H de Harry (BG.5 libro #1) Di...

By darlis_steff

59.4M 5M 6M

Sinopsis Kaethennis ha disfrutado de los placeres de la vida, mucho, casi se puede decir que demasiado. Un... More

H de Harry
Capítulo Uno
Capítulo Dos
Capítulo Tres
Capítulo Cuatro
Capítulo Cinco
Capítulo Seis
Capítulo Siete
Capítulo Ocho
Capítulo Nueve
Capítulo Diez
Capítulo Once
Capítulo Doce
Capítulo Trece
Capítulo Catorce
Capítulo Quince
Capítulo Dieciséis
Capítulo Diecisiete
Capítulo Dieciocho
Capítulo Diecinueve
Capítulo Veinte
Capítulo Veintiuno
Capítulo Veintidós
Capítulo Veintitrés
Capítulo Venticuatro
Capítulo Veinticinco
Capítulo Veintiséis
Capítulo Veintisiete
Capítulo Veintiocho
Capítulo Veintinueve
Capítulo Treinta
Capítulo Treinta y uno
Capítulo Treinta y Dos
Capítulo Treinta y Tres
Capítulo Treinta y Cuatro
Capítulo Treinta y Cinco
Capítulo Treinta y Seis
Capítulo Treinta y Siete
Capítulo Treinta y Ocho
Capítulo Treinta y Nueve
Capítulo Cuarenta
Capítulo Cuarenta y Uno
Capítulo Cuarenta y Dos
Capítulo Cuarenta y Tres
Capítulo Cuarenta y Cuatro
Capítulo Cuarenta y Cinco
Capítulo Cuarenta y Seis
Capítulo Cuarenta y Siete
Capítulo Cuarenta y Ocho
Capítulo Cuarenta y Nueve
Capítulo Cincuenta
Capítulo Cincuenta y Uno
Capítulo Cincuenta y Dos
Capítulo Cincuenta y Tres
Capítulo Cincuenta y Cuatro
Capítulo Cincuenta y Cinco
Capítulo Cincuenta y Seis
Capítulo Cincuenta y Siete
Capítulo Cincuenta y Ocho
Capítulo Cincuenta y Nueve
Capítulo Sesenta
Capítulo Sesenta y Uno
Capítulo Sesenta y Dos
Capítulo Sesenta y Cuatro
Capítulo Sesenta y Cinco
Capítulo Sesenta y Seis
Capítulo Sesenta y Siete
Capítulo Sesenta Y Ocho
Capítulo Sesenta y Nueve
Capítulo Setenta
Capítulo Setenta y Uno (Penúltimo)
Capítulo Setenta y Dos
Epílogo
Extra: Cinco minutos de entrevista con BG.5
Extra: BG.5 acerca de Halle Kaede
Extra: Gira por América
Extra: Acerca de ELLAS
Extra: Un hasta luego
Extra: Tercer bebé Karry
Agradecimientos
Nota final
H de Harry cuenta con Editorial
H de Harry ya disponible en Librerías

Capítulo Sesenta y Tres

658K 55.7K 110K
By darlis_steff


CAPÍTULO SESENTA Y TRES

2 de abril, 2012.

—Todos hablan de tu embarazo —escucho una voz suave, alzo mi vista de mi almuerzo para encontrarme con la dulce, joven y adolescente rubia que trabaja en la editorial. La más joven y muy admirada por todos.

Le sonrío mientras ella se sienta, no sin antes preguntar, en mi mesa para dos y saca su almuerzo. Saluda con su mano a varios en el lugar y luego se enfoca nuevamente en mí.

—Lo sé, mi embarazo es inclusive uno de los temas más hablados en las redes sociales y canales televisivos.

—En la radio también... Y periódicos —agrega ella sonriendo, incluso luce más joven de los diecinueve años que posee—. Por cierto, me llamo Grace.

—Es un placer conocerte Grace, todos me han hablado muy bien de ti.

—Eso espero —dice guiñándome un ojo antes de tener un bocado de su almuerzo—. Pero seré sincera al decirte que realmente creo que eres la mujer embarazada más deslumbrante que he visto. Es decir, tú pareces una celebridad embarazada, tu estómago tiene la proporción perfecta y no luces demacrada, ni destruida, es admirable.

