Al día siguiente ambos chicos se levantaron llenos de nerviosismo, ese día planeaban confesarse a sus respectivos crushes, sin saber que eran las mismas personas de las que se habían enamorado...
Enamorarse.
Esa palabra aun asustaba un poco a ambos ¿enserio pudieron cambiar de amor en cuestión de un par de meses? ¿Y si otra vez solo se estaban engañando y pudiera ser que solo les gustara?
La respuesta es obvia, un rotundo no, pero ellos no lo saben así que seguían con mil dudas rondando en su cabeza.
El día en la escuela transcurrió normal, todos estaban emocionados por el picnic que se llevaría a cabo en la tarde, habían acordado quien montaría las cosas mientras los demás llevaban la comida, todo el salon y algunos mas estarían ahí.
Chloe seguía molesta con Adrien después de lo que le dijo la ultima vez que fue akumatizada, pero se entero que su media hermana asistiría y no quería perder una oportunidad de humillarla, por lo mismo también llevaría a Sabrina.
Lila no tenia planeado ir originalmente, inventaría una excusa sobre algún evento de caridad o algo parecido, pero desde hace días noto el increíble nerviosismo de Adrien con Marinette y el chico se veía especialmente nervioso y emocionado ese día, como cada vez que Marinette intentaba confesársele, y al ser el chico mucho mas seguro temía por lo que podía pasar durante el picnic así que también se apunto de ultimo minuto.
Algunos invitados extra fueron la ya mencionada Zoé, se había hecho muy amiga de la banda así que la invitaron, por eso mismo iría Luka, Kagami fue invitada por Marinette aunque esta allá perdonado a Adrien aun no habían hablado por lo que no sabia que tan incomodo seria.
Marc también asistiría al recientemente presentarse como la pareja oficial de Nathaniel con el resto de los chicos, lo mismo pasaba con Ondine que fue invitada por Kim, por lo que con tantas personas parecía mas una pequeña fiesta que un picnic.
Era hora, las clases habían acabado por lo que todos fueron a sus casas rápidamente para ir por las cosas del picnic y reunirse en el parque en media hora, cierta ojiazul fue corriendo a su casa apenas toco el timbre de salida, su mejor amigo vendría a recogerla 5 minutos antes de tener que estar en el parque a pesar de vivir en frente.
Acaricio a su pequeño gatito y se aseguro de que estuviera bien antes de empezar a organizarse mentalmente, tenia que apurarse si quería todo listo para el gran momento, tenia que estras lista para cuando se reuniera en el parque.
Pero no era por eso por lo que quería tiempo.
Estaba decidida a declararse a Chat noir y aun no tenia un plan, el se le había declarado tantas veces con gestos lindos y románticos, nunca faltaban las rosas rojas y las palabras hermosas para intentar ganar su corazón, y sin embargo ella no había preparado nada.
Tiene varias macetas en su balcón y una de ellas tiene rosas que salieron hace unas semanas habían empezado a florecer por lo que ya estaban perfectas, cortaría una antes de irse de patrulla y también dejaría algunos dulces preparados en una pequeña canasta mientras tanto.
Así lo hizo, preparo algunos dulces en una canasta y los dejo en su habitación, se encontraba dando vueltas en el cuarto, armando en su cabeza mil escenarios en los que su declaración saldría mal, podría olvidar cortar espinas de la rosa y hacer que el chico se lastimara, podría ser rechazada amablemente o podría tener una respuesta molesta porque el pensaría que estaba jugando con sus sentimientos.
Pero de repente vino a su cabeza una imagen distinta, una en la que el la aceptaba y podían empezar a salir juntos, donde llevaría a conocer sus identidades después de derrotar a Shadow Moth y ser felices para siempre. Este pensamiento fue suficiente para motivarla a seguir adelante con su plan, con la esperanza de que ese futuro perfecto se hiciera realidad algún día.
Que mal que no todo puede ser como soñamos, y ellos son muy ciegos para luchar por lo obvio.
La chica iba a subir a su balcón para cortar la rosa y tener todo listo de una vez pero la voz de su madre la interrumpió.
-Marinette baja, Adrien ya esta aquí- fue lo que grito la mujer china.
La chica se alarmo ¡Se había olvidado por completo de que Adrien vendría por ella!
Rápidamente bajo hasta la sala para encontrarse con su mejor amigo esperándola, se le veía feliz pero algo nervioso, pero ella no le dio importancia, el chico llevaba semanas comportándose así con ella pero no parecía ser nada malo.
-Hola Adrien perdón por la demora, iré por el pastel y podemos irnos-.
