[Meses atrás]
La reunión a puerta cerrada del alfa de su manada, junto con los demás representantes de las distintas naciones, estaba tardando más de lo necesario.
Todo la tribu se encontraba esperando por respuestas, esperando a lo que sería la siguiente orden de su alfa. Llevaban ya mucho tiempo esperando por respuestas claras pero nunca llegaban, cada persona enviada a Europa nunca volvía, dos eran las excepciones, pero eran viejos ahora, gracias a ellos ahora sabían lo que sabían.
Los alfas esperaban anciosos por escuchar las nuevas órdenes, deseaban saber que era lo siguiente en hacer, necesitaban soluciones y las necesitaban ya. Los alfas viejos, aquellos que consideraban sabios, estaban realmente preocupados por el bienestar del continente.
No podían seguir así, debería haber algo o alguien que detuviera aquel suceso que cada vez más, estaba acabando con todo.
Sus poderes, esos que los representaba, entre muchas cosas más, se estaban extinguiendo y con ellos su gente.
Aquel alfa, Omega o beta capaz de controlar alguno o varios elementos, eran afortunados hoy en día, y eran afortunados por el simple hecho de que cada vez eran más pocos los que nacían con algunos de ellos, cada vez eran más pocos los que lograban presentarse como alfa, Omega o beta.
Sabían que había una solución, o alguien que lograra detener eso, lo sabían porque había una profecía plasmada en el centro de su nacion, aquel lugar en donde encontrarás todo y nada a la vez, en donde una piedra enorme tenía gravado cosas que aún nadie era capaz de descifrar.
Lo poco o nada que sabían, era la pequeña parte de una de las tantas líneas, pero aún así demasiado importantes para dejarlas de lado.
"Viajaras a las ciudades pérdidas, y encontrarás todo lo que siempre deseaste pero jamás podrás tener."
***
-¿Qué crees que estás haciendo, Harry? .- dijo su amigo, sentado detrás de la barra de su cocina. O bueno, de la cocina de su mamá.
- Quiero ser yo, Liam, me he preparado para esto desde que tengo memoria y lo sabes. .-dijo para seguir continuando con lo que hacía.
-Ni siquiera sabemos que es lo que dirán, el alfa dijo que debíamos esperar.
-Liam, Zuco me ha dado señales, se que enviaran a alguien, el sabe que deseo hacerlo yo. Los ancianos me han dado consejos, me creo capaz de hacerlo.
-Nunca dije que no lo eras .- frunció su nariz mientras lo decía, y con un tono de preocupación dijo lo siguiente.- ¿Que pasa si sucede lo mismo? ¿Te enamoras de su ciudad, de sus costumbres, de... alguien? .- Harry lo vio mal.- ¿Que pasa si no deseas regresar, sabes que...?
-No yo, yo regresaré. Sabes que amo aquí, no sería capaz de traicinarlos, no sería capaz reprimir lo que soy, lo que la luna me dió.- dijo Harry serio a su amigo.
-Lo se, tu quieres encontrar a tu Omega, formar una familia y mudarte a la montaña, ¿No? Allá donde deseas construir tu casa, rodeada de árboles y flores silvestres.
-Si .- sonriendo se sentó frente a su amigo, luego asintió hacia la ventana. Afuera las calles cada vez más se llenaban de casas. - Me gusta aquí igual, pero sabes que amo la naturaleza. Yo siempre...
-Bueno, debemos que ¿No? .- sonrió y dio un chasquido de dedos.- es nuestra naturaleza.
Harry sonrió cuando afuera los árboles comenzaron a moverse, y giro su rostro nuevamente hacia su amigo.
-Acabo de barrer las hojas Liam, gracias por estropearlo. - dijo bromeando.- pero sabes que me prepare para eso, me fascinaba desde pequeño aprender lo más que sabía sobre nuestros orígenes, pero ahora que sé que hay algo que no está en nuestras manos, esa pequeña parte de...-supiro.- deseo ayudar a la manada Liam. Y ayudar al continente.
-Eres uno entre muchas opciones Harry, ¿Enserio crees que te elegirán a ti, de entre miles? .- se llevo la mano a su frente su suspiro.- somos demasiados Harry, cualquiera podría ser el elegido y...
-Lo se, y es por eso que debo ir y hablar con el alfa de la manada, al menos ser el elegido de nuestra tribu Liam, ser el que pueda salvar a la tribu. Sabes que cada vez los niños... Ellos lo están perdiendo Liam, me duele ver cómo ellos se asombran con lo que hacemos, he intentado enseñarles,mostrarles como hacerlo pero no se puede, debe haber algo allá afuera, que haga que nuestra raza vuelva a ser como antes.