No puedo evitar reír mientras mastico, tomo un poco de mi jugo de fresa para proceder a hablar.

—He corrido con "algo" de suerte en este embarazo, en ese aspecto. Pero créeme, sólo tengo cinco meses, en tres semanas seis, en algún momento seguramente me pondré muy enorme y muchas partes de mi cuerpo se hincharán.

Ella ríe mientras Carlos, un trabajador hispano, nos saluda con un clásico "hola" en español que tiene a muchas delirando. Grace me mira con una sonrisa curiosa.

—¿Y cómo es estar con uno de los miembros de BG.5? ¿Con uno de los hermanos Jefferson?

—Oh, ya veo, ¿no me digas que eres...?

—Bueno, tengo diecinueve años, no puede esperarse que no me guste una muy buena banda que no es pop.

—Lo cual es genial, créeme, ellos tienen fans de todas las edades y de ambos sexos —digo, riendo—. Para responder a tu pregunta, sin miedo a que la bloguees, estar con Harry es bastante peculiar y maravilloso. No es tan fácil como parece, ya sabes, él tiene responsabilidades y yo las mías, pero sabemos hacerlo funcionar y entonces ambos nos hacemos bastante bien y disfrutamos de esa burbuja en la que nos encontramos cuando estamos juntos.

—Cuando supe de "Karry" simplemente me encantó la idea, la idea de una chica con una aparente vida fuera del mundillo de la fama, pero con una gran belleza, con la suficiente personalidad y encanto para atrapar a un hombre que millones de féminas desean.

—Oh, bueno, es bueno saber que eres de ese grupo amplio que estuvo de acuerdo con mi relación con Harry —digo en medio de una corta risa.

—Sí, muchos amaban a "Henny" pero yo no. Esa modelo, siendo perfecta, no me parecía la indicada.

—Bueno, eso hace que me agrades más —digo con diversión—. Aquí entre nosotras, tengo una gran aversión hacia Jenny, es una grandísima perra que se ha ganado malos sentimientos de mi parte.

—Te creo, pero es una maravilla que ella esté en el pasado, y Karry sea el presente.

—Esperemos.

—¿Y tendrás niño o niña? Puedes decirme tranquila, todo esto quedará entre nosotras, soy una fan confiable.

—Aun no sé el sexo, antes de que Harry se fuera de gira no se dejó ver, prometí esperarlo, así que no he dejado que me digan su sexo, aunque muero de ganas por saber qué será, igual que su hermanito.

—Oh, sí, ese niño adorable del que BG.5 sube fotos al instagram, Harry y tú tienen a un niño hermoso.

—Lo sé, gracias, debes conocerlo, es todo un encanto.

—Puedo imaginarlo.

—Tú y yo nos llevaremos muy bien Grace —le digo, guiñándole un ojo y ella me sonríe con alegría.

—Eso será genial, Kae... ¿Puedo llamarte así, verdad?

—Puedes.

***

10 de abril, 2012.

—Lo quelo —repite Dan, señalando la vidriera donde un cachorro intenta lamer la pequeña mano de mi exigente hijo.

—Mi cielo, cuando tengamos nuestra casa, entonces quizás mami te compre uno, pero ahora no se puede.

Dan aprieta sus labios, pero, como bien sabe, no hace un berrinche, sólo parece molesto mientras cruza sus brazos, haciéndome saber que no quiere agarrarse de mi mano. Sonrío mientras le pido amablemente que me extienda la mano.

Él se niega mientras observa al cachorro.

—Harry Daniel, será mejor que en este mismo instante le des la mano a tu madre si no quieres verme realmente molesta —indico con voz neutra, consigo que me de la mano de manera voluntaria e incluso que suspire.

Entro a la tienda por la que me dirigí al centro comercial, con una única misión: comprar ropa.

Es cierto, yo no estoy enorme, pero es bien cierto que mis caderas no son las mismas, que tengo más muslos, mis pechos crecieron un poco y mi vientre definitivamente con casi seis meses no es nada plano.

En conclusión, mi ropa de pre embarazada desde luego ya no entra en mí.

