-¡Formal! ¿En serio viejo? ¡A mí no me gusta lo formal!-Exclamó Chico Bestia cruzando los brazos.
-¿De dónde vamos a sacar vestidos y trajes Robin? Sólo tenemos uniformes, y Starfire tiene una piyama de conejitos rosas-Dijo Raven.
-En realidad la piyama es mía-Confesó Chico Bestia.
-Bruce se encargará de eso. Ya mandó comprar los trajes y los vestidos-Dijo Robin tranquilamente.
-¡Maravilloso! ¡Vamos a usar bonita ropa de humanos y no los uniformes!-Exclamó Starfire.
-Bueno chicos, mañana será la cena de aniversario de la Liga de la Justicia, en el Salón de la Justicia, así que por favor no lleguen tarde al auto, para irnos temprano-Pidió Robin saliendo del cuarto de Starfire, donde todos se habían reunido.
-¡Súper! ¡Conoceré a Linterna Verde, y Flash, y la Mujer Maravilla!-Exclamó Chico Bestia saltando en la cama.
Al día siguiente, Robin, usando un traje y sin el antifaz, se acercó a tocar la puerta de Starfire.
-¡Star! ¿Estás lista princesa?-Preguntó.
En el interior, Starfire se sonrojó. La hacía feliz cuando Robin le ponía apodos cariñosos.
-¡Un segundo, sólo tengo que subir el dispositivo de la espalda!-Exclamó ella.
-¿Hablas del cierre?
Y la puerta se abrió. Usaba un largo vestido de color rosa, con una falda de tul y algunos diamantitos en el top strapless.
-No estoy acostumbrada a este tipo de vestimentas, pero me gusta. Es bonita-Dijo ella con una sonrisa.
-Te ves....muy hermosa-Dijo él. Ella miró sus ojos azules. Sólo los había visto una vez antes, en el aniversario de la muerte de los padres de Robin, y anhelaba verlos de nuevo.
-Tú también luces muy atractivo hoy, querido novio Robin-Dijo ella sonriendo.
Robin la tomó de la mano y se dirigieron al auto que los llevó al Salón de la Justicia, donde los miembros de la Liga de la Justicia esperaban. Robin la acercó a un hombre con lentes y smokin, y una mujer de pelo negro con vestido rojo.
-Clark, Diana, les presento a mi novia Starfire. Starfire, ellos son Clark Kent y Diana Prince, o Superman y la Mujer Maravilla-Dijo Robin.
-Es un gusto querida-Dijo la mujer estrechando la mano de Star.
-Mucho gusto, jovencita. Bruce me ha hablado mucho de ti-Dijo Clark Kent estrechando la mano de la joven.
-Yo también he oído de usted, señor. ¿Es usted el héroe kryptoniano, no es verdad?-Preguntó Starfire.
-En efecto, querida. Me parece haber escuchado que tú eres de Tamaran. Buenos luchadores y buenas personas los de ese planeta-Dijo Clark con una sonrisa.
Mientras Starfire y Robin hablaban con los miembros de la Liga, Chico Bestia pedía autógrafos, Cyborg devoraba todo a su paso y Raven simplemente se mantenía al margen de todo, Zatanna y Barbara Gordon bajaron las escaleras, usando provocativos vestidos, Barbara un vestido rojo entallado con mucho escote, y Zatanna uno negro oscuro con una larga abertura en la pierna y sin espalda. Ellas eran justo lo opuesto a Starfire: mientras ellas se veían sensuales, ella se veía más delicada, femenina e inocente.
-Hola Dick, tiempo sin vernos-Saludó Zatanna a Robin. Lo abrazó y le besó la mejilla.
-Zatanna, te ves bien. Déjame presentarte a mi novia, Starfire-Dijo Robin mientras empujaba suavemente a Starfire al frente. Ella extendió su mano para saludar.
-¡Hola! Soy....
-La alienígena, ¿no? Creo que te vi en las noticias-Dijo Zatanna estrechando la mano de Starfire con desdén. Ella se sintió confundida. ¿Por qué ella y Barbara no fueron amables con ella si ella sí lo había sido? "Debería ponerme más al tanto de la psicología terrestre" pensó ella.
Cuando la música comenzó a sonar, Zatanna arrastró a Robin al centro de la pista casi sin preguntar. Starfire, rendida, se dirigió a Raven. Traía un vestido negro de manga larga y falda amplia sin hombros, y estaba levitando.
-¿Por qué vuelas, amiga Raven?-Preguntó extrañada Starfire.
-Estoy usando tacones, y jamás los había usado antes-Dijo Raven. Miró la cara de Starfire y negó con la cabeza-¿Perdiste a Robin, o por qué no estás con él?
