Lauren Pov.
Me desperté pero todo me daba vueltas, al abrir los ojos me di cuenta que estaba en otro lugar.
-Hasta que despiertas cariño-. Dijo Camila sonriendo.
-¿Donde estoy?-. Pregunte tomando su mano.
-Ya te lo diremos amor-. Dijo besando mi mejilla.
-¿Que hacemos aquí?¿Donde están los demás?¿Donde están Luna y Ally?-. Pregunté y ella solo se encogió de hombros.
-Ellas están bien amor, todos lo estamos-. Dijo apartando los mechones de mi cabello.
-¿Cuanto tiempo llevamos aquí?-. Dije y ella beso mi mejilla.
-Tenemos unas cuantas horas, fui la primera en despertar-. Dijo y asenti.
-Quiero ver a los demás y a mi hija-. Dije y ella se levanto.
-Vamos-. Dijo y juntas salimos de aquel lugar.
Pase por aquel pasillo viendo cada cosa y memorizando las puertas de emergencia, por cualquier cosa.
Subimos las escaleras y sabia que no estábamos en una casa si no en un barco. ¿Pero como carajos llegamos aquí? Seguí a Camila mientras apretaba su mano un poco.
-Ven-. Dijo y abrió una puerta.
El lugar era enorme, muy elegante, había una gran mesa con fruta y aperitivos. Unos sillones blancos muy hermosos, un pequeño bar en una esquina, pude distinguir las risas de mis amigas.
Seguí caminando estando demasiado confundida, Camila sonreía como una idiota y tenia demasiadas ganas de golpearla pero me con tuve.
-¡Mami!-. Grito mi pequeña corriendo hacia mis brazos.
-Mi pequeña Luna... ¿Estas bien?¿Nadie te hizo daño?-. Dije revisando todo su cuerpo.
-Nadie la a tocado-. Dijo una voz que se me hacia bastante conocida.
-¿Tu?-. Dije viéndolo de arriba abajo.
-¿No vas a saludarme? Me costo trabajo encontrarte antes que él-. Dijo mirándome desde su asiento con su vaso en mano.
-Ian-. Dije soltando a mi hija y acercarme a él.
-¿A si que ya has recuperado tu memoria? Eso me alegra bastante-. Dijo él sonriendo de lado.
-¿Como sabes donde estaba?-. Dije sentándome enfrente de él.
-¿Se te olvida quien soy? No fue tan difícil, tomando en cuenta que no te escondes-. Dijo para después tomar un poco de su bebida.
-¿Porque estamos aquí?-. Dije tomando el vaso de agua que me dio Marie.
-Es un poco molesto él que me hables de esta manera, te salve antes de que Mike llegara-. Dijo y mordi mi lengua al oír su nombre.
-No sabes como odio a tu hermano-. Dije y el sonrió.
-El no es nadie para mi... ¿Como pudiste creer que el era tu padre?... Espera no me digas... No recordabas nada-. Dijo señalándome con su dedo.
-No-. Susurré jugando con el vaso entre mis manos.
-Conoci a Taylor tu medio hermana... No confió en ella-. Dijo haciendo una mueca.
-¿Como puedes decir eso si es tu hija?-. Dije mirándolo con enojo.
-Sera mi hija... Pero ella no es tú... Cometí un error al engañar a tu madre con la de ella, estaba débil y tu debes entenderlo-. Dijo y yo rodé los ojos.
-¿Como es que estas vivo?¿No se supone que solo había un lobo aquí?-. Dije y el rio un poco.
-¿Circunstancias de la vida? No lo se mi querida hija. Sabes que no eres el único lobo, el mejor de tu clase eso si-. Dijo levantándose y salio al exterior.
-Vamos hermana... Tenemos que hablar con el-. Dijo Marie mirándome a los ojos.
-Ahora vuelvo-. Dije viendo a mis amigas.
-Tarda lo que tu quieras Laur, aquí hay comida por todos lados-. Dijo Dinah comiendo dulces junto a mi hija.
-Ve-. Dijo Camila besando mis labios cortamente.
Tome la mano de Marie y salimos para buscar a mi padre, suspire cuando me di cuenta que estaba en el mar, el sol estaba un poco fuerte pero el cielo estaba despejado.
Me quede admirando el paisaje hasta que Marie me jalo, la seguí y encontramos a Ian mirando a la nada.
-Tu madre estará contenta al saber que las encontré... Solamente así podrá perdonarme, llevó años buscándolas a amabas... Mis dos hijas más preciadas-. Dijo sonriendo.
-¿Donde esta nuestra madre?¿Por...-. Dijo Marie pero él la callo alzando su mano.
-Deja de preguntar... Admira lo que tienes enfrente-. Dijo apuntando el atardecer.
El sol comenzaba a esconderse, la vista era hermosa y mi cabello se ondulaba por el el viento, Marie sonrió tomando mi mano, mire de nuevo al frente sabiendo que las cosas por fin mejorarían.