Midnights ✨ || Casi Ángeles

Per just4cherry

184K 19.1K 3.5K

Valentina Brescia Wunder regresa al país que la vió nacer sin saber que la magia empezaría a partir de aquél... Més

MIDNIGHTS | REPARTO
MIDNIGHTS | PORTADAS
MIDNIGHTS | INTRODUCCIÓN
HOY: ESPERANZA
HOY: CENICIENTA
HOY: REYES MAGOS
HOY: EL RULO VUELVE
HOY: EL ELEFANTITO ROSA
HOY: BAJO OCHO LLAVES
HOY: TUS DESEOS SON ÓRDENES
HOY: RETRATOS DE FAMILIA
HOY: HASTA EL SANTO DESCONFÍA
HOY: EL AMIGO INVISIBLE
HOY: MISIONES
HOY: SIGUE AL CONEJO BLANCO
HOY: HAY UN LUGAR
HOY: REVIVALS
HOY: BAUTISMO
HOY: EN EL NOMBRE DEL PADRE
HOY: EL SENTIDO DE LA VIDA
HOY: DÍGALO CON MÍMICA
HOY: EL BUSCADOR
HOY: PASTORCITO MISTERIOSO
HOY: CARETAS
HOY: FASE II
HOY: EL ESCUDO
HOY: EL REY LEÓN
HOY: DE UNA MANERA O DE OTRA
HOY: COMEDIA ROMÁNTICA
HOY: INCONSCIENTE
HOY: EL MONSTRUO BAJO LA CAMA
HOY: LA RESISTENCIA
HOY: PRUEBA DE AMOR
HOY: NOS VEREMOS OTRA VEZ
HOY: LINDA Y CIELO
HOY: UN DÍA EN LA CASA DE LA ABUELA
HOY: EL TRADUCTOR
HOY: SNOW ON THE BEACH
HOY: TODOS PARA UNO
HOY: DOS
HOY: DE CABEZA
HOY: NO HAY TIEMPO
HOY: EL PLACER DE LOS DIOSES
HOY: EL HOMBRE DE LAS MIL CARAS
HOY: ROMPECABEZAS
HOY: BAJO MI PIEL
HOY: EL ALMOHADÓN DE PLUMAS
HOY: SEIS HORAS ANTES
HOY: PALITOS CHINOS
HOY: LA TELENOVELA
HOY: SALE
HOY: ÁNGELES CAÍDOS
HOY: QUIERO
HOY: ESCALADA
HOY: EUFORIA
HOY: SORPRESA
HOY: ¿QUÉ SOMOS?
HOY: GRACIAS
HOY: MELODY DESENCADENADA
HOY: SUPERAR AL PADRE
HOY: ISLA FLOTANTE
HOY: LA RISA FRANCA
HOY: UNA TEORÍA SOBRE EL TIEMPO
HOY: EL PRESENTE
HOY: SUEÑO DE UNA NOCHE DE VERANO
HOY: FUISTE
HOY: EL ESCORPIÓN Y LA RANA
HOY: LA OTRA ORILLA
HOY: OJO DE ÁGUILA
HOY: INVISIBLE STRING
HOY: CHIQUITITA
HOY: FLOGGERS
HOY: DIECISÉIS
HOY: FOTOS DEL FUTURO
HOY: UNA CUESTIÓN DE ESTADO
HOY: NO ESTÉS SOLO EN ESTA LLUVIA: PARTE I
HOY: NO ESTÉS SOLO EN ESTA LLUVIA: PARTE II
HOY: LA COMPETENCIA
HOY: ROCK AND ROLL
HOY: LA MUÑECA DE TRAPO
HOY: JUGATE CONMIGO
HOY: SOLOS Y SOLAS: PARTE I