***
-Dije que no Harry, ahora regresa a tus deberes para con la manada.
-¡Pero alfa, sabes que yo sé mucho más que todos los demás! Por favor. .- dijo siguiéndole los pasos.
-Cachorro, dije que no y es mi última palabra. La elección ya está tomada, solo serán uno por cada estado, y en el nuestro, el elegido fue el de la tribu central.
-¡SABES QUE SE MAS QUE TODOS AQUI! CONOZCO CADA PEQUEÑA PARTE DE LA HISTORIA DE NUESTRA TRIBU ALFA, Y NO SOY MAS UN CACHORRO, TENGO 23 AÑOS, JODER!
No sabía de donde había sacado toda esa valentía, nunca se imagino gritarle a su alfa, dió un paso atrás cuando se dió cuenta de lo que había hecho. El hombre frente a él lo miraba fijamente, y dió un paso hacia el.
-Por esto es por lo que no irás, no sabes controlarte Harry.- su mano, que había estado en su hombro y no se dió cuenta cuando llegó ahí, ahora estaba siendo arrastrada para tocar su mano.
Harry sintió algo como si lava caliente corriera por sus venas, y llevo su vista a sus manos, en ellas había fuego, y rápidamente las cerro en puños para apagar las llamas que de ellas salían.
-No sabrías esconderte Harry, perteneces aquí. No estás apto para ir, si alguien allá sabe lo que eres capaz de hacer. .- cerro sus ojos y lo tomo entre sus manos . En sus manos sintió como si hielo fuera puesto sobre ellas, Zuco estaba usando su poder de agua para calmarlo. - No puedo dejar que vallas y no regreses, eres importante para la tribu y lo sabes.
-Pero Zuco...- cerro sus puños, ahí más calmado, respiro profundamente antes de continuar.- lo haré, podré controlar mi poder, son un alfa raza puro, esto solo fue un desliz. Un año, dame un año y si en ese año no consigo nada, te juro por mi madre que volveré.
-Harry...
-Por favor alfa, se que soy capaz de hacerlo. Yo...-miro hacia afuera y cerro sus ojos con fuerza.- si quieres que me humille lo haré y ...
-Harry, yo nunca te eduqué así, a ti ni a ningún otro de la manada, un alfa, y menos un alfa raza pura se humilla o ruega a menos que sea a su Omega, crei que tenías eso claro.
-Lo se, pero si eso hace que me envíes a...-su alfa suspiro, y dió un paso atrás.
-Tienes un año Harry, y si en el último día del treceabo mes no estás aquí, no dejaré que regreses. ¿Entiendes?
Los ojos de Harry brillaron, asintiendo efusivamente y tomo las manos de su alfa.
-Gracias, gracias. Te juro que no defraudaré a la manada Zuco.
-Un año Harry, despues de eso, creo que sabes mejor que nadie aquí, que no puedo dejarte encontrar a Mu. Y dirás aunque no quieras, adiós a tu hogar y a todo lo demás.
-Estoy conciente, si.¿Cuando parto?
-Mañana al amanecer, cuando te dirija hacia la salida, te daré los detalles de todo lo que harás cuando llegues a Europa.
***
[Actualidad]
-Han pasodo 8 meses Otoniel, llevo ocho meses tratando de encontrar algo y no lo he logrado. .- el hombre frente a él, aquel hombre-alfa que hace años había pertenecido a su manada lo veía con la mirada fría.
-Creo que es hora de darse por vencido Harry, incluso nosotros....- miro hacia otro lado, apretando sus puños con fuerza .- incluso ustedes los alfas, saben que no siempre se logra lo que se propone. No has encontrado nada aquí y no creo que lo hagas en 4 meses.
-Aun tengo 5 meses Oto, el dijo que tenía...- el rizado fue interrumpido por el hombre frente a él.
-Si, el último día del treceavo mes, Harry, tú sabes que en ese último mes debes buscar la entrada al continente, no está a la vista de todos, por eso es que nadie ha llegado ahí. Sabes mejor que nadie que primero debes encontrar las perlas que te fueron consedivas para regresar.
-¿Que pasa si no logro encontrar nada? .- dijo frunciendo el seño. Llevo sus manos a su pelo y lo hizo hacia atrás.
-Entonces habrás hecho lo que has podido, eso no te hace menos persona ni menos alfa.
-Lo se pero yo...
-Eres terco Harry. No sé porque Zuco te envío aquí si ni siquera sabes obedecer las órdenes. - su tono de voz se elevó y puso ambas manos sobre la mesa, su cuerpo levemente inclinado hacia el rizado.- te he visto jugar con fuego en el jardín atrás de la veterinaria, aquel día que pase por ahí logré verte. - Harry estaba pasmado .- y no me digas que no y me veas con esos ojos, mucho menos me enseñes los colmillos, cualquiera pudo haberte visto.
