Nos despertamos por golpes en la puerta de los chicos para despertarnos.
-¡Cállense!- Grita Jane.
-¡Hay que levantarse! ¡Es tarde y hay que llegar al internado!- Oigo la voz de James.
Todas gruñimos y nos levantamos para cambiarnos, ordenar rápidamente la habitación y bajar.
-Buenos días.- Saludamos ta abajo.
Todos los chicos estaban ya sentados en la mesa desayunando. Lo que me llamó la atención fue Nate. Estaba con el ceño fruncido, jugando y mirando su comida, sin apartar su mirada de ella.
Sacudí mi cabeza y me dije que no tenia importancia.
Peter se acerca y me da un beso en la mejilla.
Si, ayer le dije que si.
Sé que tal vez es muy rápido, pero siento muchas cosas por Peter, y siento que hago lo correcto.
Aun no se como les voy a decir a los chicos, pero luego se me ocurrirá algo.
Desayunamos rápidamente y salimos de la casa de Peter.
-Tengo que ir a buscar algo cerca de aquí, avancen ustedes, luego yo voy al internado.- Habla Peter.
-¿Seguro?- Pregunto.
El asiente y me da un beso en la mejilla. Él sabe que aún no hay que mostrar tanto afecto frente a los chicos, ayer hablamos sobre eso.
-Luego nos vemos.- Dice eso y se va.
Seguimos caminando y llegamos al internado.
-¡Esperen!- Grita Jane haciendo que nos detuviéramos.- Seguramente nos darán un gran castigo al entrar.
-Muy cierto.- Dice Kile.
-¿Entonces? ¿Que hacemos?- Pregunta Sam.
-Pues... Tengo una idea.- Habla por primera vez Nate.
(...)
-¿Seguro de esto?- Le pregunto.
-Claro.- Dice indiferente y mira a los demás.- Subimos por esta reja, no nos ven, y ponemos la escusa que ya habíamos llegado a noche, solo que no había nadie en la portería y no nos vieron entrar.
Y esa es la loca idea de Nate.
<<Acéptalo, es buena >>
-Bien pensado.- Dice Jesse.- A escalar.
Bufo, nunca me dio bien escalar.
Todos empezaron a subir la reja, y yo aquí, "intentando" hacerlo.
-¿Necesitas ayuda?- Pregunta burlonamente Nate del otro lado de la reja.
-¿De ti? No, gracias.- Le sonrío falsamente.
Mira a los chicos, que ya están del otro lado.
-Vayan adelantándose, luego los alcanzamos.- Ellos nos miran dudosos, pero luego asienten.
Bufo y me cruzo los brazos poniéndolos en mi pecho.
-No necesito tu ayuda.
El rueda los ojos y salta de nuevo la reja para mi lado.
En un movimiento rápido, me toma de la cintura y me eleva.
-¡Ah!- Suelto un chillido de la impresión.- ¡Suéltame, idiota!
Me baja y me mira.
-¿Quieres quedarte aquí?
Suspiro y niego con la cabeza.
Me levanta de la cintura nuevamente y subo la reja que me queda, para saltar al otro lado.
Luego, Nate pasa.
-¿Ves? No es difícil.
Me sacudo mi ropa y lo miro entre cerrando los ojos. Sin decir nada, me voy.
-Uhh, que miedo tu mirada.- Camina detrás mio y finge terror.
Ruedo los ojos y me dirijo a mi edificio.
Noto la presencia de Nate al lado mio y lo miro.
-¿Por que me sigues?- Le pregunto molesta.
-Tranquila.- Rueda los ojos.- Solo estoy caminando por el internado, no estoy siguiendote.
-Pero, ¿Puedes caminar a otro lado?
-Este lugar el libre, así que no.- Me sonríe.
Lo que resta del camino nos quedamos en silencio.
Unos sonidos se oyen en los parlantes que están por el internado.
-Campell, Nathaniel y Meller, Brooke a la oficina del director. Campell, Nathaniel y Meller, Brooke a la oficina del director.- Se oyo una voz en ellos.
Nos quedamos parados al escuchar nuestros nombres y nos miramos en silencio.
Una carcajada mía lo rompe.
-¿Te llamas Nathaniel?- Pregunto riéndome.
Me mira incrédulo y empieza a caminar.
Yo lo sigo aún riéndome.
(...)
Llegamos a dirección, Nate, o como ahora sé que se llama, Nathaniel, abre la puerta y entramos.
Ahí está Clary sentada detrás de un escritorio. Clary es la quien nos recibió cuando llegamos al internado. Es la secretaria e hija del director.
