{En multimedia Eiden}
PUNTO DE VISTA DE CANDICE
Una semana ha pasado desde que empezó el instituto. En esa semana yo solo he asistido el primer día. No hay que ser muy listo para saber porque he decidido no asistir a clase, creo que es algo más que obvio.
Hoy es lunes y lo único que espero es que ya nadie se acuerde de las fotos o que al menos ya no hagan comentarios al respecto. También quiero hablar las cosas con Eiden pero él no parece querer arreglar nada conmigo ya que no ha respondido a ninguno de los mensajes que le he mandado.
No me puedo creer que en estos momentos en los que le necesito, él esté pasando de mí, eso es demasiado injusto. Yo siempre he estado para él cuando me ha necesitado, ¿por qué él no puede hacer lo mismo?
Tal vez Eiden no es como yo pensaba.
Varios golpes resuenan en la puerta de mi habitación.
—Pase —digo sin saber de quién se trata.
Observo el rostro de la persona y si llego a saber quién es antes de entrar, no le hubiera permitido la entrada a mi cuarto.
—¿Podemos hablar? —me pregunta la chica que antes era rubia pero que ahora tiene el pelo pelirrojo.
Se lo habrá teñido en estos días.
—¿Qué quieres Brittany? No estoy para boberías —digo alto, claro y de manera borde.
Ella me mira con profundidad.
—Quería disculparme por aquel comentario que te hice el primer día de clase, ni siquiera tú te mereces lo que te hicieron, fue demasiado cruel —me quedo perpleja ante las palabras de la pelirroja.
Nunca me hubiera esperado que Brittany se disculpara conmigo y mucho menos que actuara de esa manera agradable, por así decirlo.
—Ya bueno, eso me pasa por beber demasiado alcohol —doy un leve suspiro al recordar que hoy tengo que volver a clases.
Espero que la gente se haya olvidado ya de eso.
—No Candice, no digas eso porque nada justifica que hayan puesto esas fotos en las paredes de la escuela, eso es denunciable y cuando encontremos al responsable lo denunciaremos por ello —es la primera vez que veo que Brittany se preocupa tanto por algo que me haya pasado. Su voz suena tan decidida que hasta pienso que el tinte le ha afectado al cerebro.
—¿Por qué te preocupas tanto? —pregunto con cierta curiosidad.
Brittany se acerca a mí y se sienta en una esquina de mi cama. Sus ojos comienzan a lagrimearse. ¿Qué le ocurre?
—Hace cuatro años, mi prima Bailey pasó por algo parecido a lo tuyo Candice. Ella le mandó una foto privada a su novio y cuando rompieron él se encargó de publicarla por todos los medios posibles. Le arruinó la vida Candice y nadie hizo nada. Ahora mi prima lleva mejor las cosas pero en su momento incluso tuvieron que internarla en un centro de ayuda porque se intentó suicidar. Sin embargo, a él no le hicieron nada, nadie le castigó por lo que le hizo a mi prima y eso realmente fue injusto —se nota que Brittany está sintiendo lo que dice—. No quiero que contigo pase lo mismo Candice —termina añadiendo.
Su discurso me emotiva y una pequeña lagrima sale de mi rostro. Me acerco lentamente a Brittany y la abrazo en señal de agradecimiento.
—Muchas gracias Brittany, no sabes cuánto te lo agradezco —sollozo.
—Para eso están las hermanastras, en vez de pelearnos deberíamos apoyarnos Candice —dice y sé que en el fondo Brittany tiene razón. En vez de estar siempre discutiendo deberíamos llevarnos mejor.
####
Brittany y yo entramos juntas a la escuela. Esta vez mis amigas ya no están esperando en la entrada como la última vez, ni siquiera sé dónde están.
Una vez estamos dentro Eiden y su grupo de amigos pasan por al lado nuestro.
—Candice a ver cuando haces otro de tus streaptease —comenta Daniel, el mejor amigo de Eiden, con un tono de burla.
El chico es bastante alto, delgado, con cabello pelirrojo y tiene un par de pecas. Se parece a Penélope.
Bueno, por algo son hermanos.
