Narra Melissa.
¿Nunca os habéis preguntado eso de, "Quien mierdas se invento lo de madrugar"? Por que yo sí. Me lo preguntaba cada mañana al entrar por las puertas del edificio al que iba ha hacer las practicas. No es que fuera vaga ni nada de eso, al revés era bastante activa y me gustaba ser productiva, pero a una hora más normal, no a las siete y media.
Aunque bueno, tampoco podía quejarme. Hoy tenia que reconocer que estaba de muy buen humor, por mucho sueño que tuviera, estaba bastante alegre. Y sí, de alguna manera u otra, Justin tenia mucho que ver en ello.
Tenía unas ganas terribles de que fuese mañana, osea Martes, para verle. Para aclarar y que me explicara todo esto un poco, aunque verdaderamente me daba igual ya, solo me importaba que el no estaba con Selena, que había sido sincero y que aunque no debía, y no tenía porqué contarmelo, lo había echo, había confiado en mi, y eso demostraba que aunque sea un poco, le importaba.
-Señorita Melissa, ¿me esta usted escuchando? -dijo el supervisor, sacandome de mis pensamientos.
-Si, disculpe. -dije yo.
-Bien, tome su trabajo trimestral. Felicitaciones, es usted la mayor nota. -me entregó el trabajo trimestral que teníamos que hacer. Era como una especie de examen que los supervisores de las practicas nos hacían para comprobar lo que aprendíamos.
Observe mi trabajo de arriba a abajo y me fije en mi nota, que estaba justo en la parte de arriba de este. Un nueve. Era lo que esperaba. No es que hubiese estudiado mucho, pero en las clases atendía a todo esforzándome y todo esto se me daba realmente bien.
-¿Que as sacado? -me preguntó Sara cuando me senté de nuevo a su lado, en el final de la clase.
-!Un nueve¡ -dije entusiasmada, pero sin alzar la voz para que el supervisor no nos llamara la atención.
-Joder tía, que bien. Tu trabajo estaba muy bien, te lo has currado. -dijo Sara felicitándome.
-¿Y tu que has sacado? -le pregunté.
-Un ocho... Habría sacado más nota si Ryan no me hubiera distraído varias veces. Pero bueno, no esta mal. -dijo ella de forma casual.
-Seguro que solo fue Ryan ¿no?, ¿Tu no tuviste nada que ver, verdad? -comencé a reír de manera disimulada, insinuándole a Sara lo que pensaba.
-Para nada, mal pensada... -ya sin aguantarse más soltó una risa. -Yo solo colaboré... -otra carcajada salió de mi boca.
-Oh dios, eres una pervertida. -le dije de broma. Sin para de reír. Estos temas, al ser un poco incómodos a pesar de la confianza, siempre nos causaban risas.
-Señoritas, por favor guarden silencio o salgan de la clase. -dijo el supervisor. Explicaba las cosas muy bien y era un buen profesor, pero era realmente un estúpido. Ambas nos callamos y seguimos escuchando lo que decía.
Estábamos en esa parte del trimestre en el que todo era aburrido. Eran casi las vacaciones de Navidad y las clases eran más liberales, excepto con este supervisor, que no entendía que ya habíamos acabado casi el trimestre y ya no quedaba prácticamente nada que hacer.
Alguien toco a la puerta de la sala, sacandonos a la mayoría de las persona que estábamos allí de el trance aburrido en el que estábamos.
Un hombre de unos veinticinco años de complexión fuerte, moreno y con el pelo corto y perfectamente peinado entró. Vestía un traje gris oscuro, que le hacía ver elegante y más mayor de lo que parecía.
-Señorita Trees, ¿puede salir un momento? -dijo refiriéndose hacía a mi. Asentí y me levante de mi mesa, caminando hacía la puerta.
-Acompañeme. -caminé junto a el hasta el ascensor, y pulsó un botón que llevaba a una planta superior de la que estábamos, la cinco. Me abrió la puerta de lo que parecía ser su despacho y me dejo pasar primero. Me senté en un cómodo sillón y el lo hizo igual detrás del escritorio.
-Hoy me han enseñado las ultimas notas de sus trabajos trimestrales, y debo decir que son realmente buenos. Me gustaría proponerle una cosa.
