Discúlpenme, no he tenido mucho tiempo y no he podido responder sus valiosos comentarios, pero lo haré pronto.
Espero les guste el capitulo :3
Anteriormente:
Los zombis tenían bastante fuerza, mis brazos se estaban cansando y por si fuera poco, un tercero apareció por el callejón acercándose a mí.
Sonreí.
No le dije a Maehara que se fuera porque planeara sacrificarme por él, yo no soy Nagisa y no tengo esa clase de pensamientos. ...Yo, le dije que se fuera para que los ayudara y porque quería usar esto como una prueba.
Si tanto trabajo me costaba acabar con unos simples zombis, entonces no tendría oportunidad de cumplir los objetivos que tengo en mente y es claro, que no sería capaz de proteger a Nagisa.
Tenía que hacer esto sin ayuda, si quería tener oportunidad de un futuro.
Mis brazos temblaban y esos asquerosos dientes estaban más cerca de mi rostro.
...Quizás...subestime la situación...
Nagisa pov.
Era muy difícil mantener mi mente intacta. Tenía que repetir en voz baja quien era un enemigo y quien no lo era.
Además Karma estaba enfrentándose solo a esos Zombis y aunque no estábamos tan lejos, me preocupaba. No podía quitar mi mirada de él. Tenía que verificar cada dos segundos el que estuviera bien y es por eso que falle en servirle de apoyo a Isogai.
Cuando Karma me dejo sobre este auto, quería replicarle, pedirle que me dejara ir con él, pero...sabía que solo sería una molestia, no quería ser un estorbo y tuve que contenerme para obedecerlo, después de todo prometí hacerlo...
Mi corazón bombeaba con fuerza, la adrenalina me ayudaba a estar en alerta a pesar de la enorme angustia y frustración que sentía en estos momentos.
Estaba tan concentrado en ver a Karma que para cuando me di cuenta, Isogai ya estaba siendo alejado y acorralado por cuatro Zombis. Uno estaba a punto de morderle un brazo, así que de nuevo tuve que disparar.
Mi puntería no era la ideal, pero ayudaba que la distancia no fuera mucha.
El impacto en mi cuerpo al disparar el arma, era algo doloroso, pero no importaba, no era el momento de preocuparse por ese tipo de cosas.
Cuando dispare para ayudar a Karma mis manos temblaban pero fue más mi deseo de salvarlo que el miedo a fallar.
Termine rápidamente con los Zombis que rodearon el auto donde estaba parado, tres cuchillos en los lugares correctos acabaron con ellos.
Ahora estaba por ayudar a Isogai con los que quedaban pero el grito de Maehara me paralizo.
-¡Karma! -
Solo con escuchar ese nombre me gire aterrado.
Dos de esas cosas lo estaban acorralando y estaban demasiado cerca de él como para que yo les disparara.
Sin pensarlo y con una enorme presión en el pecho, me baje del auto para ir con él.
Corrí para ir con Karma y solo vi como Maehara corría en dirección contraria. Nos cruzamos sin prestarnos demasiada atención.
Un tercer zombie salió de un callejón y se acercaba a Karma.
El correr hacia que mi estómago doliera, y mi angustia solo hacía que mis manos temblaran y me fuera difícil respirar.
Sentí todo mi mundo caerse de nuevo y esta vez no podría recuperarme, si algo le pasaba a Karma...yo no podría recuperarme.
Tenía que ayudarlo y la mejor manera era...liberar sus manos.
Me puse frente a Karma, y con un cuchillo en cada mano, perfore la sien de los Zombis que intentaban morderlo. El sonido de un gruñido a mis espaldas era cada vez más cercano.
-¿¡Nagisa!? -
Escuche que me llamo sorprendido y su rostro demostró una angustia enorme, mientras empujaba el cuerpo inmóvil de los Zombis frente a él.
El tercer zombie estaba muy cerca de mí y no tenía tiempo de girarme a matarlo. Elegí ayudar a Karma y servir de escudo.