Mi estómago es el idóneo para mi embarazo, realmente me gusta la manera en la que me veo y a Dan parece gustarle, lo sé por la manera en la que en ocasiones lo sorprendo mirándolo fijamente, más que con curiosidad, con alegría.

—Buenas tardes, ¿en qué podemos ayudarla? —pregunta una joven dependiente.

—Necesito ropa favorecedora y que me sirva para mi estado —digo, señalando con mi mano libre hacia mi vientre y en medio de una mueca que hace reír a la chica.

—Por supuesto, sígame por acá.

La sigo y en poco minutos me encuentro con muchas prendas que ella sostiene, que para ser sincera me gustan. Dan, en silencio, se mantiene a mi lado mientras selecciono todo aquello que sea de mi agrado.

Incluso mi hijo se mantiene de manera obediente en uno de los pequeños sofás dentro del probador mientras me observar desvestirme y probarme diversos vestuarios.

—¿Qué te parece este? —le pregunto a Dan, observándome en el espejo con el vestido holgado que llega a mis rodillas.

—Lindo.

—Gracias bebé, tendré en cuenta tu opinión.

Procedo a sacarme el vestido mientras en ropa interior me inclino al lado de Dan para tomar una de las camisas y pantalones premamá que tomé. Siento un contacto cálido y suave en mi crecido estómago y me doy cuenta cuando bajo la mirada que se trata de la pequeña mano de Dan presionada sobre mi estómago.

Sonrío con emoción porque es la primera vez que Dan toca mi estómago, incluso temí que tuviera miedo de esa área de mi cuerpo. Él me mira con una pequeña sonrisa mientras presiona su pequeña mano, yo no hago más que sonreírle de vuelta con mucha alegría.

Entonces ambos nos sorprendemos cuando mi estómago se ondula y se percibe un pequeño movimiento. Dan da un pequeño grito y retira su mano mientras abre sus ojos con sorpresa, luego presiona su mano una vez más y el movimiento se repite.

Creí percibir hace unos pocos días que quizás bebé en camino se movía, pero creí que quizás sólo fueran falsas alarmas. Pero en este momento mi bebé no nacido ha hecho uno de sus primeros movimientos para su hermanito.

—Creo que está emocionado o emocionada de que lo toques Dan —le digo con cariño a mi sorprendido y emocionado hijo—. Te amo y también amo a bebé en camino, ¿también amas a bebé en camino Dan?

Dan abre su pequeña boca, sorprendido cuando hay un nuevo movimiento bajo su pequeña mano, luego él me regala mi sonrisa favorita de pequeños dientes y ojos achicados, sus mejillas están ruborizadas.

Ti amu —le dice a mi estómago, y yo reprimo las ya cansonas lágrimas que quiero derramar.

—Estoy segura que también te ama, mi cielo.

***

Conduzco mientras el tercer CD de BG.5 se reproduce, canto las canciones y creo que Dan intenta cantar algunas mientras cada vez que puede preguntar por algún miembro de la banda, hasta terminar preguntando por su papi azul.

Creo tener tres días o cuatro sin hablar realmente con Harry, sólo intercambiamos un email hace unos cinco días. Mayormente porque quizás es mi culpa por extrañarlo de tal manera. Sin embargo le sigo la pista a sus conciertos, incluso estuve eufórica cuando lo vi con un traje formal asistiendo a uno de esos premios conocidos en Estados Unidos del que Kathe me repitió el nombre una y otra vez, pero del que nunca recordé.

Me recuerdo redactándole un largo email diciéndole cuán orgullosa estaba de los premios que ellos lograron ganar, es ese email con su respuesta amorosa el último contacto que tuvimos. Con el tiempo, a principios de marzo, yo realmente dejé de preguntarle cuándo volvería, porque siempre parecía que le agregaban una fecha nueva y era una tortura para ambos saber que aplazábamos cada vez más el volvernos a ver.

Espero y sí se cumpla su vuelta para la fecha que se tiene previsto el lanzamiento de la biografía, a comienzos de mayo. Ese al menos es un compromiso al que la banda no puede faltar, es mi consuelo y esperanza.

