Me perteneces (COMPLETA)

Da Joly0711

4.4M 213K 13.5K

Ella....una hermosa chica con un espantoso pasado que busca un nuevo comienzo. Él....el hombre que pondrá el... Altro

Comienzo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 28 (cont.)
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 32 (cont)
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 36 (cont.)
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Epílogo

Capítulo 47

78.7K 2.9K 332
Da Joly0711

POV MYLA
Viernes.....

He asistido al almuerzo al que fui invitada por John. Su madre Eloise y su "prometida" también están aquí con nosotros. La conversación ha ido básicamente de lo mismo que Khris me había contado. Se ha disculpado profusamente con su madre, conmigo y con Caroline. Le ha suplicado a Caroline otra oportunidad. Su madre lo ha perdonado y yo le dije que no se preocupara. Lo que hizo en el hospital no estuvo bien, pero su ataque no fue dirigido a mí directamente, sino a Khris. Y si Khris ha decidido que tratará de hacer las pases con él, pues yo también, después de todo es su hermano. Pero con Caroline será más difícil, ella está muy dolida con él. La madre de Khris se retira debido a que pronto comienza su turno en el hospital.

-¿Y qué planes tienes para el día de hoy? - me pregunta Caroline.

- No tengo ninguno. De aquí me regresaré al apartamento hasta que llegue Khris.

-¿Enserio? ¿Nunca sales de compras o algo?

- Lo he hecho con Liz, solo no me gusta ir por ahí sola. No me gusta tener a los fotógrafos y curiosos persiguéndome. Al menos cuando estoy con Khris se mantienen al margen.

- ¿Al margen? - ellos se miran el uno al otro y luego a mí - ¿Acaso no has visto nada?¿Las redes sociales? - pregunta Caroline un tanto confundida.

- No he visto nada y no estoy en ninguna red social. ¿De qué estás hablando exactamente? - mi corazón comienza a palpitar rápidamente.

Caroline saca de su enorme bolso unas revistas de cotilleos y me las ofrece. En la portada de una se encuentran Alexie y Liz. Es la revista que cubrió su boda. Busco dentro de la revista el reportaje completo. Son varias páginas. Hay varias fotos de ellos pero también hay varias mías y de Khris juntos. En una el me mira con una expresión tierna en su rostro, como si mi rostro fuera lo único que ve. En la otra estamos desfilando en la ceremonia. Pero la última foto y la que alberga una página completa, esa me eriza la piel. Estamos bailando sólos en la pista de baile y varios invitados están de pies a nuestro alrededor, incluidos los novios. Mientras miro la foto, lo recuerdo todo perfectamente. Estábamos bailando abrazados y muy pegados, mis brazos alrededor de su cuello. Una de sus manos estaba sobre mi trasero y la otra en mi nuca. Recuerdo la leve presión de su mano y se me calienta el cuerpo. Al pie de la foto se escribe : "Definitivamente el soltero más codiciado de la ciudad ya no se encuentra disponible. Según fuentes confiables, la pareja se encuentra muy unida y enamorada, y aunque aquí tenemos una prueba contundente, aún no se sabe mucho sobre la misteriosa mujer que le ha robado el corazón al joven magnate".
En la otra revista hay fotos de nosotros cenando el martes y luego en la pista de patinaje. Hay muchas fotos. De mí patinando sola alrededor de Khris, Khris sonriendo ampliamente, de ambos patinando agarrados de la mano, de Khris arrodillado en el suelo poniéndome mis patines. Pero no son las fotos lo que me altera, sino el pie de la foto: "Confirmado el ardiente romance entre el magnate Khris Becker y la preciosa mujer misteriosa, la cuál fuentes confirman, es llamada Myla D'Clairo. Ésta chica definitivamente ha conquistado el corazón del magnate al cuál se le ve muy enamorado de la hermosa mujer. Al parecer, la por cierto muy talentosa mujer, tiene una muy buena arma secreta de seducción y ha agarrado al magnate con ambas manos y éste se ha dejado agarrar de muy buena gana. Nos preguntamos, ¿qué otros secretos tendrá ocultos? Esto es demasiado. Mi presión sanguínea se acelera y puedo escuchar el fluído de la sangre por mis venas nítidamente palpitando en mis oídos.

-¿Myla, te encuentras bien? - la voz de John me saca de mí ensimismamiento y me doy cuenta de que estoy temblando.

-¿Hay más de esto? - es lo único que pregunto con voz temblorosa.

- Myla está en todas partes. En Facebook, Twitter, Instagram. Inclusive el video del patinaje está en Youtube. Además no son las primeras que publican. Ya habían publicado otras a la salida de un restaurante ¿De verdad no sabías nada?

- ¡Ya te dije que no estoy en las redes sociales, no me interesa el Internet. No entiendo cómo consiguieron todo esto. Además, Khris les dijo que nos dejaran en paz! - me estoy alterando y por supuesto que sé perfectamente cómo han conseguido todas éstas fotos y videos.

- Es normal que los persigan. Los periodistas hacen lo que sea para conseguir una portada. Y puede que no se hayan acercado desde que Khris les amenazó, pero eso no significa que no lo hagan a una distancia prudente - dice John. Niego con la cabeza frustrada. No son las fotos lo que me ha descolocado, no. Es el hecho de que ya saben mi nombre y dicen tener "fuentes confiables". Y mis "otros secretos ocultos". ¿Quién diablos les ha dicho mi nombre?¿Tendrán manera de averiguar mis secretos? ¿Podrían? ¡Oh mi Dios, esto no puede estar pasando!¿Qué pasaría si encuentran esas otras fotos de las que nunca hablo?¿Y si encontraran el video?¡Por Dios, no!

- Me tengo que ir. Disculpen - agarro mi bolso y me levanto de la mesa de prisa.

- Myla, espera, no te vayas - John me agarra del brazo.

- John, gracias por el almuerzo pero tengo que irme, por favor, déjame ir - estoy frenética y si no me controlo voy a vomitar. Me volteo para marcharme pero no doy ni un sólo paso porque Allan está plantado frente a mí.

- Myla - mi cuerpo se estremece y se siente como gelatina. Me fallan las piernas y cuando creo que voy a caer, él se acerca para agarrarme.

-¡No me toques! - se para en seco y doy gracias a Dios de que John haya estado a mi lado para evitar mi caída - No me toques infeliz. ¿Qué demonios quieres, por qué me persigues? Ya déjame en paz - no grito, tengo los dientes apretados. Por fortuna estamos solos en ésta terraza. Lo miro y parece arrepentido y puedo notar algunos moratones en su cara empezando a desvanecer.

