La maldita profesora no me pidió las llaves, así que eso significa que se las han devuelto.
¡Maldita Zorra!
Ayer estuve ignorando a Scott olímpicamente, incluso comí con Jer y sus amigos.
También hay que admitir que son muy divertidos, y guapos.
Pero parece que todo el que viene a ésta escuela está maldecido de ser atractivo.
O simplemente se operan.
El dinero hace milagros, sino que se lo digan a la Zorra.
- ¡Dana! - Oigo el grito de mi amiga, así que me giro y miro a Jimena, la cual está corriendo hacia mí.
- Todo preparado. - Murmura, yo asiento. Bien, vamos a encargarnos de la venganza.
- Bien, vamos a la cafetería a por las chicas. - Con una sonrisa nos dirigimos a la cafetería, donde todos ríen y hablan ajenos a lo que pasará dentro de unas horas.
Al llegar me acerco a la mesa donde están los chicos los cuales al verme me saludan animadamente.
Hay que admitir que echo de menos las bromas de Steven y Mark, a los otros dos los tengo en varias clases, y por desgracia también a Scott.
- Chicas, es hora del código azul. - Explica, Dani y Karen se levantan con una sonrisa. Mientras apartan su bandeja ya vacía.
Ayer estuvimos inventando unos códigos para cuando hubiese alguien no deseado escuchando, y por si había riesgo de ser atrapadas.
Código azul = Comenzar con el plan.
Código rojo= Todo va mal.
Código rosa= Todo a la perfección.
Código amarillo= Vamos a ser pilladas.
Simple y fácil, lo más fácil para recordar y lo que recordamos las cinco.
O sí, Nati también está involucrada en esto. Obviamente, y ni hablemos sobre lo que le contó la Zorra.
- ¿Código azul? - Pregunta confundido Scott, ruedo los ojos ignorándolo.
- ¿En serio? ¿Ni siquiera me vas a mirar? - Pregunta indignado.
Miro a todos lados menos en su dirección, no sé cómo pude estar besuqueándome con él en el maldito armario.
Todos en la mesa parecen pendientes de nosotras así que me giro, y salgo de la cafetería.
Siendo seguida por las chicas y cientos de preguntas sobre porque no le hablaba si solo fueron besos.
- Chicas, vamos a lo que tenemos que hacer. - Asienten mientras volvemos a dirigirnos hacia el edificio.
Lo tenemos todo planeado, y va a ser increíble, sobre todo porque hay cámaras en los pasillos, y allí sale grabado cuando la zorra me metió en el armario y me encerró.
Y dudo de que quiera más mala reputación con sus padres, así que va a ser tan fácil amenazarla.
Porque con Dana Ferwin no se mete nadie.
*******
- Más a la izquierda. - Jimena asiente mientras Giuliana, la compañera de cuarto de Karen cuelga los hilos.
- ¿Quién los quitara? - Pregunta Dani, mientras ata el hilo en el extremo del armario.
- Nati, que ya le habrá hablado a la Zorra sobre nuestros "pasatiempos" - Me reí, dios esto sí que va a ser divertido.
Cuando acabamos de atar los hilos, y pintar en el espejo con sangre falsa.
Mientras salpicamos unas gotas por todo el baño.
Ayer vimos "Carrie", es una película que va sobre una chica con poderes telequinéticos y su madre está loca, pensando que la ha poseído satanás. Y sus compañeros de instituto, no ayudan mucho haciéndole bullying.
Por lo cual se me ocurrió la genial idea de que la Zorra piense que somos satánicas.
Como ella dijo.
Nati nos contó, que ella nos insultó diciendo que somos unas brujas y satánicas hijas del Diablo.
Así que, ¿por qué no?
Mi lema es: Si no te temen, haz que tiemblen.
Y es lo que voy a hacer.
*****
Salgo de la cafetería con una napolitana y miro la hora en el móvil, lo cual es muy útil. No sé por qué la gente aún sigue llevando relojes.
Las siete y media, me dirijo hacia mi cuarto mientras me como la napolitana y me imagino una lenta y dolorosa muerte para la Zorra.
¿Qué?
Cada uno tiene sus gustos, ¿no?
En fin, cuando estoy a punto de llegar a la habitación una mano me agarra del brazo girándome. Cuando el olor picante y dulce inunda mis fosas nasales, se quién es.
- En serio, ¿me vas a ignorar solo por unos besos? Por si no te diste cuenta no fui el único que lo quería, mínimamente solo me golpeaste, gracias a dios. Sé que eres capaz de arrancarme la cabeza. - Murmura lo último en un intento de poner algo de humor a la situación, lo cual no consigue al ver que no me hace gracia su maldito comentario.
- ¿En serio? ¿Ni una sonrisita? - Pregunta, bueno, más bien suplica. - Venga ¿estás realmente enfadada por unos besos? - Insiste.
Alzo la mirada y muerdo mi napolitana, me tomo mi tiempo en masticar lentamente y tragar.
Cuando ya acabo el primer bocado Scott está con una ceja alzada esperando pacientemente, bueno, no tan pacientemente. Ya que oigo su pie golpear contra el suelo.