-Gracias, por supuesto digame.
-Bien. Necesitamos a alguien con sus excelentes notas y conocimientos que nos ayude en la nueva campaña de marketing y diseño de la empresa. Sería un muy buen aporté a su currículum.
-Si, pero es que yo no me especializo en marketing.
-De todas formas tiene muy buenas notas también en este apartado, nos sería de gran ayuda y solo tendría que venir una hora o dos horas a la semana. Yo te avisaría con antelación, tengo su numero aquí. -señaló una ficha con datos mios y una foto.
-Supongo que es una buena oferta. -dije dudosa
-No la veo muy segura, esta semana podríamos vernos una tarde y te explico de que trata todo esto. Solo considera la oferta, es bastante buena.
-Si eso me parece bien.
-Bien, pues muchas gracias por su tiempo. En cuanto tenga un hueco libre me comunicó con usted para explicarle todo. -dijo mientras daba un apretón en mi mano.
-Gracias a usted, hasta luego. -le dije saliendo por la puerta. Baje por el ascensor y Sara ya estaba en la puerta.
-¿Nos vamos? -le dije ya a su lado.
El día no podía ir mejor.
-SI, ¿que a pasado? -pregunto mientras subíamos al taxi.
-Pues a ver... -comencé a contarle todo lo que me había dicho.
Narra Justin.
-...You're all that matters to me
Yeah yeah, ain't worry about nobody else
If it ain't you, I ain't myself
You make me complete
You're all that matters to me
Yeah, yeah, what's a king bed without a queen
There ain't no "I" in team
You make me complete
You're all that matters to me
Yeah, yeah, yeah, yeah
You're all that matters to me
Yeah, yeah, yeah, yeah
You're all that matters to me... -terminé de gravar la nueva canción " All that matters".
-Perfecto, ya esta, ha quedado perfecta. Te ha salido genial Just. -dijo Scoot dando palmaditas en mi espalda cuando salí de gravar.
-Gracias hombre. -dije riendo, Scott siempre se sentía muy orgulloso cada vez que terminábamos una canción. -¿Cuando gravaremos el videoclip?. -pregunté.
-No lo sé todavía. Tengo que aclarar algunos temas sobre eso. -dijo el. Asenti.
-¿Que hora es? -pregunté yo.
-La hora de comer.
-¿Si? Bueno pues vámonos, te invito a comer.
-¿Restaurante? No me apetece, la verdad. -dijo el haciendo una mueca.
-No. Vamos a mi casa y pedimos algo por teléfono.
-¿Al apartamento o a Calabasas? -preguntó. Realmente prefería ir a la mansión que tenía en Calabasas, allí no había tanta gente persiguiendome, ni paparazis. Pero esta tarde teníamos que volver pronto al estudio para los últimos retoques, así que era mejor ir al apartamento, estaba más cerca.
-¿Te da igual? -pregunte. El asintió.
-Pues entonces vamos a mi apartamento. Seguramente estarán Trent y Ryan.
-Esta bien. Hace tiempo que no veo a Ryan ¿que tal le va? -preguntó mientras salíamos por la puerta.
-Le va muy bien al jodido. -dije yo sonriendo.
-Corre sube rápido. -dijo Scoot indicándome que subiera al coche. Había demasiada gente en la puerta, más de lo normal. ¿Realmente nunca se cansaban?
[...]
-Gracias. Aquí tiene. -le dije al hombre que había traido las pizzas y le entregué el autógrafo que me pidió. Cerré la puerta.
-¿Scoot te gusta el pepperoni, no? -le dije yo entrando con las pizzas.
-¿A quien no le gusta el pepperoni? -dijo Ryan.
-Pues no se, alguien habrá... -dije yo. Mientras me sentaba en la mesa.
-Enciende la televisión anda. -dijo Ryan.
-¿No has encontrado una televisión mas grande, verdad? -dijo Scoot.
-Es más grande la de la mansión de Calabasas, no exageres.
-Caprichoso... -susurró. Me eché a reír, Scoot era para mi casi como un padre.
-¿Donde esta el mando? -preguntó Ryan.
-Ahí, encima del sofá. -lo cogió y la encendió. Nada más encenderla ya estaba yo, en un programa de cotilleos.
