Hoy ando de ánimos para subir un capítulo nuevo 😜, síganme en Twitter Camrennarnia para poder estar informados acerca de la historia y más importante sobre los acontecimientos Camren del momento.
Oh cielos, oh cielos, oh cielos. Esto está mal, muy mal... ¿Cómo demonios llegue aquí? No solo eso ¿Qué paso anoche?
Estaba en la habitación y en la cama de Camila, aun tenia puesta la ropa del día anterior. Camila no estaba aquí, y tampoco en el baño que tenía dentro del cuarto. Tenía que irme cuanto antes, necesitaba llegar a mi casa de inmediato y tratar de recordar lo que había sucedido. Ahora que lo pienso mejor ¿Qué paso con mis amigas?
Salí de la cama y me arrastre por el piso para buscar mis botas. Me las puse apenas las encontré y recogí mi chaqueta que estaba en el piso. Esperaba que nadie me viera salir, si el Sr. o la Sra. Cabello me veían me interrogarían de inmediato y yo no sabría que responder y posiblemente los sirvientes y Taylor también querrían saber qué es lo que estaba sucediendo. Tampoco quiero encontrarme con Camila porque todavía me acuerdo de la cena y como reacciono ella al enterarse de que no la había escuchado cuando me dijo lo de su torneo. Camine hacia la puerta del cuarto y, antes de siquiera poder poner la mano en el picaporte, esta se había abierto dejándome ver a una bella castaña y de ojos chocolate. Camila cerró la puerta detrás de sí y apoyo su espalda contra ella, todo esto sin romper contacto visual conmigo. Tenía puesto su pijama, se trataba de una remera blanca con el dibujo infantil de un oso y un pantalón rosa, lo que la hacía ver encantadoramente sexy.
-¿En qué pensabas?- pregunto. Obviamente no supe que responderle- ¿Crees que no voy hacerte algún tipo de cuestionamiento aunque logres salir de la casa evadiendo a todos?
-Honestamente no recuerdo nada- dije en mi defensa.
-Dudo que hayas olvidado lo que paso en la cena.
Lauren , estas atrapada.
El silencio cayo en el lugar, como de costumbre ya me estaba incomodando.
¿Por qué simplemente no se lo dices? ¿Por qué no le dices que nuestra amistad se terminó y que la quieres lejos?...Porque no me animo, soy cruel para alejarme de ella y menospreciar todo lo que hace pero no soy tan cruel como para pronunciar esas palabras. Ni siquiera la merezco como amiga.
-Lo lamento- hable al fin y con sinceridad-, lamento no haber escuchado cuando me dijiste de tu torneo. Me siento feliz por ti porque puedo imaginarme lo mucho que te esforzaste para llegar tan lejos y espero que sea quien sea la persona con la que tengas que competir en el torneo logres ganarle.
Camila soltó un pesado suspiro antes de bajar la cabeza. No paso mucho tiempo para que la volviera a levantar, dedicándome una débil pero cálida sonrisa. Quería decirle que no lo hiciera, que no la merecía, que simplemente no debía tener tanta compasión de su parte.
-¿Iras?- me pregunto, aunque sonaba como si me lo estuviera pidiendo.
Me pase la mano por el cuello y torcí el labio. ¿Qué excusa tengo? Posiblemente, estoy segura, de que vaya a mi partido de fútbol a pesar de que no se lo pidiera. Pero esa no era una razón suficiente. Si voy a ir, seria para apoyarla así como la harían todos sus amigos que estarían presentes. Esos amigos que me consideran extraña, que me miran con recelo cada vez que estaba cerca de ellos y de Camila , los que posiblemente no me dirigirían la palabra y los que murmurarían preguntas como ¿Por qué ella está aquí? ¿Por qué no se va? ¿Qué acaso no tiene un grupo raro de amigos?...etc, etc, etc.
Ella está esperando una respuesta, Lauren. Dile algo, algo para no herirla más de lo que ya lo haces.