HOY: SOLOS Y SOLAS: PARTE II
HOY: CARNAVAL
HOY: CHACOTE
HOY: EL BOOMERANG, LA ESPADA Y LA LLAVE
HOY: NO ME FALLES
HOY: CAMBIO CLIMÁTICO
HOY: UN GRAN AMOR
HOY: SIN NOMBRE
HOY: ESTOY CON VOS
HOY: EL PERIODO SAROS
HOY: LOOP
HOY: MASTERMIND
HOY: ¿ALGUNA VEZ VISTE LLOVER EN UN DÍA SOLEADO?
HOY: PADRE E HIJO
HOY: CRISIS DE ANSIEDAD
HOY: CON UNA PEQUEÑA AYUDA DE MIS AMIGOS
HOY: ATRÉVETE
HOY: QUE NADIE SEPA MI SUFRIR
HOY: LA IDENTIDAD DE UN SUPERHÉROE
HOY: NO HAY TAL CRISIS
HOY: EN EL AMOR TODO ES EMPEZAR
HOY: PLANTAR UN ÁRBOL, TENER UN HIJO, ESCRIBIR UN LIBRO
HOY: LA MANZANA DE ORO
HOY: SIN NICO
HOY: EL MAL DE LA ÉPOCA
HOY: A DONDE VAYAS
HOY: PURRETES
HOY: TALK SHOW
HOY: LA VIDA ES MARAVILLOSA CON VOS EN EL MUNDO
HOY: ALGO MUY IMPORTANTE
HOY: EL MAL AGÜERO
HOY: ÁNGELES Y LA FÍSICA CUÁNTICA
HOY: FACTOR DESENCADENANTE
HOY: PALABRAS MÁS, PALABRAS MENOS
HOY: EL OFF
HOY: EL AMATEUR PROFESIONAL
HOY: YO SÉ
HOY: FAMILIA
HOY: CONGA
HOY: SIENTO COMO UNA MUJER
HOY: QUEDATE CONMIGO
HOY: EL ESPEJO: PRIMERA PARTE
HOY: EL ESPEJO: SEGUNDA PARTE
HOY: ¿LOBO ESTÁ?: PRIMERA PARTE
HOY: ¿LOBO ESTÁ?: SEGUNDA PARTE
HOY: HOY PUEDE SER UN GRA DÍA
HOY: LAS SOMBRAS
HOY: EL SENTIDO DE TODAS LAS COSAS: PRIMERA PARTE
HOY: EL SENTIDO DE TODAS LAS COSAS: SEGUNDA PARTE
HOY: ¿DÓNDE ESTÁ EL AMOR?
HOY: COPIADO: PRIMERA PARTE
HOY: COPIADO: SEGUNDA PARTE
HOY: LA BOTELLA ROTA
HOY: EL SONIDO DEL SILENCIO
HOY: LOS SÚPER AMIGOS
HOY: CINCO BODAS Y DOS FUNERALES
HOY: EL ALMA AL CUERPO
HOY: LABYRINTH
HOY: A MI MANERA
HOY: ZARPADO
HOY: SÍ, ACEPTO: PRIMERA PARTE
HOY: SÍ, ACEPTO: SEGUNDA PARTE
HOY: NO HAY NADA MÁS LINDO QUE LA FAMILIA UNIDA: PRIMERA PARTE
HOY: NO HAY NADA MÁS LINDO QUE LA FAMILIA UNIDA: SEGUNDA PARTE
HOY: ESTOY LISTO: PRIMERA PARTE
HOY: ESTOY LISTO: SEGUNDA PARTE
HOY: UN MUNDO AGRADABLE
HOY: BIGGER THAN THE WHOLE SKY: PRIMERA PARTE
HOY: BIGGER THAN THE WHOLE SKY: SEGUNDA PARTE
HOY: CASI ÁNGELES
HOY: MIDNIGHTS
MIDNIGHTS | AGRADECIMIENTOS