Ruedo mis ojos cuando siento mucha hambre y ansiedad por alguna hamburguesa de carne que contenga brócoli, cabe destacar que se supone a mí nunca me gustó el brócoli, pero así son los antojos de una mujer embarazada.

Aparco el auto en el estacionamiento de la residencia, leo el mensaje de mamá avisándome como se encuentra reunida con Katherine y le respondo rápidamente. Con mucho cuidado, y con un poco de molesta lentitud, desciendo del auto. Admito que ya me siento un poco pesada, y procedo a desatar el portabebés de Dan.

Sólo, y sin mi ayuda, para demostrar que ya no necesita del portabebés, Dan baja del auto y salta continuamente mientras en la maletera yo tomo mis bolsas de compras, así como aquellas que contienen ropas que no me resistí a comprarle a Dan.

Me dirijo hacia el apartamento con la idea de que por favor haya por alguna razón brócoli en la nevera y pan para hamburguesa en la alacena.

Es una increíble suerte que el edificio posea ascensor, aun cuando a Dan no parece gustarle mucho. Sonrío mientras escucho a Dan tararear una canción de BG.5, él dice sólo palabras al azar que recuerda y puede pronunciar, aquellas que no recuerda las remplaza por un "lalala".

—Ya estamos en casa —murmuro frente a la puerta mientras dejo las bolsas sobre el suelo e introduzco la llave a la cerradura.

Abro la puerta sin siquiera ver dentro mientras ubico una mano en mi estómago cuando siento que una vez más hay movimiento, no puedo evitar sonreír y suspirar al mismo tiempo, es maravilloso de sentir.

El gritito de alegría de Dan me saca de mi estado de mamá emocionada, Dan pasa por mi lado corriendo dentro del apartamento, con dos palabras resonando en un grito.

—¡Papi azul!

Confundida y sorprendida miro dentro del apartamento para encontrarme con Dan siendo alzado por Harry, jadeo con sorpresa, porque definitivamente no me lo esperaba y porque mi corazón late con esa rapidez y fuerza que extrañaba que lo hiciera.

Con cuidado, e ignorando las bolsas, camino dentro del apartamento. Vaya, él está observándome y parece absolutamente emocionado y fascinado con mi vientre crecido, puesto que su mirada se mantiene ahí.

Me detengo a mitad de la sala y ubico una mano en mi cintura mientras sonrío, este no es un sueño, real, y finalmente, él está aquí. Harry está aquí.

—Ehmm ¿hola? —digo con voz suave y no muy segura.

Harry murmura algo para Dan que hace que mi niño lo abrace con fuerza y bese su nariz con emoción, incluso Dan comienza a decirle muchas cosas mientras mueve sus manos. Harry ríe y lo observa, pareciendo entender todo lo que Dan quiere decirle.

Sólo me mantengo ahí, esperando que Dan me deje tener mi turno y oportunidad de ser abrazada por Harry, quien besa una vez más la frente de Dan antes de depositarlo sobre el suelo y observarlo correr hacia su habitación.

Harry me mira con ojos brillosos y una gran sonrisa. Luce incluso más atractivo de lo que ya era, parece que obtuvo un corte de cabello, pero es más largo de cuando lo conocí, lleva una barba de pocos días y su piel está un poco bronceada de una buena manera.

Y yo, bueno, yo luzco embarazada, pero sé que es una imagen que él está encantado ver.

Harry abre sus brazos esperando que, como de costumbre, corra a refugiarme a ellos, pero con una sonrisa que amenaza con dividir mi rostro, niego con la cabeza, haciendo que él abra sus ojos con sorpresa.

—Lo siento Harry Jefferson, pero estoy muy embarazada y no pienso correr hacia ti, tendrás que correr tú por mí.

Él suelta una de sus carcajadas roncas, esas que extrañaba escuchar, mientras a paso rápido se acerca a mí para luego, en menos de tres segundos, tenerme entre sus cálidos brazos.

Él parece realmente sorprendido de que mi estómago no nos permita estar pegados, pero entonces ríe mientras me alza sobre mis pies y con sus labios busca los míos. La suave presión de sus labios contra los míos, amenaza con hacerme perder la cordura, fueron dos meses y medio sin sentir su boca contra la mía, ni esa fascinante emoción que transmite cada beso que compartimos.