-Creo que iré si no tengo algún compromiso.
Eso pareció convencerla pero en el fondo parecía algo triste. Supongo que quería que le dijera "si, iré con mucho gusto".
-¿Podrías decirme como termine aquí?- pregunte como para tratar de evadir el tema y además enserio quería saber que había sucedido conmigo anoche.
-Bueno, no sé en realidad que es lo que te impulso beber hasta emborracharte pero lo único que puedo decirte es que vi tu amiga Keana cuando te bajo de su auto.
-¿Como a qué hora llegue?
-Como a las tres de la madrugada. Yo había salido con Shawn y otros amigos y justo las vi cuando llegaban.
-¿Porque simplemente no de dejaste que Keana me acercara a mi casa?
-Porque quería ayudarte...y además tenía ganas de pasar tiempo contigo, aunque sea solo un poco.
No sé quién será, pero tengo la sensación que hay alguien ahí arriba en el cielo que se está burlando de mí y le encanta verme sufrir.
-Camila yo...-recuerda, trata de no lastimarla tan solo por esta vez- agradezco la ayuda pero...no lo vuelvas a hacer ¿entiendes? No me gusta la idea de despertarme en una habitación ajena y en una cama que no es la mía, aunque sea la tuya.
-Está bien, no lo volveré hacer.
Bueno, todo solucionado, ahora lo único que tenía que hacer era hablar con Keana para que me explicara qué es lo que se le cruzo por la cabeza cuando decidió dejarme con Camila. No quiero siquiera pensar en las cosas que dije, o hice... ¿Dije? ¿Hice?...El beso... ¿A QUIEN BESE ANOCHE? Pudo no ser real, aunque lo parecía. ¿Y si bese a Camila? No, imposible, ella no podría estar actuando de esta manera en estos momentos y además no era ese tipo de chica que hacían las cosas que me hicieron anoche.
-¿Camila, que es lo que hiciste una vez que me trajiste aquí?
-Mis padres no saben que te embriagaste y me encargue de avisarle a los tuyos de que te quedaste en mi casa, si es lo que quieres saber.
Eso me dejo tranquila, pero no era la respuesta que buscaba.
-¿Pero...dije algo extraño?
-Si con extraño te refieres a decir cosas como "Soy una idiota" "me voy a volver loca" "esto me está matando",si lo dijiste- contestó cruzándose de brazos
-¿Solo eso?... ¿Y de casualidad no hice nada raro o incomodo?
Camila medito un poco, su mirada estaba en el techo y movía los labios de forma pensativa.
-No, excepto que estuviste dentro del baño vomitando poco más treinta minutos y luego te quedaste dormida en el suelo, así que tuve que arrástrate hasta mi cama.
Eso último me incomodo bastante, y no era solo por hecho de que me haya visto vomitar.
-¿Tú donde dormiste?
-Ahí- apunto hacia un acolchado de una ventana, la ventana que tenía una perfecta vista hacia el balcón de mi habitación. Había una almohada y unas sábanas desacomodadas, evidencia de que si había dormido toda la noche en ese lugar.
Me quede más tranquila. La sola idea de pensar en Camila y yo en la misma cama me tortura.
-Ya debo irme- declare colocando las manos en mis bolsillos.
Camine unos pasos hacia delante con la idea de salir de la habitación lo más rápido posible, hasta que sentí unas manos tomar de mi brazo. Me gire para ver a Camila.
-¿No puedes quedarte un rato más?- me pregunto, suplicándome con los ojos.
Abruptamente, me zafe de sus manos.
-Por favor, no me toques- pedí.
-Lo siento.
-No puedo quedarme, tengo que hacer unas cosas.
Se decepciono, claramente tenia las esperanzas de que me quedara. Quisiera quedarme, de verdad que quiero, pero no puedo. Si algún día encuentro el valor suficiente para decirle lo que siento quizás me quede, siempre y cuando ella me acepte. O bien, quizás me quede cuando mis sentimientos por ella desaparezcan.
