5.0.5
Hoy en particular me sentía muy triste.
Recuerdo perfectamente que hoy es el cumpleaños de Flug. Se supone que me levantaria temprano para prepararle un pequeño pastel.
Aunque no estuviera en su cuarto. No dude en levantarme temprano para hacer el pastel.
Lo hice de vainilla con chocolate. Sus dos sabores preferidos y puse una pequeña vela para adornar.
Cómo me gustaría volver a verlo, mi mejor amigo.
Largas búsquedas con Demencia y aún así no hemos podido encontrarlo.
Primero en esta ciudad, luego de asegurarnos que no estaba en esta, buscamos en la ciudades vecinas.
Recuerdo que Black empezó a contactar a amigos suyos para que lo ayudarán.
Parti el pastel y tome una pequeña rebanada en un plato.
—¡Ten Flug! Feliz cumpleaños, espero que te guste. Lo hice con todo el cariño del mundo, para que levantes tu ánimo de todos los constantes regaños de Black y de las travesuras que te hace Demencia.
Si, el estaba conmigo. Lo sabía por qué un día me dijo que nunca se separaría de mi y yo confío mucho en sus palabras. El nunca miente.
—Esta bien, está bien, no voy a obligarte a que le des una mordida, si no quieres no me meteré en esos asuntos.
Ya 6 meses buscándolo sin nada de nada, una pista, una señal, el mínimo rastro. Flug había desaparecido.
—¿Te gustó?
Escuche unos pasos acercándose.
—Nada como un buen desayuno...— Demencia entro a la cocina.
—5.0.5 ¿Qué haces aquí?
Me puse muy nervioso —Emmm, yo... Hice un pastel.— lo mostré.
—¿Un pastel? ¿Para que?
Muchas preguntas, estaba perdido.
—¿Para mí?
Demencia lo medito —Pues no es tu cumpleaños, así que... ¡Espera! Hoy sí que era cumpleaños de alguien ¿No?.
Asentí un poco triste.
—El cumpleaños de Flug— continuó —Por eso hiciste ese pastel ¿Cierto?.
—Si, me gusta pensar que él sigue aquí con nosotros.
Demencia río ligeramente —No lo digas de esa forma. Suena espeluznante, como si ya estuviera muerto.
Flug muerto. Nunca lo soportaria.
—No, el no está muerto, solo está desaparecido y lo encontraremos— mi preocupación era evidente —Nosotros lo encontraremos pronto, yo...
—Tranquilo oso— Demencia puso su brazo sobre mi espalda —Claro que no está muerto. El es demasiado listillo como para morir, eso sí que no es para nada probable.
Si, ella tiene razón.
—Y bueno— agrego —Tu no puedes comer pastel.
Negué rotundamente.
—Y este pastel no se puede comer solo.
—Pues no— concorde con ella.
Demencia fijo su mirada en mí.
—Si sabes a qué me estoy refiriendo con todo esto ¿Verdad?— la chica se me acercó a un punto demasiado incómodo.
—¡Si!— respondí —A que debemos de salir a buscar a Flug y dárselo para felicitarlo.
Demencia frunció el ceño.
—No tonto— rápidamente, busco una cuchara y tomo una buena parte del pastel para comérselo.
—Oye, Ese pastel era de Flug.
—Pero Flug no está aquí.
—Se lo podíamos guardar.
—¿Y si se echaba a perder?— Demencia siguió comiendo del pastel —A el seguramente no le agradaría que su pastel se quedará sin que nadie lo degustará ¿O si? Recuerda que el es muy compartido.
Oh! Por supuesto, a el seguramente no le gustaría que el pastel se desperdiciará de esa forma.
—Bueno Demencia, puedes comer pero solo un pequeño pedazo, quiero que cuando llegue Flug, el pastel...
Demencia tenía lo boca sucia y completamente llena. Se lo había acabado todo sin dejar la mínima migaja.
—Creo que me avisaste un poco tarde.
Yo suspire.
—Ya no importa, igual el no está aquí— baje la mirada.
—¡Oh! Pero 5.0.5— reacciono después de terminar su bocado —No te pongas triste, por favor, solo piénsalo. ¡Se trata de Flug!, En algún momento, por su propia cuenta tiene que venir.
—¿¡En serio!?— esas palabras definitivamente me daban ánimos.
—Si, tú solo espera, que...
—¡Todos en este maldito mundo son unos inútiles, no pueden hacer nada bien, yo tengo que hacerlo todo!— interrumpió Black Hat a Demencia con sus gritos y después salió de la mansión.
El silencio después de aquella escena fue inevitable.
—Otra vez Black está enojado— dije triste.
—¿Bromeas? Siempre está enojado, solo que hay algunos días en los que está un poco más que otros— explicó Demencia.
—¿Cuál crees que sea la razón?
—Seguramente no le han pagado. Ya sabes, cosas de la organización y eso.
Algo me decía que no todo su enojo tenía que ver con cosas de la organización, igual, eso me debe importar un reverendo cacahuate.
Finalmente son cosas de Black Hat y a el no le gusta que se metan en sus cosas.