HOY: LA EDAD DE LOS POR QUÉ

1.1K 114 3
Per just4cherry

Melody se llevó a Irma hacia un lado de la cocina, y todo lo que yo podía pensar era que su mamá era la mucama, Irma, no Alice. Y todo empezaba a cobrar sentido. Aquel día, cuando vinimos a esta casa para hacer el trabajo grupal, Melody se veía... estresada, la reacción de Alice cuando Nacho comentó algo de su "hija", las reacciones de Irma... ahora todo tenía sentido.

¿Pero por qué ocultarlo? ¿Por aparentar otra vida? Su mamá no se merecía que la esconda, Irma no se veía como una mala persona. ¿Por eso trabajaba en aquel restaurante?

Mar miraba con atención a Irma y Melody, al igual que yo. Ambas, sorprendidas de saber la verdadera identidad de la mamá de Melody. Después de unos segundos, Melody regresó, sonriente.

—Pobre— le dió una mirada rápida a su mamá —Es medio lenta, pero bueno, le dije que vaya a comprar helados y se olvidó. ¿Volvemos a la fiesta?

La miré —Es tu mamá, ¿verdad?

Melody soltó una risa —¿Perdón? ¿Irma mi mamá? No, no, no, no, no, no.

Por su reacción, no había duda, Irma era la mamá.

—Te dijo hija— señaló Mar.

—Ah, no, bueno, hija, a veces me dice hijita— se rió una vez más —Me conoce desde que nací y vive acá desde que yo nací— suspiró —¿Vos bien? Digo, por lo del cole, ¿un garrón, no?

Era bastante obvio que quería cambiar de tema.

—No, ya está todo aclarado— le respondió Mar con una sonrisa —Nachito me hizo una cama, ahora, no sé si tuvo cómplices.

—Jero— habló Melody —Jero, tal vez, porque es re pendejo. El grupito ese son re pendejos.

—¡Mel!— se escuchó la voz de Tefi y entró también hasta donde estábamos nosotras tres —Mel, gordi, llegaron tus viejos.

Melody la miró con horror y rápidamente se fue. A Mar y a mí nos quedó el silencio y seguramente un montón de preguntas en la cabeza. Intercámbianos miradas y decidimos salir de la cocina.

—Mar— la llamé antes de salir por completo —Por cierto, tienes que saber que Thiago golpeó a Nacho cuando te fuiste. Fue un golpe directo a la cara, eso debió doler bastante.

Solté una pequeña risa y ella me siguió para entrar juntas a la sala.

Afuera, la música estaba a tope, y los "papás" de la cumpleañera parecían confundidos al vernos aquí. Algunos de los chicos les colocaron sombreros y se pusieron a bailar a su alrededor mientras su "hija" los miraba preocupada.

—Así que son mis suegros, che— comentó Lleca.

—Volá de acá, nene— Melody lo empujó y se colocó frente a los señores —Eh...esto no es lo que ustedes piensan, yo se los voy a explicar.

El señor se le acercó —¡Feliz cumpleaños, Mel!— la expresión de Melody era de confusión y un poco de alivio —¡Me encantan las fiestas en mi casa!

—¿Qué decís? ¿Estás loco?— preguntó su esposa.

—Por eso, porque es el cumpleaños— sonrió, Alice frunció su ceño —Vamos a bailar.

Alice negó —No, no, no, no, no, antes tenemos que hablar, vení, por favor.

Se llevó a Melody del brazo y el señor las siguió sin decir más. Luca se nos acercó, mirando todo con la misma expresión que yo.

—¿Te das cuenta lo copado que es mi suegro?— me reí al escuchar decir eso a Lleca.

Luca lo miró y se fue. Sentí una presencia a mi lado y me giré, notando que se trataba de Simón.

—No puedo creer lo que le hizo Nacho a Mar.

Suspiré, encogiéndome de hombros —Yo tampoco. Te juro que no lo entiendo y, honestamente, siento mucha pena por él. ¿Siempre ha sido así?— lo miré con una mueca, pero negué —Lo siento, no debería hablar así de tu amigo frente a ti, lo siento.

—No, no, no— lo miré —Tenés razón.

Sonreí —¿Supongo que soy muy afortunada de que me haya tocado un chico increíble?

—Bueno, yo no me quedo atrás. Vos sos increíble.

Solté una risita. Abrí la boca para sugerirle que nos fuéramos al patio, pero no pude decirle nada al ver que Santiago se nos acercaban. Cuando estuvo a mi lado, me retuve de soltar un quejido.

—Valentina, ¿podemos hablar?

Melody había mencionado que también estaba acá, pero no me lo había cruzado aún, hasta ahora. Vi a Simón y noté incomodidad en su rostro, y obvio no lo culpaba, para él debía de ser difícil todo esto, era culpa mía, claro.

—¿Valentina?

Parpadeé —Eh... ¿qué pasó?

—¿Podemos hablar unos minutos?— repitió y miró rápido a Simón —¿No te jode, verdad?