-No te preocupes, aun tenemos unos minutos- dijo el chico aferrándose a su mochila.
La chica no lo había notado pero el chico traía su mochila consigo por alguna razón y parecía aferrarse a ella como si su vida dependiera de ello.
-¿Y que traes ahí?- pregunto curiosa la chica lo que hizo que el rubio se pudiera nervioso de golpe.
-Na-nada importante- dijo con una sonrisa fingida -Nino me pidió un par de bocinas para poner algo de música- le contesto, no era del todo mentira, si traía las pequeñas bocinas pero aparte traía una rosa con la que planeaba confesársele.
La ojiazul tomo el pastel del refrigerador, mismo que habían horneado el día anterior y ambos se dirigieron en una amena charla al parque, eso ayudo a que el chico se relajara un poco pero no podía esconder del todo su nerviosismo.
La tarde paso bastante agradable, entre platicas en todo, la música de fondo que había seleccionado Nino, y gracias a Marinette, Adrien y Kagami parecían quedar en mejores términos. Y todos los ataques de Lila en contra de Marinette no habían salido como se suponían y dejaron a la italiana en situaciones extrañas, todo parecía perfecto.
Por un lado estaban Alya, Nino y Marinette charlando, el dj quería enseñarles a las chicas su nuevo remix por lo que les paso sus audífonos, el rubio pensó que ese era el momento ideal, así que dejo de hablar con Max, Ondine, Kim y Alix, tomo la rosa de la mochila y se paro llamando la atención de varios pues todos estaban sentados.
La italiana al ver las claras señales de alerta de inmediato se puso de pie y se paro frente al rubio llamando la atención de varios mas.
-Adrien cariño, gracias por la rosa pero no pensé que revelaras lo nuestro tan pronto, pensé que seria mas seguro hacerlo después- dijo usando su típico tono falso.
Esto sorprendió a varios que no dudaron en tragarse la mentira y no podían dejar de mirar, estaban casi seguros de que el Adrinette seria real y ahora Lila salía con esto.
Lo que ellos no esperaban fue la reacción un tanto agresiva del chico en respuesta a las palabras de la castaña.
-Te equivocas Lila, entre nosotros no hay absolutamente nada mas que el ser compañeros de clase y modelaje- dijo con bastante seguridad y cierto enojo -Por obvias razones la rosa tampoco es para ti- dijo esta vez sin poder ocultar una sonrisa un tanto burlona.
Volteo a el lugar donde estaban sus mejores amigos, notando que su mejor amigo lo veía entre confundido y ajustado por su reacción aunque también algo alegre, mientras Alya intentaba quitarle los audífonos a Marinette que solo los alejaba mas de ella.
-De hecho, ¡Tengo algo que decir!- grito mas fuerte de lo que esperaba, ahora si ganando la atención de los pocos que faltaban.
Al recibir la mirada confundida de su crush se dio cuenta de la gran idiotez que estaba haciendo, las manos empezaron a sudarle y le temblaban las piernas, pero no se echaría para atrás, le había prometido a Plaga que no se acobardaría y no lo iba a hacer.
Avanzo lentamente hasta quedar enfrente de sus tres amigos, momento en que la pareja se alejo unos metros, Alya mas bien siendo jalada por Nino, sabia lo que iba a pasar y no sabia si saldría bien, dejaron a una confundida Marinette que no se percato de la escena anterior y no había visto la rosa en la mano de su mejor amigo.
-¿Te puedo ayudar en algo Adrien?- pregunto la chica aun algo confundida y poniéndose de pie para quedar a mejor altura.
Lila fingió tropezarse y torcerse el tobillo pero nadie le hizo caso por ver la escena, inclusive Chloe estaba atenta a la escena, desde que se enojo con Adrien no le importaba lo que pasara en su vida y si los dos que se encargaban de arruinar su día estaban juntos para ella seria mas fácil atormentarlos.
Adrien apoyo una rodilla en el suelo, solo basto verla a los ojos para saber que hacia lo correcto, hacia lo que su corazón le decía, tomo la rosa y con toda la seguridad que pudo juntar pronuncio las palabras.
-Marinette, desde hace tiempo he notado todas las maravillas de ti, he visto tu amabilidad, tu valentía, tu creatividad, tu belleza, haces que cualquier día horrible cambie al mejor de mi vida con solo una sonrisa, no puedo evitar perderme y subir al cielo cada vez que te veo a los ojos, ya no puedo ocultarlo mas, me he enamorado de ti, ¿aceptarías ser mi novia?- confeso para finalmente extender la rosa.
