I'm Here Right Be Side You...

By UnaNiamShipper

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Niall se presenta inesperadamente como un omega y esa revelación le da la vuelta a su mundo, así que decide e... More

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XIII - Final
Epílogo.

2015

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By UnaNiamShipper

- Uno de estos días tendrás que vivir en el lado salvaje, Payno, y salir con un omega - dijo Louis mientras sus dedos se desplazaban a través de su móvil y con los ojos pegados a la pantalla.

Niall que también tenía su mirada fija en la pantalla de su celular levantó la cabeza y a pesar de que Louis mencionaba aquello al menos una vez a la semana nunca dejaba de inquietarlo, e incluso asustarlo. Pero una vez más, obtuvo la misma reacción de Liam cuando alguien mencionaba omegas, sin importar con quién estuviera, siempre parecía nervioso ante el tema.

Liam hizo un ruido de disgusto en su garganta y suspiró con cansancio.

- No esto otra vez.

Niall jugó nerviosamente con el cabello cerca de su oreja, con sus ojos azules mirando a Louis.

- Sí, te das cuenta de que estás un poco obsesionado con esto, ¿eh, Tommo?

Louis levantó la vista para poner los ojos en blanco.

-Niall, no puedes opinar sobre esto - dijo bruscamente - ¿Alguna vez has estado cerca de experimentar el inflar tu nudo dentro de un omega?

Niall sonrió ácidamente y levantó el dedo medio hacia él - vete al infierno.

Liam se echó a reír y Louis parpadeó - Encantador, Nialler, pero para ser sincero, como beta, no encajas en estas pequeñas charlas porque no entenderías los impulsos con los que Liam y yo tratamos.

Un ligero aleteo recorrió sus nervios y, para ocultarlo, se burló, - se nota que sólo estás tan preocupado por ti - Niall pateó la pierna de Louis y sonrió cuando él gruñó de dolor - incluso siendo beta puedo ver que estás obsesionado, con ese tema.

Niall observó a Liam suspirar con exasperación y enderezar los hombros después, tal parecía que se estaba preparando para defenderse una vez más y eso hizo que Niall sonriera.

- Hemos hablado de esto antes - Liam respondió juntando sus cejas en una línea severa con una preocupación genuina brillando en sus ojos marrones. - no vale la pena el riesgo de salir con ellos. Los omegas son demasiado fértiles. ¿Qué pasa si accidentalmente haces un nudo dentro de ellos? Es probable que tengas un bebé.

Las cejas de Louis se alzaron demasiado - Whoa, confía en mí, Payno, vale la pena el riesgo. Mi primera vez fue con un omega, Brian...

Niall negó con la cabeza, gimió y presionó la punta de los dedos en sus párpados - Jesús, no la historia de Brian otra vez.

Liam le dirigió una mirada compasiva y, cuando Louis comenzó a hablar de nuevo, Niall le dio a Liam un pequeño giro de ojos. Una pequeña curva se mostró en la esquina derecha de la boca de Liam y supo que era por humor, haciendo que él mismo sonriera. Niall amaba momentos como esos. Cuando él y Liam se comunicaban con gestos y sonrisas, parecía que podían mantener conversaciones enteras sin decir una maldita cosa. Dirigió su atención a Louis antes de darse cuenta de que no estaban escuchándolo.

-Fue una de las cosas más terroríficas que jamás haya experimentado. Lo estaba follando como loco, drogado por su olor y ni siquiera estaba en celo, estaba tan cerca de perder todo el control y de anudarlo. Es absolutamente intenso que tu sentido común sea pisoteado así porque a pesar de saber las consecuencias que un nudo puede traer, el instinto de hincharse es tan intenso, y el miedo que te da no poder controlarte en realidad aumenta la adrenalina haciéndolo más placentero. Y así es como descubrí que los putos omegas son mucho más placenteros que los betas - Louis se volvió hacia Niall - lo siento amigo, pero así es.

Niall suspiró con impaciencia - Lou, discúlpate cada vez que nos cuentas esa historia. No me importa un carajo qué es más placentero, sólo haznos un favor a todos y deja de decirla.

- No. No hasta que arrastre a Liam al lado oscuro y lo haga dejar sus reglas sobre sólo salir con betas.

