Ginny
Las manos me sudaban, sentía que me iba a desmayar en cualquier momento, mi mente imaginaba todos los escenarios más horribles que podía, Astoria lloraba y no me volvía a hablar al ver que tal vez solo juge con sus sentimientos, Blaise se enojaba conmigo por hacer llorar a Astoria. Blaise y Astoria se peleaban, todos los escenarios terminaban mal.
Cuando Astoria y Blaise llegaron juntos hablando como si nada, mi corazón empezó a larir muy fuerte, tenía ganas de llorar y no entendía por qué, parpadeé varias veces y quité los malos escenarios de mi cabeza. Los dos se sentaron a cada lado de mí.
—Hola Gin—Astoria me dió una amplia sonrisa.
—Hola Tori, Hola Blaise—Blaise asintió con la cabeza en forma de saludo—¿Quieren algo?
—A mi me gustaría un café la verdad—Astoria veía la carta de arriba a abajo para ver que café iba a escoger, Blaise solo negó con la cabeza.
Él nunca fue de muchas palabras, se limitaba a hacer gestos y rara vez hablaba.
—Bien, yo igual quiero uno—llamamos la mesero y hice el pedido, una vez que el mesero se fué no sabía cómo empezar—. Bueno, yo... Yo los cité aquí por que, es que quería hablar de algo... Algo, algo que quería deicrles—mi voz temblaba un poco y jugaba con mis manos, mi cabeza estaba gacha, sentí una mano encima de la mía acariciandola suavemente, cuando levanté la vista Blaise me daba una sornisa tranquilízate, indicándome que me tome mi tiempo. Respiré hondo y seguí—yo se que es raro que los haya citado a ambos, pero la cosa es que—queria ser suave a la hora de explicar pero no era buena con eso, siempre fue directa a la hora de decir las cosas, así que suspiré y continué—estoy confundida con ustedes dos por que siento algo por ambos, se que suena extraño pero es como si mi corazón no pudiera elegir a uno solo. Tori, se que somos mejores amigas y ha sido así desde que inicamos la U, pero no puedo evitar sentir algo hacía tí, cada vez que te veo, cuando me sonríes, cuando salimos juntas o cuando nos reunimos en tu casa y solo nos acostamos en la cama en silencio, esos momentos y esas acciones hacen que mi corazón enloquezca por tí, que palpite tan rápido y no pueda evitar sonreir cuando te veo—el mesero llegó y me callé un rato, dejó los cafés y se retiró—Blaise, contigo es lo mismo, me gusta los paseos cortos que damos por el lago, cuando tomamos el té con tu mamá o cuando me explicas cosas que te gustan, cuando tomas mi mano, todo, absolutamente todo de ustedes dos hace que me vuelva loca y tenía miedo de que se enojaran conmigo por que... Por que—ya no podía evitarlo, las lágrimas caían por mis mejillas y mi voz sonaba entrecoratda, la mano de Astoria se unió a la de Blaise mostrándome apoyo—por que tal vez ustedes podrían pensar que somo estuve jugando con sus sentimientos... Lo siento.
Todo estuvo en silenco en la mesa, yo seguía llorando y solo pedía internamente que las manos de ellos no se apartaran de la mía.
—Gin—la voz de Tori rompió el silencio—no nos enojamos contigo por eso, es normal, a veces las personas están enamoradas de dos y no pueden evitarlo y creen que está mal, que lo que sienten no es normal, pero lo es, no podemos cambiar lo que siente nuestro corazón, solo analizarlo y aceptarlo, la verdad es que, yo también siento algo por ti—mi respiración se cortó—pero no quería decirtelo por que nos dijiste que te gustaba Zaza, yo no quería molestar, por eso me quedé callada.
—Astoria tienen razón, no nos vamos a molestar por eso, es más, vamos a estar a tu lado cada que lo necesites, además, es imposible no amarnos a los dos, somos maravillosos—Astoria y yo nos reímos por el atrevimiento de Blaise—si tu la amas a ella y me amas a mi también, no podemos hacer nada, no puedo obligarte a amarme solo a mi, eso es egoísta—subí la cabeza, no podía dejar de sonreir y llorar, pero no de tristeza, sino de felicidad.