La escena era preciosa, Nino en cuanto vio que su mejor amigo se empezaba a acercar cambio la música a aquella canción que los chicos habían bailado ya dos veces, en la fiesta de Chloe y en su viaje a Nueva York. Rosita lloraba de la emoción por el romántico momento mientras abrazaba a su novia que la consolaba.
Alix, Mylene, Sabrina y Ondine sonreían enternecidas por la escena, Lila y Chloe tenían caras de pocos amigos, no se les veía para nada contentas aunque la rubia dijera lo contrario. Nathaniel y Marc solo estaban tomados de las manos felices por sus amigos.
Kim, Max e Iván se veían sorprendidos, no creían que el chico fuera capaz. Luka se le veía con una sonrisa triste, estaba feliz por ellos pero aun así no dejaba de ser doloroso.
Kagami estaba con una pequeña sonrisa casi invisible, estaba feliz por ellos, era obvio que Adrien estaba enamorado de Marinette y al fin pudo verlo, eran el uno para el otro y por fin podría verlos juntos.
-Adrien yo...-
-Adrien yo...- esa pausa sorprendió a la mayoría, exceptuando a la morena de lentes que la veía venir.
Demostraba duda, muchos pensaban que Marinette se lanzaría a los brazos del chico y repetiría que si miles de veces, pero al parecer alfo había cambiado.
-Yo lo siento, pero estoy enamorada de alguien mas- contesto y todos pudieron observar el momento en el que el corazón del rubio se partió y todo el momento romántico cayo, el ambiente se volvió tenso en un segundo, se podía escuchar el lamento de un corazón roto, mas bien el lamento de Rosita que rompió en llanto.
-Lo entiendo Marinette, no te preocupes- dijo el chico poniéndose de pie, sorprendiendo a todos, mostrando una sonrisa que parecía sincera, pero que varios supieron identificar como falsa, el chico se había vuelto un experto en mantener sus emociones, el exterior lucia perfecto, amable y comprensivo como siempre, aunque el interior estuviera roto y quemándose.
-Enserio lo siento Adrien, debo irme- dijo la chica tomando rápidamente su bolso y huyendo de la escena a su casa, varios iban a seguirle, pero fueron interrumpidos por Alya, asegurando que la chica necesitaba tiempo y sabiendo que talvez eso afectaría en sus planes de confesarse a Chat noir.
Nadie sabia que hacer para ayudar al pobre chico rubio parado en medio del picnic, se le veía con la misma sonrisa de siempre, con la mirada puesta en donde se fue la chica, aunque su mejor amigo podía ver que en cualquier momento rompería a llorar.
Nino fue corriendo rápidamente y abrazo a su amigo, quien solo pudo corresponder el abrazo y hundir su cabeza en el hombro de su amigo, nadie sabia que Adrien estaba llorando mas que el moreno, el rubio no hacia ningún ruido, no se movía, el de lentes solo sentía como su camisa se humedecía rápidamente por las lagrimas.
Así pasaron un par de minutos, Rosita lloraba por otro lado por lo que la mayoría estaba concentrados en ella, hasta que Kagami visualizo una curiosa mariposa morada acercarse hacia donde estaban, pensando que la chica amante del rosa estaba en peligro por su estado grito.
-ROSITA CUIDADO- grito la japonesa llamando la atención de todos hacia donde apuntaba viendo el akuma acercarse.
Juleka de inmediato se puso frente a su novia con intención de protegerla, grande fue la sorpresa de todos cuando el akuma se introdujo en la rosa que el rubio aun tenia en su mano, haciendo que levantara la cabeza dejando ver el gran rastro de lagrimas que aun estaba en su cara.
Muchos se alarmaron al ver la característica mascara color morado sobre la cara del ojiverde, señal de que Shadow Moth se comunicaba con el, pero aun así el chico parecía en shock, no parecía poder responder a pesar de las palabras de su mejor amigo para que resistiera.
-Y-yo...- pronuncio el chico.
Nino no quería arriesgarse, no sabia si su amigo pudiera volver a resistir una akumatización nuevamente, por lo que le arrebato la rosa a su amigo y la partió en dos.
La mariposa negra salió alejándose rápidamente, al mismo tiempo que Adrien caía rendido y empezaba a ser atendido por sus amigos, que dejaron de prestarle atención al akuma, momento que fue aprovechado por el kwami de la destrucción que salió de la mochila del rubio y pulverizo al insecto, y talvez un par de palomas pero ayudo el que no hubiera nada mas cerca.
El rubio se recupero rápidamente y con la excusa de tener clase de piano salió rápidamente de ahí, no quería que verlos hablar de su humillación así que corrió a su casa y después a su cuarto.