-¡Clary!- La salude alegre.
-¡Hola!- Me sonríe y niega con la cabeza.- Mi padre los espera, no saben en que lío se metieron.
Mire a Nate.
Caminamos y tocamos la puerta de la oficina del director.
-Pase.- Se escuchó una voz del otro lado.
Le hice una seña a Nate para que pasara antes de mi, pero el no se movió y me miró a mi para que pasara.
Rodé los ojos. Abrí la puerta y entramos.
-Ustedes deben de ser Meller y Campbell.- Su silla esta de espalda, no lo podemos ver.
-¿Por que no se da vuelta?- Pregunta Nate confuso luego de unos segundos en silencio.
-Así hay más suspenso.- Se gira y rueda los ojos.
Nate y yo nos miramos confundidos.
-Siéntanse.- Apunta a las dos sillas que están frente a su escritorio.
Nos sentamos y quedamos en silencio.
-Deben de saber porque están aquí.- Levanta una ceja.
No decimos nada.
-No llegaron a noche y además se pasaron ilegalmente la reja del internado.- Dice y me mira.- No he tenido la oportunidad de conocerla, señorita Meller, pero a usted señor Campbell - Lo miró.-, si he tenido la suerte de conocerlo.
-No sé porque siento que esta siendo sarcástico.- Murmura Nate haciéndose el pensativo.
El director rueda los ojos, al igual que yo.
-Deben de saber que esto es muy grave...
-No tiene pruebas.- dice rápidamente Nate.- Nosotros entramos ayer, solo que no había nadie en la entrada y...
Se calla cuando el director da vuelta la pantalla de su computador, y muestra como Nate me ayuda a pasar la reja, la paso y luego el pasa.
Nate y yo nos caemos rendidos entrada la silla.
-Aquí están las pruebas, señor Campbell...
-La verdad fue que ayer se nos paso la hora, y decidimos ir a la casa de un amigo aquí cerca, y ahora para evitar el castigo, pasamos la reja.- Digo sincera.
-¡Cuéntame mas! Lo voy a anotar todo en mi maquina de escribir invisible.- Dice escribiendo en el aire.
Abro la boca para decir algo, pero la cierro frunciendo el ceño.
<<¿Y a este que le pasa? >>
-Creo que el director esta loco.- Murmure hacia Nate.
-¿Crees?- Pregunto elevando una ceja.
(...)
-Todo esto es tu culpa.- Digo entrando a mi habitación.
-¿Mía?- Pregunta Nate entrando y cerrando la puerta detrás de mí.
-Si, si no hubiéramos pasado la reja, no nos hubieran castigado.
-¡Es tu culpa! Si no te costará subir una simple reja, nos hubiéramos ido con los demás y no nos hubieran grabado.
Me cruzo de brazos y nos quedamos en silencio.
El director, luego de sentenciar que esta muy loco, nos dio un trabajo para hacer juntos. Uno muy fácil pero aburrido.
-Pues, no interesa, hay que hacer este estúpido trabajo.- Dice y rendida, me siento en la orilla de mi cama.
Estar aquí con Nate me trae recuerdos de cuando lo conocí.
Antes, al recordar ese día, me ponía furiosa con el, pero ahora, raramente sonrío.
¿Que me esta pasando?
Borro rápidamente esos pensamientos de mi cabeza y miro a Nate, que tiene una sonrisa mirando toda mi habitación.
<<¿Estará pensando igual que nosotras...? >>
No, no. Claro que no. Seguramente recuerda que aquí me vio casi desnuda.
Sacudo mi cabeza para sacar esos pensamientos.
-¿Empezamos?- Interrumpo su paseo por mi habitación y se sienta al lado mío.
(...)
Al tomar un descanso del trabajo, caímos en mi cama mirando el techo.
Si, los dos. Y hemos estado así por varios minutos.
¡Aplaudan! Es un nuevo récord que llevamos sin insultarnos o fulminarnos con la mirada.
El suspira y se levanta levemente sosteniéndose de su codo.
-¿Que tal si hacemos una tregua?
-¿Una tregua?- Lo miro confundida.
-Si, tratar de llevarnos bien, al menos este día para que terminemos bien el trabajo.
Sí... Eso se que el trabajo era fácil no fue cierto al final de todo.
Asiento lentamente pensándolo.
Tiene mucha razón, pero...
No hay ningún pero.
-Bien, pero no te comportes como un idiota, ¿Quieres?
El asiente y se acuesta nuevamente al lado mio, mirando el techo.
-Lo siento... Por todo.- Dice Nate.