Un jalón brusco en mi ropa me impulso hacia adelante, choque con su cuerpo mientras Karma sostenía la cabeza del zombie con fuerza.
Karma empujaba con su mano derecha al zombie, justo por encima de sus dientes mientras esa cosa cerraba y abría con fuerza la mandíbula. El zombie se abalanzaba con toda su fuerza y Karma se esforzaba para que no se acercara, él tuvo que soltar su arma para poder protegerme y sentía sus manos temblar.
De inmediato saque el arma tras mi espalda y la coloque por debajo de la barbilla del zombie, dispare y sus sesos salpicaron un poco cuando la bala salió por arriba de su cabeza.
Por el momento no había más zombis cerca, aunque el ruido seguro los atraería...
El cuerpo se desplomo en el suelo, por fin pude respirar y con duda mire a Karma.
Podía percibir su enfado sin siquiera mirarlo. Claro, no me arrepiento. Si eso lo salva, lo haría otra vez y quizás el habría logrado salir de esto por su cuenta, después de todo él es fuerte... pero ¿Cómo podría solo dejarlo solo?
Karma tenía una mirada furiosa en el rostro, su frecuencia estaba alterada y no me extrañaría que me golpeara por mi imprudencia.
El me abrazo con fuerza y escondió su rostro en mi hombro, todo su cuerpo temblaba y no era por el esfuerzo sino por...miedo.
Mi corazón se estrujo y correspondí a su abrazo con la misma intensidad.
-¡Lo siento Karma! ¡Lo siento! Pero no podía dejarte solo- Me disculpe sintiendo un nudo en la garganta.
- ....Esta bien, si estas a salvo..., está bien- Me respondió con un tono de voz muy bajo.
Sentí como el temblor de su cuerpo se fue calmando...
Karma termino el abrazo y se agacho para recoger el machete que soltó.
- Regresemos,...tenemos mucho de qué hablar- Dijo con una inmensa seriedad.
Asentí.
Isogai y Maehara estaban bien, Takebayashi y Seiro salieron a ayudarlos así que todos se veían bien.
Me detuve abruptamente al darme cuenta de lo egoísta, estúpido y malo que fui.
Había abandonado a Isogai a su suerte por correr con Karma y me había olvidado por completo de ellos hasta ahora.
-Todo estará bien... No fuiste el único en correr y yo haría lo mismo que tú. ...Estoy a salvo gracias a ti- Comento Karma mientras me tomaba de la mano.
Recibí justo las palabras que necesitaba, mientras esquivaba los cuerpos tirados en las calles.
Al reunirnos con los demás el ambiente era bastante tenso.
Entramos rápidamente a la casa porque varios zombis empezaron a aparecer en las calles, atraídos por el ruido...
Busque mantenerme alejado de Seiro y Karma paso un brazo por mis hombros para tranquilizarme.
Estábamos sentados en la sala y el ambiente no mejoraba.
-¡¿Qué hacían ustedes afuera en primer lugar?! ¡No debieron arriesgarse!- Maehara nos gritó a Karma y a mí.
Karma afirmo el agarre en mis hombros.
Por un momento pensé que Karma se había alterado pero...en realidad mi cuerpo se había tensado ante el grito de Maehara e instintivamente intente dar un paso frente a Karma. Yo era el que se estaba alterando...
Mi cuerpo reacciona antes que mi mente, quizás de alguna manera lo percibí como una amenaza,...a mi amigo y compañero...
Karma me tomo de la mano y entrelazo sus dedos con los míos.
Respire profundo para tranquilizarme un poco.
-Obviamente fuimos a pasear, pero al verte con ese rostro de angustia mientras esos zombis los perseguían, decidimos salvarte- Respondió Karma con tono burlón.
-¿¡Crees que es momento de hacer bromas!? ¡Todo estuvo a punto de salir mal!- Grito de nuevo Maehara.
Isogai solo estaba sentado en el sillón, escuchando y por su rostro, estaba pensando en lo que había pasado. Takebayashi y Seiro estaban de pie un poco alejados.