- No volverás a verme nunca, lo prometo. Sólo quería pedirte perdón sinceramente y que te cuidaras por favor. Erik ya salió de la cárcel y está decidido a encontrate. Y sí yo te encontré, él también lo hará. Ahora estás en todas partes - y así sin más se marcha. Mis oídos pitan y soy consciente de que John me agarra más fuerte y me regresa a la silla. En pocos segundos tengo a Caroline de frente.

- Santo Dios, Myla. Estás pálida. ¿Qué sucede, quién es ese hombre que te asustó tanto? - pero no puedo hablar, estoy muda.

- Caroline, iré a pagar la cuenta. La llevaremos al apartamento, claramente no se encuentra bien - todo se vuelve negro en ese preciso momento.


POV KHRIS

Mi asistente me ha indicado que tengo una llamada urgente de mi hermano y Myla se encuentra con él, así que salgo de la reunión de prisa y dejo a cargo a mi mano derecha Ross. John sólo me ha dicho que un tipo se le acercó y la alteró, pero ya estaba alterada debido a las fotos que vió. No le había mencionado nada de las fotos y los videos porque sé que no le agrada. Lo más preocupante es que se desmayó. Sorteo el maldito tráfico y llego a casa tan rápido como puedo casi media hora más tarde. A ésta hora del día el tráfico es un maldito infierno. Al entrar, John y Caroline están en la cocina tomando café.

-¿Qué diablos ha pasado?

- Ella está dormida. Se tomó unos calmantes - esto me pone en alerta - Khris, lo siento. Fue mí culpa por enseñarle las revistas.

- Caroline en algún momento tendría que verlas, no te preocupes. Sólo quiero saber quién fue el cabrón que la molestó - miro directamente a John.

- No lo sabemos. Myla le cuestionó qué quería, que por qué la perseguía y le pidió que la dejara en paz. El le pidió perdón y le prometió que no lo volvería a ver.

- Allan, maldita sea - voy a matar a ese hijo de puta.

-¿Lo conoces?

- Sé quién es. Ha estado molestándola desde hace ya varias semanas.

- Le dijo algo más - esto capta mi atención - Le pidió que se cuidara. Que un tal Erik había salido de la cárcel y estaba decidido a buscarla y que si él la había podido encontrar, el tal Erik también lo haría - no sé quién diablos es Erik, pero el hecho de que represente un peligro para ella me enerva la sangre.

- Maldita sea - digo frustrado mientras doy un manotazo en la encimera y Caroline da un respingo. Caroline agarra mi mano y la aprieta.

-¿Acaso está en peligro? - pregunta Caroline.

- Ojalá lo supiera. No tengo ni puta idea de quién es Erik - Caroline me ofrece una taza de café y la tomo agradecido, me tuve que saltar el almuerzo - Tendré que comunicarme con su padre y sus hermanos porque esto es algo que desconozco - después de unos minutos se despiden.

- Espero que todo se solucione y perdona nuestro atrevimiento - dice señalando hacia la taza de café. De hecho, ahora recuerdo que nunca antes había estado en mi casa.

- Nahhh, descuida y muchas gracias por cuidar de ella y traerla aquí.

- No hay de qué, hermano - me da un palmada en el hombro y se marchan.

Voy a la habitación y veo a Myla acurrucada en la cama. Está de espaldas a mí, pero sé que no está dormida. Su cuerpo tiembla y escucho los hipidos de su llanto. Mierda. Al darse cuenta de que estoy en la habitación trata de controlarse. Entro al baño y preparo la bañera con agua caliente y burbujas. Me desvisto y voy por ella. La tomo en brazos para llevarla al baño y se hace la dormida, pero su cara está roja y húmeda.

- Cielo, voy a ponerte en el suelo para poder quitarte la ropa,¿está bien? - ella abre los ojos y me mira. Sus ojos están inyectados de sangre y están muy hinchados. La rabia se apodera de mí.

-¿Cómo sabías que no estaba dormida?

- Te escuché llorar. Y aunque no hubieses estado llorando lo sabría. Porque te conozco, porque a veces paso horas mirándote dormir y me he memorizado tú manera de respirar cuando estás dormida, cielo - la bajo al suelo y le da un repaso a mi cuerpo desnudo y a mi inevitable erección - No estamos aquí para eso - le quito la ropa, la llevo a la bañera y la acomodo en mi regazo como si fuera una niña pequeña.

Acaricio su cabello y la beso en la frente. De repente estalla en un incontrolable llanto. Se agarra a mi cuello y la abrazo fuertemente por un largo rato. No le digo nada, sólo la sostengo en mis brazos y después de un largo rato, cuando por fin siento su cuerpo relajado, le pregunto.

- ¿Te sientes mejor? - su cara todavía está enterrada en mi cuello pero asiente - Mírame, cielo - lo hace después de unos segundos y sus ojos están más hinchados. Acaricio su mejilla - Háblame, dime que sucedió - niega con la cabeza - No me digas que no. Esto no lo voy a dejar pasar. ¿Te pusiste así por las fotografías, por Allan o por lo que te dijo sobre Ekic? - se aleja de mí bruscamente.

Su cara refleja terror e intenta salirse de la bañera. Forcejeo con ella pero está resbaladiza por el jabón y no puedo agarrarla. Logra salirse y va directo al inodoro. Se arrodilla y vomita hasta que no queda nada en su estómago. Me he quedado a su lado sujetando su cabello a pesar de que me ha empujado varias veces para que me aleje. La ayudo a ponerse de pie y la llevo hasta el lavamanos para que se moje la cara mientras pongo toallas en el suelo mojado. La envuelvo en una toalla mientras se cepilla los dientes. Espero pacientemente a que termine. Veo el frasco de calmantes sobre la encimera del lavamanos.

- ¿Te tomaste alguno? - su mirada se encuentra con la mía en el espejo.

- No, no lo hice - y le creo. Le seco el cabello con otra toalla y la llevo a la cama. Nos acostamos en la cama y nos miramos por una eternidad. Odio ver sus hermosos ojos hinchados por el llanto. Por fin habla, pero no me gusta lo que empieza a decir.

- Khris, esto es demasiado para mí y no puedo soportarlo más. No puedo.

-¿Qué es lo que no puedes soportar?

- Todo.

- Sé más específica, por favor.

- Me refiero a la intromisión de la prensa, las fotos, los videos, Allan......

-¿Y Erik? - cierra los ojos con fuerza y se estremece mientras las lágrimas vuelven a brotar - Myla me estás ocultando algo y eso no me agrada. Y sé que lo de la prensa no tiene casi nada que ver con lo que te está pasando. ¿Qué carajos quería Allan y quién demonios es Erik? - niega con la cabeza e intenta levantarse de la cama. La detengo de inmediato, la volteo y me siento a horcajadas sobre ella e inmobilizo sus manos por encima de su cabeza - No, no, no. ¡Ya basta maldita sea! Vas a hablar y vas a hablar ahora. Estoy harto de verte de esta manera. Me vas a decir qué demonios pasa ahora mismo - está asustada y le doy un momento para calmarse - Habla - le digo cuando para de llorar. Respira profundamente.