Su boca se mueve sobre la mía, guiando el beso, mientras su lengua parece ponerse al día con la mía, mis dedos están muy aferrados a la parte baja de su nuca, a la vez que sus manos cálidas están presionándose en mi espalda para mantenerme lo máximo que mi cuerpo me deja estar junto a él.

Cuando comienzo a necesitar aire, su boca deja la mía y me da una gran sonrisa, sus ojos miran muy fijamente los míos.

—Hola, Kae —murmura muy bajo, su mano acariciando levemente mi mejilla, luego la aprieta—. Me gusta que estén más llenitas tus mejillas.

—Te amo.

—Yo también te amo, y te eché muchísimo de menos mi amor —dice besando mi rostro, luego se aleja y me observa con una gran sonrisa.

Su mirada se detiene en mi vientre, me observa maravillado antes de guiar sus manos hacia la parte de mi cuerpo que lo tiene tan fascinado desde que parte de él crece particularmente ahí.

Bueno, este es un buen momento, las manos de Harry acariciando mi vientre es algo que yo simplemente no puedo describir. Él está tan maravillado como yo lo estoy, se arrodilla, levanta mi camisa blanca y sonríe realmente ante la visión de mi estómago desnudo.

—Vaya Kae, realmente ha crecido...

—Sí, ya me siento algo pesada.

Él presiona sus labios continuamente sobre mi piel, haciendo que ría, puesto que me da cosquillas, luego suspira.

—Papi está de vuelta, hola por aquí —una de sus manos continúa con una acaricia que estimula a bebé en camino, o eso imagino cuando una vez más se percibe movimiento—. Oh, Cielos santo ¿acaso acaba de moverse?

No puedo evitar reír mientras una vez más hay movimiento, es una buena cosa que Harry llegara justo el día que bebé en camino decidió hacer sus movimientos.

—Mierda, mierda ¿te duele? —me pregunta sin despegar sus ojos de mi estómago, creo que espera otro movimiento.

—No, es un poco incómodo porque hoy ha comenzado... Pero ya me adaptaré y es maravilloso sentir a la personita que creamos moverse —digo con una gran sonrisa—. El primero en sentirlo ha sido Dan, esta mañana. Él realmente se asustó, pero luego parece que le gustó.

—¿Sigue renuente a la idea de que puede ser niña?

—Totalmente, para él es niño y punto.

Una vez más hay movimiento en mi estómago y Harry ubica ambas manos sobre el lugar, sus ojos están brillosos.

—No le digas a Dexter que yo estuve a punto de llorar sintiendo a bebé en camino moverse para mí.

—Será uno de nuestros secretos.

—De acuerdo.

Él permanece en silencio durante quizás dos minutos, sólo murmurando cosas contra mi estómago que no logro escuchar, es una conversación de él con bebé en camino, como que soy el medio por el que se comunica.

Besa una vez más mi estómago antes de bajar mi camisa, luego evalúa mi camisa y con sus manos forma un corazón sobre la tela.

—Sí, está lo suficiente grande como para que un corazón quepa.

Besa mi estómago una vez más antes de ponerse en pie y tomar mi rostro entre sus manos, sus labios nuevamente cubren los míos, esta vez un poco más breves.

—Te extrañé demasiado —murmura contra mi mejilla mientras me abraza, Dan pasa correteando a nuestro lado con el peluche que hace un tiempo Dexter le regaló.

—¿Y rojo?

—Rojo vendrá más tarde pequeño hombrecito.

—¿Y And?

—También...

—¿Y Dou?

—Él también y...

—¿Y súper E? —pregunta nuevamente Dan con sus ojos muy abiertos y batiendo el peluche, Harry ríe mientras aun me mantiene abrazada.

—Iba justo a decirte que él también vendría, sólo que no me dejaste terminar —Dan asiente con la cabeza mientras vuelve corriendo a su habitación—. Ellos querían venir conmigo, pero les pedí que me dejaran disfrutar de estar contigo por unas horas, están realmente emocionados de ver como luces, en internet vimos algunas fotos, pero veo que en persona todo es mejor.

—Yo también te seguía la pista por internet...

—¿Cómo puedes probarme eso?