-Y aquí tenemos de nuevo al gran ídolo juvenil, Justin Bieber. Últimamente lo hemos visto acompañado de la preciosa actriz y cantante Selena Gomez. Pero las dudas se desatan antes estas nuevas imágenes del pasado fin de semana donde el ídolo juvenil era visto entrando a su apartamento del centro con una joven de cabello rubio. -mostraron las imágenes en las que yo salía cogiendo a Melissa en brazos. Y ella estaba dormida. La noche que se quedó conmigo a dormir.
-¿Estará engañando a Selena gomez? ¿tendrá Justin Bieber una nueva relación? ¿O será una nueva modelo con el que el cantante mantiene algo más que palabras? Solo podemos decir que estaban muy acaramelados. -mostraron una foto en la que Melissa estaba acurrucada en mi pecho y yo la miraba directamente.
-El ídolo juvenil cada vez da más que hablar. Buenas tardes y gracias por seguir las noticias con TMZ. -terminó diciendo la presentadora.
-Apagala. -le dije a Ryan refiriéndome a la televisión, un poco enfadado. No podía ser que ya se estuvieran enterando de lo que tenía con Melissa. Era increíble joder. Menos mal que gracias a la oscuridad y a que estaba dormida apenas se le veía la cara. No era una buena idea que la gente se empezara a enterar de lo que "tenia" con ella. Iba a ser un gran escandalo y ni siquiera habíamos aclarado nada.
-¿Quien es esa chica, Justin? -preguntó Scooter desconcertado.
-Pues es una chica que tiene enganchadito al "Gran Bieber" -dijo Ryan mientras se reía de forma burlona.
-Callate imbécil. -dije yo tirándole un trozo de la corteza de mi pizza, lo que le hizo reírse aun mas.
-¿Y que hay de Selena? -dijo Scoot frunciendo el ceño.
-Ella pronto se va de gira, no me molestará mucho más. -dije yo, aclarándole. Scoot soltó otra risita burlesca.
-Osea que la chica te tiene enganchadito ¿No Justin? -dijo el, en el mismo tono que Ryan.
-No empieces tu también eh... -dije intentando no reírme. Amenazando con el dedo.
-No. Enserio... ¿Quien es? Parece guapa. No sabía que te gustaban las rubias. -dijo otra vez riéndose.
-Pues vaya si le gustan... Se llama Melissa, es la amiga de mi novia y esta bastante bien, la verdad, buenas curvas. -dijo Ryan aclarándole.
-Pero... ¿para una noche o algo más? -preguntó Scoot curioso.
-Pues eso ya no lo sé... Por que el idiota este tiene unos líos. No se lo que querrá con ella, la verdad. -dijo Ryan refiriéndose a mi. Intentaba hacer que no les escuchaba mientras estaba con el móvil, pero Ryan me sacaba de mis casillas.
-Pero que capullo eres... -le dije mientras le tiraba un cojín en la cara. -Cierra la boca ya. -dije intentando sonar cabreado mientras el no paraba de reírse. -Ya verás que gracia le va ha hacer a Sara cuando le cuente, "las buenas curvas que tiene Melissa" -dije imitando su voz.
-Ni se te ocurra. -dijo tirandome otro cojín. Y es que mira que le gustaba enfadarme al muy cabron. Aunque era de broma, siempre estábamos así.
-Bueno ya me contaras anda... -dijo Scoot, refiriéndose a el tema de Melissa.
-Si, si. A ver si consigues que se aclare. -dijo Ryan, lo fulmine de nuevo con la mirada, y rodando los ojos.
-Bueno, empieza a arreglarte que en nada nos vamos a la entrevista. -me avisó Scoot. Asenti y me levante del sofá dándole otra vez con el cojín a Ryan y me fui a mi cuarto.
Antes de vestirme le mande un mensaje a Melissa.
Para Melissa: ¿Como esta mi rubia favorita?
Tardo poco en constestar.
De Melissa: Debes de tener muchas rubias favoritas, Bieber.
Una pequeña carcajada salió de mi boca a leer el mensaje.
Para Melissa: Que va. Eres mi única rubia favorita, Trees.
Terminé de vestirme y ates de salir me contestó.
De Melissa: Eso no te lo has creído ni tú, Bieber... Mañana nos vemos tonto.