- Allan me pidió disculpas y me dijo que no lo volvería a ver. Me pidió que me cuidara... de él.

-¿De Eric? - asiente - ¿Fue él quién te hizo daño? - veo el dolor en sus ojos, pero niega con la cabeza - Pero tiene algo que ver con lo que te sucedió, ¿cierto? - asiente nuevamente.

- Tiene mucho que ver y estoy aterrada de que me encuentre. Si Allan me encontró, él también lo hará, más ahora que estoy en todas partes por culpa de la prensa - tiene sentido lo que dice. Allan le confesó a los hermanos de Myla que la encontró debido a una publicación que vió en internet de nosotros saliendo del restaurante. Ahora hay muchas más fotos, videos y están en todas las plataformas sociales.

-¿Es por esa razón que desde un principio no querías ser fotografiada?

- Sí. Tengo un pasado horrible y no quiero que nada de eso salga a luz pública. Aunque se supone que todo está confidencialmente archivado, la prensa siempre se las arregla. Además en los pie de foto de las revistas decía que tenían una fuente confiable y ésta fuente les ha dado mi nombre. No quiero ni pensar qué otra cosa puedan decir o averiguar. Sólo de pensarlo me muero de la vergüenza de que algún día se sepa la verdad, de que tú sepas la verdad y me odies por ello. No quiero que mi suciedad te salpique - estalla en llanto otra vez.

- Myla, cielo, por el amor de Dios. ¿De qué demonios estás hablando? Nada puede salpicarme, no va a pasar nada. No voy a permitir que te pase nada, sólo tienes que dejarme cuidar de tí y protegerte. Nada malo va a pasar.

- ¡No, no lo entiendes. Si alguien encontrara esas fotos y ese video no sé que..... !- se calla cuando se da cuenta de lo que estaba diciendo.

-¿Myla? - gira su cabeza para no mirarme. Le suelto sus manos y me acomodo entre sus piernas. Me apoyo en mis codos para sostener mi peso - Cielo, tranquila. Todo va a estar bien. Yo te cuidaré, te lo prometo - asiente con la cabeza sin mirarme poco convencida.

La dejo tranquila y no volvemos a hablar del tema. Creo que ha sido suficiente por ahora. Después de un rato, ordeno la cena. Cuando llega el delivery, la llevo hasta el comedor. Juguetea con la comida y apenas come. No le digo nada aunque me molesta que no coma. Nos vamos a la habitación y enciendo la televisión. La tengo acurrucada en mis brazos. Ha escogido una película pero sé que no le presta atención. Mi teléfono suena y al mirar la pantalla veo que es Jean. Le he enviado un mensaje explicando lo que sucedió y le pedí que me llamara en cuanto le fuese posible.

- Cielo, tengo que atender ésta llamada - no dice nada, sólo sigue mirando la televisión - Intenta dormir un poco.

- No creo que lo consiga.

- Está bien, no tardo - me dirijo a mi oficina aquí en casa mientras contesto - Jean.

-¿Qué demonios? ¿Está mal verdad?

- Ya está calmada, pero sí, estuvo mal.

- ¿Te ha hablado, te ha dicho que quería ese cabrón? Pensé que le habíamos dejado muy claro que la dejara en paz.

- Le pidió perdón y le prometió que no lo volvería a ver, pero eso no es lo que me preocupa. ¿Quién demonios es Erik?

-¿Quién ha mencionado ese nombre?

- Allan. Le ha pedido a Myla que se cuide. Que ya salió de la cárcel y está decidido a buscarla. Le dijo que ahora ella está en todas partes y por supuesto, si él la encontró por las publicaciones de Internet es posible que Erik la encuentre más fácilmente ahora que hay tantas y por todos lados.

- Mierda.

- Myla no me ha dicho exactamente quién es, pero si me ha confirmado que tiene que ver con lo que le sucedió.

- ¡Por supuesto que el muy cabrón tiene que ver! ¡Ese hijo de puta mal nacido! Más le vale que no se acerque a ella.

-¿Ya sabían que salió de la cárcel?

- Sí, nos enteramos hace dos días. Inmediatamente salió de la cárcel desapareció, no se sabe de su paradero. Pero estamos trabajando en ello y no descansaremos hasta encontrarlo.

-¿Puedes darme sus datos? Tengo un especialista en informática, puedo buscar yo también y ver que puedo encontrar. No quiero por ningún motivo que se acerque a Myla.

- Eso suena perfecto - intercambiamos datos y planificamos nuestro siguiente paso.

Le doy el número de John, mi especialista en informática por si necesita contactar con él para lo que sea que necesite. Después de un rato de conversación regreso a la habitación y me maldigo mil veces por no darme prisa. Myla no está y no me gusta en absoluto el escalofrío que se instala en mi cuerpo. La busco por todo el maldito apartamento y no la encuentro por ningún lado, pensé que estaba en la biblioteca pero no está. Vuelvo al dormitorio y me percato de que su bolso no está. Voy en busca de mi teléfono y encuentro una nota debajo de él: "Lo siento Khris, esto es lo mejor para los dos".

-¡Maldita sea! - llamo a su teléfono pero me salta al mensaje de voz - ¡Joder! - me siento en el borde de la cama y me halo por los pelos.

Respiro profundo varias veces para aclarar mi mente, necesito pensar. Sólo me he tardado unos veinte minutos en mi oficina, ¿qué tan lejos podría estar?. Piensa, Khris, piensa. No quiero llamar a ninguno de sus hermanos hasta que agote todas mis posibilidades de encontrarla. Ya está oscuro afuera, así que me pongo en movimiento. Lo primero que pienso en hacer es ir al piso de Alexie y ver si se encuentra allí, pero no está. Voy al estacionamiento, pero su auto sigue allí, así que me regresó a la recepción del edificio y pregunto si la han visto salir: "Sí, Sr.Becker, tomó un taxi hace unos quince minutos aproximadamente". Con un demonio, va a matarme de un jodido infarto. Lo próximo que viene a mi mente es la casa que sus padres compraron a las afueras de la cuidad, debe de ir hacia allá, si no, ¿a dónde más podría haber ido? Llego en tiempo récord y abro con la llave de repuesto que su padre me entregó. Todo está a oscuras. De todos modos reviso la casa rápidamente por si se está escondiendo de mí, pero no está aquí y me estoy empezando a cabrear pero en serio. Salgo de la casa antes de empezar a destrozar todo lo que encuentre a mi paso. Al llegar a mi camioneta llamo a John, mi especialista en informática.

- Sr.Becker, ¿en qu...