Su comentario me sienta mal y agacho la cabeza. Sin embargo, lo que más me duele es que Eiden no me defienda y se quede ahí mirando como si nada.
—Déjala tranquila, idiota, ¿acaso no te han enseñado en tu casa a respetar a las mujeres? Cuando seas mayor y le ocurra algo parecido a tu hija y los chicos se burlen de ella espero que te acuerdes de que tú eras uno de los que hacía eso de adolescente —Brittany le ha dejado las cosas claras en cuestión de segundos.
Ahora el pelirrojo me mira con pena. Creo que se ha dado cuenta de que se ha pasado.
Sus amigos siguen caminando y lo dejan atrás. Es entonces cuando él se acerca hacia mi. Brittany le mira con atención esperando a atacar si se pasa conmigo.
—Lo siento Candice no había pensado en lo que dije —se disculpa él y parece que lo hace de forma sincera.
Suspiro y me aclaro la garganta para hablar.
—No pasa nada Daniel, todo está bien —digo aceptando sus disculpas. El chico sigue mirándome con pena pero termina alejándose de nosotras.
—No te preocupes Candice, siempre vas a tener a mi apoyo cuando estés mal —Brittany me sonríe y yo le doy una de mis sonrisas fingiendo que estoy bien cuando por dentro me siento fatal, sobre todo porque Eiden no me defendiera.
#####
En el comedor, Brittany y yo cogemos la comida para luego buscar un lugar donde sentarnos. A lo lejos diviso a mis amigas quienes hablan entretenidamente.
—Vamos allí, con las C —le propongo a Brittany. Al principio no parece gustarle la idea pero al final termina aceptando.
Cuando llegamos hasta donde se encuentran ellas todas me miran con alegría.
—Hola —saludan al unísono como si se hubieran sincronizado para hablar al mismo tiempo.
Yo me río.
—¿Y ella que hace aquí? —pregunta Cecile con desagrado y mirando con repugnancia a Brittany.
—Viene a comer con nosotras, Brittany me ha ayudado bastante con el tema de las fotos —explico.
Sé que a Cecile le cuesta asimilar la idea de tener que comer junto a Brittany pero no dice nada más al respecto.
Tomo asiento al lado de Courtney y empiezo a probar mi comida para hoy. Una crema de berros de primero y un pequeño filete de ternera acompañado de puré de patatas de segundo. Sin olvidar la manzana que comeré como postre. Todo esto acompañado de agua mineral.
Mis amigas comienzan a hablar e intentan integrar a Brittany. Sin embargo, mi atención no está fijada en su conversación sino en Eiden.
Él está sentado un par de mesas más lejos de la nuestra, hablando con sus amigos tan tranquilamente y eso me enfurece. Es como si le hubiera dado igual lo que ocurrió hace un par de horas, es como si mis sentimientos le dieran igual.
Decido dejar de torturarme así que dejo de mirar a Eiden y empiezo a hacer caso a mis amigas y centrarme en su conversación.
—No me puedo creer que dentro de menos de un mes ya tendrás quince años Caitlin —comenta Courtney con emoción y abrazando a nuestra amiga.
Todas nos reímos al ver la escena.
—Hay que hacerte la mejor fiesta que hayas tenido jamás, los quince son importantes —comento y todas asienten dándome la razón.
Después de eso seguimos hablando de cómo sería la fiesta ideal para Caitlin y aunque esté hablando con mis amigas mi mente no puede dejar de pensar en Eiden y en cómo me ha decepcionado.
#####
Mi primer día de vuelta al instituto ha terminado. Ahora estoy a fuera en los aparcamientos esperando por Brittany, ella tiene una reunión y me pidió que la esperara.
Todas mis amigas ya se han marchado al igual que la mayoría de los estudiantes de la escuela. Como aún no han empezado las actividades extra escolares nadie tiene porque quedarse después de que terminen las horas de clase del instituto, excepto los chicos que ayudan en el comité de bienvenida de la escuela y los del equipo de fútbol, hoy es su día de presentación.
Brittany es una de las personas del primer grupo mencionado.
Miro las agujas del reloj que tengo amarrado en mi mano derecha. La escuela termina a las dos y media y ya son las tres.