Escuchar esas palabras fue tranquilizante, me sentí calamda, mi corazón ya no estaba como loco y mis nervios desaparecieron, ambos me daban una sonrisa grande.
—En serio lo quiero mucho, no hay personas más comprensibles que ustedes dos—Astoria se levantó y me dió un abrazo, Blaise hizo lo mismo, me quedé ahí por un momento sintiendo la calidez de sus cuerpos a mis costados, me sentí llena.
Cuando nos separamos y se sentaron me limpié las mejillas y tomé el café, no quería que se me enfriara, en eso Astoria habló.
—Oh si, ayer me acosté con alguien, pero no se con quien, lo único que tengo es este labial—sacó de su bolso mi labial y me atoré, Blaise también conocía ese labial y se quedo muy quieto con el rostro inexpresivo—¿Que pasa?—Blaise sonrió luego de un rato y se echó a reir, yo solo me sonroje, esperando a que no diga nada, pero esperaba mucho de Blaise chismoso Zabini.
—Ese labial es de Ginny, al parecer, se acotaron—la cara de Astoria se puso roja, me regresó a ver con los ojos bien abiertos, yo no pude decir nada y Blaise se seguía riendo—Deberian ver sus caras, es lo mejor—Astoria me dió una pequeña sonrisa y me extendió el labial.
—Al menos fue contigo y no con un desconocido—sonreí y lo tomé, ambas callamos a Blaise y le pedimos que deje de reirse tan fuerte por que la gente nos comenzaba a ver raro, lo único que recibimos de respuesta fue un "¿Y a mi que? diablos, sus caras son lo mejor."
Ahí nos quedamos, sonriendo mientras veíamos a Blaise quedarse sin aire de tanro reírse. Al final de cuentas no salió tan mal, luego de eso iría donde Harry y le agradecería eternamente.
Harry
Como era sábado y no tenía nada que hacer me quedé en mi cama toda la mañana, ni siquiera me levanté a desayunar, solo quería quedarme ahí acostado viendo mi teléfono. El timbre de la casa me obligó a levantarme, vi por la ventana, era Sirius, todos los sábados comemos juntos, traía fideos chinos, le abrí la puerta.
—Harry.
—Hola Sirius—me dió un abrazo, aún no me acostumbro a eso, pero se siente bien—deja la comida en la mesa, ya bajo, solo voy a cambiarme.
—Claro, te espero—subí y me cambié, bajé de nuevo y la comida ya estaba servida, nos sentamos y comenzamos a hablar de lo que había hecho en la semana, ser jefe de policía era más difícil de lo que parecía.
Cuando acabamos de comer levanté los platos mientras Sirius hablaba con alguien por chat, cuando recogí el suyo no pude evitar ojear un poco el teléfono, no sabía quien era pero lo tenía registrado como "Moony", Sirius se dió cuenta y apagó el teléfono.
—Vaya, si así eres conmigo, no me quiero imaginar cuando tengas pareja—sonrio divertido.
—Solo me dió curiosidad—llevé los platos al fregadero—¿Quién es Moony?
—Mi prometido—me giré para verlo, estaba sorprendido, no sabía que tenía novio que de hecho ya se iban a casar—estamos juntos desde hace 10 años, es alguien maravilloso sabes.
—Me alegra que tengas a alguien en tu vida Sirius—gire de nuevo para lavar los platos.
—Pero tú no estás completamente solo.
—¿Por qué mo dices?
—El chico Malfoy ¿No te gusta acaso?—Me quedé quieto, cerré la llave y suspiré—lo sabía.
—No se como decirle, además no se si también le guste—me seque las manos y regresé a la mesa—no quiero cagarla.
—Es obvio que le gustas, cuando hablamos de tí el primer día que llegué se lo notaba muy preocupado, además que aceptó quedarse contigo esa noche solo para cuidarte—bajé la mirada—¿No han hablado de eso?—Negé—¿Se han visto estos días?