-Yo solo estaba nervioso, el tiempo pasa y...
-Debes aprender a controlar tu poder, no puedes andar como si nada haciendo fuego con tus manos, o incluso hacer crecer flores en el jardín.
-No volverá a pasar. Sabes que nunca lo hago, desde que llegué aquí solo dos veces he usado mi poder y esta vez fue un desliz, me sentía desconectado conmigo mismo.
-Lo de, te entiendo .- el hombre bufo y se mantuvo en silencio por unos segundos para después contínuar - yo mejor que nadie te entiendo Harry. No sabes cuánto me arrepiento de no haber regresado, no se como paso que... -un suspido y moviendo sus ojos lejos de los verdes que lo observaban atentos.-Los poderes simplemente fueron disminuyendo hasta que después no quedará nada, pero la amo ¿Sabes? .- dijo refiriéndose a su esposa, aunque Harry preferiría llamarla Omega, pareja, tantas palabras con un mismo significado.- ella nunca supo de mi condición ni de dónde venía, lo supe cuando la ví, era ella...
-Tu omega.- dijo Harry.- Daleth es tu Omega.
-Cuando llegue aquí, venía dispuesto a mucho, pero cuando la encontré, lo supe, ¿sabes? Aunque ella no tuviera el conocimiento de eso, ella o sus ancestros en algún momento fueron igual que nosotros, fue su olor Harry, ellos le llaman alma gemela, fue fácil aceptarlo con el tiempo, adoptar sus modos de vida para estar a su lado. Pero si me preguntas de nuevo que hubiera hecho, la seguiría eligiendo por sobre todo.
-Pero tu gente...- Harry comenzó a hablar.
-A veces, aunque no quieras, tu alfa escoge prioridades. No tienes eleccion.
-¿Como siquiera supiste que era tu Omega, si ellos hace años o incluso siglos, que dejaron de saber acerca de nuestra condición? ¿ Porque lo encontraste aquí?
-Harry, aveces he pensado, que aún hay gente como nosotros aquí, tengo el presentimiento de que se esconden, al igual que nosotros. ¿Suena loco no?
-¿Porque se esconderían?
-Por la misma razón que lo
hacemos nosotros. Quizá no es porque ellos quieran, la gente aquí es muy susceptibles a juzgar, si alguien dice o hace algo que es diferente para la mayoría lo tachan de loco y millones de cosas más. Aunque el mundo ahora se dice es mucho más tolerante es todo lo contrario.
-Estas sugiriendo que...¿Pueden saber y no saber que son, ya sabes, alfa omegas o betas? .- dijo dudoso el rizado, más atento a la plática que estaban dezarrollando.
-Creo que de alguna forma los de aquí, son como...¿Betas? No sé si me explico .- con su mano rodeando a su alrededor continuo - ellos no piden o llaman a su alfa y Omega, ellos no huelen ni sienten esa conexión, lo mismo que los betas de la manada, aquí solo son atracción.- cuando vio al rizado más confundido añadió.- no lo malentiendas, para haber atracción debe haber amor, una conexión distinta a la nuestra, a lo que voy es que, el linaje o como aquí se llama, sus antecesores fueron alguna vez parte de nosotros, esa pequeña parte que aún vive dentro de ellos, es la que creo que es la que algunos la llegan a sentir pero no a decir nada sobre todo por el miedo al que dirán. Y porque es desconocido para ellos. ¿Me explico?
El de ojos verdes asintió, en el tiempo que llevaba ahí había aprendido bastante. Muchas veces cuando iba al pequeño parque las chicas e incluso algunos chicos se le quedaban viendo.
Una ocasión un mujer de pelo ondulado y ojos color avellana se le acercó y le dijo que lo había visto días anteriores sentado en esa misma banca, le dijo también que le había llamado la atención y que quería conocerlo.
A él no le interesaba conocer a nadie, porque él estaba esperando conocer a su Omega, su mamá siempre le decía que cuando lo encontrará simplemente lo sabría y con aquella chica simplemente no sucedió, eso, y que el preferiría a los chicos, y también por el hecho de que no creía que encontraría ahí a alguna o algun omega si fuera el caso.
¿Porque buscar a alguien, a una pareja, por su aspecto físico?
El estaba consciente de que estaba bien, era guapo si, pero no por ese hecho quería decir que se iba a juntar con cualquier persona.
Las personas aquí eran extrañas, siempre fijándose en el físico y después en los sentimientos.
-Lo entiendo Oto, pero yo solo...- tomó su taza de té y le dió un sorbo.- no puedo solo no hacer nada y regresar con las manos vacías.
