{En multimedia Brittany Brooks}
PUNTO DE VISTA DE CECILE
Ya estamos a mitad de semana lo que significa que en dos días más en fin de semana. ¡Bien!
La verdad es que estos últimos días han pasado bastante tranquilos. En mi casa todo sigue igual. Mis padres se pelean, mi madre termina llorando y mi padre se va de la casa durante unos días para luego volver como si no hubiese pasado nada. Mi hermano sigue yendo a la casa de sus amigos, seguramente porque pasa de vivir en el infierno en el que estamos sumergidos en mi casa.
En el fondo sigo manteniendo la esperanza de que mis padres maduren y sean capaces de recapacitar y entender que si no son felices juntos es mejor que se separen. Sin embargo, ese deseo parece ser que no se cumplirá tan pronto como deseo.
Pero bueno, ya estoy acostumbrada a vivir así.
En cuanto al instituto por ahora me va bastante bien. He intentado no bajar mi ritmo y a pesar de que no soy una de las alumnas más excelentes apruebo todo con más de un seis, menos en arte, ahí sí que soy una alumna ejemplar y de las mejores de la clase. Casi todas mis pruebas terminan con una calificación de un diez y cuando no es así, es un nueve o nueve con algo.
Las clases de deporte también las llevo mejor de lo que pensaba que iban a ser. Sinceramente, Peter es muy simpático y de vez en cuando hablamos, a pesar de que sea mi profesor. Incluso ya le considero como un amigo más.
Lo único malo es que aún no les he contado a mis amigas mi encuentro inoportuno con Peter días antes de comenzar las clases. Creo que si lo hago pueden juzgarle de mala manera y tampoco quiero eso.
Salgo de la clase para dirigirme a mi taquilla cuando de pronto me encuentro con una desagradable escena para mis ojos. Courtney y Brian hablan entretenidamente.
Al verles hablar de esa manera siento como mi corazón está siendo pisoteado en el piso una y otra vez.
Me doy la vuelta para parar de torturarme de esa manera y me choco con una Brittany que me observa con detenimiento.
—¿Estás bien? —me pregunta. Arrugo mi frente pensando en lo mosquita muerta que es esta chica.
Realmente no estoy bien y menos después de la escena que acabo de presenciar pero no le voy a dar el gusto de verme mal y poder reírse de mi desgracia.
—Claro que sí, ¿por qué no iba a estarlo? —bufo fingiendo que no me pasa nada. Brittany se ríe levemente y eso me hierve la sangre.
¿De qué se ríe la tonta esta?
Controlo mis ganas de pegarle una cachetada y dejo que hable.
—Es más que obvio que no estás bien —afirma con decisión. Yo pongo los ojos en blanco e intento apartarla de mi camino para marcharme de ahí. Sin embargo, ella consigue detenerme.
—¿Qué quieres Brittany? —pregunto elevando la voz ya que mi enfado aumenta por segundos.
—Cecile he visto como miras a Brian —musita por lo bajo de forma apacible. Mis ojos se abren un poco más de lo normal al oír su confesión pero rápidamente intento negarlo.
—No sabes de lo que hablas —disimulo pero parece no funcionar porque ella sigue mirándome de la misma manera y con la misma expresión.
—Cecile, tranquila, no voy a contar nada —no puedo evitar reírme al escuchar sus palabras.
Eso me hace recordar el motivo por el cual Candice y yo la odiamos. Aunque parece ser que a Candice ya se lo olvidó porque ya está bien con ella.
—Como cuando tampoco le ibas a contar a Eiden que Candice no había ido a su fiesta porque prefería estar con nosotras, ¿no? —digo refrescándole la memoria por un suceso ocurrido cuando Eiden y Candice comenzaron a salir.
Recuerdo que Candice le había suplicado a Brittany que si Eiden preguntaba porque no había ido a su fiesta le dijera que se encontraba mal. Sin embargo, Brittany no hizo caso a Candice y la delató contándole toda la verdad a Eiden, es decir, diciéndole que Candice prefirió estar con nosotras que ir a su fiesta de inauguración de la Navidad.