- ¡Busca a Myla, no me importa lo que tengas que hacer encuéntarla, pero ya! ¡Su maldito teléfono está apagado y no tiene su auto, tomó un taxi. Por lo tanto, el dispositivo de rastreo de su teléfono ni el de su coche nos sirven!¡Rastrea, hackea, viola la ley, no me importa lo que tengas que hacer!¡Encuéntrala!

- Enseguida señor.

Myla no lo sabe, pero le instalé un dispositivo de rastreo a su auto y a su teléfono. Si lo supiese me habría cortado los huevos. Pero de todos modos, no me han servido de nada, joder. Sigo pensando en los lugares en los que podría estar, pero no me viene ninguno a la mente hasta que recuerdo la pista de patinaje. Me dirijo hacia allá, pero no hay nadie. La pista se encuentra a oscuras. Media hora más tarde, cuando siento que voy a perder mi maldita cabeza, recibo la llamada de John.

- ¡Escupe!

- Señor, ella ha utilizado su tarjeta de crédito ... ella ha abordado un avión con destino a Italia hace un hora.

-¡¿Qué?! ¡¿Acaso me estás jodiendo?!

- Jamás lo intentaría, señor.

-¡Mierda! ¡Llama a Claudio y dile que prepare el jet ahora mismo, maldita sea!

- Lo que usted ordene, señor.

Joder y mil veces joder. Han pasado casi dos horas desde que abordó el avión. Y el jodido Claudio no se encuentra en la jodida ciudad. Dice que llegará cómo máximo en cuatro horas. A eso hay que sumarle aproximadamente una hora y media de la inspección del jet y el plan de vuelo. Mientras más lo pienso más creo fervientemente que moriré de un jodido infarto a mis veintisiete. Pero no tengo más remedio que esperar, así que me regreso al apartamento para preparar mi maleta. Al menos sé que se dirige a casa de sus padres y allí estará segura. Ya han pasado ocho horas desde que Myla abordó cuando por fin logramos abordar nosotros. Antes de levantar el vuelo, recibo un mensaje de Jean: "Myla acaba de llegar...¿¿¿¿qué carajos pasó???? Le respondo: "Estoy a punto de despegar, hablaremos en unas horas". Eso es todo y activo el modo de avión de mí teléfono. Me voy hacia la cabina privada para intentar dormir un poco. Me esperan unas horas espantosas.

POV MYLA
Sábado.....

Por fin he llegado a casa de mis padres. Es la mañana del sábado y mis padres y Jean están un poco tensos. Mis hermanos mayores no tardaron en llegar con sus esposas e hijos y hay casa llena. Luego del desayuno empezarán con los preparativos para la comida familiar, como de costumbre en mi familia todos los sábados. La reunión consiste en comer y beber hasta quedar en coma por intoxicación. Hace mucho que no estoy en una de estas reuniones y ni siquiera lo recordaba cuando tuve el impulso de subirme a ese avión. No he parado de pensar en Khris. Debe de estar destrozado y muy, muy molesto. Soy una maldita perra, lo sé. Pero no pude parar de pensar en las consecuencias de que Erik me encontrara. Si ha visto todo lo que se ha publicado de mí, pensará que estoy en Nueva York, jamás pensará que estoy de vuelta en Italia y por lo tanto no me encontrará. No quiero que cuando se revuelque la mierda Khris termine salpicado. Es una figura pública y no sé las repercusiones que pueda tener en su imagen y su empresa el que se pueda saber la verdad sobre mí en algún momento.

-¿Dónde está Khris? - pregunta Junior sacándome de mis pensamientos.

- Eh, yo... yo he venido sola.

-¿Por qué? - me mira entrecerrando los ojos.

- Él tenía mucho trabajo, no podía acompañarme.

- Dios, eres una vil mentirosa, Myla. No sabes mentir y lo sabes perfectamente - la voz de Junior es severa y todos me miran . No dicen nada y lo dejan estar. Terminamos el desayuno y los hombres se van al patio trasero a preparar las carpas. Yo me quedo en la cocina ayudando a mi madre. Al poco rato mis cuñadas también salen al patio.

-¿Está todo bien cariño? - suspiro.

- No mamá, no lo está. Lo he abandonado.

-¡Oh, cariño!¿Pero que ha pasado?

- Es todo mamá. Es la prensa, las fotografías, los videos, Allan, Erik...

-¿Allan, Erik? - oh, oh.

-¿No lo sabías, mamá?

- Sabía lo de Erik, por supuesto.¿Pero qué está pasando con Allan?

- Se apareció por Nueva York y me estaba molestando. Pero mis hermanos y Khris lo pusieron en su lugar y la última vez que lo vi me pidió disculpas y me dijo que me cuidara de Erik.

- Santo cielo, está pesadilla no acaba.

- Por eso estoy aquí. No quiero que todo esto salpique a Khris. Si Erik me encontraba estando allá o si esas fotos llegan a ver la luz del día, o ese video, pueden perjudicar la imagen de Khris y a su empresa y él no se merece eso mamá. No quiero hacerle daño. Él es un buen hombre. Se merece a alguien mejor que yo.

- No va a haber nadie mejor que tú para él, Myla. Él te ha escogido a tí. Y estoy totalmente convencida de que es un buen hombre y te quiere - y le creo.

Mi madre tiene un don espeluznante. Puede leer a las personas, ver en su interior. Si dejas que sostenga la palma de tu mano derecha entre las de ellas, te conviertes en un libro abierto. Y lo digo totalmente en serio. Dejamos la conversación y nos ponemos con los preparativos de la comida. Después de varias horas, comienzan a llegar mis familiares que hacía mucho no veía. Todos me dicen lo contentos que están de verme después de tanto tiempo y comentan sobre lo bien que me veo junto a Khris y la bonita pareja que hacemos. Estoy con mis primas enfrascada en una conversación y ya está oscureciendo. De repente veo que se quedan mudas y  miran a mis espaldas. Se me erizan todos los vellos del cuerpo de repente y le pido a Dios que no sea lo que me imagino, pero supongo que sí lo es a medida que veo los ojos de mis primas ponerse como platos. Me volteo y lo veo caminando hacia mí con paso decidido, como un tigre a punto de agarrar a su presa y en un segundo mi mundo se viene abajo. Vuelvo a darle la espalda nerviosa antes de que llegue a mí y mis primas empiezan a hacerme señas para que vuelva a voltearme hacia él.

- Myla - su voz retumba a mis espaldas y siento escalofríos. Tengo miedo de voltearme y verle la cara, pero cuando me agarra del codo suavemente y me voltea no me queda más remedio que hacerlo. Lo miro y veo cansancio... Y dolor. Se le ve agotado y tiene ojeras. Le he hecho pasar un infierno a este pobre hombre que lo único que ha hecho es adorarme y me odio por eso. Me escuecen los ojos y estoy a punto de llorar.

- Khris, estás aquí, viniste por mí  - le digo, aunque es la cosa más obvia del mundo.