—Puedo decirte los países por los que pasó tu gira y cuántos conciertos por país.

—Sorpréndeme.

Me libero de sus brazos y respiro hondo, porque la lista es larga.

—México contó con tres conciertos, dos inicialmente y uno agregado a mediados de la gira. Venezuela conto con uno al igual que Colombia y Perú. Pasaste por Chile, en donde dieron dos conciertos así como en Argentina. Brasil fue el segundo con más conciertos, cuatro en total.

»Costa Rica, República Dominicana, Nicaragua y Paraguay fueron a mediados de febrero con un concierto en el cual en uno de ellos Dexter se cayó, reí mucho con ese vídeo.

Harry ríe, sí, el video de Dexter resbalando por el cable de su bajo es fascinante y divertido.

—También está Uruguay y Puerto Rico... Ya va, déjame ver cuáles me faltan... ¡Bolivia! Sí, fue una de las fechas que agregaron hacia el final porque las fans organizaron una colecta de firmas y los llevaron, está Honduras..., ¿Guatemala?

—Sí, Guatemala...

—Creo que Ecuador, si mal no recuerdo... Sí, El Salvador estaba y Panamá, que al igual que Bolivia hizo colecta de firmas. Y luego están todos esos seis conciertos dados en Estados Unidos, y las dos presentaciones en dos premios de los cuales no recuerdo el nombre.

—Sabes de geografía, y sí que me seguiste la pista, a pesar de que te has negado a hablar conmigo las últimas tres semanas y medias.

—Ya sabes que andaba algo deprimida.

—Lo sé, mamá me daba informes de ti y de Harry Daniel...

No puedo evitar interrumpirlo con un beso suave en sus labios, extrañaba tanto besarlo.

—Te amo mucho Harry Jefferson, en la próxima gira o nos vamos juntos o te amarro y no te dejo ir.

—Me gusta cómo suena esa idea —dice contra mis labios—. Ahora déjame mostrarte lo que traje para nuestros hijos.

Toma mi mano y me guía a nuestra habitación, en donde se encuentran sus dos maletas junto a estuche de los platillos y baquetas. Toma una gran bolsa y saca una bolsa negra muy llena, luego llama a Dan, quien llega corriendo hacia nosotros.

—Te tengo dos sorpresas pequeño hombrecito, cierra tus ojos.

—No, no quelo cerrarlos...

—Vamos, hazlo por mí.

—No, no quelo —Dan se encoge de hombros y sólo lo ve, Harry suspira con resignación.

—En serio que eres bastante mata ilusiones cuando quieres pequeño hombrecito.

Harry toma una caja de la bolsa y se la extiende, Dan la toma con rapidez y da un gritito cuando la ve, al igual que pequeños saltos.

—¡Mira nani!

Con curiosidad tomo la caja que mi hijo me extiende. Sonrío, es un muñeco bastante genial de Ben10 que trae diversos accesorios, incluso trae eso que parece un reloj o algo así para Dan. Harry le extiende la bolsa mediana que parece muy llena y está vez realmente Dan grita de alegría. Miro con horror a Harry cuando noto que son muchísimos chocolates y golosinas.

Dios mío, Harry enloqueció, eso tendrá a Dan como... Como, ni siquiera quiero imaginarlo.

—Tranquila, se lo suministraremos poco a poco, son golosinas de cada uno de los lugares que conocí. Me gustaron mucho las gomitas trolli de Colombia, el chocolate de Venezuela y el de Brasil son deliciosos... aunque también hay unos dulces mexicanos y peruanos que... Oh, y...

—Harry lo entiendo —lo interrumpo—. Te gustaron todos.

Con mucho cuidado y sosteniendo mi estómago me agacho un poco, intentando estar a la altura de Dan.

—Cariño, ¿por qué no tomas un chocolate y dejas que mami guarde el resto?

Dan no parece muy convencido de mi propuesta, pero mi mirada logra hacerle saber que no estoy negociando, así que decide confiar en mí y, tras tomar una bolsa pequeña llena de bolitas de chocolate, me da la bolsa llena de lo que es la gran droga y adicción de mi pequeño hijo de tres años.