—Ayer lo ví, pero no hablamos de nada en especial—Sirius se quedó callado un rato.
—Remus va a venir en unos días, vamos a salir a comer algo, invitalo—subi la mirada dudando de si hacerlo o no, no creía que fuera buena idea, Draco no conocía a Sirius y peor a Remus—salimos los cuatro, como una cita doble de padre e hijo—escuchar esas palabras me hicieron sentir bien, sonreí y acepté la propuesta.
Sirius se levantó y me dijo que tenía que irse a su casa para arreglar todo, yo tenía que ir con Ginny que me había llamado para contarme como le fué, por el tono de voz parecía que todo fue de maravilla.
Nos despedimos y cada uno se fué por su lado, Ginny y yo nos reunimos en su casa.
—Harry!—la señora Weasley me recibió con un abrazo—me alegra de que estés bien—correspondí el abrazo, me hizo pasar y tomar asiento mientras ella llamaba a Ginny.
No había estado muchas veces en su casa, era pequeña a pesar de todas las personas que vivían ahí. No los conocía a todos, solo a la señora Weasley, a Ginny, Ron y Percy.
Hablando de Percy pasó por la sala y me dió un saludo formal, siempre pensé que era muy formal para el resto de su familia, sus dos hermanos Fred y George se habían salido de la Universidad para abrir su tienda de bromas, el otro hermano, Bill, estaba casado y trabajaba en Nueva York como agente de policía, Charlie trabajaba en un zoológico, cuidando a todos los animales grandes. Ron estudiaba para entrar a la guardia civil y Ginny diseño de videojuegos. Percy era administrador de empresas, también se sabe que trabaja para el presidente, tiene un puesto alto, siempre me pareció alguien muy inteligente.
Ginny bajó a paso rápido y ni bien entró en la sala se lanzó para darme un abrazo fuerte, correspondí y le dí un apretón amistoso.
—No se como darte las gracias Harry—se separo y se sentó a mi lado—en serio, me ayudaste mucho, anuque solo me dijiste algo muy pequeño me ayudó mucho y tenías razón, no se enojaron, me dijeron que me iban a apoyar en todo y que se iban a quedar a mi lado, gracias en serio.
—No hay de qué, eres mi amiga, como no ayudarte—sonrió y me entregó una funda—no hacía falta el regalo, pero gracias—abri la funda, en ella estaba unos papeles, los leí y sonreí como nunca.
Los papeles eran para un curso de fotografía instruido por una de las maestras más solicitadas que no muchos podían entrar con ella debido a todo el estricto reglamento que tenía, la profesora Dorcas Meadowes. Siempre seguí su trabajo, es maravilloso, de ahí empezó mi fanatismo por la fotografía.
Cuando lo ví por primera vez le implore a mi mamá que me compre una cámara para poder hacer fotos y ser como ella, mi mamá solo sonrió y aceptó, al día siguiente que llegó de las comprar me entrego una caja con una cámara, no era una profesional obvio, pero fue mi primera cámara, con la cual comencé a practicar, primero trataba de imitar algunas fotos de Dorcas, las que más me gustaban, luego experimentaba yo mismo. Aún hasta el día de hoy sigo su trabajo y poder ser instruido por ella es un sueño que por fin voy a cumplir.
—Eres la mejor en serio—le dí un fuerte abrazo a Gin que correspondió con la misma fuerza—muchas, muchas gracias.
—Eres la persona más linda que pueda conocer Harry, lo mereces—nos separamos y volví a leer los papeles sin creermelo aún—aunque también me ayudó alguien—volteo a ver a Precy quien aún seguía ahí.
—Muchas gracias Percy.
—Ayudaste a mi hermana, es lo menor que puedo hacer—me dió una sonrisa sincera y se fué.
—Dios, aún no me lo creo, tengo que contarle a Sirius.
—Bien, anda cuéntale a todos, yo tengo que ir con mamá al mercado de pulgas—hizo una mueca—odio ese lugar.
