Melek en el multimedia.
Ya habían pasado 3 días desde que hablé con la señora Zaniye esa, y mi primita no me ha dado quejas, pero yo tampoco le he preguntado...
Mil cosas me vienen a la cabeza. Decido ir a la habitación de mi primita a hablar con ella -Hola Sirin- le digo en buena forma, ella sacude su mano con felicidad -Te veo contenta-
-Hoy la maestra nos dió las notas de matemáticas-
-Vaya ¿Cuánto sacaste pequeña?-
-Pos 100- la cargo y le soy un beso en la cabeza.
-Estoy orgullosa de ti- me abraza -Oye cuentame ¿Murat te sigue molestando?- ella no responde -Sirin-
-No lo hacía, pero hoy me dijo que yo era una nerd fea que no cogía novio-
¿Pero que clase de niño era ese? El mundo es un caos, Sirin solo tiene 6 años ¿Como iba a tener novio con tan poca edad?
-El no te molestará más, vas a ver- no le dejé hablar y salgo del cuarto, corro hacía afuera para dirigirme con mi chofer, pero Yilmaz se mete en mi camino, desde aquella vez, me ha estado molestando, y lo admito, disfruto que lo haga, pero todo tiene un límite -Yilmaz lo siento, tengo que hacer algo- el se queda pensativo.
-¿Más importante que tu primo querido?-
-Mucho, mucho más- le empujo pero me detiene.
-¿Que pasa aquí?- habló el abuelo.
-¡Abuelito! Yilmaz me está molestando-
-¡Yilmaz! ¿¡Que carajos te pasa!? ¡Deja la niña!- Yilmaz me suelta, le sonrío al abuelo de agradecimiento y me mandó a correr a la salida.
-Amigo-
-¿Que pasa señorita Emel?- le abracé, nunca lo hago literal.
-Necesito que me lleves otra vez- el pone los ojos en blanco y me abre la puerta trasera.
^^^^
Toco el timbre, y me abre Zaniye esa como se llame.
-Buenas señorita Yaman- cada vez que me ve se le nota el miedo que le causa mi apellido. Entro a la casa sin pedir permiso, con mi fea mala forma -¿Que sucede?- miré a mi alrededor y su esposo estaba en la mesa comiendo junto a Murat.
-Zaniye- solté una risita -Te dije que esto no volviera a ocurrir-
la mujer temblaba -¡Kemal!- el hombre corrió hacía la sala, un viejo feo, canoso y panzon.
-Diga señorita Yaman-
-Tu hijo le hace bullyng a mi prima ¿Sabes que significa eso?- solté una risita para luego sacar un cuchillo de mi borsillo y encajarselo en su gran barriga, se podía escuchar los gritos pero yo no podía aguantar mi risa -Te dije que no iba a venir de buenas- la mirada diabólica no podía ocultarla, la mujer gritaba más que un bebé acabado de nacer, pero yo me sentía, bastante feliz -Tu hijo, es un maleducado- lo miré de pie a cabeza -Y bastante feo para andar haciendo bullyng- las lágrimas del niño le salían sin parar, pero yo no tuve ni esta gota de lástima, cogí una pequeña cuchilla que tenía debajo de la manga y se la encaje en el hombro a esa tal Zaniye -Está ahí los dejaré- señale al niño -Si le vuelves a hacer algo a Sirin, la próxima vez que venga te dejaré huérfano- dije así para luego largarme de ese lugar.
-¿Por qué se oían tantos gritos allí dentro?- me preguntó el chofer.
-Jeje ay amigo, apuñale a Kemal- el no parece impresionarse.
-Me lo esperaba de ti- ¿Osea quien no? Es algo demasiado obvio.
3 meses después...
Estaba con Osman en la cabaña, practicando las artes marciales, se ha pegado un poco más a mi, pero lo veo como un hermano.
-Peque-
-Decime-
-Deberíamos hacer ¿Una banda?- me echó a reír -Sii, nuetros abuelos tienen más amigos mafiosos, deberíamos conocer a sus nietos y hacer como un equipo de mafiosos-
-Estás loquito de veras- el me riega el cabello -Me gusta trabajar sola- el pone mala cara.
-Sería divertido, nosotros, matando gente- niego con la cabeza.
-Los Yaman no matamos gente inocente Osman- el me mira de una forma como si no entendiera, pero no le hice caso.
-¿Hacemos eso?- asiento, me tomó de la mano y me llevó a casa para luego ir a la oficina del abuelo y hablar con el.
-¡Abuelo!- gritó Osman (si que confianza para decirle abuelo ¡A mi abuelo)
-Pasen mis nietos- entramos, el abuelo nos vió de la mano y sonrío, lo noté así que solté a Osman.
-Osman quería hablar contigo-
-Si abuelo, hemos pensado...- lo detuve.
-Tu pensaste- el puso los ojos en blanco.