Los ojos de Liam se ensancharon y su rostro era a penas rojo, sin embargo, eso sólo significaba que en unos cuantos segundos se volvería rojo intenso.

- ¡Tommo, hablas de la posibilidad de engendrar accidentalmente a alguien como si fuera un juego divertido! Al menos con los betas, si pierdes la cabeza en medio de las relaciones sexuales y los anudas, no puedes embarazarlos.

- en realidad también hay una pequeña posibilidad de que puedas hacerlo - Louis discutió con obstinación arqueando una ceja hacia Liam - porque tal vez son betas que podrían estar tomando secretamente amplificadores para poder quedarse embarazados.

Niall se rió de eso. - ¿Has estado viendo esa telenovela otra vez?

- Sí - Louis respondió alegremente - pero también sucede en la vida real.

Sacudió la cabeza y volvió a reírse ante el tono condescendiente de Louis, en realidad no era como si estuviera del todo equivocado, pero aún así era un poco dramático para la vida real. Sin embargo, le había pasado a un amigo de su primo, había estado saliendo con un beta por un par de meses y el beta decidió tomar secretamente amplificadores que le permitieran quedar embarazado. Sin esos amplificadores los betas tenían una tasa de embarazo extremadamente baja. Si un alfa se relacionara con un beta, sería necesario que éste los use en caso de que desearan tener un bebé. Y bueno, todo eso es lo contrario con omegas.

Por supuesto, aquello era algo que también había aterrado a Niall cuando supo que era un omega. En la escuela le habían enseñado bien lo fértil que era y que los supresores a veces no eran un buen control de la natalidad. Niall podría tener todo el sexo que quisiera siempre y cuando no permitiera que un alfa lo anudara.

No obstante, nada era más difícil de evitar que el anudar a un omega en celo, pues la reacción de un alfa es tan fuerte ante el celo, que la necesidad de hacer un nudo es casi inevitable. Así que los supresores se toman principalmente para prevenir aquellos celos.

- ¿Qué hay de ti, Niall? - Liam ladeó la cabeza con curiosidad - ¿Alguna vez has estado con un omega?

Niall se calló ante la pregunta. Su cerebro se apresuró a encontrar una mentira que sonara sincera, pues el hecho era que nunca había estado con nadie, jamás. Su mentira era tan grande, que no podía arriesgarse, porque fingía ser un beta todos los días de su vida. Podía follar con un omega, pero su propia naturaleza se alejaba de esa idea cada vez más, debido a que él en realidad no quería llenar a alguien más, quería ser llenado y seguro que no podía dejar que ningún alfa lo follara, porque tan pronto como sintieran la humedad salir de su trasero sabrían que no era un beta, así que simplemente no tendría sexo, y lo peor es que nunca les admitiría eso a sus amigos.

Volvió sus ojos a sus pantalones vaqueros, recogiendo el borde deshilachado de la rodilla porque Louis tenía la capacidad de ver una mentira en ellos desde el otro lado de la habitación.

- He estado con algunos...

Louis hizo una mueca graciosa y gimió - Oh, a quién le importan las experiencias de Niall con omegas, probablemente ha salido con un montón, los omegas prefieren salir con betas porque no pueden hacer nudos - su expresión cambió a confusión - aunque es extraño que nunca hables de tus hazañas, incluso puedo hacer que Liam hable de ellas, sin importar lo rojo y tímido que se pone con sus propias palabras.

- ¡Hey! - Liam frunció el ceño - Es un tema privado para algunas personas, no todos sienten la necesidad de confesar cada detalle sobre su vida sexual como tú, Tommo.

- Sí, bueno, eso es lo que me hace un alfa - Louis enfatizó.

- Claro que no, eso no tiene nada que ver con ser un alfa - respondió Liam, con voz algo tímida pero con confianza - y créeme yo también soy todo un alfa.

Niall había estado observando el intercambio de ida y vuelta, sin embargo, trató de ocultar el escalofrío que recorrió a su cuerpo ante las palabras de Liam.

Los supresores le impidieron detectar el olor de Liam, pero lo inundó un profundo anhelo de poder olfatearlo en ese momento. Sin embargo, aquel olor era bloqueado por una razón, pues sabía que si lograba captar el olor de Liam, su cuerpo inmediatamente reaccionaría ante ello, lo que llevaría a Liam a captar el suyo y aquello, a su vez lo llevaría a enterarse de su mentira, y Niall lo sabía porque aquello casi le había sucedido cuando tenían diecisiete años.