-Puedes salir por la puerta de entrada si quieres- indico Camila, abrazando su estómago- mis padres no están y los sirvientes y mi hermana no dirán nada.
Le agradecí con un ligero movimiento en la cabeza antes de salir. Camine por un pasillo, baje las escaleras, luego camine por otro pasillo y baje otras escaleras que daban justo a la entrada. El único que logro verme fue Kai, quien me saludo amablemente haciendo un gesto con la mano. Cruce la calle para llegar a mi casa, no vi a nadie. Fui a la cocina para ver si encontraba a mi mama o a mi papa, no estaban, pero vi un mensaje escrito en un papelito, pegado en la heladera, que decía: Lauren, salimos de compras. Ya que estaba ahí, y tenía hambre, saque la leche que estaba dentro y después busque de uno de los estantes que estaba al lado una caja de cereal, también un cuenco de porcelana blanco y abrí un cajón que de abajo y a un costado de la heladera para sacar una cuchara.
Coloque todo en la barra de desayuno, me senté en una silla. Primero puse el cereal en cuenco y luego la leche. Hundí la cuchara en él y la lleve a la boca. Marque el número de Keana luego del segundo bocado.
-Mmm...¿Hola?
Wouu parece que no fui la única con una noche loca, apenas reconocía la voz de Keana de lo afónica que estaba.
-Soy yo ¿Te sientes bien?
Escuche un bostezo y ruido con la boca.
-Sí, pero de saber que tú y las otras dos se embriagarían de esa manera no me habría ofrecido como conductor designado.
-Espera ¿Llevaste a Lucy y a Vero a su casa ebrias?
Los padres de Lucy y el padre de Vero eran más exigentes que los míos. Si se llagaban a enterar de que sus hijas se embriagaron explotarían de ira.
-No, están aquí conmigo, profundamente dormidas.
-¡¿Oye, porque no me llevaste a tu casa?!
-Quería hacerlo pero tú, aun en el estado en que estabas, querías ir a tu casa a toda costa...Ni siquiera me dejabas conducir.
-Está bien, pero... ¿En qué pensabas cuando decidiste dejarme con Camila?
-Échale la culpa a tu amada Camila, no me dejo en paz hasta que consiguió llevarte a su casa. Pero admito que me hubiera gustado ver tu cara cuando despertaste en el cuarto de esa chica.
-Eres una idiota.
Keana se soltó una risa. Puedo darme una idea de cómo se puso Anna cuando me vio con ese estado. A veces me sorprendía la paciencia que Keana tenía, Camila no solía ser muy amable cuando hablaban las dos. Imagino como la trato anoche.
-Lauren
Solo al escuchar mi nombre me di cuenta de que Keana había dejado de reír.
-Hablando enserio, tienes que decirle a esa chica lo que sientes.
-Keana , ya te lo dije, tengo miedo de lo que ella pueda llegar a pensar...y mis padres también, sobre todo ellos.
-Ellos te aman.
-Eso quiero creer...- mis ojos comenzaban a humedecerse- Siempre les estoy causando problemas, puedo pensar en cómo se pondrán cuando se enteren.
-Eehh, no llores. Todos los padres pueden ser algo exigentes, quizás ellos al principio puede que se molesten pero estoy seguro que cuando lo piensen mejor te aceptaran tal cual eres. Sé cómo te sientes con respecto a tus padres, no solo yo, Lucy y Vero también te comprenden. Todas tenemos nuestros problemas, debes hablarlo porque no estás sola. No te sientas sola sabiendo que todas estamos en una situación más o menos como la tuya y...oh vamos, deja de llorar.