- Cielo, por supuesto que he venido por tí, ¿a dónde más iba a ir sino a dónde tú estés? - oigo a mis primas suspirar y luego jadear de asombro cuando Khris toma mi rostro en sus manos y me besa con ganas. Mis piernas se vuelven gelatina y él me abraza fuerte. Me suelta y pega su frente a la mía.

- Khris, tenemos que hablar - lo miro y tiene el ceño fruncido, como si no le fuese a gustar lo que voy a decirle y tiene razón, no le va gustar. Pero llegó el momento de hacerlo.

Lo tomo de la mano y comienzo a caminar, pero me detengo de inmediato cuando veo a toda mi familia mirándonos muy atentos, así que me aclaro la garganta y lo presento cortésmente.

- Famiglia, él es Khris. Khris, te presento a mi Famiglia - Khris  levanta una mano en modo de saludo y todos lo saludan de vuelta. Mi madre se acerca y lo abraza.

- Hijo, me alegra verte de nuevo.

- Igualmente.

- Mamá, tenemos que hablar. Estaremos en mi habitación - mi madre sonríe con tristeza y asiente con la cabeza.

También sabe que es el momento de hablar, es inevitable. Vuelvo a tomarle de la mano y entramos a la casa. Cruzamos la sala de estar y subimos las escaleras hacia el segundo nivel. La casa es grande, rústica. En el interior parece como si fuera una cabaña gigante con techos de madera de pino. Cruzamos todo el pasillo hasta el final. Abro una puerta y subimos unos pocos escalones más. Mi habitación es un anexo a la casa. Solía dormir en una de las cinco  habitaciones regulares de la casa, pero después de lo sucedido quise aislarme y mi padre mandó a construir mi habitación. Es prácticamente como un tercer piso. Frente a mi cama hay un enorme cristal por el cuál miraba al cielo nocturno hasta quedarme dormida. Este es mi santuario, casi nadie entra aquí, mucho menos sin ser invitado. Respetan mi privacidad. Khris observa mi habitación, pero no dice nada. Luego de varios minutos viendo a través del cristal rompe el silencio.

-¿Por qué te fuiste? - se voltea para mirarme. Puedo ver el dolor en sus ojos - ¿Por qué me sigues haciendo esto, por qué sigues huyendo de mí? ¿Cómo se supone que voy a cuidar de tí y protegerte cuando no me lo permites?

- Khris, yo... - estoy temblando y siento unas ganas terribles de llorar. Estoy muy nerviosa, pero tengo que hacerlo - Khris, necesito contarte lo que me sucedió y necesito que por favor me escuches con suma atención. Si decides marcharte y no volverme a ver nunca más una vez termine, lo entenderé. Pero necesito que me escuches hasta el final - frunce el ceño severamente y entrecierra sus ojos.

- Está bien, te escucho - dice cauteloso.

- Bien - mi voz es temblorosa igual que todo mi cuerpo. No podía controlar los temblores y casi no podía respirar por el llanto - No hay manera de suavizar esto, así que simplemente lo diré - lo miré fijamente para ver su reacción. Ladeó su cabeza a la espera de lo que iba a decir. Respiré profundamente y lo dije - Fui violada cuando tenía dieciséis años - se hechó hacia atrás bruscamente cómo si hubiese recibido un puñetazo. Su expresión se convierte en una de horror y niega con la cabeza.

- No, eso no puede ser posible. ¿De qué demonios estás hablando? Myla, ¿cómo puede ser eso posible? ¡Yo rompí tu carne, yo sentí cómo rompía tú virginidad, por el amor de Dios! - cierro los ojos con fuerza.

- Khris, por favor escúchame, eso te lo voy a explicar - su pecho sube y baja frenéticamente y ha enterrado sus manos en su cabello - Esto es muy doloroso para mí, pero quiero que sepas toda la verdad por mí. No quiero que te enteres por otra persona. Por favor escúchame - se sienta de golpe en el borde de la cama, dejándose caer con todo el peso de su cuerpo - Su nombre era Jacob. Estudiamos en un colegio privado para personas económicamente privilegiadas. Lo conocí cuando estaba a mediados de mi primer año de preparatoria, él estaba en su último año. Su padre era el superior de mí padre y de Junior en la marina. Nos vimos en varias actividades de nuestros padres. Empezó a acercarse a mí de la nada y cada vez mostraba más interés por mí hasta que un día me dijo que le gustaba. Empezamos a llamarnos y a salir. A mis padres no les agradaba ni a mis hermanos. Salimos unas cuántas veces y todo fue de maravilla. Me decía que estaba enamorado de mí, que era muy hermosa. Yo en ese momento era muy tímida y me sonrojaba con ese tipo de comentarios. Una vez me dijo que se moría por hacerme el amor, pero yo le dije que no estaba preparada. Me dijo que iba a esperar a que lo estuviera. Un día hablando con mis amigas, me recomendaron que le practicara sexo oral para mantenerlo contento hasta que estuviera preparada, así él no buscaría acostarse con otras. Lo consideré y un día le ofrecí hacerlo, aunque no tenía experiencia. Lo hicimos un día que salimos, pero tan pronto como empecé me agarró la cabeza y me empezó a penetrar la boca con brusquedad hasta que me hizo vomitar. Nunca lo había hecho antes, no sabía cómo hacerlo. Se disculpó y dijo que pensaba que lo había hecho anteriormente debido a que fui yo quién se ofreció. Después de eso lo intentamos varias veces más, pero siempre sucedía lo mismo. Y cada vez que sucedía se enojaba y me decía que era increíble que fuera tan hermosa y que no sirviera ni para una mamada - su mirada se endurece y supongo que está recordando lo que le dije la primera vez que le practiqué sexo oral en la ducha - Sí, por eso te pedí ese día que no sujetaras mí cabeza y también te dije que no servía ni para dar una mamada. También solía enterrar su cara en mi cuello para olerme porque le gustaba mi olor, pero después de un tiempo empezó a decirme que le encantaba mi olor porque era similar al de las putas cuando estaban muy calientes. Luego dijo que ese olor estaba tan impregnado en mi piel que me hacía una mujer tan sucia como una prostituta - respiro profundo para calmarme, aún sigo llorando - Por eso me incomoda cuando me hueles y me dices que te encanta mi olor, es doloroso escucharlo aunque sé que para tí no significa lo mismo. De ahí mí trastorno de bañarme cada dos por tres, sólo trato de quitarme el olor de encima - me mira con dolor.

- Myla...

- No, por favor, déjame contarte todo ahora que puedo. Luego podrás juzgarme y decirme lo que quieras.

- No voy a.... - levanto la mano y se calla de inmediato. Asiente con la cabeza.