Con mucho cuidado Harry lo ayuda a sacar a Ben10 de la caja, así como a ponerle lo que yo llamo reloj, pero ellos le dicen otro nombre, en su pequeño brazo. Entonces tenemos a Dan correteando, como ya es una costumbre, mientras juega y murmura cosas.

—Ahora, puesto que no sabemos el sexo de bebé en camino, compré algo que nos servirá sea niña o niño.

Tomo una pequeña mochila color crema que me extiende y cuando la abro comienzo a reír, es simplemente adorable.

Apenas abro la pequeña mochila, se percibe ropita de bebé, ropa pequeña. Me siento en la cama mientras lo saco a todo.

Hay camisetas y bodys de bebé con palabras de cada país que Harry visitó. Algunos solo tienen el nombre del país, otros van acompañados con el mapa de su país y están los que tienen el típico "I love", pero cada país que visitó está presente.

Todas las prendas son de color blancas y algunas color gris con bordes blancos, de manera que puede usarlo tanto si es niña o niño, aunque yo no le prestó atención a esa tontería de azul para chicos y rosa para chicas.

Lo loco está en que los hay de todos los tamaños, desde lo que podría ser sus primeros días de nacimiento, hasta posiblemente sus ocho o diez meses. Es hermoso, puedo imaginarme a Harry comprándolo.

—Es hermoso —digo, derramando lágrimas—. Me encanta. Todos esos países en bebé en camino... Es perfecto.

—Pensé que ya habías pasado la etapa hormonal.

—¿Bromeas? Estoy deseando arrancarte la ropa.

Él ríe mientras toma mi cintura y me acerca a su cuerpo, con su nariz roza mi cuello, sé que está sonriendo.

—Sólo debemos esperar a que Dan se duerma —murmura contra mi piel, no puedo evitar suspirar. Luego me abraza con fuerza—. Te echaba tanto de menos que siento que no quiero soltarte, a Dan igual, pero él sólo quiere jugar ahora con Ben10.

Enredo mis brazos alrededor de su cuello mientras atraigo su boca una vez más a la mía, él sonríe sobre mis labios.

—Ahora que estoy aquí, estoy ansioso de saber el sexo de bebé en camino...

—Sólo que para eso faltan dos semanas —lo beso una vez más—. ¿Tienes hambre? Porque yo sí... ¡Espera! Dejé las bolsas de compras en la entrada.

Camino a paso apresurado hacia la puerta y suerte que ahí se encuentra mis bolsas, Harry se me adelanta y las toma.

—¿Qué compraste?

—Ropa, ya mi ropa no me servirme.

—Adorable —dice riendo—. Por cierto, a ti también te traje regalos, chocolates, ropa y un lindo collar. Bueno y muchas cosas más.

***

Estoy cepillando mi cabello en la habitación con una gran sonrisa, el collar con la H de Harry descansa en mi cuello en una fina cadena de oro, estoy muy segura que fue increíblemente costoso, pero a Harry parece no importarle gastar su dinero.

—¡Rojo! —escucho el grito de Dan y sonrío aún más porque eso significa que BG.5 ya está en el apartamento.

Con una cinta logro que mi cabello se mantenga fuera de mi rostro y caiga hacia mi espalda mientras me pongo de pie, escuchando los gritos de Dan y las risas de los chicos. Aun con mi sonrisa camino hacia la sala, en donde BG.5 simplemente me observa con sorpresa.

Sin mentir todos ellos observan mi estómago, con coquetería doy una vuelta y ellos riendo comienzan a silbar como unos vulgares camioneros, haciéndome reír.

—¡Jodida mierda! Tú estás putamente embarazada, te ves increíble, tú... Santa mierda, tú sólo me has dejado sin una puta palabra de mierda que decir —dice Dexter, caminando hacia mí.

—Mala palabras —le reprende Dan.

—Oh, debes entenderme pequeña bestia, tu mami ha pateado mi cerebro, no tengo palabras Hottie, estás absolutamente hermosa.

Dexter me abraza con intensidad mientras me aprieta mucho contra él, este es uno de los abrazos más tiernos que he podido obtener de Dexter, incluso él está murmurando cosas tiernas acerca de cuán hermosa luzco embarazada.