Respondí rápidamente —¡No! No le molesta, ¿pero por qué lo haría?— me reí, nerviosa y miré a Simón disculpándome con la mirada —Después hablamos.

Él simplemente asintió. Santiago me llevó al patio, donde habían muchas más personas y lo miré algo expectante. Pude ver a Luca dándome un gesto con la cabeza que no supe descifrar, y regresé la mirada al chico que tenía frente a mí.

—¿Qué pasó?— pregunté —¿Todo bien?

Soltó un suspiro —Mis viejos hablaron hoy con ella.

No necesitó decir más. Lo rodeé con mis brazos, no tardó en hacer lo mismo y froté su espalda. Era tan injusto lo que estaba pasando con su hermanita, no merecía nada esto. Nadie merecía pasar por esto, y mucho menos los más vulnerables.

Cuando nos separamos, traté de darle una sonrisa.

—¿Cómo lo tomó?

Se encogió de hombros —Ni bien, ni mal. Creo que en el fondo, está asustada, pero mis viejos trataron de endulzar un poco el asunto para no asustarla. Y ella está bastante positiva, supongo que es bueno y debería sentirme más tranquilo, ¿no?

—Por supuesto— sonreí —Si ella pone de su parte y está tranquila durante todo este proceso, estoy más que segura de que todo saldrá bien. Tengamos fe.

—Sí, tenés razón— me sonrió un poco mejor —Creo que la única razón por la que decidí venir a la fiesta hoy... fue porque sabía que estarías aquí y... quería, necesitaba, desahogarme. Aunque no quisiera estar siempre agobiándote con mis problemas.

Negué con una sonrisa —No me agobias para nada. Sabes que siempre podrás contar conmigo, en todo momento, pase lo que pase.

—Gracias— me sonrió —¿Siempre sos así de buena con las palabras?

—Casi siempre— respondí entre risas.

Santiago estiró una de sus manos y la colocó sobre una de mis mejillas. Tragué saliva, era aquí donde, con mucha pena, le confesaba la verdad, no quería seguir ocultando mi relación, Simón no se merecía que lo haga. ¿Pero cómo decírselo?

Abrí los ojos de pánico cuando lo vi acercarse para besarme, iba a ser muy feo que me aleje porque no quería hacerlo quedar mal, pero no quería besarlo. Justo cuando estábamos a nada de distancia, sentí que alguien tiraba de mi mano y suspiré aliviada al ver que se trataba de Jazmín.

—¡Lo siento!— soltó una risita —Necesito robártela un segundo, ¿puede ser?

Santiago asintió —Eh... sí, dale, dale.

—¡Gracias!— respondió ella.

Sin más, me llevó de nuevo hacia adentro y solo me soltó cuando nos detuvimos. Le di un abrazo rápido que la hizo reír.

—Me salvaste— le dije, alzando la voz para que ella pueda escucharme entre tanta música.

La vi sonreí —Vi tu expresión, sabía que no querías estar en esa situación y tenía que hacer algo.

—Pues gracias, enserio.

—¿Aún no sabe de Simón y vos? ¿No le dijiste?

Negué —Iba a hacerlo, pero él está pasando por un momento difícil y... quería esperar un poco. No me esperaba que quiera besarme.

—Bueno, te aconsejo que se lo digas lo más pronto posible— sugirió y asentí —Te salvé yo hoy, pero el día de mañana... quién sabe que pueda pasar.

—Lo sé, lo sé— me rasqué la frente.

Mi atención se dirigió a los dueños de la casa, ellos sonreían y el señor se acercó a la radio para bajarle el volumen.

—Chicos, silencio, por favor, a ver, silencio— todos dirigieron su atención a ambos señores —Atención, atención, chicos. Quiero presentar a alguien que es muy importante para Melody— la mencionada solo miraba la situación —Ella es Irma, ¡un aplauso!

Todos le aplaudimos a Irma, algunos confundidos, mientras que Melody parecía desencajada.

—Sí— habló ella después de varios segundos, todas las miradas puestas en ella —Bueno, Irma... es muy importante para mí. Te quiero mucho, Irma.