En ese momento, sus padres habían olvidado surtirle su receta de supresores, y él no se había dado cuenta hasta esa mañana. Había estado tan cerca de lograr que sus padres estuvieran de acuerdo en dejarlo quedar en casa ese día, pero al final ellos se negaron, diciéndole que las píldoras duraban 36 horas, no 24, por lo que no pasaría nada si iba a la escuela, que ellos le surtirían la receta más tarde cuando vinieran del trabajo camino a casa. Niall apenas podía recordar ese día porque había estado muy nervioso.

Sin embargo, hubo un momento que se quedo para siempre grabado en su memoria. El horario escolar había terminado y él había estado caminando hacia su vehículo ubicado en el estacionamiento, despidiéndose de sus compañeros de la manera más informal y tranquila posible, a pesar de que quería salir de allí. Acababa de llegar a su auto, fue entonces, que sus ojos se fijaron en Liam, quien se encontraba de pie con un grupo de personas y olfateó por primera vez en el aire, dándose cuenta de que podía olerlo. De todos los chicos que lo rodeaban en ese momento, instintivamente sólo se concentró en Liam.

Pesado y cálido, almizclado y agudo, su aroma lo había retorcido instantáneamente todo dentro de él. Había inhalado profundamente varias veces, aspirando su delicioso aroma de alfa que era a la vez increíblemente familiar. Sólo unos momentos más tarde, la realidad lo había salpicado como un cubo de agua fría cuando sintió que se estaba resquebrajando. Podía empezar a sentir el goteo por la curva de su culo. Era la tercera vez que lo había experimentado en su vida, pero lo había reconocido de inmediato. Había visto como el cuerpo de Liam se había puesto rígido y sus palabras se habían cortado, estaba girando su cuerpo cuando Niall abrió la puerta y se deslizó en el asiento del conductor, con los latidos del corazón vueltos locos.

Hasta el día de hoy, no estaba seguro de si había captado el aroma de Liam por la falta de sus supresores, pero después de eso se había asustado y se había asegurado de que sus padres nunca se olvidaran de surtir su receta de nuevo.

En su cabeza, Niall era consciente de que, en algún momento, la verdad tendría que revelarse, no podía pasar el resto de su vida pretendiendo ser un beta. Durante los últimos años se había propuesto revelar su mentira, "el año siguiente" , pero nunca había podido hacerlo. Y de repente tenía veintidós años y todavía lo escondía. Había estado pensando en contárselo a Liam durante su viaje anual de campamento este año, pero todavía lo estaba pensando.

Niall sabía dos cosas con certeza, la primera era que Liam nunca había mostrado el más mínimo interés en él como algo más que un amigo, y la segunda, que tenía menos interés en salir con omegas. Así que por ahora, la mentira podría quedarse, pues en cualquier caso, lo pondría en una desventaja adicional si lo supiera porque Liam no saldría con omegas.

***

Y entonces apareció Danielle.

Todo comenzó por Harry. El yogurt helado se había vuelto su nueva obsesión y los había convencido a todos para que fueran a un nuevo lugar. Niall quería estrangular a Harry debido a sus obsesiones, algunas eran absolutamente ridículas y no tenían límites. Por ejemplo, hubo un mes en el que dejó de ducharse porque las sales de baño se habían convertido en algo nuevo. Literalmente Harry había comprado docenas de aromas, marcas, colores, entre otras cosas, el armario cerca de su inodoro estaba absolutamente abarrotado de todas esas sales. Tiempo después, pasó dos semanas en las que estuvo obsesionado con los rompecabezas de Sudoku y ninguno de ellos podía hacer nada para quitarle esos malditos libros de sus manos. O como cuando había reducido su dieta a brócoli y mandarinas, aunque bueno, eso había durado sólo seis días. ¿Pero esta obsesión? ¿El yogurt congelado? Iba para la semana cinco con ella.

Niall se preguntó qué habría pasado si lo hubiera superado una semana antes, pero eso no sucedió y los había llevado a todos a Yogurt Plus por uno de aquellos postres.

