Alges: La Guerrera

By BlazeShira

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Desde el momento en que Madison Hill escucho sobre los guerreros quedo obsesionada. Se convirtieron en la raz... More

Sinopsis
Capítulo Uno
Capítulo Dos
Capítulo Tres
Capítulo Cuatro
Capítulo Cinco
Capítulo Seis
Capítulo Siete
Capítulo Ocho
Capítulo Nueve
Capítulo Diez
Capítulo Once
Capítulo Doce
Capítulo Trece
Capítulo Catorce
Capítulo Quince
Capítulo Dieciséis
Capítulo Diecisiete
Capítulo Dieciocho
Nota de la autora
Capítulo Diecinueve
Capítulo Veinte
Capítulo Veintiuno
Capítulo Veintidós
Capítulo Veintitrés
Capítulo Veinticuatro
Capítulo Veintiséis
Capítulo Veintisiete
Epílogo
Nota importante: Alges: La Alfa

Capítulo Veinticinco

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By BlazeShira

      —Todo va a estar bien—susurré por milésima vez—. Vamos a salir de aquí muy pronto, Row.

Los ojos de Rowran se mantuvieron cerrados. La única confirmación que tenia de que siguiera vivo eran sus respiraciones y sus latidos bajo mis dedos. La piel de mis brazos estaba llena de quemaduras por la plata de las barras pero me rehusaba a dejarlo ir. Tenía que saber que yo estaba a su lado, que no estaba solo. La verdad era que sin importar lo que pasara no lo iba a dejar. Salimos juntos o morimos juntos.

— ¿Lo quieres mucho, no?— Ni me sorprendí al escuchar la voz de Frannie.

—Lo amo—dije.

—Él también lo hace—. No le contesté—. Vino solo, luchó contra los guardianes y causo todo un revuelo. Incluso retó a papá. Estaba furioso o, mejor dicho, estúpidamente suicida.

—Sí, eso suena como Rowran—dije sonriendo. Seguía mirando el rostro de Row, rogándole a la Diosa Lunar que le permitiera abrir sus hermosos ojos una vez más. En estos momentos lo necesitaba más que nunca.

— ¿Cómo se conocieron?

—Golpee a un chico en la ceremonia de mi ascensión y el apareció a ver que sucedía—. Frannie me sonrió—. Fran...

—Maddie, sabes que no puedo hacer nada.

—Claro que puedes, pero no quieres.

—Uriel me mataría.

—Damián no permitiría eso.

—El miedo de papá no tiene límites. Preferiría verme arder antes de enfrentarse a él.

—Wow, me lastimas, Francesca—. El color rosado en las mejillas de Frannie desapareció y se volvió más pálida de lo que era—. Oh, no se detengan. Tienen una conversación muy interesante.

—Tú...—Susurró Frannie.

— ¿Sabía que ustedes dos se conocían? Por supuesto—dijo Damián. Odiaba su rostro. Odiaba su sonrisa. Odiaba parecerme a él—. La visitabas cada cumpleaños, ¿no?—Me preguntó.

—Cuando salga de aquí, te voy a arrancar la cabeza—le contesté. Su rostro se tornó serio.

—Frannie, tu madre te anda buscando—dijo sin dejar de mirarle. Mi agarre en Rowran aumentó.

Frannie me dio una mirada cautelosa y se alejó. Miró entre nosotros, abrió la puerta y se fue sin decir una palabra. Alcé el mentón y le di una mirada desafiante a Damián.

—Y ahora, ¿Qué planeas hacerme?—Dije.

—Hablarte—me sonrió, pero no de la manera que esperaba.

Rowran susurró algo ininteligible y se giró, haciendo que mi mano golpeara las barras de plata y me quemara otra vez. Sisee y me alejé un poco. Rowran volvió a murmurar y pasé mi mano entre otras dos barras con cuidado, colocándola sobre su hombro.

—Frannie no los va a ayudar—dijo Damián—. Están aquí solos y lo único que los puede ayudar a salir es que lleven a cabo su parte del trato.

— ¿Cuál trato?— Lo miré con ojos entrecerrados. Damián se sentó en el escritorio frente a la celda y cruzó sus brazos.

—El trato que Uriel le ofreció a Rowran para dejarte ir—. Mierda.

— ¿En qué consiste ese trato?—. Damián cambió la vista.

—La manada Antonelli nos ayudará a traer abajo a Blood Moon—. Isobelle. Doble mierda.