—Te eché mucho de menos hermana —dice besando mi mejilla, luego con emoción lleva sus manos a mi estómago y suspira con deleite—. Joder, es un estómago duro.

—Así son los estómagos de las embarazadas.

—Harry nos dijo en cuanto llegamos que ya se mueve, y jodidamente espero y se mueva para su tío fa...¡Mierda!

Dexter no puede terminar cuando ya comienzo a sentir un movimiento en mi vientre, es algo incómodo, pero maravilloso, Dexter parece maravillado.

—Oh, joder, que putada, se está moviendo para su tío, le echaré esto en cara a Keith. Jodidamente yo seré su tío favorito.

—Déjate de payasadas y hazte un lado que todos queremos saludarla y tocar su hermosa barriga de embarazada —ordena Andrew mientras lo hace a un lado y me abraza con cariño—. Dex tiene razón, estás absolutamente hermosa, pareces como la mujer embarazada modelo.

Andrew es más dulce, pero es muy sonriente e incluso me alza un poco sobre mis pies, me gusta el verdadero Andrew, es increíble. Por el contrario, Ethan es más reservado, de hecho parece que me abraza con miedo, procurando no tocar mi vientre.

Cuando Doug me saluda, él aprieta mis mejillas ahora un poco regordetas y comienzo a comprender porque Dan odia tanto que yo hago eso, ciertamente es molesto, pero igual seguiré apretando las adorables mejillas de mi bebé.

—¿Vas a cocinar para mí, verdad Ethan? —pregunto con una gran sonrisa.

—No puedo negarme, es decir, mírate, en ese estado tú puedes obtener lo que quieras —me dice Ethan mientras carga a Dan, quien comienza a apretar las mejillas de Ethan.

—Cuidado con lo que le ofreces a mi chica Ethan —dice Harry, abrazándome de espalda, recargando su barbilla de mi hombro.

—Di "No te lo ofrezcas a mi mujer puto de mierda" —recomienda Doug con una cerveza que supongo ellos trajeron.

—Gracias por el consejo Doug —dice Harry riendo.

—Estoy feliz de que estén de vuelta —digo y ellos exclaman un molesto "aw".

—Papil azul me compio chocholate.

—Pues fíjate que tu tío rojo te compró unos peluches geniales que están en el auto, ¿quieres ir por ellos? —le pregunta Dexter, estirando sus brazos hacia él, Dan parece disculparse con Ethan y luego convenientemente se arroja a los brazos de Dexter—. Joder pequeña bestia, ¿qué te ha dado hottie de comer? Estás pesado.

Ti amu rojo.

—Sí, sí, yo también te amo, pero no tienes que convencerme de que vayamos por los peluches —le dice, caminando hacia la puerta, Dan ríe.

Yo sonrío y observo a Ethan.

—Entonces, ¿cuál es el menú, chef Ethan? —pregunto.

—Lo que la dama desee.

—Una vez más el puto se ofrece —murmura Doug, dando un trago a su cerveza.

—Una vez más tú tienes la lengua larga Doug —dice Andrew riendo mientras toma una cerveza.

Harry ubica una vez más sus manos en mi estómago mientras observamos a Andrerw burlarse de Doug, quien sólo ríe de sus burlas, nuevamente hay movimiento en mi estómago y Harry suspira.

—No creo que me acostumbre a esto, es tan maravilloso.

—Lo sé...

Continue Reading

You'll Also Like

2.9K 144 5
¿Qué harías si, de repente, tus amigos y tu familia te dieran la espalda, si tuvieras que empezar una vida desde cero, si nada de lo que hubieras pla...
16.4K 1.2K 7
𝗜𝗦𝗦𝗨𝗘: Lo suponía, desde el primer momento, desde que empecé a soñar con sus labios, su cuerpo y su rostro. Mi jefe siempre fue un amargado e im...
336K 21.2K 29
Chiara y Violeta son compañeras de piso, y no se llevan bien. Discuten a menudo, y cuando no lo hacen, se ignoran. Cuando se adelanta la boda de su h...
759 63 5
Historias Cortitas y Cariñosas sobre Nuestro Niño Pinguinito historia 1000% mías ☝️🤓