—A veces encuentras buenas cosas.
—Si, bueno, gracias por la ayuda.
—Gracias a tí por esto—nos levantamos y nos dimos un último abrazo, me acompaño a la salida y nos despedimos, me fuí con una gran sonrisa a la casa.
Cuando llegué a mi casa guardé los papeles y me acosté en la cama, llamé primero a Sirius y le conté todo, aunque se puso raro cuando le dije el nombre de la instructora. Luego decidí ir al cementerio para ver a mi mamá y contarle, no era 4 de julio, pero ya no tenía esa necesidad de ir solo es fecha, mi mamá merece que la vea todos los días. Salí de la casa y fui directo al cementerio, me senté frente a la tumba y comencé a contarle todo lo que me pasó desde la última vez que la visité.
Astoria
Estábamos con mi familia en el cementerio visitando la tumba de mi abuela materna, como siempre, luego de un rato con Daphne ibamos a dar vueltas por todo el cementerio, como ella no pasa mucho en casa debido a su trabajo casi no podemos hablar, por eso aprovechamos ese momento para pasear y conversar, le hablé de lo que Ginny nos dijo a Zaza y a mi, ella habló de como iba con su novio, la verdad es que no lo conozco, pero dijo que ese día va a ir por ella y que tal vez pueda verlo y hablar un rato con él, estuvimos así un buen rato, cuando pasamos por una parte del cementerio vi a Harry, centado frente a una tumba estaba solo, tenía puesto unos audiculares y veía directamente a la lápida.
—Oye Daphne, esperame un momento aquí—Daphne asintió y me acerqué a Harry, topé su hombro y cuando me volteó a ver algo confundido me sonrió y se sacó los audiculares—. Hola Harry.
—Hola Astoria ¿Que tal?
—Bien, visitando la tumba de mi abuelita—regrese a ver a la lápida, en ella estaba gravado el nombre de Lily Evans—¿Es tu mamá?—Regresé a ver a Harry quien asintió.
—Si es ella, parece que Sirius pidió que cambiaran la lápida, antes estaba Lily Potter Evans, me gusta mas así.
—¿Por eso los lirios?—cerca de la tumba estaban lirios rojos y unos claveles.
—Si, a ella le gustaban esas flores al igual que los claveles, cuando unos se le marchitaban traía otros—ver a Harry sonreir me alegró un poco—vaya, mira la hora, pasé más de dos horas aquí—se levantó y se sacudió la ropa—nos vemos Astoria.
—Adios Harry—le dí un abrazo y caminé de nuevo hasta Daphne, quien miraba a Harry curiosa—¿Pasa algo?
—Ese chico trabaja con mi novio.
—¿A si?¿Cómo se llama tu novio?
—Theodore Nott—abrí la boca asombrada—¿Qué?
—Una vez fuí a donde trabaja tu novio y él fue quien me atendió—Daphne no dijo nada, solo se rió—que loco.
Seguimos caminando por el cementerio hasta que volvimos de nuevo donde estaban nuestros padres, volvimos al carro, afuera estaba Theo esperando en el carro, mis padres y yo nos acercamos a saludar, Theo me reconoció y nos reimos un rato, luego Daphne se fué con Theo y yo con mis padres, tenía que contarle esto a Draco. Luego recordé que Draco estaba indispuesto, desde el último día que vió a Harry estaba decaido, según el la cagó con Harry, según yo es solo un exagerado.
•w•
Holaaaa personitas, espero que estén bien.
Esta vez van a ser solo dos cap ya que le próximo va a ser del juicio y de más, así que quería hacerlo largo y diferente a la forma que va la historia, el narrador va a ser omnisciente para facilitar un poco más la narración.
Además se acerca un poliamor entre Blaise, Ginny y Astoria. La preja entre Daphne y Theo me encanta, obviamente no podía dejar atrás la pareja Wolfstar.
Cuídense personitas de mi corazón, tomen agua, coman y duerman bien, besos y abrazos, lo quiero, nos vemos en los próximos cap.