—Nunca van a poder vencer a Isobelle, ni con el resto de las manadas tras ustedes.

—Bueno, pero si caemos, caemos todos juntos—. Me devolvió la mirada—. Y con toda una familia de Mega y Ultra Lupus, no tenemos las de perder.

—Rowran nunca aceptaría ese trato.

—Creo que subestimas su amor por ti—sonrió otra vez—. El trato ya está hecho. Lo único que falta es que despierte para discutir los últimos detalles—. Mi vista cayó en Rowran. No. Él no podía hacer algo así. El nunca llevaría a su manada a la ruina.

No...

—No te preocupes, Maddie.

—Para ti soy Bellator Hill—escupí.

—Pero ya no eres una Bellator—daría lo que fuera por borrarle esa sonrisa—. Yo me encargué de eso.

No lo pude resistir. Brinqué y rugí contra las rejas, a pocos pies de distancia. Al principio, estaba confundida. No había podido escuchar a Madeline o la Mega lupus desde que había despertado, pero en el momento en que pensé en atacarlo mis garras y colmillos salieron y podía sentir que mi vista había cambiado...como si tuviera a mis lobas.

—Huh, jamás pensé que lo pudieras lograr—dijo Damián. Se puso de pie y se acercó a las barras—. Al parecer te pudiste conectar con tus lobas. ¿Ves? Todo gracias a tu padre, gracias a todo lo que he hecho para hacerte fuerte. Ahora eres como el resto de nosotros. Bienvenida de vuelta a la familia.

Era una guerrera. Siempre lo había sido. Ahora por fin era una con mis lobas- porque ya no las necesitaba. Era lo suficientemente fuerte como para hacer mis propias decisiones, para defenderme y luchar sola. No necesitaba el título de Bellator cuando llevaba el espíritu de uno por dentro.

—Yo no soy tu familia—dije, volviendo a la realidad—. Y puede que no sea una Bellator oficial, pero a la guerrera la llevo dentro de mí, siempre lo he hecho. El que por fin las tres seamos una solo lo comprueba—.Tomé un gran respiro—. Nunca te he necesitado, nunca lo haré. Soy una guerrera por mis propios méritos, no por tu sangre, no por tus maneras de "hacerme fuerte". Soy Madison Hill. Madison Silver murió el día en que la traicionaste, así que no me vengas con tus cuentos de que soy quien soy por ti. Tú no eres nadie.

—Te equivocas—dijo y por fin vi algo de rabia en sus ojos rojos—. Soy tu padre, te guste o no, y no tienes derecho a juzgarme cuando no tienes la historia completa.

— ¿No tengo la historia completa? Yo soy la historia completa— golpeé las barras con rabia—. Yo soy a quien entregaste a Los Hijos del Sol para que abusaran de ella, yo soy a la que intentaste separar de su loba, yo soy la chica a la cual separaste de su madre. ¡Tolo por una maldita perra!

La mano de Damián entró por las barras rápidamente e intentó agarrar mi cabello, pero fui más rápida y halé su brazo hacia el otro lado, sintiendo su hueso partirse en dos. Su aullido recorrió todo el lugar.

—Madison...—dijo, pero la puerta se abrió de golpe—. ¡Estoy bien, déjenos solos!—Le gritó a quien quiera que estuviera allá arriba, aun cuando su brazo estaba derramando sangre como una fuente.

La puerta se cerró y él se dejó caer al suelo con un quejido. Tomó su brazo y lo arregló con otro crujido, haciendo que su piel se volviera a sellar al instante. Se quejó por un par de segundos más, luego hubo silencio mientras miraba al suelo. Mi corazón latía con fuerza en mi pecho, retumbando contra mis oídos y enojándome aún más. ¿Cómo podía continuar temiéndole a este bastardo?

Damián alzó la vista y sus ojos eran tan azules como los míos. Se puso de pie y se arregló la ensangrentada camisa. Tomó un respiro antes de volver a mirarme.

—Ana no se iba a detener hasta que estuvieran muertos, y no iba a permitir eso. Si llegaba al punto de tener que luchar, sabía que iba a defenderlos a ustedes e iba a terminar asesinando a mi alge. No podía permitir que eso sucediera—dijo.

—Así que preferiste entregar a tus hijos a unos psicópatas para que los torturaran—le contesté cruzando mis brazos. Me ignoró.