Irma le dió una mirada de decepción antes de irse. Los dueños de la casa miraron a Melody y fueron a seguir a su mamá. Imaginaba lo doloroso que tenía que ser para Irma al tener que seguir la mentira de Melody. ¿Todo esto solo por aparentar?

—¿Vamos al patio?— me preguntó Jazmín.

—Eh... sí, vamos.

Las dos caminamos al patio entre las personas y yo traté de buscar a Simón con la mirada, pero aún no lo veía. ¿Dónde se habrá metido? ¿Se enojó porque lo dejé para hablar con Santiago?

—¡Cielo!— escuché a Jazmín exclamar.

Giré la mirada y encontré a Mar y Cielo de la mano cerca de la piscina. Nos acercamos a ellas.

—Que bueno que te pudiste escapar, Cielo— Mar le dijo, sonriendo.

—Sí— Cielo sonrió —Tenía un montón de ganas de distraerme un ratito la verdad.

—Bueno, llegaste justo— escuché a Thiago, Cielo lo miró —Llegaste justo, estamos punto de bailar.

—¿Bailar?

Jazmín asintió —Dale.

—Sí.

—Pero no me acuerdo, chicos.

—Pero a ver, vení, dale— pidió Thiago.

—Sí, dale, dale, Cielo— Jazmín apoyó.

Cielo dudó un poco, pero los chicos no iban a ceder tan fácilmente y ella lo sabía. Asintió.

—Bueno.

—¡Tacho, vení!

Me reí al ver a los chicos emocionados. No sabía si Melody estaría feliz de escucharlos, pero sabía que los demás sí lo estarían. Los chicos siempre dan su mejor espectáculo sin importar el lugar, así que no será diferente esta vez.

—Vos también, Valentina.

Parpadeé —¿Yo?

—¡Sí!— Mar exclamó, dándome una sonrisa —Dale, vos te sabés también la coreo.

Jazmín asintió —Sí, dale, vení.

—Chicas, pero no creo que me sepa la coreografía y mejor será que-

Mar me cortó —Nada.

Solté un suspiro y rodé los ojos con una sonrisa, no estaba segura de saber todos los pasos, pero podría intentarlo.

—Vengan.

Poco a poco los demás invitados se fueron juntando en el patio para ver el pequeño acto. Traté de soltar los nervios y sonreí cuando empezó la música, muy sorprendida de saberme los pasos y la letra. Supuse que eso se debía a que había pasado mucho tiempo viéndolos ensayar.

Cuando la música paró, todos aplaudieron y con las chicas nos dimos un abrazo.

—Valentina, Valentina, sos lo más.

Sonreí al ver a Simón llegar a mi lado, pero aquella sonrisa se borró cuando sentí el olor a alcohol salir de su boca. Sus ojos estaban un poco desorbitados, tenía una sonrisa en el rostro y no le salían seguras las palabras.

—Sos perfecta— me dijo, acercándose más.

No pude evitar soltar una risita —Gracias, mi amor, ¿estás borracho, no?

—No, no estoy borracho. ¿Por qué no podemos ser novios delante de todos? ¿Por qué?

Arqueé una ceja —¿Eh? ¿Por qué mejor no voy y te traigo un poco de agua?

—No, espera— me detuvo —Te amo.

Arrugué la nariz —Estas borracho.

—¡No, no estoy borracho!

—¿Valentina? ¿Todo bien?

Me tensé al ver a Santiago llegar a nosotros, todo lo que pedía era que Simón no diga nada más frente a él. Carraspeé nerviosa y traté de sonreír natural, no sabía qué responderle.

—¿Todo bien?— repitió.

Asentí —Sí, sí, yo... iba a traerle agua, está un poco borracho— las palabras me salieron rápido.

—¡No, no estoy borracho! ¡Estoy enamorado, viejo! ¡Tenés que saberlo!— abrí los ojos, horrorizada y la cara me ardió de vergüenza —¡Estoy perdidamente enamorado de vos, Valentina!

Santiago frunció el ceño mientras Simón hablaba y repetía lo mismo.

—¿De qué estás hablando?

Simón soltó una risa —Se supone que es un secreto, pero vení, vení— trató de jalarlo.

—Simón— lo detuve —Basta, por favor.

—No, mi amor, pero-

Santiago lo frenó —¿Mi amor?— Simón trataba con una mano de jalarlo —¡Soltame!