Giro mi cabeza para mirarlo confundida.
Al notar mi mirada confundida, agrega: -Creo que hay que disculparnos, para iniciar bien la tregua.
Asiento.
- Yo también lo siento, a veces puedo ser muy terca...
Gira su cabeza para mirarme, así estamos cara a cara. Me pongo nerviosa, pero creo que el no lo nota, ya que me mira incrédulo.
-¿A veces?
Rio y asiento.
-Bueno, bueno. Contigo puedo ser siempre terca.- Sonrío y el ríe, para luego mirarme sonriendo.
Nos quedamos en silencio, sonriéndonos, mirándonos.
De a poco, mi sonrisa se borra. Estamos muy cerca.
Me siento rápidamente y carraspeo.
El también se sienta y pasa sus manos por su cabello, nervioso. Eso significa que el también noto lo cerca que estábamos.
Me levanto y el igual.
-Podemos juntarnos mañana para terminar el trabajo.- Habla el.
-Sí.- Noto que asiente, pero no puedo mirarlo.
Tengo tanta vergüenza. ¿Porque? Porque tuve tantas ganas de besarlo, que no sé de donde salieron.
-Bien.- Dice y camino hacia la puerta para abrirla.
La abro y el pasa, pero se queda parado afuera.
Me dispongo a cerrarla, pero la mano de Nate lo impide.
-Espera.
Quedamos frente a frente.
Se acerca, tanto, que tengo que subir mi cabeza para no quedar mirando su pecho.
Levanta una mano y la deja en mi mejilla, acariciándola.
¿¡Que esta haciendo!?
<<No lo sé, pero me gusta mucho...>>
Sorprendentemente, a mi también.
Se acerca mas y mas. ¿O soy yo quien se esta acercando?
Creo que somos los dos.
Su respiración se mezcla con la mía y nuestras narices rozan.
¡Me va a besar!
<<No querida, se van a besar, porque tu también te estas acercando y también quieres >>
Extrañamente, aún escuchando a mi conciencia, no me separo, además de que tiene razón, ya que si quiero besarlo.
Nuestros labios rozan y me levanto un poco para juntar nuestros labios.
Y nos estamos besando...
¡Nos estamos besando!
Sus labios son tan dulces... Y suaves...
Movemos juntos nuestros labios lentamente, sintiendo miles de sensaciones y sentimientos.
Dicen que se puede transmitir mucho con un beso, y creo que eso hacemos, no hace falta hablar, solo besarnos.
Seguimos moviendo nuestros labios, e inconscientemente levanto mis brazos para entrelazarlos atrás de su nuca, acercándome mas a el.
Siento mil cosas que no puedo explicar, una sensación que va de mi pecho hasta mi estomago.
Luego de unos segundos besándonos lento, nos separamos lentamente abriendo los ojos.
Estamos literalmente en shock.
Su mirada me dice que sintió exactamente lo mismo que sentí yo. Pero ni siquiera podemos explicarlo.
-¿Brooke?- Volteo y ahí esta Emma mirándonos sorprendida.
Me separo rápidamente de Nate.
-Emma...- Alcanzo de decir antes de que salga corriendo.
Dispuesta a salir tras ella, Nate me detiene.
-Voy yo.- Su voz sale ronca.
Asiento y se va.
Suelto el aire que tenia, sin darme cuenta, retenido en mis pulmones.
Recargo mi espalda en la pared del pasillo.
No puedo creer lo que acaba de pasar.
No puedo creer que haya besado a Nate.
No puedo creer que haya besado a Nate ahora estando con Peter.
Oh, no. Peter.
Pero lo que no puedo creer mas que nada, que me gusto y sentí muchas cosas mas en el beso con Nate que con el beso con Peter a noche.
¿Que me pasa?
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N/A:
¡¡AHHH! Casi me muero escribiendo este capitulo. Desde que están juntos en la habitación me vino la inspiración y no pude parar de escribir.
#TeamNake!!!!
Espero que les haya gustado!!
Por favor no piensen que Brooke es una zorra, solo, ¿quien se puede resistir a Nate?
Aquí las dedicaciones:
No prometo nada de subir pronto, ya que no se si me venga la inspiracion, esperemos que si
Aquí el #Team(Ahora)Nathaniel!!!
Pasen por "¡Esto es guerra!" de butrelizzle, ¡¡¡Es muuuy buena!!!!
Pd: Alguien me pidio también recomendarla, solo que se me fue la converzacion, quien quiera que fuera, me avisa! Que se me olvido
Besossssss
-F