Eiden estuvo varios días enfadado con Candice hasta que finalmente la perdonó. Aun así, Candice y yo no olvidamos lo traicionera que fue en esos momentos Brittany.
—Eso fue un error —intenta excusarse.
—Excusas baratas —le corrijo.
Ella rueda los ojos.
—Si te gusta Brian no deberías de quedarte en las sombras esperando a que otra sea lo suficientemente valiente como para confesarle lo que siente por él —me termina aconsejando Brittany.
Ante sus palabras me quedo boquiabierta puesto que en el fondo sé que por mucho que la odie en esta ocasión ella es quien tiene la razón. Sin embargo, hay algo en mi que me prohibe confesarle mis sentimientos a Brian y ese algo se llama miedo al rechazo.
No quiero acabar mi amistad con Brian porque no sea lo suficientemente inteligente como para ocultar mis sentimientos.
Ni siquiera sé cuando, ni como, empecé a sentir este tipo de sentimientos hacia él. Solo sé que un día me desperté y noté que ya sus palabras no me sonaban como las del resto de chicos, que ya sus abrazos no eran iguales y que yo ya no sentía solo una amistad hacia él.
—Y-yo te juro que no puedo decírselo, no puedo Brittany, no estoy preparada —comienzo tartamudeando pero luego consigo que mis palabras salgan con claridad. Ella me mira con compasión y tal vez empatía.
Muy raro en ella.
—No pasa nada Cecile, yo te entiendo, a mí me ocurre lo mismo con Daniel —suspira Brittany mientras me pone su mano en mi hombro.
Me quedo un tanto boquiabierta al oír el nombre de Daniel.
—¿Daniel? —pregunto con incredulidad. Ella asiente y da otro suspiro.
—Siempre he intentado llamar su atención, ya sea hablándole, echándole la bronca o lo que sea, pero él no parece notarme —su voz ha sonado frágil y no puedo evitar sentir lástima por ella.
Está pasando por lo mismo que yo con Brian.
Suspiro y me animo a contarle también lo que me ocurre a mí con Brian.
—A mí me pasa algo parecido con Brian. Yo intento que él me vea como algo más, incluso hemos hablado de cosas profundas que muy pocas personas saben sobre mi, pero, a pesar de todo eso, él siempre sigue viéndome solo como una amiga o incluso hasta como una hermana —espeto.
—¿Y cómo sabes que ese amor no es correspondido? —me cuestiona Brittany.
Por un momento dudo ante su pregunta, es decir, Brian nunca me ha rechazado pero yo solo sé que lo noto. Yo noto que él no siente nada más que una amistad por mi.
—Lo sé porque yo lo noto, las chicas tenemos un sexto sentido para eso. Además, yo sé cuando le gusto a alguien y cuando no —digo encogiéndome de hombros. Brittany asiente prestándome atención.
—El amor es una mierda —suelta la pelirroja teñida.
Suspiro para luego darle la razón.
—Y que lo digas.
Ella ahora cambia su mueca triste por una sonrisa.
—¿Tregua? —me pregunta estirando su mano. Dudo durante unos segundos si aceptar su ofrenda de paz pero al final mi lado bueno es el que vence y me hace hablar para "firmar" la paz.
—Tregua —entrelazamos nuestras manos y damos por zanjada la tregua.
Y quién iba a decirme a mí que terminaría hablando con Brittany de mi amor no correspondido.
—Bueno, me voy a comer algo —se despide la pelirroja de mi. Yo asiento y opto por volver yo también a buscar algo a la cafetería.
En el camino me choco con el profesor Marshall o mejor dicho Peter.
—Vaya, Cecile, ¿qué tal el día? —me pregunta de forma amable y sonriéndome.
—Pues la verdad es que ahora bien —respondo a su pregunta. Él sigue ahí en frente de mi sonriéndome.
—Nos vemos luego en clase —se despide con la mano y yo hago lo mismo.
Vaya, eso ha sido un encuentro extraño.
Cuando voy a seguir con mi camino siento que alguien agarra mi brazo y me detiene. Cuando me volteo quedo a centímetros del rostro de Brian. Rápidamente me separo de él dejando una distancia razonable.