Y ahí es donde entra Danielle. Era hermosa y su risa hacía que incluso los labios de Niall se estiraran hacia arriba en una pequeña sonrisa. Pero la cosa era que Liam estaba coqueteando con ella y bueno, eso no habría sido del todo extraño, excepto que ella era una omega, llevaba una camisa que decía omega y estaba orgullosa de serlo.

Y como si eso no fuera suficiente, las expresiones de Liam y Louis le habían dicho lo suficiente. Claramente ella no había estado enmascarando su olor y Niall empezaba a odiarla un poco para entonces. Odiaba lo descarada que era, y odiaba aún más el hecho de que ella pudiera ser así de libre porque había muchas más omegas femeninas que masculinos.

Niall la vio coquetear descarada y escandalosamente con Liam, observó a Liam inflar su pecho y obtener una postura más sensual sobre la barra, mientras tanto, él se quedó a un lado riendo con los chicos cuando era apropiado y esperando a que el hueco que sentía en su pecho no fuera obvio. Louis retrocedió un poco y le dio una palmada en la espalda a Liam, una pequeña muestra de aliento con la cual Niall tragó con amargura. Harry le había apretado el brazo con comodidad varias veces, pero eso no parecía ayudar.

La cosa era que... Danielle parecía una chica bastante agradable. Honestamente, tenía un humor que incluso cautivó a Louis una o dos veces. Bien por ella. Pero ella representaba algo que era como un muro de hierro, bloqueando la objetividad de Niall. De alguna manera, Niall siempre se había aferrado al hecho de que Liam nunca había salido con omegas, y aquella muestra le hizo tragar el hecho de que Liam nunca estaría interesado en él de la manera en la que él esperaba, pues en la mente de Niall, sus sentimientos hacia Liam no importaban porque Liam no saldría con él de todos modos si realmente supiera que era un omega. Era mejor para él pensar que ese era el factor decisivo y no que Liam únicamente lo veía como un amigo.

En el momento en que obtuvieron su yogurt helado y se sentaron (Liam, mirando fijamente en su móvil el número de teléfono que Danielle le había dado), Louis lo estaba golpeando en la espalda como un padre jodidamente orgulloso y estaba hablando tan alto que el silencio de Niall había pasado inadvertido. Niall se sentó de lado de la ventana, retorciéndose el cabello por las orejas, ofreciendo suficiente risa para apaciguar las sospechas que los demás pudieran llegar a tener sobre su comportamiento y periódicamente comiendo una cucharada de su yogurt congelado de vez en cuando. Su risa comenzó a sonar cada vez más forzada cuanto más tiempo pasaban en el establecimiento y mientras observaba a Liam robar miradas discretas hacia detrás de la barra. Finalmente, todos parecían listos para irse y él se puso de pie, agarrando su tazón de cartón a medio comer y su cuchara.

- ¿Acaso mis hermosos ojos me están engañando? Tengo que corroborarlo, ¿en serio, Niall? No puedo creer que te quede una taza casi llena de yogurt.

Niall lo tiró a la papelera y le dio a Louis una sonrisa tensa - en realidad no me siento del todo bien, creo que podría vomitar o algo así.

Liam se volvió hacia él, con la preocupación brillando en sus ojos - ¿fue algo que comiste? ¿Deberíamos pasar por la farmacia y comprar algún medicamento? - se acercó a Niall y sintió su frente con el dorso de su mano haciendo un ruido afirmativo, aunque Niall no tenía idea de qué demonios estaba confirmando, - sí, estás caliente, irás directo a la cama y yo cuidaré de ti en cuanto lleguemos a casa.

Niall honestamente no había querido captar toda la atención de Liam con su mentira, pero tampoco podía decir que estaba molesto por eso. No cuando Liam lo atrajo a su cuerpo con el brazo alrededor de sus hombros y no miró a Danielle ni una vez cuando salieron.

***

Si Niall había pensado que Danielle no le caía del todo bien, entonces odiaba absolutamente a Sophia.

Al menos, Danielle no había estado el suficiente tiempo con Liam como para que Niall realmente se preocupara. El hecho de que Liam sólo hubiera salido con ella durante tres semanas le había dado esperanza. Tal vez sólo necesitaba sacar a esa omega de su mente, decir que no sabía lo que le había pasado, seguir adelante y volver con los betas.