-He pensado que tal vez debíamos...-
-Conocer a los demás nietos de tus amigos mafiosos para así hacer un equipo de nietos de la mafia ¿No fue así Osman?- el abuelo comenzó a reír, Osman y yo compartimos miradas (entiendo al abuelo, esa idea es algo estúpida)
-Que imaginación hijo mio- se arrasca la barba -Pero sería buena idea- pongo mala cara -Llamo a mis amigos para que traigan a sus nietos y así se conozcan- podía notar a Osman feliz ¿Pero yo feliz? Siendo sincera, me da igual, no quiero conocer a nadie ¿Y si uno de los nietos es una chica? Tal vez se enamore de Osman, pero no dejaré que me lo quiten ¿Y si el la quiere más? Si se enamora de Osman, si se acerca un poco más de la raya, juro que la enterraré viva.
-Osman- el me enseña esos hermosos dientes que tiene, que brillan más que las estrellas -¿Quieres quedarte a dormir conmigo hoy?- el parece sorprenderse.
-¿Emel?-
-Decime abuelo- el se ríe.
-No quiero tocadera- me sonrojo, Osman era como mi hermano ¿Como podían pensar algo así?
Osman me tomó de la mano y nos fuimos juntos a la cabaña -Oye Osman- le dije ya acostada al lado de el -Me da miedo conocer a esos nietos-
-¿Por qué peque?- pone su mano en mi cabello y comienza a acariciarlo.
-¿Y si hay una nieta? ¿Y si le coges más cariño a ella y me cambias?- el suelta una de sus risitas sexys.
-Eres mi peque, no te cambiaría- me besó en los labios, se sentían tan suavecitos.
-Esta bien- me sonríe.
-Te quiero peque-
-Yo igual te quiero- me viré para quedar frente a frente, su mirada contra la mia y le di un besito en su perfilada naricita, pero luego abrazarlo y cerrar mis ojos para quedarme dormida.
^^^^
Desperté y Osman no estaba a mi lado, me levanté asustada -¿Osman?- escuché como protestaba y me dí de cuenta que andaba durmiendo en el piso, se veía tan tierno.
¡No te enamores Emel! ¿Que mierda me pasa?
Me acuesto a su lado, miradolo como dormía, procedí a darle un beso en sus mojaditos labios y el abrío sus ojos poco a poco, cuando me vío tan pegada se levantó muy rápido -No te preocupes, no te viole mientras dormías- suelta una carcajada, y la puerta se abrío rápidamente -¡Oye!-
-Me dijeron que querían conocer a los demás nietos- Osman y yo compartimos miradas -Pues ya están aquí- me levanté corriendo del suelo y me metí al baño.
Había olvidado por completo que le pedimos al abuelo que queríamos conocer a los nietos de sus amigos mafiosos, ni si quiera esperaba que llegaran tan rápido, esperaba no se ¿Una semana?
-¡Emel! ¿Puedes apurarte?- era la voz de Osman, escuché como la puerta del baño se abría.
-¡O-Osman!- soltó una risita.
-Tranquila peque, tu abuelo ya se fue- entro al baño pero yo por suerte estaba vestida.
-Muy tarde ya me vestí-puso mala cara, me puse frente al espejo para así peinarme y el comenzó a desnudarse delante de mi -¿Que carajos haces?-
-Voy a bañarme peque- me río y seguí pasandome el cepillo por mi rizado cabello, llegó un momento que no podía evitar avergonzarme, pues la sangre iba para mis mejillas, el ya estaba, en calzones.
-Osman, deja que termine para que puedas terminar y yo salir para allá afuera- no podía dejar de mirar, se le marcaba.
-No me molestas peque-
-Pues a mi si- salí del baño y me quedé afuera para esperarlo.
5 min después...
-Vamos peque- solté un respiro de cansancio y ambos fuimos juntos de la mano a la mansión, cuando ya entramos, había un monton de gente, mis tíos y mi padre se veían tan felices, y el abuelo de Osman estaba aquí.
-Abuelo- dijo Osman y rápido fue a saludar a su abuelo, yo lo acompañe, de paso lo saludé también.
-Pero si es Emel- no podía evitar sonreír -Estás bastante preciosa pequeña- asentí.
-Muchas gracias tío Ali- señala a su nieto.
-La cuidas bien Osman- todos seguro han notado que estámos demasiado pegados para así decirlo, pero no puedo evitarlo, el es un imán.
-Osman, Emel- nos llamó mi abuelo y ambos nos dirigimos hacía el -Les presentó a uno de mis amigos de jóven, Josué Gomusoglu- sonreí (diablo que apellido tan raro carajos)
-Y el es su nieto, Joshua Gomusoglu- miré para al lado y había un chico alto, con unos ojos bastante negros, y un pelo más oscuro que la noche, super pálido, y unos finos labios rosados, era simplemente, un dios griego, dios, te amo.
-Tu debes ser Emel ¿No?- tenía una vocesita como un niño de 10 años -Soy Joshua-
-Si, mi abuelo me lo acaba de decir-
-Es un placer conocerte Emel- no podía evitar sonreír, mis ojos brillaban solo al escucharlo hablar.
-El...- Osman se metío en el medio.
-Si, igualmente amigo- me tomó de la mano (celoso eh) Así me gusta, controlador, nos alejamos de todos.