Traté de alejar a Simón y Santiago quizo empujarlo para que se aleje, haciendo que pierda el equilibrio. Por suerte, Tacho vino a mi rescate y evitó mi caída para luego colocarse en entre ellos.

Pude ver que Rama hacía lo mismo con Sebastián y Thiago mientras que Mar estaba en mi posición.

La fiesta había terminando para mí. Entré a la casa rápidamente, evitando a todos y saqué el celular de mi cintura para llamar a mi abuelo para que pase y me lleve a casa.

—¡Valentina!

Suspiré —Ahora no, Luca.

—¿Te vas?

—Sí— respondí cortante.

—¿Qué paso allá afuera?

Volví a suspirar —No quiero hablar de eso, ¿puedes dejarme sola, por favor? Gracias.

Lo cierto era que estaba siendo muy cobarde, claro, pero no quería lidiar con nada, solamente quería ir rápido a casa y dormir. Necesitaba salir, me estaba ahogando y prefería huir, por más cobarde que sea.

Como no quería esperar a mi abuelo, decidí que un taxi sería más eficaz, por lo que decidí salirme de la casa lo más rápido posible para que nadie me vea y quiera hablar conmigo.

Para suerte mía, un taxi se detuvo cerca, así que no tardé en llegar a casa. Cuando cerré la puerta, noté que mis abuelas se encontraban aún despiertas. La mirada de ambas se posó en mí, sorprendidas.

—Valentina.

—¿Viniste sola?

Solté una risa apagada, negando —No, me trajo un amigo— mentí.

—¿Tan rápido terminó la fiesta, nena?

—No, pero estoy cansada— me encogí de hombros, fingiendo normalidad —Me voy a dormir que estoy muerta de sueño, las amo, hasta mañana.

Besé sus mejillas y subí las escaleras, rápidamente. Mi noche no había terminado tan bien como pensé que iría y gran parte de mi se culpaba por ello, todo había pasado porque no aclaré las cosas cuando las tuve que aclarar. Solo esperaba no haber arruinado nada con ninguno de los dos.

**********

Cuando amaneció, estuve por varios minutos en la cama, pensando seriamente en no ir al colegio, eso hubiese sido fantástico, pero sabía que mis abuelas no me dejarían faltar porque sí, a menos que tenga dolor de barriga, cabeza o algo así. ¿Quería mentir otra vez con eso? No, no podía huir siempre.

Con mucha lentitud hice mi rutina diaria, no quise mirar mi celular en toda la noche porque este tenía llamadas y mensajes de Simón y Santiago. ¿Odiaba todo eso? Sí, y mucho.

Cuando bajé las escaleras, saludé a mis abuelos.

—Se te hará tarde— avisó uno de ellos.

—Se le pegaron las sábanas— bromeó el otro.

Me reí —Tengo mucha pereza, es todo— arrugué la nariz —Solo tomare jugo, no tengo mucha hambre.

—¿Segura? Mira que el desayuno es importante.

—Aunque sea come fruta, amor.

Negué —No, enserio, comeré algo rápido allá si me da hambre.

—¿Por qué mejor no te llevas un poco de fruta? Me sentiré más tranquila sabiendo que llevas algo para comer.

—Sí, está bien.

Me llevé el vaso de jugo a la boca y bebí de esté con rapidez. Una de mis abuelas me entregó la fruta en un pequeño envase y lo guardé en mi bolso delante suyo. Me despedí de los cuatro y le pedí a Julio que me lleve al colegio. Todo el camino me la pase muy en mis pensamientos, ¿estaba siendo dramática?

Cuando llegamos al colegio, me despedí de él y bajé del auto un poco apresurada al ver que faltaba poco para que toque la campana.

Una voz me detuvo cuando estaba por entrar. Cerré los ojos y los abrí, girándome con lentitud hacia esa persona. Simón me miraba, avergonzado, mientras que yo, expectante.

—No sé que me pasó— comenzó a hablar —Te juro que fueron dos vasos nada más— suspiró —Pero no era yo, el de anoche no era yo.

Mordí mi labio. En verdad se veía arrepentido y yo no podía enojarme con él, no del todo.

—Lo sé.

Parpadeó —Lo siento.