-Ya algunos lo han hecho Harry, Zuco me dijo que hasta ahorita han regresado más de la mitad, con las manos vacías.
-Yo no soy ellos, yo prometi regresar con algo que nos ayude a curar lo que está pasando, los poderes son sagrados, no se pueden perder.
-Quiza ya es hora de que se pierdan. Deben aceptar que todo esto de...
-No Oto! .- se paró de su silla, un ruido sordo cuando está callo al suelo, las manos de Harry hechas puño pero nada saliendo de ellas .- nosotros buscamos soluciones.
-Estas bien Harry, es hora de que regreses...
-No voy a regresar..
-No me dejaste terminar, queria decir que es hora de que regreses a casa, anda ve, haz el cambio, creo que te ayudará un poco.
***
-Louis, al fin hijo, hace cuanto que llegaste, si hubieras dicho que llegabas hoy habríamos ido a recoger al aeropuerto.
El castaño se encontraba entre medio los brazos de su mamá, su cara enterrada en su pecho pero su sonrisa sin poder romperse.
-No era necesario mamá. Estoy aquí, sin ningún rasguño.
-Que bueno querido.- su mamá le dió un beso en su frente antes de separarse de el.- las niñas salieron, ¿Quieres tomar té? ¿Dónde están tus maletas?.- dijo dirigiendo su mirada a la espalda del de ojos azules.
-Yo, me estaré quedando en un hotel mamá, ya está pagado. - cuando la vio comenzar a mover la boca la interrumpió.- enserio, no te preocupes.
-Estas bien, vamos. - con un giro, se encaminó hacia la cocina y preparo té para los dos. Cuando estuvo listo le entrego una taza a su hijo y otra se la quedó ella. - Estás, ¿Tomando siguiendo tu tratamiento?
El chico se movió incómodo en su lugar, aunque era su madre y era ella la que lo había llevado en primer lugar a revisión cuando le comenzaron a pasar cosas extrañas, bueno... Después de eso, hace casi más de 10 años, seguía sintiéndome extraño.
-Si mamá, tengo que hacerlo, sabes que esos dolores son... Muy fuertes, si no tomo mi medicamento yo...bueno ya sabes, suelo tener días muy difíciles, sin salir de la cama y eso.
-Te entiendo hijo, cuando yo sufría de dolores a causa de ...
-Mamá, no hables como si fuera una chica, estos dolores no son por ...-carraspeo- cólicos o algo así, solo, son dolores raros, alguna extraña enfermedad heredada de mi abuela.
-Si, lo siento si yo...- su mamá se llevó la taza a su boca y dió un pequeño sorbo. - bueno, ya sabes.
-Lo se mamá .- puso su mano sobre la de ella.- no es tu culpa de nada, se que tengo una extraña enfermedad o lo que sea que tengo que hacer que yo tenga... Pues estos dolores.
-¿Cuanto tiempo vas a estar aquí? ¿Te quedas? ¿Que me tienes que contar? ¿Algún novio? .- el chico río.
- No lo sé, deberia haberme quedado en Londres pero prefiero viajar y estar más cerca de ustedes el tiempo que esté aquí hasta que tenga que voy a New York. - luego sonrió - y no, ningún chico, sabes que yo...
-Si, si, buscas esa conexión y todo eso de almas gemelas. ¿Sabes hijo, aveces me preguntó cómo es que tienes especialidad a una rama de la ciencia y crees en esto?
-Soy un romántico mamá, dejame ser. Ahora en día somos muy pocos los que existimos.
-Si, tienes razón, tómate tu tiempo querido.
***
Cuando Louis llegó al hotel, no dudó en dirigirse hacia el baño, desde que había llegado había sentido ese calor en todo su cuerpo, se había tomado unas pastillas antes de irse a visitar a su mamá, creyo que iba a ser más que suficiente, pero el dolor y el calor era cada vez más intenso.
Creía que las pastillas y todo el tratamiento cada vez dejaba de funcionar.
Se lavo la cara y se quitó la ropa, metiendo al agua fría. Para bajar la temperatura en su cuerpo, aveces se preguntaba porque de la nada, cuando esas calenturas le daban, tendía a tener erecciones.
Eso no era normal, esta vez no quiso ocuparse de eso, con una toalla a su cintura y con sus brazos alrededor de su estomago llegó a la cocina y se tomó con un vaso de agua el doble de pastillas.
Se dirigió a su dormitorio y se metió a la cama, estaba seguro de que serían unos largos pares de días, o al menos eso esperaba.
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Hola, no tan largo pero aquí les dejo este capítulo.
Las cosas se irán aclarando conforme avancen los capítulos.
Espero que el AU sea completamente de su agrado y llegue a cumplir sus expectativas.♥️