—Tienes razón.— levanté el recipiente sucio en donde hice el pastel que ahora se resguardaba en el estómago de Demencia, y lo puse en el lava trastes.
—Oye, 5.0.5, ¿Te gustaría jugar conmigo? Ya sabes, para quitarme el aburrimiento.
Eso sonaba divertido, pero sinceramente no tenía ganas de nada. No si en todo momento recordaba que mi amigo podría estar en serios problemas, perdido o secuestrado.
—Me encantaría Demencia, pero, estoy muy cansado. Dormiré otro poco para ver si ahora si recupero mis energías. Si quieres, después de eso ¡Podemos jugar!.
Demencia emitió un sonido de aquejamiento y se cruzó de brazos.
—Esta bien, oso flojo, ve a dormir mientras yo pienso en lo que vamos a jugar.
Di una sonrisa y fui para mi lugar de descanso. Se sentía horrible estar preocupado todo el tiempo. Los insomnios y las pesadillas con Flug se presentaban cada vez con más frecuencia.
Yo solo quería que llegará el dia indicado para poder encontrarlo.
Demencia me contó que el salió por su propia cuenta. Pero yo no creo eso.
Seguramente, con lo cruel que eran con el, lo corrieron por haber echo algo malo. Si Black se atrevió a reemplazarlo descaradamente, es obvio que también se atrevería a correrlo así, sin mucho problema.
Justo como lo hizo con Evan.
Supongo que tengo las pesadillas por qué se que me equivoqué yo también. En el momento en el que Black metió a alguien más a la mansión, debí decirle a Flug.
Pensé que decirle solo traería más consecuencias.
Eran ya las 7 de la mañana. Ahora que lo recuerdo, me había dado cuenta de algo, Black ya no desayuna.
Incluso no estoy seguro de si come o cena. Hace como dos semanas (o tal vez más de un mes) que solo yo soy el que acompaño a Demencia cuando se trata de degustar cosas.
Black se desesperaba con mucha mayor facilidad y sus ataques de irá me daban mucho miedo.
Esa es la razón también de que ya no procuro separarme de Demen. Por el miedo que me causa Black con sus repentinos comportamientos y regaños.
Aún así, se perfectamente que aquel día de la convención no fue precisamente el última día en que vería a mi mejor amigo.
Sé que pronto lo volveré a ver, y cuando pase eso lo abrazaré muy fuerte, y le contaré todo lo que pasó mientras el estuvo afuera.
También le contaré lo mucho que nos hizo falta, como fue que lo buscábamos y como era que terminabamos. Tan cansados que no podíamos ni siquiera dar un paso más.
Pero todo con tal de encontrarlo. Cuando llegue ese día, le pediré perdón por no decirle lo que Black planeaba, lo que oculto audazmente.
Por fin había llegado a mi lugar de descanso, camine y me hize bolita en el rincón donde siempre duermo.
Cerré mis ojos para intentar dormir, pero no podía.
No estaba acostumbrado a forzarme el sueño, nunca lo había intentado. Se sentía raro.
Sabía que solo sería cuestión de tiempo para que lo logrará. Me impresionaba tener que llegar a estos límites para intentar evitar la realidad que estaba viviendo.
No me gustaba en lo absoluto, me aterraba, y así siempre fue, pero estaba Flug para recibirme con un abrazo y con un cordial saludo. Alguien con el que de alguna manera me sentía identificado por qué se perfectamente que Flug tampoco le parecía muy cómodo el ambiente.
Por mucho que los quisiera a todos con todo mi corazón, a Black, a Demencia. Los dos tenían unas actitudes algo groseras y muy malas.
Bueno, creo que eso ahora solo aplicaba a Black, Demencia poco a poco se fue convirtiendo en una gran amiga para mí.
Ya no me asustaba, ni tampoco tiraba basura cuando acababa de barrer la mansión. Y si quiero buscar a Flug, me acompaña hasta que ya no aguantemos mas y a veces cuando tengo muchas pesadillas me cuenta cuentos.
Así hasta quedarme dormido otra vez... Para poder dormir tranquilo... Sin ninguna mala pesadilla...
—5.0.5, deja de preocuparte por mí, yo estoy mucho mejor de lo que te puedas imaginar.
—¿Flug? ¿Acaso eres tú Flug?
—5.0.5, se por todo lo que estás pasando. Pero eres un oso muy fuerte y sé que lo puedes soportar.
—¿Qué haces? ¿Donde estas?
—No puedo decirte 5.0.5, pero si te digo que tus búsquedas serán siempre en vano por qué me encuentro en un lugar inalcanzable por ustedes.
—Pero Flug... Necesito que regreses, y no solo yo, todos necesitamos que regreses.
—tengo que irme. Hasta pronto 5.0.5
—No Flug, espera... Flug...
Flug
—Aun no se acaba aunque me escondas por dolor... Aún me haces falta a donde... A donde quiera que yo voy... Black...
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Holis OwO
El cap tarde pero aquí está jiji.
La única parte donde se muestra el punto de vista del oso uwu.
Demencia, 5.0.5...
Nos leemos el sábado! :D
Bai.