sin aliento y mis piernas temblaban. Me desplomé a la sombra de la entrada del edificio de apartamentos. Había comenzado tarde ese día porque las clases terminaron más tarde de lo normal, así que tenía que ir a toda velocidad para poder entregar los volantes en todos los cuatro edificios de apartamentos. Si no lo hacía mi jefe me esperaría con un gran regaño. Lo había persuadido con mucho esfuerzo para contratar a un estudiante de la escuela media, no podía permitirme ser despedido en este punto. Mi mamá había dejado su trabajo en el restaurante la semana pasada, teníamos que pagar la factura del doctor de papá, sin mencionar que nos habíamos atrasado en el pago de la electricidad y el gas.
Seguí cabeceando en la sombra, había unos niños jugando al basketball en la distancia. Me levanté de nuevo. Hora de correr, me dije a mí mismo. Debo hacerlo. Puedo hacerlo.