—¿Qué pasa? —pregunto desviando la mirada hacia otro lado con nerviosismo.
—¿Qué hacías hablando con el profesor Marshall? —me cuestiona con el ceño fruncido. Dirijo mi mirada hacia él y arrugo la nariz.
—Solo estábamos hablando, ¿qué hay de malo en eso? —miro confundida a Brian, quien no deja de examinarme con la mirada o eso parece.
—No sé, es raro, siempre te habla y cuando lo hace sonríe demasiado —trata de explicarme. Sé a lo que quiere llegar con eso pero finjo no darme cuenta.
—Nos llevamos bien —me encojo de hombros pero a él no parece servirle mi respuesta.
—Creo que deberías de tener más cuidado con quien te juntas —me advierte y eso me hace enfadarme. ¿Quién se cree él para decirme con quien debo juntarme o no?
—No me gusta que me manden —al escucharme pone sus ojos en blanco.
—Es un consejo Cecile, no tienes que tomarte todo a mal —su comentario me hace enfadar aún más, así que sin darle ni una respuesta más me alejo de él y voy hacia la cafetería para comer algo y despejarme un poco.
######
Las clases van pasando hasta que es la hora de ir a deporte. Las chicas nos cambiamos en el vestuario y nos ponemos nuestra ropa deportiva.
Cuando salimos el profesor Marshall nos hace dar un par de vueltas. De vez en cuando miro para él y veo que me sonríe.
Sigo corriendo junto a mis amigas.
—Dios, a este paso voy a morir —se queja Candice, quien últimamente parece estar mucho más flaca de lo que ya estaba antes.
No quiero pensar mal de mi amiga pero realmente su estado de salud me preocupa.
—Creo que no vas a ser la única —le responde Caitlin. Las cuatro estamos sudando a mares ya que estas vueltas son duras. No obstante, las que mejor lo estamos llevando somos Courtney y yo.
Vuelvo a mirar para Peter y me vuelve a sonreír. Es ahí cuando en unos segundos mi mirada se conecta con la de Brian y siento cómo me mira enfadado. Rápidamente desvío mi mirada y sigo corriendo como si nada.
Después de varias vueltas, carreras de relevos y un partido de voleibol la clase ha terminado. Camino con mis amigas para salir de ahí cuando el profesor me hace un comentario.
—Vas mejorando Cecile —al oírle le sonrío.
—Gracias Peter —después de eso sigo con mi camino.
Esta ha sido la última clase de hoy así que toca volver a casa.
Me quedo esperando en el aparcamiento para que mi madre venga. Sin aviso ningún Brian toma asiento a mi lado.
—Cecile, en serio, ten cuidado —al oírle le miro con brusquedad y me aparto de donde está él.
—Brian, me sé cuidar sola —después de eso veo como mi madre llega con su coche y me subo en él esperando a que también entre mi hermano, ni siquiera me he despedido de Brian. Una vez que mi hermano llega, mi madre pone el coche en marcha y nos vamos de ahí.
Por el espejo retrovisor miro hacia atrás y veo a un Brian solo y deprimido esperando en el mismo banco en el que yo estaba hace un par de segundos.
Doy un leve suspiro y luego me pego a la ventanilla pensando en lo jodido que es tener un amor no correspondido.
####
N.A:
Hey! ¿Cómo están? He subido el capítulo antes de tiempo :)
Antes de hablar de la novela o mejor dicho del capítulo quería pedirles que si se podían pasar por mi novela "Cumpliendo los catorce", es nueva y quiero ver qué tal les parece :)
Ahora en cuanto al capítulo...
¿Se esperaban el amor no correspondido que tiene Cecile? ¿Qué opinan del comportamiento de Brian cuando ve al profesor Marshall con Cecile, son celos o es preocupación porque es su amigo?
Por ahora, ¿a quién shippean (emparejan) con quien? ¿Quién es su personaje favorito?
Muchas gracias a quienes me leen, que cada vez son más, los amodoro mucho a todos y cada uno de ustedes <3