—Lo sé— repetí.

—Entenderé si estás enojada conmigo, pero quería disculparme antes— se llevó una mano a la mejilla, lamí mis labios —Intenté llamarte, pero... creo que tenés el celular apagado.

—No, de hecho está encendido, pero preferí dejarlo de lado.

Asintió —Claro.

Agachó la mirada, observando sus zapatos como si fuesen lo más interesante del mundo. Sonreí al ver que parecía un niño regañado y elevé su rostro con mi dedo sobre su mentón.

—Simón, no estoy enojada contigo— aclaré.

—¿No?

Negué —No.

—Bueno, no te culparía, mi psicólogo dice que-

Lo corté —¿Psicólogo?— solté una pequeña risita y pude notar la sorpresa en su rostro —Estamos bien, enserio— aseguré —Supongo que... algo de culpa yo tengo.

—¿Qué? No, mi amor, es mi culpa.

—Bueno— me encogí de hombros —No le dije lo de nosotros a Santiago y... eso. Supongo que ahora no tenemos problemas.

Lo hi hacer una mueca —Sobre eso...

—¿Qué?

—Cuando te fuiste, Jazmín se llevó a Santiago y me parece que nos cubrió— confesó —Me disculpé con él, no parecía enojado.

—Oh.

—Sí, no sé qué le habrá dicho, pero está todo bien.

Arqueé una ceja —¿Seguro?

—Sí.

—Bueno— lamí mis labios —Igual tengo que hablar con él, sé que no está pasando un buen momento y no sea lo más ideal hacerlo ahora, pero no puedo ir por la vida haciendo crecer sus ilusiones.

—Yo confió en vos, ayer... no sé qué pasó— repitió, asentí —Yo puedo esperar, no tengo apuros en que todos sepan que estamos juntos.

Me crucé de brazos sin creerle —¿Enserio?

—Bueno, puede que sí quiera que lo sepan— reveló haciendo que suelte una risita —Pero sabemos que no está pasando por un buen momento, vos misma lo dijiste.

—Una semana.

Frunció su entrecejo —¿Qué?

—Dame una semana.

Negó con una sonrisa —No quiero presionarte.

—¡Deja de ser tan lindo!— me quejé.

Lo escuché reír —Mejor vamos a clases.

—Te odio— murmuré.

—¿Segura?

—¡Por supuesto que no!

Ambos nos reímos y miré a todos lados para poder asegurarme de que nadie nos vea para besarlo. Me tuve que alejar rápido porque el director se acercó, indicando que entráramos a clases y ambos reímos antes de obedecerlo.

Y como Simón había mencionado antes, Jazmin sí parecía habernos ayudado, porque Santiago sonrió al verme entrar al salón, señalando el asiento vacío junto a él.

—Hey— saludé, nerviosa.

—Hey— respondió, bastante normal —Te llamé.

Entrecerré mis ojos —Sí, sobre ayer...

—¿Qué pasó ayer?— rió —No tenés que explicarme nada, tu amiga lo hizo por vos. Te llamé porque me preocupé cuando vi que te habías ido y solo quería asegurarme de que llegaras bien a casa.

—Oh— sonreí —Sí, llegué bien.

—Bueno— me sonrió —Me alegra.

Me sorprendió la tranquilidad con la que me habló, como si nada hubiese pasado. Miré a Jazmín y esta me guiñó un ojo antes de dirigir toda su atención a su cuaderno.

Como la quería.

Continua llegint

You'll Also Like

3.4K 78 59
Sara una joven Mexicana se va a a Bareclona por una beca de universidad junto a su amiga Maria. En la busqueda de un trabajo se postula en el camp no...
35.5K 4.4K 28
-Cada vez qué completes una lección con éxito, te daré una recompensa- - ¿Qué clase de recompensa? - -La que tú quieras- - ¿Qué tal una mamada? - ...
902 96 11
Una chica al tocar el agua se convierte en chico Un chico al tocar el agua se convierten en chica Estos dos se ven envuelto en un matrimonio arregl...
200K 7.5K 54
Thiago es un chico de 22 años que vive solo con su hermana pequeña. Sus padres lo abandonaron y él tuvo que cuidar de su hermana, se convirtió en un...