—Los umbarum fueron idea de Uriel. Por eso te separé de tu loba para protegerte, pero tenías que hacer algo para volver a meterte en el medio, ¿no?—Le rugí—. Si tan solo te hubieras quedado tranquila siendo Luna, si te hubieras mantenido alejada de Isobelle, nada de esto estuviera sucediendo. Pensé...pensé que si te separaba de tu loba él te dejaría en paz.

—Uriel es un psicópata, igual que tú—. Abrió su boca para protestar, pero la volvió a cerrar.

—Nunca fue mi intención que fueras abusada. Eres mi princesa, por amor a Dios—. Volví a rugir.

—No me llames...

—Lo eres, siempre lo has sido, pero no podía tenerte aquí. Ni a ti ni a tu madre.

— ¿Por eso la asesinaste?

—Yo no...—Se pasó una mano por el rostro—. Tu madre fue asesinada, no sé por quién.

—Por Ana, que no le bastó con destruir a su familia.

—Ana no destruyó nada—. Dejé salir una risa amarga. El hombre no podía estar más ciego—. Tu madre y yo nunca debimos haber estado juntos, por más que la quisiera. Sabía que mi verdadera alge estaba ahí afuera, pero decidí estar con ella de todas maneras. Sé que fue mi culpa, pero nunca pensé que todo fuera a terminar de esta manera.

—Ni tan siquiera le diste un funeral digno—. Sentí el ardor en mis ojos al pensar en mi madre. Mi mamá, mi reina, la victima mayor en todo este enredo.

—Ana me lo prohibió, dijo que si lo hacia ella se iba a llevar a Frannie y...

— ¡Otra vez con Ana!—Suficiente—. Todo lo que sucedió fue porque no pudiste mantener tus pantalones cerrados y luego dejaste a mi madre por una perra loca. Admite tu culpabilidad en todo esto. Entre los dos les destruyeron la vida a mamá, a Mikhail, a mí y a sabrá Dios cuantos más. No intentes hacer que sienta simpatía por ti porque no la mereces.

—Madison...

—Lárgate—dije—. Prefiero lidiar con el psicópata antes de pasar un minuto más contigo.

—Ma...

— ¡Fuera!

Los ojos de Damián chocaron contra los míos. Justo cuando iba a decir algo, la puerta se volvió a abrir. Los pasos pesados me dijeron quién era antes de que hablara.

—Bueno, bueno, pero que bonita reunión de familia—dijo Uriel. Cerró la puerta y pude ver su rostro. Me sonrió y miró a mi lado. Seguí su mirada y me encontré con la mirada intensa de Rowran, quien estaba sentado en el suelo—. Ya que todos estamos listos, ¿por qué no hablamos de negocios?

Los ojos de Rowran me decían todo lo que quería saber. Había escuchado mi conversación con Damián...y había aceptado el trato con Uriel.



***Hello babies!

Este cap ya va mejor, no? Faltan pocos capítulos para terminar. Menos de cinco ;) La próxima de Alges en la que estaré trabajando será La Cazadora, que ya esta subida en mi perfil para que la vayan guardando, y para las que comprendan el inglés, volví a mis viejas raíces y subí una historia, también de lobos, pero sin alges predestinados. La pueden encontrar en mi perfil con la foto de portada que les puse allá arriba. Ambas portadas fueron creadas por Ashyma.

Aquí les dejo la info de la novela en ingles:

Title: The Rising Sun

Synopsis:

Amanda Sinclair's life is thrown off the road when she meets Rohan Vorinek. After turning her into a wolf, he allows her to join his pack and she finally feels like she belongs somewhere. Her life as a shewolf asks a lot of things of her, but nothing asks as much as the Alpha when he offers her a deal: she will get the title she always wanted and she will have a much better job- but in order to get those things she will also become his wife. She sees it as the opportunity of a lifetime, even when she knows he will probably never truly love her, however things get complicated when the Alpha King makes an appearance in their lives. He wants their pack, he wants more power and he will stop at nothing to get it. Amanda thinks they can deal with him, but nothing can prepare her for the things she discovers...

Because the Alpha King is tied to her in a way she didn't think possible and her alpha's intentions might be a bit more different than what she initially thought...


Terminando el mensaje...

Xoxo

Yashira***

P.S. YA LEGALIZARON EL MATRIMONIO GAY EN USA Y PR! ESTOY MÁS FELIZ QUE UN PÁJARO CON UNA PAPA FRITA!

P.P.S. Comentarios homofóbicos serán borrados. Ahórrense la energía, por favor y gracias :D

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