Pero no lo hizo. Y empeoró porque conoció a Sophia y, una vez más, Niall había estado allí en el momento importante de su encuentro, siendo testigo de la conexión instantánea que Liam parecía tener con ella y que duró hasta el final. Había estado en un maldito pub. El favorito de Niall, por cierto, y ahora estaba contaminado para siempre por su culpa.

Ella se encontraba apartada en una mesa exclusiva del club con sus demás amigas omegas. Niall no encontraba las palabras correctas para decirlo, pero eran un grupo de mujeres escandalosas y había visto a más de una de ellas levantarse en una silla y gritar "¡muerte a los estereotipos de omegas!".

Ese día, el pub celebraba su décimo aniversario, por lo cual habían colocado, por una semana, una de esas cabinas que toman fotos polaroid para que la clientela se tomara algunas y las colocara alrededor de las paredes del establecimiento. A Liam le había llevado un montón de tiempo y algunas cantidades de alcohol para convencer a Niall sobre tomarse una y a pesar de que el rubio había luchado con uñas y dientes contra eso, una suave sonrisa se dibujó en su rostro cuando Liam se mostró satisfecho por la foto que habían obtenido. Después de salir de la cabina, vio a Liam sujetarse a la pared para pegarla, fue entonces cuando notó que la morena de pelo largo, quién también intentaba pegar una foto, giró hacia Liam mientras se abría camino. Ella curvó su mano sobre su bícep y Liam se inclinó para susurrarle algo. Ella se echó a reír a carcajadas y se dieron un codazo mientras cada uno pagaba sus respectivas fotos.

Niall lo observó todo con una sensación de hundimiento en su estómago. Sus ojos se desviaron y golpeó la barra para llamar la atención de Paul, el camarero y dueño del pub - Paulie, creo que he tenido suficiente de tragos ligeros, pasemos al whisky - dijo apartando la vista de su mejor amigo y observando a Paul quien lo miraba detenidamente antes de servirle un vaso - oye, no seas tan cuidadoso conmigo, amigo, he llegado a tomar más de dos dedos, ¡sirve más!

Niall notó que los hombros de Paul se tensaron, pero sacudió rápidamente su cabeza mientras vertía y luego deslizaba el vaso hacia él.

- ¡Salud! - Niall levantó el vaso, le guiñó un ojo y sonrió tan grande como pudo, inclinándolo hacia atrás y sin soltarlo hasta que lo terminó de una vez. Golpeó el vaso contra la barra con un golpe satisfactorio - uno más, Paulie. Vamos.

- No creo que eso sea posible, Horan, creo que es hora de que te pida un taxi.

Niall miró a Paul, incrédulo de que no lo dejara beber. Nunca en su vida Paul se había negado a servirle algo. Por otra parte, podría haber pasado mucho tiempo desde que había estado tan enojado y dolido. Se rió ante su pensamiento y se dio cuenta de que Paul no parecía compartir su humor porque estaba mirándolo con el ceño fruncido, así que tocó la barra de nuevo.

- Paulie - hizo que el nombre durara diez segundos, con la esperanza de que al camarero se le ablandara el corazón - eres un buen hombre, sé que me servirás otro, yo sé que eres buen amigo de mi papá y que sabes la cantidad de alcohol que los Horan pueden manejar.

Paul suspiró y Niall sonrió. Sabía que había ganado.

- Bien, te daré esta bebida, pero luego llamaré a un taxi para ti, te irás a casa y echaras tu culo a la cama.

Niall escuchó el sonido de la risa de Liam mezclado con la risa femenina y el músculo en su ojo derecho se contrajo. Agarró el vaso, lo meneó un poco y lo tragó igual que el primero. Apenas y sentía la quemazón que el líquido provocaba al bajar, pues éste era amortiguado en comparación con lo que su corazón sentía en ese momento.

Las botellas que se alineaban en el espejo detrás de la barra empezaron a distorsionarse un poco viéndose muy bien juntas porque los colores se mezclaban, y Niall se rió para sí mismo, sin saber siquiera porqué lo hacía, sólo dejando escapar la risa de sus labios. Apretó el vaso con fuerza en su mano y esperó el taxi que Paul le había prometido.


Lamento la tardanza he estado un poco ocupada con lo de mi tesis, además que admito que me da un poco de flojera editar los capítulos xd. En fin espero que les haya gustado, gracias por leer no olviden votar y comentar, se los agradecería mucho 💜



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