-¿Estas bien?-Pregunta otra vez Adam,deteniéndose enfrente de la casa de Javier,después de todo lo que había pasado se ofreció a traerme,solo habíamos compartido pocas palabras en el viaje,un silencio incomodo se apoderaba del auto cuando no hablábamos,y ninguno de los dos estaba dispuesto a romper el silencio.
-Si-Murmuré y suspire.-¿Que eres?-Pregunte y lo mire a los ojos,en sus ojos no había sentimientos,eran fríos como dos témpanos de hielo,un escalofrío recorrió mi columna,pero no despegue mis ojos de él en ningún momento.
-No puedo decirlo-Apretó sus manos en el volante,haciendo que este cruja y yo quiera salir del auto,pero me contengo y me mantenido adentro con mi jefe.-Lucinda hay cosas que son mejor ignorar.
Apretó mis labios formando una pequeña linea,esa es la ultima gota que rebalsó el vaso,ya estoy cansada de todo lo que esta pasando. Mis sueños no cesan,Adam es algo que no tengo ni idea de que rayos puede ser,porque,obviamente no es humano.
-¿Como el beso de la fiesta?-Me escucho decir,no controle las palabras,solo salieron por si solas.
Veo a Adam,esta desconcertado,lo deje sin palabras,quería golpearlo,tenia un remolino de sentimientos en mi interior pero no quería dejarlos salir.
-Luci..eso es diferente -Musita-No es lo mismo,nuestro beso no es un secreto,pero si te dijera que soy estaría en peligro y si sigues insistiendo no podre decir que no pequeña.
Cerré mis ojos con fuerza, quería llorar,gritar y matar a alguien.
-Hasta mañana señor Witman-Murmuré antes de salir del coche. Él no dice nada,solo se queda observando mis movimientos
Busque las llaves de la casa de Javier en mi bolso,él me había dado un juego de llaves hace unos días. No me di cuenta,pero tenia mojadas mis mejillas,con lágrimas,no me había dado cuanta de que estaba llorando hasta que toque mi barbilla.
Adam,te odio.
Aleje esos pensamientos de mi mente,no quería pensar en mi jefe en estos momentos,había tocado el timbre,para ver si Javier podía abrirme,pero no lo hizo,así que supuse que no estaba en casa.
Gire la llave y entre. Me pareció extraño que las luces estuvieran encendidas,deposite mi bolso en un sofá junto con mi chaqueta,afuera hacia frío,estábamos a mediados de enero,creo que en abril ya empezara el calor. Fui hacia nuestra habitación,los tacones resonaban contra el suelo,mi mano tomo la perilla,estaba fría,gire y entre. Lo que mis ojos encontraron me sorprendió y sentí una punzada en mi corazón.
-¿Que sucede aquí?-Pregunte con un hilo de voz. Cerré mis ojos por un momento y respire profundo,necesitaba estar tranquila para enfrentar esta situación.
-Luci..-Fue lo único que dijo Javier.
Javier y Carolina,mi supuesta mejor amiga,se encontraba arriba de mi novio,o ex novio mejor dicho. Cuando entre se estaban besando,y lo mejor que había que añadir era que ella se encontraba en ropa interior.
Una parte de mi se sentía hipócrita,ya que yo albergaba en mi interior sentimientos por Adam,y hasta lo había besado.
-¿Es lo único que vas a decirme?-Pregunto con recelo. Carolina no habla,lo único que hace es mirarme,sigue arriba de Javier,y puedo observar como las comisuras de sus labios juegan con elevarse.
Perra.
Javier aleja a Carolina de su regazo y se acerca a mi-Lucinda,por favor perdoname-Me suplica y yo bufo. El gesto sale por si solo,no puedo evitarlo.
-No hay nada que perdonar,lo único que quiero es que esa perra de vaya -Murmuré señalando a mi supuesta amiga.
Ella se levanta y recoge su ropa que esta en los pies fe la cama, se acerca a mi y me susurra-Gane puta.
Decir que estoy sorprendida por sus palabras es quedarse corto,"gane puta";¿Que significaba eso?
Tome mi maleta y empecé a recoger todas mis pertenecías,que eran pocas,ya que había vendido muchas de mis cosas por Javier,maldito idiota.
-Luci no te vallas.
-¿Desde cuando pasa esto?-Pregunte ignorando sus suplicas.
Él me mira desconcertado y se muerde el labio inferior.
-Hace..desde antes que empezáramos a salir-Susurra con la cabeza gacha y lanzó un jadeo,me engaña desde el primer día de noviazgo,muy considerado de su parte,que se note la ironía.
-Me das asco-Es lo único que digo,cierro la maleta y maldigo en mi interior,no tenia auto,ni departamento y menos amigos,la única amiga verdadera que tenia no tenia su propia casa,vivía con su hermano,y él era mi jefe.
-Por favor Lucinda no me dejes-Suplica tomando mi mano justo cuando estaba por abrir la puerta.
Frunzo el ceño y me giro.
-Javier somos personas adultas,cometiste un error y ahora tienes que aguantar las consecuencias,las cosas pasan por algo y nosotros no estábamos destinados a estar juntos. Adiós y no me llames-Murmuré antes de salir por la puerta, él solo se quedo ahí,mirándome cuando me iba. Es mejor así,ya que,no hubiese cambiado de opinión por más que me siga y suplique.
Ahora la principal pregunta es;¿donde vivo?.