-Sus amigas lo han llevado al centro de la pista de baile, y yo me he quedado sola-Dijo Starfire con algo de melancolía.
-A mí nunca ningún chico me ha invitado a bailar, así que puedo acompañarte por ahora.
Chico Bestia escuchó esto, y se acercó a ella.
-¡Siempre hay una primera vez! ¿Me concede esta pieza, mademoiselle?-Preguntó extendiendo una mano ante Raven. Ella lo miró dudosa, pero finalmente tomó su mano y se dirigieron a la pista. Starfire se quedó por completo sola.
-¿Me permites esta pieza?-Preguntó una voz.
-Oh, supongo que sí, Jason-Dijo Starfire con una sonrisa aceptando su mano.
Bailaron por unos instantes, y Jason preguntó:
-Déjame adivinar, Zatanna o Barbara se llevaron a Dick-Dijo él, y se rió.
-Básicamente así sucedió-Suspiró Starfire mientras Jason le daba vueltas.
-No te preocupes por ellas. Robin ya terminó con Barbara, y nunca tuvo una relación con Zatanna. Más bien ella se enamoró de él-Dijo Jason riendo.
-De todas maneras estoy sintiendo una sensación no muy agradable en el estómago que me impide disfrutar del baile mientras él baile con ellas-Dijo Starfire frunciendo el ceño.
-¿Celos?
-Eso. Celos-Suspiró.
Cuando la canción terminó, de pronto, se escucharon disparos contra las ventanas, que cayeron echas añicos. Cincuenta payasos robóticos, liderados por Madame Rouge y Monsieur Mallah.
-Tiempo sin vernos, ¿o no, niños?-Preguntó Madame Rouge alzando una ceja. Todos los que estaban en el interior del edificio comenzaron a sacar sus armas y encender sus poderes.
-¡Ataquen!-Gritó Monsieur Mallah mientras una lluvia de balas les caía encima.
-¡TODO MUNDO ATRÁS!-Exclamó Bruce mientras Raven creaba un escudo en la ventana.
-Starfire, ve a esconderte, ¿de acuerdo?-Pidió Robin a Starfire.
-Pero...
-¡CORRE!
Starfire decidió obedecer a su novio, y se fue a esconder a un cuarto mientras sus amigos luchaban por defender el lugar. Chico Bestia, convertido en gorila, luchaba directamente con Monsieur Mallah. Raven y la Mujer Maravilla luchaban contra Madame Rouge, y entre todos los demás luchaban contra los payasos.
Desde la puerta de donde estaba, Starfire pudo ver cómo noqueaban a Raven tirándole encima una viga metálica, y cómo entre dos payasos atacaban a su novio. Se enfureció y abrió la puerta.
Furiosa, alzó vuelo y comenzó a disparar starbolts en contra de todos los payasos que veía.
-¡Starfire! ¡Sal de aquí, ahora!-Exclamó Robin enojado.
-¡Tengo que ayudar!-Exclamó Starfire mientras disparaba.
Zatanna miró hacia arriba, mientras Starfire atacaba a los payasos, y se le ocurrió una idea macabra. Dejó de detener al payaso con el que luchaba y se hizo a un lado, lo que hizo que este apuntara su arma a Starfire y disparara. Starfire cayó, y Robin corrió a atraparla. Todo su cabello pelirrojo le cubrió la cara.
-¿Starfire? ¿Estás bien?-Preguntó Robin preocupado, mirando a su novia.
Starfire alzó la vista, y dejó ver una mancha de sangre en sus costillas, que crecía más y más. Robin alzó los ojos como platos.
-¡STARFIRE, NO!-Exclamó, mientras las lágrimas amenazaban con salir de sus ojos.
-¡Starfire! ¡Vamos, no nos hagas esto muñeca!-Gritó Jason mientras corría a ella.
Cuando vieron a Starfire caer, los payasos restantes y Monsieur Malla y Madame Rouge se retiraron.
-¡Raven, necesitamos a Raven!-Exclamó Robin mientras se arrodillaba con Starfire. Ella estaba perdiendo la consciencia poco a poco.
-¡Raven tampoco está en buen estado Robin!-Gritó Chico Bestia aún siendo gorila. En brazos tenía a una inconsciente Raven.
-Dick, llévala ahora a la enfermería, sin perder nada de tiempo, ¿está claro?-Dijo Bruce.
Robin corrió con Starfire aún en brazos.
-Por favor, Starfire, quédate, ¿vale? Si te quedas conmigo, prometo que tendremos la cita que prometí, pero no te vayas.
Starfire trató de contestar, pero ya no podía. Cerró los ojos, mientras escuchaba a Robin gritándole que se quedara.
-¡Por favor, no puedo estar sin ti!-Exclamó Robin, y finalmente, Starfire cerró los ojos.