Capítulo 3
-Suéltame imbécil –Espete al tener sus brazos rodeando mi cadera –Si no quieres que…
-¿Si no quiero que? –Susurro en mi oído retándome mientras su lengua lamio mi lóbulo. Mi respiración se entre corto, por lo visto me había excitado –Dime, nena –Susurro de nuevo y esta vez no lamio mi lóbulo, esta vez lo mordió provocando un gemido de placer en mí.
-Suéltame –Dije con voz ronca que jamás había conocido de mí, mientras mi respiración era entre cortada
Bajo su mano hacia mis caderas y me susurro nuevamente.
-Menéalas de nuevo y no dudare en hacerlo contigo aunque seas una nerd –Dijo esto y me soltó. Una parte de mi deseaba tenerlo encima mío en la cama pero otra parte deseaba golpearlo.
Me gire a mirarlo pero este ya se había marchado al baño, por lo visto solo existía uno en la habitación, bravo estúpido destino, ¿Qué más quieres? ¿Qué me meta a bañar con él? Ni loca, a este estúpido le hare la vida imposible.
No tardó mucho en salir del baño, pero esta vez su ropa había desaparecido dejando solamente su bóxer negro que le hacían notar mucho su amigo.
-Deja de mirarlo ¿Quieres? –Dijo esto y se metió a mi cama
-¿Qué te pasa idiota? Esa es mi cama –Respondí molesta
-¿A sí? Pues si no mal recuerdo, está siempre fue mi cama así que te toca dormir en la otra, yo llevo más tiempo aquí –Gruñí y golpee la puerta del baño con fuerza
Cepille mis dientes y coloque mi pijama la cual consistía en una camiseta de manga corta y un short.
Salí del cuarto de baño y me dirigí a mi nueva cama, mientras la acomodaba, nuevamente hablo aquel chico.
-Tus piernas son sexys –Anuncio con voz seductora
-No lo vuelvas a decir si no quieres que te parta la cara –Dije tranquilamente
Se levantó de la cama y se dirigió hacia a mí, pero cuando estuvo detrás mío quise golpearlo pero fue inútil, tomo rápidamente mis dos manos y me dirigió hasta topar con la pared, estaba atada a sus manos.
-¡Suéltame! –Gruñí
-¿Si no que? ¿Me golpearas la cara? –Rió después de cuestionarme, por lo visto sabía que no podía golpearlo ya que tenía sujetas mis manos encima de mi cabeza
-No te tengo miedo –Escupí las palabras
-Ni yo –Dijo esto y acerco sus labios a los míos, muy cerca, demasiado. Podía sentir su respiración fresca -¿Deseas que te bese? –Sonrió de oreja a oreja, sin embargo no respondí –Te ofrezco algo, tengamos un tipo free sin nada formal. No serás mi novia y yo no seré tu novio, viviremos felices y nuestra vida cada uno, pero eso si, como vivimos juntos nadie sabrá que sucede dentro de estas cuatro paredes, claro siempre y los dos tengamos ganas de hacerlo. Prometeremos no decir nada de esto a nadie y ninguno de los dos nos enamoraremos. Ni tú de mí, ni yo de ti. ¿De acuerdo?
Su trato era tentador, era sexy lo admito, pero ¿Y si uno de los dos salía herido? ¿Qué deseaba sacar de todo esto? Claro, sexo. Pero ¿Y si aunque prometamos no enamorarnos nos enamorábamos? ¿Qué pasaría? Quería aceptar, deseaba hacerlo. Sin embargo también temía.
Sé que estos dos capitulos fueron cortos pero fue un maraton de 2 capitulos en un dia (-8 gracias por leer