Como no tengo nada más que hacer comienzo a pensar en lo apagada que se ha vuelto mi vida en esta última semana, ya para mí ya no sale el sol. Tengo cosas buenas en mi vida pero yo siento que todo está oscuro. El hecho de perder a mi primer novio y ser la zorra de la escuela por esas malditas imágenes está acabando conmigo poco a poco.
Yo pensaba que Eiden y yo podríamos durar toda una vida juntos. Tenía altas expectativas en cuanto a nuestra relación. Él siempre se había comportado genial conmigo pero parece ser que en esta semana aquel chico que yo conocía ha cambiado y se ha convertido en un ser sin corazón a quien yo no le importo ni lo más mínimo.
Eso me entristece ya que entonces, ¿dónde quedan todos los momentos y baches por los que hemos pasado juntos durante este último año?
En el baúl de los recuerdos quedarán.
Noto que una lágrima recorre mi mejilla pero la limpio rápidamente. Yo no estoy acostumbrada a llorar tan seguido y últimamente lo único que hago es eso, llorar.
Sin pensarlo dos veces dejo que las lágrimas caigan por mi rostro y cuando terminan de hacerlo me limpio la cara.
Acto seguido, me pongo mis gafas de sol negras para evitar que el sol achicharre mi cara. Además, así puedo disimular mejor que he estado llorando.
Un carraspeo de garganta hace que eleve mi vista y es ahí cuando veo a Eiden de pie en frente mía, mirándome fijamente.
—¿Podemos hablar? —su pregunta me sorprende. Hace un par de horas seguro que no quería ver mi cara ni en pintura y ahora se toma "las molestias" para hablarme.
Pienso bien en lo que voy a responderle. Podría aceptar su propuesta y hablarle pero sé que eso solo me haría humillarme más de lo que ya he hecho. Él no se merece ni un solo segundo de mi tiempo y menos después de cómo me trató e ignoró estos últimos días.
—No, yo no tengo nada de que hablar contigo —mi voz es dura y fría.
Él suspira con frustración y agarra mis manos.
—Siento lo que ha pasado entre nosotros. Sé que me he comportado como un capullo Candice pero tienes que entender que estaba dolido contigo —se explica sin apartar ni un solo segundo su mirada de mi.
Yo quiero perdonarle pero mi orgullo no me deja. Él no se lo merece.
—Y yo estaba mal, todo el mundo cuchicheaba a mis espaldas, yo necesitaba un novio que me apoyara Eiden, ¿y tú qué hiciste? Ignorarme, dejarme tirada y encima dejar que tus amigos se burlaran de mí en tu presencia —mis ojos empiezan a arderme.
Quiero llorar, sí, otra vez.
—Candice, lo siento en serio —le miro y realmente parece arrepentido. ¿Debería de perdonarle?
—Yo no sé si debo perdonarte Eiden —aparto mi mirada de él.
—Candice —vuelvo a fijar mi mirada en esos ojos azules que me miran con ternura y arrepentimiento pero antes de que pueda responderle o pueda decir algo más, él se apresura a acercar su rostro al mío y es ahí cuando siento sus labios presionándose contra los míos.
Me quedo perpleja ante la situación. No sé si debería de separarme de él y pegarle o corresponderle el beso.
El beso dura varios segundos y al final decido disfrutarlo.
Cuando nos separamos Eiden me sonrie.
—Me gustas mucho Candice, no sé qué haría sin ti, en serio, espero que puedas perdonarme —sin pensarlo dos veces me abalanzo sobre él y le abrazo.
Él corresponde mi abrazo.
—Gracias Eiden, necesitaba esto —susurro.
Y él vuelve a darme otro dulce beso en los labios.
####
N.A:
Hey! ¿Cómo están?
Aquí les traigo el octavo capítulo de la novela narrado por nuestra preciada Candice. ¿Qué les pareció?
¿Les gustan Candice y Eiden como pareja? Son tiernos, ¿verdad?
Si les gustó el capítulo no se olviden darle a la estrellita (no sean tímidos) y tampoco se olviden de comentar que les está pareciendo la novela, cualquier comentario será bien recibido.
Los amodoro y gracias por leer<3