- En fin, siempre estaba con sus amigos. Para el día de su baile de graduación, me pidió que lo acompañara y lo hice. Mis hermanos me pidieron que tuviera mucho cuidado porque no confiaban en él, y yo nunca les dije lo mal que me estaba tratando. Ese día estaba tomando demasiado junto con sus amigos y se drogaron. Luego de unas horas me llevó fuera del salón de baile y me dijo que quería llevarme a un motel y le dije que no. Me dijo que no fuera aguafiestas, que eso era lo que hacían todas las parejas la noche de su baile de graduación. Cuando volví a negarme... me dio una fuerte cachetada y me dijo que no me lo estaba preguntando. La cachetada fue tan fuerte que me dejó mareada y casi no me di cuenta cuando me sacaba a rastras del lugar junto con su amigo Erik - levanta la cabeza de golpe para mirarme - El mismo Erik que acaba de salir de la cárcel - digo con ironía. Respiro profundamente por un momento y continúo. - Me llevaron hasta un granero que había cerca de la recepción del baile y.... - estallo en llanto y él se levanta de inmediato y viene hacia mí - ¡No, no te acerques! Quédate sentado y por favor sólo escucha - vuelve a sentarse y  veo como reprime las ganas de venir a mí y consolarme. Tiene la mandíbula apretada y los puños cerrados. Asiente para que continúe. Tomo varias bocanadas de aire - Me llevaron a ese sucio y asqueroso granero. Me tiraron al suelo. Jacob se lanzó sobre mí y comenzó a levantarme el vestido. Empecé a forcejear y a gritar. Le suplicaba que me dejara en paz, que no me hiciera daño, pero no le importó. Rompió mi vestido en la parte superior y dejó mis pechos expuestos, mientras levantó la parte inferior y destrozó mis pantys. Seguí forcejeando en todo momento y gritando y él trataba de agarrar mis manos para inmovilizarme. Se quito sus pantalones pero no consiguió una erección debido a lo borracho y drogado que estaba - inhalo fuertemente por la nariz - Se puso furioso porque no conseguía una erección y comenzó a gritarme que me quedara quieta. No lo hice, así que me propinó varios puñetazos en mi pómulo izquierdo. Dolía horrores. Podía ver y oler la sangre. Estaba casi inconsciente, pero pude sentir cuando Jacob se levantó de encima de mí. También podía ver cómo Erik lo grababa todo con su teléfono y podía escuchar su risa. Cuando Jacob regresó un momento después, me dijo que me iba a dar lo que tanto andaba buscando, me separó las piernas con fuerza y cuando traté de impedirle que llegara entre mis piernas, introdujo algo enorme en mi vagina de golpe y....

- Myla, por favor detente, te lo suplico - su ojos estaban llenos de dolor.

- No. Necesito que lo escuches todo - cerró los ojos con fuerza y se agarro la cabeza con ambas manos - En fin, solté un grito que me dejó la garganta en carne viva. El dolor fue espantoso, fue horrible. Sacó e introdujo el objeto unas dos veces más y agraciadamente me desmayé por el dolor. Cuando desperté en el hospital casi dos meses después gracias a un coma inducido, me enteré con detalle del resto de lo acontecido.... fui violada con un objeto contundente del cuál nunca quise saber, fui golpeada tan fuerte que el hueso de mí pómulo izquierdo fue triturado y reemplazado por una pequeña placa de metal, me tuvieron que inducir un coma para poder combatir una terrible infección en mi sistema reproductor el cuál fue provocado por el objeto que utilizó para violarme ya que estaba lleno de estiércol y encima de eso me hizo perder casi todo mi sistema reproductivo. Ah y casi lo olvido, también me entero de que el cirujano tuvo la amabilidad de reconstruir mi himen para que pudiera tener la experiencia de perder la virginidad de una forma "normal" cuando me casara. Todo esto sin consultarlo con mis padres, por cierto. Todo esto porque un imbécil le puso el precio de diez mil dólares a la virginidad de la chica más hermosa del colegio, todo por una jodida apuesta - Khris no dice nada, sólo escucho silencio. Cuando logro aclarar las lágrimas de mis ojos, lo veo caminando hacia mí. Su expresión está en blanco, como si hubiese visto un fantasma. Se detiene frente a mí y veo lágrimas en sus hermosos ojos azules.

- Cielo... - me acaricia el rostro y me envuelve en un abrazo de oso. Su enorme cuerpo duro envuelve el mío. De repente su cuerpo comienza a temblar.

- ¿Khris? - se empiezan a escuchar sus sollozos. Santo Dios, está llorando.

- Myla, cielo,¿por qué no lo dijiste antes? - dice entre sollozos.

- Porque no encontraba el valor para hacerlo. Nunca pensé que llegaríamos a tener algo cómo esto y me daba terror - poco a poco se va arrodilllando en el suelo y me lleva consigo hasta que estamos arrodillados uno al frente del otro. Miro su rostro cubierto de lágrimas. Nunca pensé ver a este hombre robusto, fuerte y dominante de ésta forma por mí, sufriendo y vulnerable. Frágil. Limpio las lágrimas de su rostro.

- Dios, Myla. ¿Te das cuenta de la magnitud de mi metida de pata? Te he hecho cosas que nunca debería haberte hecho. He sido un bruto y un animal contigo. Por Dios,¡te he esposado a mi jodida cama, Myla! Cristo, no tienes idea del asco que siento en estos momentos - me hecho hacia atrás de golpe. Eso se sintió como un puñetazo en mi estómago - Cielo, no. Me refiero a que siento asco de mí mismo por como te he tratado. Jamás sentiría asco por tí, jamás - baja la cabeza. Tomo su cara entre mis manos y lo obligo a mirarme.

- Khris, contigo todo ha sido diferente. Para serte sincera, no has hecho nada que no quisiera que me hicieras. Desde que te vi la primera vez me has hecho sentir cosas, me has hecho sentir... cosas que jamás pensé iba a desear de un hombre. Me has hecho querer ser tocada cuando nunca he querido ser tocada por nadie. Me has hecho sentir adorada y querida. Me has hecho sentir que te interesa algo más que mi cuerpo. Nunca me has hecho sentir sucia o como una puta - resopla.

- Creo haberte dicho una vez que querías que sacara la puta que llevabas dentro y eso me convierte en algo parecido a ese cabrón.

-¡Por Dios, Khris, no digas eso, nunca jamás! Tengo que admitir que tienes una forma única de decir las cosas y eres estúpidamente dominante, pero nunca me has hecho sentir como sino valiera nada y eso te lo agradezco inmensamente. Me has hecho sentir más que una cara bonita.

- Oh, Myla. Por supuesto que eres más que una cara bonita. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, cielo. Nunca lo dudes - acaricia mi mejilla y mira mis labios, pero no hace ningún movimiento para besarme.