-Osman ¿Marcando territorio?- se río.
-Para nada- le dí un beso en la mejilla, y nos separamos cuando vimos al abuelo delante de nosotros.
-Ahora la nieta de Karaman Mason-
-¿Nieta?- subí una ceja.
-Si Emel, nieta- habló Osman (lo sientooo no puedo ocultar mi cara de rabia) me apretó el cachete y fuimos a verla, era, bonita, muy muy muyyyyy bonita, peliroja de ojos verdes y llena de pequitas por toda su cara, con unas curvitas perfectas, Osman la miraba raro.
-¡Hola!- habló ella (dios porque grita) -Soy Jane Mason- le dí la mano.
-Emel Yaman-
-Osman Pasha- yo lo miraba de pie a cabeza a ver como reaccionaba.
¿Cuánto tiene? ¿14? bufo, tenía cara de niñita.
-Tengo 16 y ustedes- mierdaaaaa.
-Yo tengo 17, y esta preciosa tiene 15- sonreí por el apodo.
-Oh eres menor que yo- sonreí de lado.
-Si pero con más experiencia que tú- ella abrío sus ojos como platos, no se si entendió a lo que me refería, pero espero que haya captado, ese tal Joshua se acercó a nosotros.
-Parece que eres la más pequeña de los cuatro, Emel- soplo un pelo que tenía en mi cara -Por que yo tengo 18- sonrío de lado.
-Con más experiencia dije-
-Disculpenla- dijo Osman -Es enana pero ha matado más gente que ustedes- le doy la mano a Osman.
-Tan enanita que está- habló la chica peliroja de cara bonita, solté una de mis risitas diabólicas.
-No me conoces- (lo sientooo, no puedo evitar ser contestona, es que me sacan de quisio)
-Disculpa ¿Eres Emel?- me habló un señor mayor, yo le sonreí -Quería conocerte, soy Karaman Mason-
-Un gusto señor Mason- el sonrío.
-Mi querida nieta es muy famosa entre mis amigos- no se en que momento mi abuelo se apareció en nuestro lado.
-Es una gran mafiosa- comentó Josue Gomusoglu.
¡Diablo que alagos! Me siento eapecial, que bien se siente ser una mafiosa, y como los reyes de la mafia me alagan ¿Tan buena soy en esto?
-Emel-
-Digame señor Karaman-
-Cuando quieras matamos a alguien juntos-
-Me encantaría- le dije así para que todos esos viejos mafiosos se marcharan, mientras los tres chicos que estaban a mi lado estaban con la boca abierta.
(Hace un baile de celebración imaginariamente)
-¡Melek!- mi loquita prima corrío hacía mi y le hablé en el oído -Es muy apuesto el tal Joshua- ella asintío de una forma muy rápida -¿No te cuadra?- volvió a asentir con la misma rápidez.
-Oye Joshua- el levantó la vista -Ven, te quiero mostrar algo- le dijo así para llevarselo ahí de la mano (ja, ella siempre con sus trucos de seducción)
-Solo somos 3- habló la peliroja.
-Cuatro- Ay no.
-¿Emir?- puse los ojos en blanco.
-Hola hermanita- dios ¿en serio se quiere ligar a esa tipa?
-Ohh ¿Es tu hermano Emel?-
-Si, es Emir Yaman, el segundo nieto más menor de los Yaman-
-¿Quien es la primera?- preguntó ella.
-Yo, Sirin- esa pequeña enana de cabello lindo se aparece donde quiera ¿Tendrá poderes de teletransportarse? Ni modo.
-Ay eres muy pequeñita- dijo con ternura.
-Tengo 6 añitos- ¡Puta! ¡Puta! ¡Alejate de mi primita fea peliroja de mierda! Que deseos de vomitar.
Me mande a correr a adentro de la mansión y todos se me quedaron mirando raro. Ni modo, estoy acostumbrada de ser el centro de atención, así que, no me importa.
Tropecé con mi madre en el camino, la cual llevaba una bandeja con varias tazas de té en ella, si voló, pero pude atraparlas todas antes de que cayera al suelo.
-Eres muy torpe Emel- solté una risita.
-Lo lamento mamá- ella niega con su cabeza.
-¿Ah donde vas?- bajo la vista.
-Ni modo, la nieta de Karaman me cae mal- ella pone sus ojos en blanco.
-A ti toda chica que ves te cae mal-
-A mi no me caen mal Melek, ni Isa-
-Pero Melten si-
-Ella es una pesada-
-Es tu prima-
-Pero pesada-
-Eres tonta Emel- le miro con mala cara.
-Tengo ganas de matar a la nieta de Karaman, mejor, enterrar su cuerpo bajo tierra y dejarle la cabeza afuera, para así arrancarle la carne y enseñarle frente a sus ojos como se lo doy de comer a los puercos-
-¿Por qué razón?- me encojo de hombros.
-Mira mucho a Osman- mi mamá suelta una risita.
-¿Que? ¿Te gusta?-
-Osman es mi propiedad, mamá-