Llore con más fuerza, trate de evitarlo pero no pude. Mis ojos estaban fuertemente cerrados, mi boca estaba oculta detrás de mi mano y mi cuerpo temblaba. Era verdad, ellas me entendían, sabían cómo me sentía. Keana , su madre la quería, estaba orgullosa de ella, todos los días se encargaba de demostrárselo, pero en el fondo quería que su hija fuese un poco más femenina, que use vestidos, que vaya de compras con ella y que tuviera un guapo novio. Keana se enojaba por eso y discutía a menudo con su madre porque ella quería vivir su vida a su manera. Lucy, sus padres quieren que se aferre a las tradiciones de su familia, pero ella no quiere saber nada, ella quiere dedicarse al deporte y tiene que jugar al fútbol a escondidas porque si se enteran ellos le dirán que ha deshonrado a su familia. Verónica , es hija única, no tiene madre y su padre es un importante hombre de negocios que está siempre pendiente del trabajo y casi nunca se ven. En más de una ocasión Vero le había pedido que fuera a un partido de fútbol solo para verla jugar pero jamás lo había hecho y eso la molestaba. Por lo que me dijo, había días que no le dirigía la palabra.
Ellas no son las únicas, estoy olvidando a alguien más, alguien que resulta ser una de las personas más importantes para mí, Camila. Como ya he dicho antes, sus padres le tienen la vida hecha, tiene que estudiar leyes en la misma Universidad que su hermana, y que ellos habían estudiado antes, tiene que casarse con un buen hombre con un gran futuro, como lo es Shawn , y luego tiene que ocuparse del negocio de la familia. Ella tenía que hacer todo lo que sus padres le decían, no era capaz de tomar sus propias decisiones.
-¿Quieres que vaya para tu casa cuando estas dos despierten?
-Eso me gustaría- dije secándome las lágrimas.
-Bueno- aunque no lo pude ver estoy segura de que ella había sonreído.
La escena de la noche anterior, donde estoy besando a la chica desconocida, apareció en mi cabeza.
-Antes de que cuelgues ¿Bese a alguien anoche?
-¿Qué?
-Tengo la extraña imagen de una chica besándome como una salvaje.
-Lauren- dijo después de unos segundos de vacilación-, no te lo tomes a mal pero creo que la cerveza que Vladimir te dio es más fuerte de lo que crees.
-Créeme, eso ya lo descubrí esta mañana, pero ese beso se sintió muy real...-sentí calor en mis mejillas- hasta asombrosamente irresistible.
Keana suprimió una risa.
-¿En qué momento dices que fue?
-No lo recuerdo bien, solo sé que fui a la pista de baile y esta chica se pegó a mí y así no más la bese y ella correspondió con gusto- comí otra cucharada de cereal.
-Mira, anoche te vi todo el tiempo sentada hasta que decidí hablar contigo. Estabas completamente en otro mundo y decías cosas incoherentes, me levante solo una vez para ir al baño cuando pasaron una horrenda canción, luego volví y me quede todo el tiempo contigo hasta que nos fuimos.
¿Era posible que en el periodo de tiempo que Keana se fue al baño una extraña se haya sentado a mi lado y me haya dado un corto beso que yo exagere a causa del alcohol? De ser así, estaba más loca de lo que creí.
-Tengo que colgar, te veo luego- dijo ella.
-Sí, nos vemos.
Colgué el teléfono y lo deje a un lado. Utilice la cuchara un rato para jugar con el cereal. Estaba confundida, había una duda comiéndome la cabeza, aunque ahora que lo pienso mejor no lo considere importante, a pesar de que todo ya había pasado no me siento en mi sano juicio y creo que lo mejor que puedo hacer ahora es relajarme un poco. Tal vez, cuando Keana venga ya no tenga más dudas y no me sentiría tan confundida.
Ahora Sí... He cumplido mi obra del día, dos actualizaciones en un día, wowwww!!! Eso es un récord así que no se cuando vaya a actualizar, pienso definitivamente que la próxima semana, exactamente cuando? No se... Porque tengo certámenes en la universidad... Pero no se desesperen, actualizare durante la semana.