-¡Oh! No creo que quieras que me ponga serio. Y justo de eso quería hablar ¿Sabes por qué todo estuvo a punto de salir mal? - Pregunto Karma con tono tranquilo.
Maehara cerró sus manos en un puño con fuerza y se veía la enorme frustración en su rostro.
No creo que este molesto con nosotros, creo...que solo está usándonos para liberar esos sentimientos que lo aquejan y es por eso que Karma está intentando mantener la calma.
Karma es tan fuerte, yo apenas si puedo controlarme para no temblar y dejar que mis instintos se hagan cargo de nuevo. Yo...solo puedo aferrarme a su mano y a su presencia para mantenerme tranquilo.
-Takebayashi, creo que sería mejor si tú nos dices por qué. Estas al tanto de lo que pasó y si lo dices tú, Maehara dejara de quejarse- Dijo Karma mirando a Takebayashi.
-Ustedes fueron a ayudar a quien les importaba, ignorando a las personas a su lado. Somos compañeros, si confiáramos entre nosotros como antes, entonces no se habrían abandonado- Comento Takebayashi con seriedad.
- ¡No lo abandone! ¡El me pidió que lo dejara! - Se excusó Maehara.
-Sí, pero tú tuviste la elección de obedecer o no- Comento Takebayashi.
-¡Nagisa hizo lo mismo! - Me señalo Maehara
-Ten cuidado con lo que dices. Nadie te está acusando de nada. Todos hicimos mal. Yo intente hacer más de lo que podía y si hubiera estado en tu lugar habría hecho lo mismo... No estamos culpando a nadie pero si sigues acabando con mi paciencia Maehara...Sera mejor que aceptes las consecuencias- Karma le advirtió inclinando la cabeza ligeramente a la derecha y haciendo su tono de voz cada vez más serio.
Apreté ligeramente la mano de Karma.
-Sí, yo también me equivoque,....creo que no estábamos tan listos para regresar como pensábamos. Pero podemos arreglarlo, por eso estamos hablando de esto, para solucionarlo- Comente intentando calmarlo.
Maehara cambio su gesto de enfado por uno de angustia y arrepentimiento.
No estoy molesto porque nos gritara, todos pueden derrumbarse de vez en cuando y el necesitaba desahogarse, la culpa lo consumía y por eso estaba a la defensiva. Yo también me sentí mal cuando descubrí lo que hice, pero en mi caso Karma me ayudo a calmarme. Aunque...sigo sintiendo esa opresión en mi corazón por haber olvidado a mis amigos,...sé que solo fue un instante, pero el hecho de haberlos olvidado...siempre me hará sentir mal y me dolerá.
Es una culpa más con la que debo cargar...
-Chicos...yo...- Maehara se veía triste, quizás estaba por disculparse, pero...Isogai lo interrumpió.
-Debemos irnos de esta casa...-
Creí que estaba pensando en lo que había pasado hace unos momentos, pero al parecer había algo más grave en su mente.
Su voz se escuchaba tan seria y fue como si nos indicara que no debíamos perder tiempo...
-Bien, pongan todo lo que necesitemos en el auto, principalmente armas y comida, nos iremos ahora mismo- Comento Karma sin dudar.
-¿No preguntaras? -Interrogo Isogai.
-No. Si tú lo dices, debe ser serio pero quiero una explicación después- Dijo Karma con la misma seriedad de Isogai.
Karma y yo nos fuimos a la habitación para tomar nuestras cosas, esto era demasiado repentino y ni siquiera sabía que pasaba, pero confiaba en Karma y en Isogai. Si ellos decían que era lo mejor, entonces lo era.
Cuando terminamos de guardar las armas y nuestra ropa en las mochilas, vi a Karma más tenso de lo normal.
-¿Karma? - Lo llame con duda.
-Isogai debió ver a alguien,...es probable que ese maldito ya este enterado de donde estamos...De no ser así, no encuentro otro motivo por el que tengamos que irnos tan pronto. Aunque espero estar equivocado- Explico Karma con un ligero gesto de preocupación pero también estaba muy enfadado.