- No estoy enfadada por los besos. - Explico lentamente para que le quede claro. Scott suelta un suspiro y asiente.
- Me siento aliviado, pero confundido, así que explícate. ¿Por qué estas enfadada? - Vuelve a preguntar.
- Tenias la llave, y me la podías haber dado para abrir la puerta y encargarme de la Zorra, gran estúpido e idiota y ¡no lo hiciste! - gruño en su cara, él parpadea sorprendido ante mi respuesta.
- ¿Eso es todo? ¿Estás enfadada por no poder vengarte? - pregunta incrédulo y yo asiento volviendo a morder mi napolitana, bueno ahora ya no queda nada de ella.
- ¿Te parece poco? - Murmuro fulminándolo con la mirada.
Él realmente la cagó cuando me oculto que tenía una maldita llave, para abrir la jodida puerta y no me lo dijo.
Aunque en realidad casi me alegro así puedo vengarme con el nuevo plan, el cual va a comenzar dentro de nada y no me lo voy a perder.
- Lo siento ¿de acuerdo? Yo... bueno no pensé en eso, lo siento Dana, de verdad. - Murmura rascándose la cabeza, señal de que no sabe que más decir.
Dudo de que Scott McDaniels haya pedido perdón alguna vez en su vida, exceptuando esta.
Así que decido perdonarlo, porque soy buena gente y porque el Karma es una perra, además tengo que ganar puntos.
- Bien, estas perdonado. - Al segundo que esas palabras abandonaron mis labios, me arrepiento, ya que la maldita sonrisa de siempre vuelve a su cara.
- Bien, entonces lo que paso en el cuarto de la limpieza... - Murmura, y dicho con el maldito tono sexy, de chico malo, vuelvo a recordar que fue un jodido cliché de adolescentes.
Aunque lo seamos no significa que tengamos que caer en ellos.
Así que ya saben nada de perder la virginidad en la playa, ni en un hotel.
Por muy romántico que suene.
1: Que te lleven a un hotel es de putas y cuanto más caro, más puta.
2: En la playa, aparte de que cualquiera te puede ver, es incómodo.
Joder hacedlo en la habitación, en la cocina, en el baño, o donde os de más morbo, pero no en un hotel, ni en una playa.
- ¿Dana? - Sacudo la cabeza suavemente causando que mi pelo se mueva.
- ¿Eh? - Pregunto, él sonríe divertido.
- ¿Se volverá a repetir lo del armario? - Pregunta, yo me muerdo el labio.
Bueno, aparte de la diversión de joder a la Zorra, no hay nada más con lo que entretenerse, así que Scott sería un buen entretenimiento.
Y dado a lo que vi la última vez... un buen polvo.
¿Qué?
¡Si un chico se folla a vente tías es un triunfador!
¡En cambio si una tía se tira a vente tíos es una puta!
Realmente es muy injusto.
- Puede. - Asiento - Necesito algo con lo que entretenerme Scotty y tú serás perfecto. - Le guiño un ojo y vuelvo a adentrarme al edificio subiendo las escaleras rápidamente.
Al llegar a la habitación entro y veo a las chicas preparando la comida, y abriendo una bolsa de palomitas.
Hace una hora que la Zorra entro en su cuarto y tenemos grabado todo lo que pasó cuando vio su ropa interior colgando por la habitación.
Y su reacción.
Como nos contó Nati fue épico, según ella, ahora lo comprobaremos con nuestros ojos, ya que antes estábamos ocupadas preparando un par de cosas.
Me quito las botas y salto a la cama quitándole la bolsa de palomitas a Dani, cogiendo un puñado y luego se la devolví.
- Pon play. - Sonrío, las chicas se ríen y Karen apaga la luz mientras Jimena golpea un cojín para acomodarlo. Y Dani pone play, al estar todas acomodadas.
La habitación sólo iluminada por la luz solar que entra por la ventana de la habitación, es lo único que observamos poco a poco Dani va avanzando hasta que la puerta se abre.
Observamos a la zorra reírse mientras entra a la habitación, como esta de espaldas no se da cuenta de lo que pasa detrás así que al ver las caras sorprendidas de sus "amigas" se gira y suelta un chillido al ver toda su ropa interior, atada y destrozada en el techo por un fino hilo transparente.
Deja caer su bolso y pasan como tres minutos mientras mira hacia arriba con la boca abierta, seguramente está en shock después de ver varios miles de euros gastado en ropa interior destrozada.
Sam se dirige hacia el baño y se oye un grito, las tres chicas salen disparadas hacia el baño.
Dani conecta la cámara dos, la cual pusimos en el baño, y sale el gran espejo manchado de falsa sangre y escrito en el...
" No juegues con fuego" con la letra muy mal hecha y distorsionada para que no se reconociese.
Aunque sé qué pensará que hemos sido nosotras, pero:
1: No tiene pruebas.
2: Le haremos creer que no hemos sido realmente nosotras.
3: Haremos que sea una adolescente loca que crea en los fantasmas.
Haré que sufra, haré que el Karma sea una verdadera perra para ella.