POV KHRIS

Me muero por besarla pero no creo que sea lo más apropiado en estos momentos. Ella me mira a los ojos y me besa tomando mis rostro en sus manos. El beso es tierno y me calienta el cuerpo. Quiero agarrarla y arrancarle la ropa, pero no después de lo que acaba de confesar. No puedo hacerle eso, así que me alejo. Me mira confundida.

- Cielo, no creo que sea un buen momento - se hecha hacia atrás cohibida - Cielo, no me malinterpretes. No hay cosa que quiera más que desnudarte y hundirme dentro de tí ahora mismo. Pero no quiero abrumarte más de lo que estás - no me presta atención y vuelve a besarme, con más ganas ésta vez.

Se detiene y se pone de pie. Me extiende su pequeña mano. La miro confundido, pero la tomo y me levanto del suelo. Me empuja hasta que mis piernas chocan con la cama. Me quita la chaqueta. Mete sus manos dentro de mi camiseta y las sube hasta quitármela. Abro la boca para hablar, pero me callo cuando vuelve a besarme. Lleva sandalias de tacón alto, por lo que está más a mi altura. Abandona mi boca y sigue con mi mandíbula, luego pasa su lengua caliente por mí clavícula. Aprieto los dientes y la agarro del cabello.

- No, déjame hacerlo. Quiero ser yo quién te haga el amor. Quiero enseñarte lo que me haces sentir.

- Oh, mierda, cielo - aflojo mis manos de su cabello y la dejo hacer lo que quiera.

Es la cosa más caliente que me ha dicho una mujer en mi vida. Pasa sus manos por mis brazos, mi pecho y mi abdomen. Su boca sigue los rastros de sus manos. Mi respiración se vuelve cada vez más pesada. Lleva sus manos a mi cinturón. Lo desabrocha y baja la cremallera. Cuando su lengua llega a la V de mi abdomen, siento la urgencia de agarrar su cabello nuevamente entre mis manos y tirar de él, y lo hago. Ella gime.

- Mierda vas a hacer que me corra en mis pantalones como un jodido adolescente - le suelto el cabello y se arrodilla en el suelo.

Me quita los zapatos y los calcetines. Sigue con mis pantalones y mis boxers. Se arrodilla y me mira a los ojos mientras lleva mi polla hinchada a su boca. La chupa con lentitud y suavidad y creo que no voy a durar mucho. Su pequeña mano sigue hacia arriba y hacia abajo por mi tronco y su boca sigue succionando mi glande. Sus suaves gemidos están llevándome al límite. Su mano libre entra bajo su vestido y comienza a tocarse. Es una visión jodidamente caliente. Sus gemidos son más fuertes a medida que se acerca al orgasmo y una vez explota, yo hago lo mismo en su boca. Ella lleva mi polla hasta su garganta y exprime hasta la última gota. Saca mi polla de su boca y se relame los labios. Se levanta y me empuja hasta quedar sentado y acomodado en el cabezal de la cama. Se queda de pie y comienza a desvestirse lentamente y la vista es cada vez mejor. Una vez está totalmente desnuda, llega a la cama y se sienta a horcajadas sobre mí. Comienza a besarme nuevamente y sigue su camino hacia mi cuello y mi clavícula. La agarro de las caderas, pero ella quita mis manos y las baja hasta la cama, indicándome que no las mueva. Esto es una puñetera tortura. Quiero tocarla, apretar sus tetas. Se estruja contra mi polla y gime. Gracias a Dios tengo una gran resistencia y mi polla sigue dura como el acero. Apoya una de sus manos en mi abdomen para levantarse y hacerse balance y con la otra agarra mi polla y la lleva hasta su húmedo coño. Comienza a bajar un poco sobre ella y un gemido desgarrado sale de su garganta. Quiero inmobilizarla y entrar en ella de golpe, pero me abstengo. Ella quiere hacerlo, quiere demostrarme lo que le hago sentir, así que no intervengo. La cabeza de mi polla ya está dentro, pero es tan pequeña y apretada que le cuesta dejarse caer sobre mi polla. Sube y baja poco a poco tratando de acomodarme dentro de ella. Cuando ya me he adentrado lo suficiente se deja caer de golpe. Mi gruñido es animal, salvaje. Su grito es tortuoso. Estoy hasta la empuñadura dentro de ella y siento que estoy empujando más allá de dónde su cuerpo fisiológicamente permite. Su coño me exprime.

-¡Mierda, cielo! ¿Estás bien? - ella asiente y baja su boca hasta la mía.

Me besa con pasión y comienza a subir y bajar sobre mi polla lentamente. Es como si le estuviera haciendo el amor a mi boca y a mi polla a la misma vez y que me jodan mil veces, pero nunca había experimentado tanto placer en mi vida.  Ni siquiera juntando todas las folladas que he hecho antes de conocerla, y han sido muchas. Empieza a incrementar la velocidad dejándose caer de golpe sobre mi polla. Mañana estará muy dolorida, pero no parece importarle en estos  momentos. Deja de besarme y presiona sus manos en mi abdomen para impulsarse más rápidamente hasta que comienza a gritar y su coño comienza a contraerse. Los dos explotamos a la misma vez y es el jodido paraíso. Ella se derrumba sobre mí y le doy la vuelta hasta dejarla debajo de mí cuerpo. Sigo enterrado en ella.

- Vas a matarme un día de estos,¿sabes? - me sonríe perezosamente - Eso fue increíble. Nunca había sentido algo cómo eso. Nunca antes le he permitido a una mujer hacerlo, sólo tú - nos quedamos así acostados uno junto al otro por lo que parece una eternidad. Estamos bañados en sudor y necesitamos una ducha, pero no quiero moverme de aquí. Mi cabeza está en su pecho. Una de sus manos acaricia mi espalda y la otra está enterrada en mi pelo húmedo por el sudor. Es muy relajante. Hasta que vuelve a hablar.

- Aún no he terminado de contarte todo - mi cuerpo se tensa y me apoyo en un codo para poder mirarla.

- Cielo, has hecho un esfuerzo tremendo y ya has dicho demasiado.