El solo hecho de escuchar de ese...hombre, hace que los recuerdos me aborden y una gran furia invade mi cuerpo,...furia y tristeza por igual.
Nunca tuve tantas ganas de matar alguien, nunca estuve tan seguro de quitar una vida. Generalmente es algo que solo pasa, no lo pienso demasiado pero ahora...no sé cómo reaccionaría si ese hombre estuviera frente a mí.
-Quiero buscarlo, quiero hacerle pagar...pero lo que pasó hace un momento, me hizo ver que no estamos listos y no quiero...que algo salga mal. Yo...- Karma estaba en un gran dilema. Por una parte, tenía más o los mismos deseos que yo de matar a ese tipo y por otro, estaba preocupado por nuestra seguridad.
...Mi cuerpo temblaba, no sé si por miedo o furia, mi cordura pendía de un hilo, solo por pensar en ese hombre, pero...Karma dudaba y me confiaba esto, porque quería mi opinión.
¿Quiero mi venganza, o que la persona que amo este a salvo?...
Eso es fácil de decidir.
-Es verdad, no estamos listos, por ahora regresaremos con Itona y los chicos. - Comente mientras acunaba su rostro con mis manos.
El me escuchaba atento...
-Solo por ahora, después buscaremos a ese hombre...y lo matare- Le dije sonriendo.
Él se sorprendió por un momento y después asintió mientras me sonreía.
-Es un gran plan, pero lo mataremos juntos...- Comento divertido.
Él se acercó a mi rostro, estaba por besarme pero Takebayashi nos llamó, al parecer todo estaba listo para irnos.
Bajamos con nuestras mochilas, llenamos la cajuela con nuestras cosas. Nos llevaríamos el mismo auto que usamos para llegar aquí.
Pero hay un problema...
-Karma... ¿Cuánto tiempo crees que nos tomara llegar con Itona? - Pregunte en voz baja para que no me escucharan los demás.
- No lo sé, todo depende de lo que encontremos en el camino- Me respondió.
Oh, eso no es bueno, no creo que pueda soportar tanto tiempo en un lugar tan pequeño y con todos tan cerca, sin mencionar a Seiro, su sola presencia me perturba.
Karma jalo mis mejillas con fuerza de un momento a otro y cuando me queje un poco, el me soltó.
-No te preocupes, todo estará bien, estaré a tu lado e incluso puedes manosearme un poco. Es una gran oferta ¿No crees? - Comento Karma con una sonrisa de lado.
Me reí un poco, sin poder evitarlo.
-Sí, es una gran propuesta...- Comente sonriendo.
- ¿Verdad? - Interrogo pasando un brazo por mis hombros y restregando su rostro con el mío, en una caricia.
Asentí.
Karma siempre me hace sentir mejor, espero poder hacer lo mismo por él.
Seiro conduciría, Maehara se sentaría a su lado y los demás iríamos en la parte de atrás.
Por falta de espacio yo iría en las piernas de Karma y aunque eso me habría avergonzado un poco en otro momento, ahora me hacía sentir tranquilo y seguro.
Karma tapo mis ojos con un pedazo de tela, era el que usábamos en las sesiones de Takebayashi.
-Solo será por si acaso ¿Bien? - Comento Takebayashi.
-Si, muchas gracias y disculpen los problemas que estoy causando- Comente con eso sobre mis ojos y con los brazos de Karma rodeándome.
-No es problema, si te sientes mal o necesitas que detengamos el auto no dudes en decirlo- Dijo Isogai con un tono amable.
Escuche como encendían el motor, el auto avanzo un poco y luego se detuvo. Una puerta se abrió, después de unos segundos volvió a cerrarse y el auto avanzo de nuevo.
El estar con solo oscuridad a mi alrededor y sonidos, estaba asustándome. Antes me tranquilizaba pero por alguna razón justo ahora, estaba comenzando a asustarme.
Esta sensación de opresión en el pecho y desesperación es igual a..., igual a cuando estaba en el zoológico...con Megu.