¿En serio está pasando?
¡Claro que sí está pasando! ¡Marcus me está besando!
Pero no como yo quisiera, intenté disfrutar el beso y me era imposible.
Las cosas que me pasan últimamente pasan porque sí, y muchas de ellas se me hacen difícil de resolver.
Trato de zafarme del agarre de Marcus y a pesar de que está borracho tiene mucha fuerza.
Con habilidad consigo soltarme y mi primera reacción fue darle una cachetada.
Ni siquiera lo pensé, no pude controlar mi mano.
Pero él no podía hacer eso. No siendo yo un chico.
¿Siendo un chico? ¡Marcus, me besó siendo un chico! Eso es peor.
Salgo del auto lo más rápido que puedo y empiezo a correr hacia la casa.
¿Marcus, porque me besaste?
Me detengo y dirijo mi mirada hasta el auto. Marcus no había bajado.
Regreso al auto y él está ahí echado en el asiento. Se encuentra completamente dormido. Es más, ni siquiera se inmutó tras el golpe que le di.
—¿¡En qué carajos estabas pensando!? —Le doy un pequeño golpe en la pierna. Total, no siente nada.
—¡Claro que encantaría que me beses y que me digas ese te quiero que me acabas de decir! ¡Pero siendo yo! ¡Siendo la chica de aquella librería, a quien le regalaste esas entradas y a quien le dedicaste esa canción! ¡Más no, siendo un chico! ¿¡Qué te pasa!? —cierro la puerta con fuerza.
—¿Mi niña? —escucho la voz de papá y me convierto en un mar de lágrimas en cuanto lo veo.
—No puedo más papá. —Lo abrazo y me hundo en su pecho, él no duda ni un segundo en abrazarme.
—¿Pasó algo en la fiesta? —estando aún hundida en su pecho asiento.
—En el auto, papá. —Levanto mi rostro y lo miro. Se veía muy cansado. Seguro el sonido del auto pudo despertarlo o mis gritos.
—Dime que pasó.
—¡Marcus me besó, papá! —exageré tanto que temía que aún estando dormido me haya podido escuchar.
—¿Dónde está, Marcus?
—En el auto. —Lo señalé como niña pequeña, acusando a alguien.
Él se acerca y lo observa. —Está muy dormido. Y por como huele el ambiente está muy borracho.
—Se pasó de copas y tenía que traerlo a casa, Graciela no puede verlo así. —Ya me estaba tranquilizando y empecé a limpiar mis lágrimas.
—Cariño. —Se acerca a mí y acaricia mi rostro. —¿Qué te parece esto? Vas a la casa, te das un baño, te recuestas en la cama y descansas un poco.
Eso es una idea excelente, debo pensar un poco.
Asiento.
—Bien, mañana con más calma conversaremos sobre esto. ¿Sí?
—Sí, papá.
Miro por última vez el auto.
—No te preocupes por él, yo lo llevaré a su habitación.
(***)
Ya han pasado tres semanas y todo ha ido muy bien.
Desde la noche de Halloween, nada cambió. Marcus actuaba como de costumbre, cuando despertó no recordaba absolutamente nada y yo no sería quien le cuente lo que había pasado. Es más agradezco que no recuerde nada.
Hable con papá y con Daniela. Y los tres quedamos en que la idea de estar todo el año como un chico se cumpliría sí o sí.
Que el último día de clases sería el día en que les contaba a los chicos quien soy en realidad. Que todo esté tiempo tuvieron a una chica de amigo.
Solo tengo que esperar un mes más. Ni yo misma me lo puedo creer, al lado de Joshua y de Marcus he creado lazos muy fuertes con respecto a nuestra amistad, que temo que pronto se rompan en cuanto les confiese todo.
—¿En qué piensas? —Me entrega el batido que pedí y pone el de Marcus en la mesa, él está en el baño.
—No es nada, Joshua.
—Jordan, si te sucede algo puedes confiar en mí. Lo sabes. ¿Verdad?
¿Y a este qué le pasa? Me causa risa porque por ratos se le mete lo de querer escuchar a la gente.
Talvez lo suyo es ser psicólogo.
—Lo sé, no te preocupes.
—Bien. Te contaba que quiero visitar a Dani para vacaciones.
O talvez no sea lo suyo. Cambió de tema muy rápido.
—¿En serio? ¿Ya has hablado con ella?
—Aún no, pero quiero proponérselo. Quiero conocer el lugar donde mi mejor amigo y la chica que me gusta viven.
Joshua muy poco me habla de Dani y lo mismo con mi mejor amiga, no es que ella me oculte cosas, sino que muchas de las veces no suelta el chisme completo.
Supongo que llegará el día en que me cuenten que ya son novios desde hace bastante tiempo.
—¡Te va a gustar mucho! Eso te lo aseguro.
—¿Qué es lo que le va a gustar? —pregunta Marcus sentándose a mi lado.
—El sitio donde viví toda mi infancia.
—Sí, le comentaba a Jordan, que me gustaría ir a conocer.
—Vamos juntos, a mí también me gustaría. —Me mira y me muestra una pequeña sonrisa.
¿Por qué actúas así? ¿Acaso si recuerdas el beso que me diste y me estás haciendo creer que no? ¿Acaso después de todo sí te gustan los hombres? Y todo este esfuerzo que hice fue en vano.
Niego. ¡Imposible!
—Sí, bueno. —ignoro el gesto que hizo y dejó de sonreír. —Hablando del lugar donde viví, quería comunicarles algo muy importante.
Ambos me miran a que continúe. —¿Qué pasa? —pregunta Joshua. —¿Es algo malo?
—Claro que no Joshua. Tranquilo.
—¿Entonces? —Me mira Marcus.
—Volveré a casa, en cuento terminen las clases. —digo con cierta tristeza porque realmente los extrañaré.
—¿Pero por qué?
La excusa que di cuando llegué fue por un trabajo que a papá le dieron aquí, pues daré la misma excusa para irme.
—A mi papá se le termina el contrato en diciembre. Y solo esperaremos a que las clases terminen para podernos ir.
—¿No pasarás la navidad con nosotros?
No lo creo, después que les cuente toda la verdad dudo que quieran pasarla conmigo.
—Todas las navidades las paso en casa de Dani. Es una tradición para nosotros y es algo que no puedo dejar pasar.
—No quiero que te vayas, Jordan.
—Tranquilo, Joshua. Estaremos en contacto siempre. Y hablaremos por videollamada. —Joshua se acerca a mí y me abraza. Acepto totalmente este gesto, porque sé que será el último que nos daremos.
—Te extrañaremos.
—Joshua, él aún no se va y ya estás en ese plan. Cálmate.
Me causa risa lo que Marcus dice. —Sí, Joshua, ya podrás llorar cuando me vaya. —bromeo.
—No digas eso ni en broma.
Nos divertimos este día, y lo de hoy como muchos momentos juntos, pase lo que pase no los olvidaré jamás.
✨
Decirles que estamos a 2 capítulos del final. Y que les tengo noticias muy buenas, para los que siguen la historia de Jordan y Marcus. Sé que les gustará mucho. Esperemos el final y por fin sabremos que es lo que va a pasar.