CUANDO EL FRIO SE VUELVE CALOR

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Disculpen la demora y si hay faltas de ortografía al final les explico todo.

Día lunes, inicio de semana, día en el que inician las labores educativas, en especial para nuestra pareja de protagonistas que se encontraban profundamente dormidos en la habitación de Sora Todoroki la cual estaba abrazada al pecoso como si él fuera un oso de peluche además de tener su cabeza reposando en el pecho del peli verde, Izuku por su parte con una mano abrazaba delicadamente la cintura de su amada y con otra mano puesta en la cabeza de la bicolor se aseguraba de que no se desplegará de él.

Sin intenciones de levantarse seguían durmiendo plácidamente y muy cómodos, pero la alarma de la heterocromática resonó en toda la habitación haciendo que Sora buscará con una de sus manos el aparato de donde salía aquellos sonidos y al encontrarlo lo detuvo dándole un golpe algo fuerte.

Sora: maldita alarma, tenías que sonar yo quería seguir dormida _ pensó molesta mientras se acomodaba más en el pecho de Izuku _ ¿Que se le va a hacer?, Tenemos que ir a la UA.

Se levantó un poco provocando que la mano que tenía en su cabeza se deslizara por su largo cabello bicolor y se detuviera en su cintura junto a la otra mano de el pecoso que hizo un poco más la presión del abrazo pegando aún más a la bicolor a él.

Un pequeño tinte carmesí se manifestó en las mejillas de Sora, por más que le gustara estar así con el peli verde aún no se acostumbraba a que era novia de aquel chico para ella todo era un sueño hecho realidad, con pesar de saber que se tendrían que separar y que la dejaría de abrazar lo comenzó a despertar.

Sora: Izu-Kun, despierta se hará tarde para ir a la escuela _ hablo moviendo ligeramente al pecoso pero no daba indicios de querer despertar_ mmm?, Creo que sé como levantarlo.

Lentamente se acercó a el rostro del peli verde sin detenerse hasta que reclamo los labios de su novio, solo un par de segundos bastaron para que el pecoso correspondiera el beso que terminó por la falta de aire.

El pecoso lentamente abrió los ojos y en su campo de visión apareció la cosa más hermosa que pudiera haberse imaginado, a unos centimetros de él estaba el rostro de Sora algunos mechones de pelo cayendo marcando el contorno de su cara, unos hermosos ojos heterocromáticos que lo miraban cariñosamente, unos labios carnosos de color rosado pero a la vez se miraban muy delicado y todo eso siendo acompañado por un color rojizo que adornaban las mejillas de la belleza que tenía en frente.

Izuku: creo que morí.

Sora: jeje, no moriste, ¿Por qué lo dices?.

Izuku: entonces en el cielo tiene un problema, por que un ángel se les escapó y está a escasos centímetros de mi cara _ dijo acariciando una mejilla de Sora _ jeje me llaman Romeo _ eso último lo pensó un tanto como broma _

Sora: ahora resulta que eres poeta, de todas formas gracias por el cumplido, además ya es hora de levantarnos o llegaremos tarde a la escuela.

Izuku: okey _ contesto con pesar para dejar de abrazar a Sora y levantarse _ bueno voy a cambiarme en el baño, te espero en el comedor para desayunar algo antes de irnos.

Sora: bien te veo en el comedor _ contesto con una sonrisa mientras miraba como el pecoso salia de la habitación _ y pensar que antes te odiaba y ahora te amo con locura, por eso dicen que del odio al amor solo hay un paso.

Después de un momento también comenzó a preparase para iniciar su semana escolar...

Con Izuku...

Él ya se había alistado para ir a estudiar y ya estaba llegando a el comedor donde se encontraba una Fuyumi feliz jugando con un Hero que solo balbuceaba y reía por las caras graciosas de la albina con mechones rojos, mientras que en la cocina estaba Rei preparando el desayuno.