Se tomo unos minutos y con ayuda de Plaga pudo calmarse un poco, pudo dejar de llorar y se le paso por completo el shock de casi volver a ser akumatizado otra vez.
Recordó que tenia patrulla con Ladybug, y aunque no tenia muchas ganas de ir estar con ella seria lo mas seguro, por si Shadow Moth volvía a mandar un akuma o un amok. Por lo que se transformo y salió por la ventana buscando a la heroína.
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Marinette había llegado a su cuarto, y no importaba lo mucho que Zazu se le restregara en busca de atención ella seguía viendo a la nada.
Había pasado por un momento extraño y bastante incomodo, seguramente hace unos meses hubiera saltado hacia Adrien diciéndole que si contándole sus planes sobre su futuro, pero ahora era diferente, aun le gustaba y por eso dudo al momento de responder, por un momento se imagino que pasaría si lo aceptaba, pero la imagen de Chat noir borro ese pensamiento y fue cuando lo rechazo.
Después de varios minutos por fin despertó de su trance y mas decidida que nunca corto la flor de su balcón, se encargo de quitar todas las espinas y se aseguro de que todo en su pequeña canasta estuviera listo, ya con todo en mano invoco su transformación, no cambiaria sus planes, se le declararía a Chat noir y esperaba lo mejor.
Se lo debía a Adrien.
El pudo demostrar la valentía que ella nunca pudo así que era lo que ahora ella debía de hacer.
Estaba lista en el punto de encuentro para las patrullas, había escondido la canasta con los dulces detrás de una chimenea y entre unas cajas, además guardo la rosa en el yoyo hasta que su compañero llegara, se encontraba realmente ansiosa, había llegado unos minutos ante sy su cerebro no dejaba de inventar diferentes escenarios de lo que podía pasar en su cabeza.
El nerviosismo solo aumento cuando escucho a su compañero aterrizar en el tejado unos metros atrás de ella, junto valentía y se volteo, para que al verlo todo su nerviosismo se esfumara y solo quedara en ella preocupación, se le veía deprimido, triste, las orejas del traje lo delataban pues se encontraban gachas pegándose s su cabeza.
Sin poder tan siquiera pararse de su lugar el chico la rodeo en un abrazo que aun sin saber porque pero la chica correspondió de inmediato, le habían regresado las ganas de llorar en el camino al recordar lo que paso con su crush hace un rato pero no quería verse débil.
-¿Gatito estas bien?- pregunto la chica con un tono de voz dulce y preocupado.
El chico solo negó con la cabeza, sin querer hablar, temiendo que su voz sonara cortada y que ella descubriera sus enormes ganas de llorar, ella solo lo abrazo mas fuerte.
-¿Quieres hablar de ello?- pregunto y se arrepintió de inmediato al ver como el chico solo se estremecía -No es necesario, si no quieres esta bi- fue interrumpida antes de terminar.
-No-no, esta bien- dijo el chico separándose, su voz estaba cortada, se notaba que retenía las ganas de llorar -Y-yo..., ¿recuerdas a mi mejor amiga?- pregunto el chico.
"Como olvidarla" se dijo la chica mentalmente antes de asentir.
-Bueno... ella, me rechazo hoy- dijo el chico sintiendo como las inmensas ganas de llorar volvían y esta vez no podía detenerlas.
Esas palabras fueron suficientes para romper el corazón de la heroína, quien solo volvió a abrazar al chico mientras lo escuchaba sollozar y ella misma empezaba a derramar algunas lagrimas.
-My Lady, por favor no dejes que un akuma se acerque- pidió el héroe aferrándose aun mas a su compañera y sin poder dejar de llorar.
-Mientras yo este aquí no te va a pasar nada mi gatito, lo prometo- dijo la chica apretando mas el abrazo, intentado que las lagrimas traicioneras siguieran cayendo y haciendo un esfuerzo por que su voz no sonara afectada.
El cielo de Paris fue testigo esa noche de como dos amantes sufrían el uno por el otro de un corazón roto sin saberlo.
Dos corazones destinados a estar juntos por toda la eternidad, a pesar del tiempo o la vida en la que estén, pero es algo que ellos aun no saben y tenemos que mantener el secreto.
Con dos idiotas enamorados el uno del otro sin saberlo termina esta historia
¿Que?
Yo dije que invertiría el cuadrado no que lo arreglaría.
Eso será en otra historia, háganme firmar un contrato la próxima vez.
La esperanza es lo ultimo que muere, talvez un día los ciegos se den cuenta de sus sentimientos y dejen de sufrir, hay que tener fe.
Fin