- Pero quiero terminar - asiento para indicarle que prosiga - Según me han explicado, fui rescatada por el dueño del granero. Su perro no paraba de ladrar y al ver las luces de un auto estacionado frente al granero desde su casa que estaba un poco apartada, decidió llamar a la policía. Mi padre y mis hermanos entraron en cólera cuando recibieron la llamada y mi madre estaba destrozada. Jean se fue en la ambulancia conmigo. Eddy se quedó con mi madre. Pero mi padre y Junior se quedaron en la escena. Jacob y Erik estaban esposados y dentro de una patrulla cuando ellos llegaron, pero cuando los padres de estos llegaron, mi padre y Junior descargaron toda su rabia y su impotencia sobre ellos. El padre de Jacob tenía uno de los rangos más altos en la Marina, así que todo el proceso judicial fue llevado por la Marina ya que Jacob también había enlistado para ingresar tan pronto se graduara. El caso es que todo quedó confidencial y como fueron captados en el acto no hubo ninguna divulgación del video. Tampoco lo hay de las fotos que me tomaron en la escena ni en el hospital, pero siempre he temido que algún día puedan ser difundidas. Nada de esa evidencia salió a la luz pública, pero sí los rumores de lo sucedido. Al día siguiente, cuando el alcohol y las drogas había dejado de hacer efecto y se despertaron en la cárcel, aseguraron que no sabían lo que habían hecho. Cuando las fotos y el video les fueron enseñados, no pararon de suplicar, incluso lloraban. Recibí diez millones de dólares por los daños sufridos, pero los doné. Era dinero sucio en lo que a mí respectaba y no iban a reparar el daño causado. Nada podría repararlo nunca. ¿Sabes? Fue horrible estar en boca de todos. Ser el tema de conversación y entretenimiento de muchos. Por eso con el tiempo me alejé de mi familia. Para que ellos también tuvieran un poco de paz. Cada año que pasaba era más doloroso para mí. Cada vez que se acercaba esa fecha, me costaba mantener la cordura. Me aferré al dolor de cierta forma. El dolor físico temporero me hacía olvidar el dolor que sentía dentro, aunque fuera sólo por un rato. Mi terapeuta decía que había desarrollado un trastorno por lo sucedido lo cuál me hacía dependiente del dolor. Algo así cómo que desarrollé necesidad por el dolor. Por eso los tatuajes. Cuando necesitaba experimentar un poco de dolor, el dolor moderado de los tatuajes ayudaba, aunque tengo que admitir que a veces necesitaba algo más. Muchas veces llegué a enterrarme alfileres debajo de las uñas y eso sí que era doloroso.

- Cristo, Myla - se me ha erizado la piel - Sabes que ya no necesitas nada de eso, me tienes a mí. Para darte lo que necesites. Y para mí saber esto no cambia nada. Igualmente te quiero conmigo. Para mí es cómo sí realmente hubieses sido virgen cuando te tomé la primera vez. Eso no va a cambiar nunca. Y por favor, nunca más vuelvas a pensar que podría sentir asco por tí u odiarte por lo que te ha sucedido. No ha sido tu culpa. Tú no hiciste nada malo - las lágrimas salen de sus ojos, pero está calmada, aliviada.

- Gracias por escucharme y por no juzgarme.

-¿Cómo podría hacerlo,cielo? - bajo mi mano y acaricio la línea fina que está oculta bajo el tatuaje que llega casi a su pelvis - Llegué a pensar que se trataba de una cesárea.

- ¡Dios, no! Gracias a Dios no llegó tan lejos la situación. Eso sí que hubiese sido devastador para mí - se queda pensativa - Tú madre lo sabe. Acerca de mi sistema reproductivo. Lo supo con el sonograma que me hizo cuando estuve en el hospital. Pero le pedí que no te dijera nada. Lo siento.

- Eso ya no importa, cielo. Entiendo tus motivos para no querer que lo supiera. Ahora bien, necesito que me dejes cuidarte. Así que,¿sabes que es lo que quiere el tal Erik?

- Me pidió disculpas profusamente durante todo el juicio. Pero nunca le dije que lo perdonaría. No sé si quiere disculparse nuevamente o vengarse de mí por no haberlo perdonado. Realmente no sé qué es lo que quiere.

-¿Y Jacob?¿Está realmente muerto? - algo en ella cambia. Vuelve a asentir pero voltea su cara para no mirarme - Hey... está bien. Ya ha sido suficiente. No hablemos más de esto por ésta noche,¿de acuerdo? - de repente un jodida enorme bola de pelos salta a la cama casi sobre nosotros y me toma por sorpresa - ¡Joder! - Myla estalla en risas mientras la bola de pelos lame su cara. Es un jodido gato. Enorme y peludo y muy hermoso.

- Hola pequeño.

-¿Pequeño? Joder,¿con qué demonios lo alimentas? - ella se ríe y lo acaricia con amor.

- Con comida para gatos. Y algunas veces carne cruda para fortalecer su pelaje. Es un Maincoon. Así que su tamaño y su peso son normales. Actualmente pesa veinticinco libras.

- Demonios - la bola de pelos se acerca a mi cara y comienza a lamerme. Su lengua es áspera como papel de lija. Alejo mi cara.

- No te alejes. El hecho de que te lama significa que está cuidando de tí. Te está acicalando. Es un gesto de afecto y significa que le agradas.

-¿Enserio?

- Ujum. Te sorprendería todo lo que puedes aprender de un gato - me cuenta acerca de que los gatos te marcan como su propiedad, o sea, ellos se convierten en tu amo no viceversa, como pestañear lentamente signifa un beso y mil cosas más. Pero algo está rondando mi cabeza.

- Quiero que regreses a casa conmigo. No voy a irme sin tí - me observa por un momento.

-¿Estás seguro?

- Por supuesto que lo estoy. ¿Por qué otra razón estaría aquí ahora mismo? Por cierto, espero que nadie nos haya escuchado. No quiero que tu familia me persiga con un cuchillo para cortar mi polla por no haber respetado la casa de tus padres.

-¡Oh, créeme! Si nos hubieran escuchado estarían celebrando. Pero tranquilo, aquí no se escucha ni siquiera cuando están dentro de la casa gritando.

- Bueno en ese caso, creo que podríamos tener otra ronda - digo con una mirada lasciva.

- No creo que sea apropiado para los ojos y oídos de London. Ya ha escuchado suficiente - dice sonriente señalando a su gato.

-¿Ducha? - señala una puerta la cuál supongo es el baño.

La tomo en brazos y la llevo hacía la ducha. Tiene una bañera, pero ya es tarde y verdaderamente necesito tener unas horas de sueño decentes, pero eso será después de que pasemos un buen rato en la ducha. Así que nos ensuciamos un poco más, nos limpiamos y luego volvemos a la cama.

Continua a leggere

Ti piacerà anche

797K 38.4K 45
Lo mire a los ojos y supe en ese mismo instante.... que ya nada seria igual. Me tenía en sus manos sin yo saberlo y a su vez todo el paraíso se encon...
45.8K 3.6K 72
Belén Saavedra no creía que su amor por Adrián Lee fuese correspondido, después de todo ella era solo una chica diminuta, débil mientras él era parte...
885K 98.6K 35
La venganza puede ser un objetivo, pero nunca será un final. Elsa vio en la venganza una salida a su resentimiento, acabar con aquellos que se llevar...
123K 9.2K 27
Hazel, una chica que es famosa en la escuela por agarrar a patadas a todos y ser muy extrovertida y Noah, la chica mas popular de toda la escuela, a...